[Tierra de Dragones] [Misión] Salven a Chin-Luz/Sin Piedad

Misión de: Maya, Xefil, Saeko, Saito

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[Tierra de Dragones] [Misión] Salven a Chin-Luz/Sin Piedad

Notapor Sombra » Lun Sep 30, 2013 2:35 am

Datos de la misión de Equipo Tierra de Partida:

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Nombre: ¡Salven a Chin-Luz!
Solicitante: Alguien de Tierra de Dragones.
Descripción: Al parecer, alguien quiere atentar contra la vida de este general por ser tan importante a nivel político. Tiene lazos cercanos con el Emperador y es un gran estratega. Su pérdida sería un duro golpe para todo China. La misión es simple, escoltar al general Chin-Luz hasta la ciudad imperial desde un campamento situado a Seis Kilómetros de esta. Hay rumores de que los Hunos tienen a un grupo de asesinos de élite. No dejéis que se acerquen.
Mundo: Tierra de Dragones
Requisitos:
2 Participantes máximo.
Enfrentarse a los "Asaltantes" < Gente de Bastión Hueco.
Nivel mínimo 5.
Que en el otro grupo haya el mismo número de participantes.
Recompensa: 1.000 Platines, 10 de experiencia+10 al bando ganador+10 de narrativa.
Interesados: Xefil, Maya.
En Proceso


Datos de la misión Equipo Bastión Hueco:

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Nombre: ¡Sin piedad!
Solicitante: Alguien de Tierra de Dragones.
Descripción:Chin-Luz es un general Chino con mucho poder y todo el mundo en el reino confía en él y en sus estrategias por algo evidente. Su inteligencia. Este hombre es un verdadero genio y es necesario eliminarle del mapa para que los Hunos puedan seguir su avance con éxito. Físicamente deja mucho que desear, por lo que su poder cuerpo a cuerpo y su manejo con armas es de un cero rotundo, pero es importante tener cuidado. Nos han llegado rumores de que han contratado un grupo de escoltas bastante capaces. Su carro sale de un campamento situado antes de la Ciudad Imperial, es un viaje de Seis Kilómetros.
Mundo: Tierra de Dragones
Requisitos:
2 Participantes máximo.
Enfrentarse a los "Escoltas" < Gente de Tierra de Partida.
Nivel mínimo 5.
Que en el otro grupo haya el mismo número de participantes.
Recompensa: 1.000 Platines, 10 de experiencia+10 al bando ganador+10 de narrativa.
Interesados: Saeko, Saito.
En Proceso


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Equipo Bastión Hueco


El sol se alzaba majestuoso en el denso bosque de bambú en el cual habían aterrizado con sus Glider. Los dos se hallaban en un claro desde el que podían ver de cerca un amplio campamento militar chino.

El objetivo de aquella misión era un hombre importante, un estratega llamado Chin-Luz muy sabio según decían. Ninguno de los dos tenía mayor información aparte de la que ya poseían por lo que dependía solo de ellos dos como organizarse para llevarla a cabo. Era pleno día y la mayor parte del trayecto de aquel carruaje hacia la Ciudad Imperial no era más que un amplio campo abierto rodeado en algunas zonas por campos de arroz por lo que un ataque sorpresa sería muy complicado.

Pasó una hora cuando pudieron ver movimiento en el campamento. Estaban preparando un carruaje y alguien vestido con ropas de aspecto costoso se montó en este tras salir de una gran tienda de campaña. Había dos personas muy cerca del carro que vestían diferente a los soldados, que vestían con sus armaduras. Por desgracia ninguno de los dos podían verles con suficiente nitidez como para ser capaces de determinar cualquier cosa.

Tenían tres opciones para atacar. La primera era avanzar por el bosque de bambú que se extendía alrededor de aquel campo abierto corriendo hasta dejar muy atrás el carruaje (que parecía ir bastante lento) y luego aparecer por el camino como simples transeuntes actuando con naturalidad, la segunda que sería ir a atacar de golpe sin ningún tipo de miramientos o tercera, podían apurarse y esconderse en los arrozales que se hallaban a medio camino de la capital imperial y atacar por sorpresa.


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Equipo Tierra de Partida


¿Por qué una niña mujer es parte de la escolta? ¡Esto es un ultraje! —exclamaba el hombre que supuestamente tenían que escoltar, un hombre de semblante testarudo sin duda y que lucía unas ropas de tela con un aspecto lujoso, daba igual lo que dijeran. No quería que Maya fuese una escolta e incluso pretendía cancelar el contrato que tenían con ellos dos.

—¡Señor! Estos hombres fueron recomendados por el mismísimo Ronin, no podemos romper el contrato —explicaba uno de los presentes en aquella tienda de campaña donde se había comenzado aquella reunión. Al parecer Ronin era considerado un muy bravo guerrero con bastante fama allí—. No debemos dudar de...

¡Silencio! —cortó Chin-Luz tajante—. Una mujer sigue siendo una mujer, debería estar tejiendo y aprendiendo a ser una correcta señorita con su madre. Esto es trabajo solo de hombres, ¿no lo crees muchacho? —le guiñó un ojo a Xefil con cierta complicidad.

Tras la respuesta de ambos aprendices (probablemente intentando defenderse de las palabras de su protegido) el hombre miró a ambos pensativo.

Está bien. De todos modos no hemos tenido informes de los espías sobre cualquier peligro y no daría tiempo a preparar otro grupo escolta. Coser y cantar, un simple paseo entre flores silvestres.

—Sin embargo, tenemos esos rumores de los asesinos de élite aliados de los Hunos —hablaba otro de los que estaban presentes en aquella tienda de campaña.

Otro soldado entró al lugar para dar una breve explicación de la misión para refrescarles la memoria junto a detalles de la zona que tenían que atravesar.

Seis kilómetros de campo abierto, sin obstáculos mayores ni grandes curvas. Así de simple, tenían ventaja en el sentido de que no podrían ser fácilmente sorprendidos en caso de ataque enemigo (aunque ya habían dicho que lo más probable es que nadie fuese a atacarles) Serían solo ellos dos la escolta, por lo que tendrían que saber combinarse.

Tras la breve explicación les pidió que le acompañaran a fuera, donde esperaba un carruaje tradicional de aquella cultura.

Chin-Luz montó en el carruaje y cerró la puerta de este dejando el resto del trabajo a los escoltas.

Ya podían salir en dirección a la capital China.

Se abrieron las puertas de madera del campamento y el carruaje empezó a avanzar tirado por dos caballos negros que avanzaban a una velocidad moderada para que los escoltas (que iban a pie) no quedaran atrás.


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Datos a mayores:
-Dado la diferencia de nivel he decidido guiarme por interpretación en vez de los atributos para hacer un combate justo. Según la forma de expresar vuestra acciones, las estrategias que realicéis, lo coordinado que actuéis, eso serán algunos de los factores a tener en cuenta. Me guiaré en los atributos en algunas cosas, pero eso no significa que por tener más nivel se pueda ganar.
-No se podrán utilizar mascotas.
-Dado que esta es una misión que no se alargará mucho y no tiene ningún otro objetivo más que un combate... El mínimo de páginas no será de 5, como sería normal. El mínimo se reducirá a 3, en caso de no llegar a las tres páginas la puntuación por Narrativa no se tendrá en cuenta.
-El metagaming tendrá como castigo perder la recompensa de 1.000 platines.
-Podéis decidir entre los cuatro el momento en el que queráis comenzar el combate (o forzar el encuentro en el caso de los asaltantes)
-Esta es una especie de Misión Experimental, si veo que sale bien organizaré más misiones de estas características. Digamos que vosotros seréis los que me den un resultado por lo que espero compromiso por parte de todos.
-Como es un encuentro no hay fechas límite, pero entre vosotros podéis meter presión. Si pasan 14 días sin que uno no postee y hay mayoría de votos ese personaje será descalificado. Si es reincidente a postear cada mucho tiempo (aunque no llegue a los 14 días) también puede darse el caso de que se permita si hay muchas quejas una votación para descalificar ese personaje.
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Re: [Tierra de Dragones] [Misión] Salven a Chin-Luz/Sin Piedad

Notapor Zee » Sab Oct 12, 2013 11:59 pm

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¿No hay problema si la sitúo antes de El Dios Caído? Me resulta más fácil así


¿Estás segura que es lo más adecuado...?

Quién diría que mi compañero en aquella misión sería una pequeña niña. Sí, nada más y nada menos que Maya Zawrid, la pequeña hechicera en miniatura con quien sólo había "trabajado" una vez. Y me aseguro de hacer notar la ironía en esta declaración puesto que, si bien nos habíamos inscrito juntos a una Misión, ésta había resultado ser solamente un curso de cocina que el propio chef de Tierra de Partida ofrecía.

La verdad era que en realidad nunca había visto a Maya en acción. No podía saber qué tan lejos llegaban sus habilidades como portadora; ni como luchadora, ni como hechicera. Pero era sólo una niña, al fin y al cabo, ¿qué tan buena podía ser?

Recuerda que estamos trabajando como guardaespaldas, Maya —señalé, cruzándome de brazos, todavía indeciso—. Podría ser peligroso.

Pero la niña era testaruda. Presumía que era cuestión de su edad; o eso me gustaba pensar a mí, pero la verdad era que… ¿no lo éramos todos en aquella curiosa academia? O podía venir de familia, también…
Mientras más escuchaba las palabras de Maya (o más bien, la manera en la que las sentenciaba), más advertía que convencerla de quedarse sería algo imposible. Ella se había apuntado a aquella misión por cuenta propia y ni nada ni nadie iba a detenerla. Iba a participar y punto. Y de cualquier manera, sabía bien que aquél era un trabajo que un Aprendiz no podía tomar solo, y se aseguró de recordármelo.

Bueno… —murmuré, para luego mirar a Gérard atendiendo la barra. Sus ojos se encontraron con los míos e inmediatamente pareció saber qué estaba pensando. Con una media sonrisa, el joven camarero sencillamente se encogió de hombros, como bien diciéndome que aquello no tenía remedio. ¿Qué iba a hacer sin un compañero, después de todo, si el trabajo debía resolverse aquel mismo día? — Sí, supongo que… ¡De acuerdo! —expresé, finalmente resignado—. Pero debes prometerme que protegerás la retaguardia. No, espera, ¿y si atacan la retaguardia…? —cuestioné en voz baja, más para mí mismo que para la niña— Debes quedarte en… sólo…

>>Agh, sólo prométeme que no tomarás riesgos innecesarios.

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Re: [Tierra de Dragones] [Misión] Salven a Chin-Luz/Sin Piedad

Notapor Tsuna » Dom Oct 13, 2013 5:45 pm

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Cronológicamente, me gustaría que la misión fuese después de dos Encuentros (los cuales no han sido publicados todavía) que van después de la Trama “La historia Jamás Contada”, y antes de “El Dios Caído” como ha mencionado Zee, quedando algo así:
Trama con Nadhia -> Encuentro -> Encuentro -> Misión


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Final Fantasy X - The Splendid Performance


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Nombre: ¡Sin Piedad!
Solicitante: Alguien de Tierra de Dragones.
Descripción: Chin-Luz es un general Chino con mucho poder y todo el mundo en el reino confía en él y en sus estrategias por algo evidente. Su inteligencia. Este hombre es un verdadero genio y es necesario eliminarle del mapa para que los Hunos puedan seguir su avance con éxito. Físicamente deja mucho que desear, por lo que su poder cuerpo a cuerpo y su manejo con armas es de un cero rotundo, pero es importante tener cuidado. Nos han llegado rumores de que han contratado un grupo de escoltas bastante capaces. Su carro sale de un campamento situado antes de la Ciudad Imperial, es un viaje de Seis Kilómetros.
Mundo: Tierra de Dragones.
Recompensa: 1.000 Platines.
Interesados: Saeko, Saito.


Arrugué el papel de la misión con la mano hasta hacerlo una pequeña bola, luego lo guardé en uno de mis bolsillos para que no se perdiese. En esa ocasión me tocaba de nuevo con Saito, a quien llevaba un tiempo sin ver; solamente habíamos acordado quedar allí aquel día para cumplir con el encargo. Respecto a la misión, se trataba de un asesinato, una tarea perfecta y sencilla para mí, o eso pensaba.

No me interesaba en absoluto el objetivo de aquellos Hunos, mi único interés era ganar dinero, y por supuesto, hacer que la fama de Bastión Hueco se disparase por las nubes. Fallar en la misión lo consideraba una gran deshonra para nuestro bando, no podía perder.

Suspiré tras terminar de meditar, estaba sentada en las escaleras de la izquierda bajo aquella lámpara que colgaba en el techo, junto a la fuente, en la entrada del castillo.

Un estratega… habrá que actuar con cautela, probablemente haya planeado todo perfectamente para evitar cualquier ataque. —Murmuré para mí misma y di un trago a la botella de refresco, una bebida energética llamada "Heartless", que había colocado junto a mí, en un escalón.

Fue entonces cuando escuché a alguien llegar, me giré para ver a esa persona y en efecto, se trataba de mi compañero.

Al fin llegas, cuánto tiempo. —Le saludé “amablemente” y me levanté, dirigiéndome hacia él.

Escuché lo que tuviese que decir, y proseguí con el asunto de la misión. Gengar aquel día no había podido venir conmigo, por lo que tendría que ir sola con Saito.

Saito, probablemente este estratega lo haya planeado todo a la perfección, no podemos subestimarlo, ¿entendido? —Y sin esperar a que dijese nada, continué— ¿Lo tienes todo listo? Pues vámonos ya. Si crees que esta misión es demasiado para ti, siempre puedes volver a tu habitación a dormir. —Evidentemente, le dije aquello último con la intención de provocarle.

No había ido nunca a aquel mundo, a Tierra de Dragones, pero gracias a las clases de cosmología tenía una vaga idea de dónde podía estar. Sin embargo…

Oye Saito, ¿sabes dónde está exactamente Tierra de Dragones? —Y me crucé de brazos, esperando su respuesta. Si me daba una negativa, suspiraría de mal humor, y si no, también.
Última edición por Tsuna el Sab Nov 23, 2013 1:31 am, editado 1 vez en total
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Re: [Tierra de Dragones] [Misión] Salven a Chin-Luz/Sin Piedad

Notapor H.S Sora » Vie Oct 18, 2013 9:56 pm

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Cronológicamente, me gustaría que la misión fuese después de mi trama la cual va antes de un Encuentro todavia no publicado la cosa queda algo así:

Encuentro -> Trama Final Countdown-> Misión


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Terminé de vestirme con prisas ¿Llegaba tarde? Esperaba que no, ojee por última vez el papel situado encima de mi mesa.

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Solicitante: Alguien de Tierra de Dragones.
Descripción: Chin-Luz es un general Chino con mucho poder y todo el mundo en el reino confía en él y en sus estrategias por algo evidente. Su inteligencia. Este hombre es un verdadero genio y es necesario eliminarle del mapa para que los Hunos puedan seguir su avance con éxito. Físicamente deja mucho que desear, por lo que su poder cuerpo a cuerpo y su manejo con armas es de un cero rotundo, pero es importante tener cuidado. Nos han llegado rumores de que han contratado un grupo de escoltas bastante capaces. Su carro sale de un campamento situado antes de la Ciudad Imperial, es un viaje de Seis Kilómetros.
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Interesados: Saeko, Saito.


Mi compañera de misión había resultado de nuevo, nada más ni nada menos que Saeko a la cual hacía bastante tiempo que no veía. Bajé a toda prisa las escaleras de mi habitación dirigiéndome al punto donde había quedado con ella, cerca de la fuente situada en la entrada del castillo.

Esta misión resultaba un soplo de aire fresco para mí, se trataba del asesinato de un estratega aliado del ejército Chino. Realmente los intereses de aquellos bandos me eran bastante indiferentes, no era quien para entrometerme en una guerra, pero ganar dinero junto a escalar eslabones en Bastión Hueco era de mis principales prioridades.

Aceleré el paso cuando frené de golpe al encontrarme a Saeko sentada en las escaleras, antes de que dijese nada esta se giro hacia mí y me miró durante un par de segundos.

Al fin llegas, cuánto tiempo. —Aquello me extrañó… ¿Desde cuándo Saeko era amable conmigo? Mientras pensaba que podía decir, esta se levanto viniendo hacia mí.

Y que lo digas… ¿Cómo has estado?—Esperé un par de segundos y añadí— Siento la tardanza, he tenido un ligero contratiempo.

Pude ver como Gengar no había venido junto a Saeko, yo tampoco había querido traerme a Alice a una misión así, si lo ideal era que descansase y además tampoco podríamos hacer una gran “emboscada” si me presentaba blandiendo una guadaña, por lo que la dejé bien guardada en la habitación.

Saito, probablemente este estratega lo haya planeado todo a la perfección, no podemos subestimarlo, ¿entendido? —Asentí pero antes de lograr decir algo más se adelantó— ¿Lo tienes todo listo? —Asentí de nuevo— Pues vámonos ya. Si crees que esta misión es demasiado para ti, siempre puedes volver a tu habitación a dormir.

¿Y volver a compartir cama otra vez juntos? —sonreí— Tentador, pero no gracias. Prefiero que hoy hagamos esta misión.

Esperaba que Saeko reaccionara, y observé atentamente preparado para casi todo.

Oye Saito, ¿sabes dónde está exactamente Tierra de Dragones?

Me puse a pensarlo. Había oído hablar parcialmente de aquel mundo y con las clases que nos habían impartido tenía una idea medianamente clara de donde se encontraba, pero realmente desconocía la ubicación exacta. Mientras pensaba pude oír a Saeko suspirar, de una manera que denotaba una mezcla de aburrimiento o mal humor, lo típico en ella.

Bueno creo que podré hacer que lleguemos —sonreí— ¿Tienes alguna idea mejor?

Imité vagamente su pose y esperé su respuesta, o un pequeño enfado por su parte.
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Re: [Tierra de Dragones] [Misión] Salven a Chin-Luz/Sin Piedad

Notapor Zodiark » Mar Oct 22, 2013 11:51 pm

¿Estás segura que es lo más adecuado...?

Sonreí inocentemente y asentí con la cabeza. Parecía que a Xefil, que resultó ser mi compañero en la misión a la que acababa de apuntarme, no le hacía demasiada gracia que yo, una niña pequeña, fuera a realizar una tarea de ese tipo. Nunca habíamos luchado codo con codo, así que no conocía mis habilidades, y le iba a demostrar que era capaz de hacer cualquier cosa que los demás aprendices pudieran hacer.

Recuerda que estamos trabajando como guardaespaldas, Maya. Podría ser peligroso.

Lo sé, no te preocupes, ¿vale? Después de todo soy una aprendiza de la Llave Espada, y sé utilizar bastantes hechizos —respondí orgullosa con una mano en el pecho—. Sólo estás preocupado porque soy una niña, ¿pero sabes qué? ¡Soy tan poderosa como cualquiera de nuestros compañeros! —dije mirándole a los ojos con determinación, con una sonrisa optimista en el rostro—. Confía en mí.

Bueno… —murmuró Xefil — Sí, supongo que… ¡De acuerdo! —dijo finalmente, resignado.

¡Bien! ¡No te defraudaré! Ni al hombre al que debemos escoltar, claro —comenté recolocándome el sombrero—. He aceptado esta misión para demostrarme a mí misma y a los demás que tengo potencial para ser maestra de la Llave Espada, no voy a dejar pasar la oportunidad así como así —dije con otra cándida sonrisa.

Pero debes prometerme que protegerás la retaguardia. No, espera, ¿y si atacan la retaguardia…? Debes quedarte en… sólo… Agh, sólo prométeme que no tomarás riesgos innecesarios.

No te preocuuuupeeees... —repetí tras un suspiro—. He aprendido a cuidarme de mí misma durante el tiempo que llevo en este mundo.
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Re: [Tierra de Dragones] [Misión] Salven a Chin-Luz/Sin Piedad

Notapor Tsuna » Sab Dic 28, 2013 1:06 am

Bueno creo que podré hacer que lleguemos.

¡¿Crees?! —Le exclamé, entre indignada y decepcionada

¿Tienes alguna idea mejor? —Noté cómo Saito imitó vagamente mi pose, cosa que me molestó severamente, así que decidí yo cambiar la mía.

>>Sí, irnos ya, que llevamos retraso y hay platines en juego.

Bajé las escaleras sin siquiera esperarlo y olvidando mi bebida en los escalones, salí a los portones e invoqué mi Glider y mi armadura, dispuesta a partir de inmediato...

[...]

El tiempo pasó; el viaje no había sido muy complicado, Saito y yo nos las apañamos para llegar a Tierra de Dragones; en el fondo tenía curiosidad por saber cómo era ese mundo. Habíamos aterrizado en un espeso y denso bosque, con plantas y vegetales que nunca había visto antes, me resultaban extrañas:

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Nada más aterrizar guardé tanto el Glider como la armadura en mi corazón, y los rayos de sol no tardaron en impactar contra mi piel, sería complicado llevar a cabo un asesinato en pleno día. Mientras Saito aterrizaba también, yo decidí explorar un poco el terreno para asegurarme de que no hubiese nadie.

Todo parece despejado... excepto ese lugar. —Me refería al campamento, apoyada sobre una de mis caderas

Me vi obligada a forzar mucho la vista para distinguir mínimamente entre las tiendas de campaña y los soldados; supuse que el objetivo, el estratega, debía estar allí.

Y según el encargo, ha contratado gente capaz de protegerle de nosotros. Supongo que siendo un estratega lo habrá planeado todo con detalle para salir de esta victorioso, pero... —¿Sería fácil asaltar el campamento y salir de allí con vida? No, yo prefería más una táctica silenciosa, que lo pillase desprevenido— Bien, Saito; esperaremos a que salga del campamento, y en ese entonces... Ese pobre hombre se tendrá que despedir para siempre del mundo.

Retrocedí, iría a explorar el bosque con más detalle, quizás encontrase algo de utilidad para completar más rápido la misión, un atajo o algo similar. Me arriesgaba también a perder mucho tiempo y no volver a tiempo, pero confiaba en que lo tendría todo controlado.

Oye Saito, voy a explorar un poco el terreno, quizás encuentre algo útil por el camino. Intentaré estar aquí lo más rápido posible.

Y con las mismas salí de allí.
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Re: [Tierra de Dragones] [Misión] Salven a Chin-Luz/Sin Piedad

Notapor Zee » Lun Dic 30, 2013 10:31 am

Debo admitir que la determinación de Maya siempre me pareció admirable. A su corta edad, era obvio que era una de las Aprendizas más valientes, con una voluntad de hierro y la pizca perfecta de agresividad. Estaba bastante seguro que era ese tipo de persona el que llegaba a convertirse pronto en Maestro; y parecía que el Maestro Akio y la Maestra Lyn eran el ejemplo perfecto.

Maya —llamé, haciendo ademán de salir del gremio. En cuanto me aseguré de tener su atención, comencé a caminar hacia la salida, mientras agregaba una cuestión que me parecía fundamental—: ¿Cuántos años tienes?

Doce. A su edad yo...

...ugh, nunca pensé que diría eso. No me pensaba tan viejo.

Eso es bueno —expresé, aclarando así que en realidad no pretendía volver a convencer a Maya de que se quedara, si es que lo pensaba así—. Una guerrera en un empaque pequeño. Los mercenarios no se lo verán venir. ¡Ha, y se creen que ellos tienen el elemento sorpresa!

Salimos del Gremio y a los jardines traseros del castillo, lo cual no nos llevó más que unos minutos. Y no tardé ni un instante más en colocarme mi Armadura e invocar mi Glider. Intenté invocarlo cómo hacía el Maestro Ronin, sin soltar la Llave-Espada de su mano, pero me encontré fallando como de costumbre. Tuve que lanzarlo al cielo por enésima vez.

¿Nos vamos? —invité, tomando torpemente un pequeño mapa de uno de los compartimientos de mi Armadura—. Por suerte he estado antes allí, así que... Tardaremos menos de lo que se esperaría; que incluso así, es poco.

>>Bueno, tenemos una vida en nuestras manos... ¡Así que en marcha!
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Re: [Tierra de Dragones] [Misión] Salven a Chin-Luz/Sin Piedad

Notapor H.S Sora » Jue Ene 09, 2014 7:39 pm

¿Tienes alguna idea mejor?

Sí, irnos ya, que llevamos retraso y hay platines en juego.—Noté como Saeko se había enfadado ante aquello, incluso cambió su postura repentinamente.

De pronto Saeko empezó a bajar las escaleras, sin decirme nada. Después de un par de segundos sin saber que hacer me dí toda la prisa que pude y salí a los portones para ver como Saeko ya casi despegaba, olvidándose intencionadamente de mí.

¡Oye espérate!—le dije mientras invocaba mi Glider y me colocaba la armadura con toda la velocidad que pude para alzancarla en cuanto pudiese.

[...]

El tiempo había pasado más rápido de lo que creía; aunque Saeko parecía algo mosqueada por mi respuesta o aquello me había demostrado su fugaz salida, casi como si me propusiese una carrera. Aun con todo aquello, logramos llegar con una "facilidad" relativa, no había sido para tanto en el fondo. Decidimos aterrizar en un bosque poblado de unas peculiares plantas que no había visto nunca antes, pero por su forma parecían cañas o lanzas. Me resultó ciertamente peculiar y gracioso.

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Al aterrizar pude ver como Saeko ya se había quitado su armadura, y cuando yo me quité la mía no tardé en comprobar que hacía un sol resplandeciente. Un clima poco favorable para la tarea que teníamos encargada.

Todo parece despejado... excepto ese lugar. —dijo Saeko de pronto mientras se apoyaba en una cadera.

Me acerqué a ella para ver a lo que se refería. Hasta ahora no me había dado cuenta, pero se podían ver en la lejanía algunas tiendas de campañas custodiadas por lo que seguramente serían soldados o guardas. Nuestro objetivo se encontraría ahí sin duda alguna.

Y según el encargo, ha contratado gente capaz de protegerle de nosotros. Supongo que siendo un estratega lo habrá planeado todo con detalle para salir de esta victorioso, pero...—Saeko parecía estar pensando en algo, ajena al mundo entero.

Bueno, que contrate a la gente que quiera, seguirá sin poder salir con vida.—aquella respuesta había salido automáticamente de mí, apenas había pensado lo que había dicho. Por suerte, Saeko pareció ignorarla o no hacerle mucho caso.

Bien, Saito; esperaremos a que salga del campamento, y en ese entonces... Ese pobre hombre se tendrá que despedir para siempre del mundo.

Me parece bien, aunque intentémos liquidarle lo antes posible. Probablemente cuanto más tardemos en hacerlo, más refuerzos le lleguen y más se complique el asunto—dije encogiéndome de hombros casi indiferentemente.

Saeko retrocedió entonces.

Oye Saito, voy a explorar un poco el terreno, quizás encuentre algo útil por el camino. Intentaré estar aquí lo más rápido posible.

Asentí mientras ella ya se perdía entre las extrañas plantas que me recordaban a lanzas. Por mi parte me tumbé en el suelo. Se sentía un poco incómodo pero quería meditar durante un rato las opciones que tenía. Quizá incluso con algo de suerte se me ocurriese alguna estrategia que compartir con Saeko para cuando esta volviese.
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Re: [Tierra de Dragones] [Misión] Salven a Chin-Luz/Sin Piedad

Notapor Zodiark » Jue Ene 30, 2014 6:27 pm

Maya —me llamó Xefil, era hora de partir.

Asentí con la cabeza y ambos comenzamos a caminar hacia la salida del gremio, con destino a Tierra de Dragones, el lugar donde tendría lugar la misión. Mientras andábamos, el chico me hizo una pregunta:

¿Cuántos años tienes?

¿Eh? —miré a mi compañero algo extrañada por la repentina pregunta—. Doce.

Eso es bueno. Una guerrera en un empaque pequeño. Los mercenarios no se lo verán venir. ¡Ha, y se creen que ellos tienen el elemento sorpresa!

Tienes razón —dije sonriendo tras asentir con la cabeza—. Si me ven como a una cría indefensa seguramente bajarán la guardia, y entonces... ¡Zas, les zurraré de lo lindo! —exclamé mientras chocaba el puño de la mano derecha con la palma de la izquierda.

Finalmente, llegamos a los jardines traseros del castillo. Xefil se puso rápidamente la armadura y yo hice lo mismo. A continuación, Xefil invocó su glider y yo le imité, sacando así mi glider con forma de escoba, en el cual me subí sin perder ni un segundo.

¿Nos vamos? —preguntó mientras sacaba un pequeño mapa de su armadura—. Por suerte he estado antes allí, así que... Tardaremos menos de lo que se esperaría; que incluso así, es poco.

Genial, te sigo entonces —respondí levantando el pulgar.

Bueno, tenemos una vida en nuestras manos... ¡Así que en marcha!

Asentí con la cabeza y me acomodé en la escoba, preparada para partir. Dicho y hecho, ambos alzamos el vuelo y, guiados por Xefil, nos dirigimos a Tierra de Dragones.
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Re: [Tierra de Dragones] [Misión] Salven a Chin-Luz/Sin Piedad

Notapor Tsuna » Vie Ene 31, 2014 8:17 pm

Flashback
Días de Paz


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Chrono Trigger - Peaceful Days


Aquel día en Tierra de Dragones el cielo estaba claramente despejado, las pocas nubes que se avistaban en el cielo eran transportadas por una suave brisa que acariciaba el lugar allí a dónde iba.

En el jardín de una gran y prestigiosa casa se hallaba una joven de media edad (rondaría seguramente los diecinueve años), sentada y observando con detenimiento los peces del estanque, pensativa.

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¡Ey! ¡Buenos días, eh… esto, señorita…

Himeko. —Cortó de inmediato la joven, sin siquiera dirigirle la mirada; por su actitud sabía que se trataba de alguien nuevo allí, y por tanto, nadie que mereciera la pena— Debes dirigirte a mí de esa forma, de lo contrario, te irás de patitas a la calle y el nombre de tu familia será deshonrado para siempre.

El nuevo muchacho se puso rígido de inmediato, a modo de respeto hacia la chica y demostrando que haría lo posible por no terminar en la calle, provocando con ello un característico sonido de metal por la ligera armadura que llevaba encima.

Era delgado aunque algo fuerte, de cabello corto, revuelto y color castaño, tez blanca y ojos celestes. La muchacha a diferencia suya vestía unos exquisitos ropajes, típicos de alguien con mucho dinero; parecía una princesa. De tonos azules y blancos, bellísimos, además de una tez muy blanca y cabello largo, algo oscuro y morado.

Perdone, señorita Himeko. No era mi intención, en absoluto, tan solo me pasaba por aquí para comprobar que…

Sí, como sea. Tengo hambre, me gustaría que me trajeses algo de comer, estoy hambrienta. —Interrumpió de nuevo, todavía sin dirigirle la mirada, concentrada en su banco de peces

¡Oh! Claro, por supuesto, iré de inmediat…

Dime, ¿te gustan los peces? Aquí hay de muchas variedades, son preciosos. Me gusta el de color azul.

El hombre abandonó aquella y rígida postura para dar a otra menos formal, pensando una respuesta y acercándose para observar los peces. Entonces por primera vez la joven lo miró, de arriba a abajo, para finalmente hacer un gesto de desaprobación, como si no le convenciese.

Pues no sabría decirle, nunca me han llamado la atención los peces. Pero si tuviese que elegir uno... está claro que el azul es el más bonito.

La chica frunció el ceño, desconfiada.

Te ha gustado porque lo he dicho yo. —Y lo miró fijamente, parecía incluso enfadada por la decisión que había tomado

El chico retrocedió, impactado por aquella deducción tan impecable.

No, en absoluto… De verdad me gusta, ¡una casualidad que hayamos coincidido!

Dime, ¿cómo te llamas? ¿Llevas mucho tiempo trabajando como guardia para nuestra familia? Se te ve bastante verde y debilucho.

El hombre reaccionó ante aquello con indignación, en cierto modo ofendido:

No, es decir, cierto es que llevo poco sirviendo a vuestra honorable familia, mas mis habilidades no son de principante. Sé muy bien cómo defenderme, nadie hasta ahora ha podido conmigo, pero eso se debe al gran esfuerzo que le he puesto, todo sea dicho.

Bah, tonterías. Llegará el día en el que mueras combatiendo, es así; todos termináis así.

El joven tragó saliva al escuchar las duras palabras de la mujer a la que tenía que servir, intentando hacerse a la idea de ello; sabía que era cierto y tenía que estar preparado.

Igualmente, señorita Himeko, usted debería también aprender el noble arte de la espada, algún día deberá valerse por sí misma y esto la ayudará a seguir adelante. ¿No cree?

La joven volvió su mirada a la suya, una mirada cargada de dureza, preparada para decirle cualquier cosa que se le pasase por la mente. El hombre retrocedió un paso asustado, imaginándose el peor de los destinos.

¿Tu nombre?

Oh… P-pues… Me llamo Chai, señora: Chai-Fa Sung.

La joven se levantó del suelo, aun dudando de lo que iba a hacer.

Chai… ¿Podrías enseñarme? Me gustaría aprender.

El hombre abrió los ojos como platos, sorprendido.

¡C-claro! Faltaría más mi señora.

Pero antes quiero mi comida, no te he visto ir a buscarla… y ha pasado bastante tiempo desde que te la encargué.

El hombre se llevó una mano a la nuca, agobiado y sudoroso.

¡Sí, es cierto! ¡Sí! ¡Es mi falta, señorita Himeko! ¡No tardaré, le ruego paciencia!

***


No puede ser… ¿será ella? Se parece bastante.

El hombre se llevó una mano al mentón, pensativo.

>No, es imposible… ella está muerta. Igualmente, el señor Ranmaru quizá esté interesado también.

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Cambio a Saeko finalmente =D


Me había alejado un poco más de la cuenta del campamento, a lo lejos pude distinguir la Ciudad Imperial; supuse que si el estratega tenía ésta como objetivo tendría que pasar a través de los campos de arroz.

Era hora de volver con el tonto de Saito y planear una estrategia.

Detente…

Di un respingo, ni por asomo me esperaba toparme con alguien. ¿Y si era un soldado imperial? No tendría otra que matarlo allí… Éste había salido de unos matorrales a pocos metros de mí.

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He tenido que editar dos veces por un problema del navegador de la 3DS, lo siento.
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Re: [Tierra de Dragones] [Misión] Salven a Chin-Luz/Sin Piedad

Notapor Zee » Dom Feb 09, 2014 8:33 am

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¿Por qué una niña mujer es parte de la escolta? ¡Esto es un ultraje!

Tanto Maya como yo expresábamos nuestra inconformidad de diferentes maneras. En mi caso, de una manera poco brusca pero bastante directa: cruce de brazos y dagas en la mirada. Aunque de mis labios no salía ni una sola palabra, mi posición estaba más que clara. Una cosa era subestimar a la niña, cosa que incluso yo había hecho anteriormente, y otra era el trato que se le daba.

Aunque, para ser justos... el hombre debía asimilar la idea de que su vida estaría en manos de una niña. Tampoco podía culparlo por mostrar su incredulidad y desesperación... pero mi empatía me obligaba a ponerme de lado de mi compañera que tampoco (y muy claramente) estaba contenta con la forma en la que se le trataba.

¡Señor! Estos hombres fueron recomendados por el mismísimo Ronin, no podemos romper el contrato —intentaba también defendernos uno de los miembros del ejército, usando el nombre y la fama del Maestro Ronin como argumento. No debemos dudar de...

¡Silencio! —me aseguré de denotar mi rechazo al alejar mi torso y cabeza tanto como pude—. Una mujer sigue siendo una mujer, debería estar tejiendo y aprendiendo a ser una correcta señorita con su madre. Esto es trabajo solo de hombres, ¿no lo crees muchacho?

Alcé una ceja, incómodo y extrañado, además de ofendido, cuando el hombre me guiñó un ojo. Tajante, negué con la cabeza.

Una vez llegue con vida a la capital, podrá quejarse cuanto vea necesario, señor —declaré, con un semblante serio. Y en cuanto Maya también dio su opinión, nuestro protegido no tuvo más que hacer sino

Está bien. De todos modos no hemos tenido informes de los espías sobre cualquier peligro y no daría tiempo a preparar otro grupo escolta. Coser y cantar, un simple paseo entre flores silvestres.

Intercambié una mirada de extrañeza con Maya. Si realmente fuese tan sencillo, no nos hubiesen contratado a nosotros, a los Caballeros de la Llave. Y aunque era cierto que no sabían sobre nuestro estatus verdadero, era innegable que estábamos allí como pupilos de Ronin. Nosotros tampoco éramos unos cualquieras.

Sin embargo, tenemos esos rumores de los asesinos de élite aliados de los Hunos.

Y allí estaba nuestra confirmación...

***


Finalmente se abrieron las puertas del campamento, dejándonos el camino libre sólo a nosotros. Nuestro protegido, el carruaje, Maya y yo. Frente a nosotros se extendía un largo camino, rodeado por nada más sino una extensa pradera. Sin siquiera tener que forzar los ojos podía ver la capital recortándose en el horizonte. Seis kilómetros no eran nada.

O bueno, lo eran a pie...

Eché a andar a un lado de los caballos, con la cabeza alta y sin realmente esconder mi existencia. No podía sacar mi Llave-Espada o mi daga de plasma frente al chofer, pero lo hubiese hecho de haber sido capaz. La idea, por supuesto, era dejar claro que sólo yo era la escolta. Sólo yo y nada más.

Sube al carruaje, Maya —pedí—. Si el tal Chin-Luz te deja entrar, entonces perfecto. Si no, tendrás que subir con nuestro amigo a conducir —señalé con la cabeza al hombre que sujetaba las riendas—. Si el ejército te subestimó, también lo hará el enemigo. Siéntate y espera pacientemente.

>>Serás el arma secreta
—resumí, sonriente. Nadie se esperaría que una pequeña niña saltara del carruaje y comenzara a lanzar hechizos a mansalva. Sería perfecto...

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...así que nada de metagame, queridos e_e
—You're like that coffee machine: from bean to cup, you fuck up—

~Dondequiera que el arte de la medicina es amado,
también hay un amor a la humanidad~


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Re: [Tierra de Dragones] [Misión] Salven a Chin-Luz/Sin Piedad

Notapor Zodiark » Lun Feb 17, 2014 7:22 pm

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¿Por qué una niña mujer es parte de la escolta? ¡Esto es un ultraje!

Resoplé indignada, como intentando contener mis ganas de acercarme al hombre y darle un puñetazo en la boca por maleducado. Es cierto que es raro dejar tu vida en manos de una niña, ¿pero decir que era un ultraje? Poniéndome en lo peor, seguramente acabaría arriesgando mi vida para salvar el culo de ese tipo, ¿qué se había creído?

¡Señor! Estos hombres fueron recomendados por el mismísimo Ronin, no podemos romper el contrato —intervino uno de los hombres que estaba allí—. No debemos dudar de...

¡Silencio! Una mujer sigue siendo una mujer, debería estar tejiendo y aprendiendo a ser una correcta señorita con su madre. Esto es trabajo solo de hombres, ¿no lo crees muchacho?

¿Perdón? —dije indignada ante aquella actitud machista—. Mire, señor, no estaría aquí si no supiera que puedo hacerlo. Además, no veo por aquí a nadie más aparte de nosotros dos que vaya a escoltarle, ¿verdad? Así que lamentablemente tendrá que aguantarse.

Una vez llegue con vida a la capital, podrá quejarse cuanto vea necesario, señor.

Está bien. De todos modos no hemos tenido informes de los espías sobre cualquier peligro y no daría tiempo a preparar otro grupo escolta. Coser y cantar, un simple paseo entre flores silvestres.

Xefil me miró, extrañado, y yo le respondí con una mirada igual. ¿Para qué necesitaba escoltas si presuntamente tenía el camino libre?

Sin embargo, tenemos esos rumores de los asesinos de élite aliados de los Hunos.

Miré a Xefil una vez más con una expresión de complicidad en el rostro. Si los rumores eran ciertos, no iba a ser todo tan sencillo.

***


Una vez fuera del campamento, nos tocaba escoltar, por fin, el carruaje en el que era transportado Chin-Luz. Xefil comenzó a caminar al lado de los caballos y yo junto a él.

Sube al carruaje, Maya —me pidió mi compañero—. Si el tal Chin-Luz te deja entrar, entonces perfecto. Si no, tendrás que subir con nuestro amigo a conducir —dijo señalando con la cabeza al chófer del carruaje—. Si el ejército te subestimó, también lo hará el enemigo. Siéntate y espera pacientemente.

Buena idea —respondí sonriendo.

Serás el arma secreta.

Asentí con la cabeza, confiando en el plan de Xefil, y me dirigí a la puerta del carruaje. Llamé dos veces con los nudillos y la abrí ligeramente, asomando la cabeza para hablar con Chin-Luz.

Disculpe, señor. Sé que no confía en mí por ser una niña, pero tenemos un plan y necesito que me deje quedarme aquí con usted —me quedé en silencio unos segundos, pensando en algún discurso para convencerle—. No soy uno de esos bravos héroes, grandes y musculosos, que aparecen en los cuentos de caballerías, lo sé, pero soy un guerrero tan apto como cualquiera de ellos. Le aseguro que si he aceptado esta misión es porque sé que puedo protegerle. Confíe en mí.

Sin esperar una respuesta por su parte, me adentré en el carro, cerré la puerta y me senté a su lado.

Mi idea es fingir que viajamos juntos como padre e hija, por ejemplo, y así, si entran aquí, bajarán la guardia al creer que no soy más que una niña indefensa, y entonces les daré una paliza. Es por eso que necesito que confíe en mí y mantenga la calma si se da esa situación, ¿de acuerdo?
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Re: [Tierra de Dragones] [Misión] Salven a Chin-Luz/Sin Piedad

Notapor H.S Sora » Lun Feb 17, 2014 11:33 pm

Deberías intentar no dormir, y menos cuando estamos en una misión así de peligrosa.

Aquello me sobresaltó, levanté la cabeza y allí se encontraba Saeko, mirándome con aquella cara que denotaba un ligero enfado e indiferencia.

Tampoco ha sido para tanto, solo una ligera siesta—respondí desperezándome y poniéndome en pié.

¿Si llegan a ser los enemigos qué? Vaya manera más absurda de morir—Y se cruzo de brazos, impaciente.

Me encogí de hombros, aunque en el fondo sabía que Saeko tenía razón.

Pero no pude resistirme a la calma y tranquilidad de aquel lugar, era un sitio tan tranquilo y apacible, que parecía que el viento me había mecido en a propósito para que me quedase dormido.

Bueno ¿Y qué has encontrado en tu exploración?—dije para cambiar el tema.

Poca variedad de vegetación sin contar con este tipo de…—señalo a aquellas grandes cañas de color verde— lo que sea que sean esas cosas. Y la verdad es que no he encontrado ningún soldado ni nada pare…—me miró extrañada— ¿Qué haces?

La miré sin comprender unos segundos, pero me encontraba cerca de ella, con la Llave Espada invocada, pero no era consciente de aquello. Intenté hablar pero solo balbuceaba, mientras intentaba mover mi cuerpo, en vano.

¿Qué diantres está pasando?...

¿Saito?—me tocó el hombro y seguía sin reaccionar— No haces buena cara, ¿Qué te pasa?—volvió a tocar mi hombro.

De repente, volví a tomar posesión de mi cuerpo, o eso me pareció. La Llave Espada atravesó el cuerpo de Saeko de pronto. La sangre me salpicó la cara.

¿Q-Que diablos?...—Saeko entonces empezó a toser sangre. Su mirada era de estupefacción mezclada con lo que parecía odio.

¿Qué? ¡Para! ¡Aun puede salvarse, vamos! ¡Reacciona! ¡Usa cura!

Quité la espada que había atravesado el cuerpo de mi compañera y volví a clavarla con más fuerza, repitiendo el proceso una docena de veces o más.

No aguantaba aquello, cada vez que lo hacía era como si en vez de a ella, el dolor lo sintiese yo por ver aquella escena. Pero lo extraño era que mi cuerpo, que se movía por autonomía propia, no sentía lo mismo. Yo sentía el dolor y las ganas de parar mientras que mi cuerpo, parecía disfrutar de aquella macabra escena.

Antes de llegar a la media docena de puñadas mi compañera se había derrumbado en el suelo, muerta. Pero yo seguía clavando mi Llave Espada en su cuerpo, manchándola de sangre y deleitando mi cuerpo mientras yo lloraba.

¿P-Por qué? ¿Qué está pasando?...

Finalmente caí de rodillas al suelo, mi Llave Espada yacía a mi lado, junto al cuerpo de Saeko, la cual no parecía ella misma. Estaba llena de heridas profundas, con sus ropas manchadas de sangre y aun mantenía los ojos abiertos. Como si mi cuerpo se burlase de mí y me quisiese conceder un mero capricho le cerró los ojos a mi compañera, y entonces abrí la boca (involuntariamente de nuevo) y dejé escapar una sonora risa macabra mientras me esparcía la sangre de Saeko por el rostro e incluso se daba el placer de degustarla.

De pronto la risa paró. El viento se detuvo. Volví a recuperar el control sobre mí. Grité:

¡Saeko!—y me reincorporé abriendo los ojos, estos con lágrimas que descendían y una sensación que me oprimía el pecho.

No había nada, ni mis manos manchadas de sangre, ni el cuerpo muerto de Saeko por ningún lado… Nada.

T-Todo ha sido una pesadilla…

Me puse en pié con el corazón aun encogido. Jadeé pesadamente varias veces en vez de gritar, debido a que tenía miedo a que cualquier enemigo que protegía al estratega y que estuviese patrullando el lugar me oyese.

¿Por qué diablos había soñado aquello? Empecé a darle vueltas mientras me ponía a realizar ejercicio físico: flexiones, abdominales… Toda actividad que me mantuviese activo, alerta y sobretodo despierto, sería bienvenida.

No iba a volver a quedarme dormido, no al menos durante lo que quedaba día.
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Muchas grácias por el avatar Mepi ^^
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Re: [Tierra de Dragones] [Misión] Salven a Chin-Luz/Sin Piedad

Notapor Tsuna » Mié Feb 26, 2014 10:54 pm

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The war begins.


Nuestras miradas se cruzaron, se trataba de un hombre mayor que rondaría los cincuenta años o incluso más, moreno y con algunas cicatrices, ojos celestes y cabello castaño, también grisáceo y alborotado. Vestía una armadura algo grande y pesada para mi gusto, se tendría que mover bastante lento si sumaba las armas que portaba encima.

Agarré el mango de mi katana, preparada para entablar combate con aquel, tuviese relación con la misión o no, tenía que matarlo. No podía dejar supervivientes o posibles testigos.

Escucha, no quiero combatir, sin embargo deseo preguntarte algunas cosas… Psh, esto es absurdo, pero en fin, qué más da… —Dijo para sí mismo, yo arqueé una ceja, confusa y esperando esas preguntas— Me llamo Chai, dime, ¿el nombre de Himeko te es familiar?

Era la primera vez que lo escuchaba.

Es una lástima, pero me temo que no.

Y me lancé con katana en mano a por él, éste desenvainó también su arma con una velocidad asombrosa, pero aproveché la corta distancia que nos separaba para cortarle en la zona del cuello, sin dejarle posibilidad a que hiciera nada.

¡Ag!

Y se desplomó sobre la hierba; muerto pensé yo, pues no se movía un ápice y la sangre brotaba a gran velocidad del corte, formando lentamente un charco.

Lo siento, tú no entrabas en la misión, pero no tenía otra opción. —Y limpié el filo de mi arma con un pañuelo, el cual guardé en uno de mis bolsillos

Me encaminé pues dejando allí su cadáver al lugar dónde se encontraba mi compañero para planear la estrategia.

Al acercarme al lugar del aterrizaje comencé a divagar, temía que Saito apareciese de golpe capturado por soldados, o incluso, que me dijera que el objetivo ya había partido hacia la ciudad. Negué con la cabeza y tragué saliva ante tanta negatividad, estaba segura de que no todo podía ser tan malo.

Ya estoy de vuelta. —Comenté con un tono de voz neutro, sin mostrar mucho interés en el ejercicio físico que estaba haciendo. Y a juzgar por su actitud, imaginé que nada había sucedido desde que partí por mi cuenta

Exhalé aire, aliviada. A continuación me situé cerca de aquellas ramas tan extrañas, analizando el campamento. Al parecer estaban preparando algo, pues notaba mucho movimiento. Lo mejor sería explicarle a Saito todo lo que había visto.

Escucha, la ciudad imperial queda bastante lejos, me he acercado todo lo posible y lo único que he visto son campos de arroz. —Omití el detalle de que había asesinado a una persona, eso era algo que no le tenía que importar a nadie

Pasó el tiempo, no supe precisar los minutos exactos, pero los preparativos aparentemente ya estaban hechos. El carruaje partía finalmente hacia la ciudad. Aunque por culpa de mi vista fui incapaz de ver quiénes lo protegían. Apreté el puño derecho con todas mis fuerzas, maldiciendo mi pésima capacidad de visión.

Saito, ya se ponen en marcha. ¿Propones algo en especial? —Le pregunté por cortesía, pero sabía que no se le había ocurrido nada inteligente o elaborado, y por ello no le dejé continuar hablando— Se me ocurre una cosa... eso sí, tenemos que adelantarnos, ¡así que rápido! —Y me puse en marcha, recordando el camino a la capital y con cuidado de que nadie me volviese a ver, intentando aprovechar el terreno a mi favor

Mientras avanzaba no paraba de darle vueltas al plan a seguir, lo mejor sería aprovechar los campos de arroz e intentar engañar a los guardias. Teníamos que intentar también sorprenderlos de alguna forma, o ganarnos su confianza en un primer momento... y se me ocurrió la mejor manera. De hecho, tenía todo lo necesario encima: un aprendiz del maestro Ryota, un arma blanca y yo misma. Por norma general los mundos no conocían las llaves espada, así que si se trataba de simples mercenarios, lo mejor sería nombrarlas para hacerles bajar la guardia. Se mofarían de una jovencita inocente y malherida que hablaba de espadas extrañas. Estaba segura de ello.

Lo único que me faltaba era... contar el plan:

Mira, se me ha ocurrido lo siguiente: Saito, tú me atacarás con todas tus fuerzas, eso me permitirá aparecer en el camino como una chica cualquiera herida, en ese momento te escondes en los arrozales y esperas. Después les intento hacer bajar la guardia con cualquier cosa, como por ejemplo, que un grupo de hombres que no había visto anteriormente me ha atacado con Llaves Espada. Y finalmente... tú apareces por detrás y les sorprendes. —Ese era mi plan, esperé la aprobación de Saito, cosa complicada viendo el riesgo al que yo misma me enfrentaba

Era cierto que los mercenarios podían directamente sospechar y matarme, aun suponiendo que yo era una joven herida, sin siquiera preguntar. Pero a veces tenía que tomar riesgos, no era aprendiza de Bastión Hueco en vano, qué sería de nuestro bando si no hiciéramos este tipo de cosas para ganar. Nuestra reputación estaría al nivel de Tierra de Partida, por lo menos.

Una vez alcanzamos el punto acordado, me paré en seco y lo miré fijamente de brazos cruzados, pensando si sería capaz de atacarme. Cuanto más lo miraba, más lo dudaba.

¿Y bien...? —Pregunté, esperando que cargara una Flama Tenebrosa con todas sus fuerzas , o cualquier otra cosa, y me dejase severamente herida

Si decidía atacarme, saldría al camino y me tiraría al suelo, dejando la espada a mi lado y fingiendo estar casi inconsciente, e incluso, me molesté en hacer falsas huellas por la zona para simular la batalla que nunca se libró. Esperaba que Saito cumpliese su parte y se quedara escondido, esperando el momento oportuno para atacar.

Me atreví a mirar de reojo cuando el carruaje apareció por el horizonte. Temí por un momento que estuviese blindado de fuertes guerreros, pero en cambio... ¿sólo había una persona? ¿Era una broma de mal gusto? ¿Tanto trabajo y esfuerzo para tener que enfrentarnos a un solo guardia?

En cuanto se aproximaron un poco más analicé con mayor precisión los rasgos del escolta. Era un chico joven, bastante apuesto y elegante, me apenaba tener que matar a alguien así, pero los platines tenían la última palabra.

Era el momento de actuar.

Ug, por favor... a-ayuda. —Comenté, en cuanto tuviese su atención, continuaría— Intentaba... intentaba llevarle el arma recién encargada a la maestra pero... un grupo de hombres me ha asaltado... manejaban armas extrañas... p-parecían llaves. D-debe avisar... a alguien. —Y terminé de mentir, esperando que aquello colase

Deseé con todas mis fuerzas que el joven no intentase rematarme, y esperé el tiempo suficiente hasta que Saito apareciese por sorpresa.

No deberías hacerle caso a una desconocida. —Y le sonreí divertida, dejándome llevar por la oscuridad

Cargué una Flama Tenebrosa desde aquella posición, aprovechando la aparición de mi compañero para atacar al escolta. Estaba segura de que no podía fallar, y además, agarré mi espada con la mano libre, en un intento de tenerla a mano.
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Re: [Tierra de Dragones] [Misión] Salven a Chin-Luz/Sin Piedad

Notapor H.S Sora » Mar Mar 04, 2014 1:01 am

Ya estoy de vuelta.

Me detuve poco a poco y miré a Saeko, la cual como había imaginado, seguía viva y sin ninguna magulladura que no tuviese ya de antes.

¿Qué es lo que has averiguado en tu largo paseo?—dije mientras exhalaba aire pausadamente, y me colocaba en una posición más adecuada para escucharla.

Escucha, la ciudad imperial queda bastante lejos, me he acercado todo lo posible y lo único que he visto son campos de arroz.—Dijo Saeko desde una posición que le permitía analizar el movimiento que se daba en el campamento donde se debían estar preparando lo mejor posible para trasladar al estratega.

Al poco tiempo de estar observando, Saeko pareció intentar forzar la vista, me acerqué, y al fijarme vi que parecía que pretendían partir ya hacia su destino. Teníamos que planear una estrategia, era el momento de actuar como un equipo.

Saito, ya se ponen en marcha. ¿Propones algo en especial?—Se me había ocurrido una pequeña estrategia que quizá podía darnos ventaja, pero antes de que pudiese llegar a abrir la boca Saeko prosiguió sin esperar mi opinión. Fruncí el ceño levemente— Se me ocurre una cosa... eso sí, tenemos que adelantarnos, ¡así que rápido!—Y Saeko se puso en marcha, inmediatamente la seguí.

Seguía con el ceño fruncido, pero la seguí todo el camino sin rechistar debido a que supuestamente se suponía que después de explorar, ella conocía el terreno mucho mejor que yo.

Durante nuestro paseo por intentar adelantarnos, intenté pensar en el significado de aquel extraño sueño que había tenido. Si bien es cierto que uno no es capaz de controlar a sus sueños, ¿cómo iba a ser capaz de defender a Saeko si la dejaba morir/la mataba incluso en mis sueños?

Dios quiera que no fuese un sueño premonitorio…

Y con aquella perturbadora idea la continué siguiendo, esperando a que de un momento a otro se decidiese a contarme aquella estrategia que se la había ocurrido, y que por lo que según parecía era mejor que todas mis ideas juntas.

Mira, se me ha ocurrido lo siguiente: Saito, tú me atacarás con todas tus fuerzas, eso me permitirá aparecer en el camino como una chica cualquiera herida, en ese momento te escondes en los arrozales y esperas. Después les intento hacer bajar la guardia con cualquier cosa, como por ejemplo, que un grupo de hombres que no había visto anteriormente me ha atacado con Llaves Espada. Y finalmente... tú apareces por detrás y les sorprendes. —la miré de hito en hito, con los ojos bien abiertos.

Dime que esto es una broma, por favor…

Saeko no parecía estar bromeando, quería que la dejase malherida para intentar sorprender a los que fuesen que protegiesen a nuestro objetivo. Dentro de lo normal, nunca me hubiese quejado de un plan así de elaborado, pero después del sueño que había tenido no me sentía capaz de herir a Saeko sin que el resultado final no fuese la muerte de esta... Pero obviamente no podía excusarme con aquello, tenía que tomar la decisión que podría darnos prácticamente una victoria o que podía acabar con la muerte de Saeko.

No dije ni una palabra y seguimos avanzando, hasta que Saeko se paró en un punto, y se cruzó de brazos mientras me sostenía la mirada. Esperaba que lo hiciese, ambos sabíamos que la oportunidad de ganar residía en aquella cínica estrategia inventada por mí compañera, ¿pero y si no podía controlarme y me pasaba dañando a Saeko? Mientras más le sostenía la mirada, más seguro estaba de qué no podía quedarme sin actuar. Tenía que evitar a toda costa que pasase lo del sueño, mi cuerpo y mi mente eran míos y sobre ellos no reinaba cualquier otro que no fuese yo.

¿Y bien...? —Preguntó mi compañera con un deje de miedo en su voz, miedo de que fuese lo suficientemente egoísta como para no querer ejecutar el plan.

La miré y asentí.

Es arriesgado pero no tenemos otra opción —dije estirando mi mano derecha, no estaba seguro de sí lo mejor era usar la Llave Espada, o por el contrario algún hechizo—en cuanto empiece la lucha intentaré captar la atención de los guardias el suficiente tiempo como para que tú te puedes sanar de las heridas y reincorporarte a la batalla.

Mátala. Mátala. Mátala.

No es momento para estas cosas… por favor ahora no…

Aquella sensación de descontrol intentaba apoderarse de mí… respiré hondo, y… lancé una Flama Tenebrosa al cuerpo de mi compañera, al costado opuesto al del corazón para intentar no sobrepasarme con los daños. Invoqué mi Llave Espada seguidamente, y realicé un corte superficial en el brazo de aquel mismo costado, pero que hacía que la ropa de Saeko estuviese rasgada por esa parte y pareciese que había estado entablando un combate, o que simplemente la habían atacado.

Mátala.

Creo que con esto bastará para convencerles el suficiente tiempo como para que entre en acción.

La miré con algo de preocupación por lo que los encargados de la protección pudiesen hacer con ella… ¿Y si preferían matarla en vez de escucharla? ¿Y si se la llevaban para realizar una atrocidad?... Alejé aquellas ideas de mi mente cuando Saeko salió al camino y fingió estar casi inconsciente, dispuesta a cumplir su parte.

Yo me escondí en los arrozales, sin dejar ver en absoluto mi cuerpo y sin hacer ningún tipo de ruido. Me tocaba esperar pacientemente al momento adecuado. Aunque con tanta planta no pudiese ver demasiado bien ni oír perfectamente lo que se decía, tendría que hacerme una idea de cuándo actuar.

Entonces, pude verlo. Aquel carruaje tenía solamente un guardián custodiándolo, lo que ponía las cosas más fáciles pero no me dio muy buena espina. Ya que si tan importante era nuestro objetivo, ¿por qué diantres solo tenía un encargado para protegerlo? ¿Acaso era tan fuerte que no necesitaba más ayuda? El tipo en cuestión no parecía un guerrero del otro mundo, podía decir incluso que su edad oscilaba entre la mía o la de Saeko, cosa que hacía que mis sospechas siguiesen alerta.

Ug, por favor... a-ayuda. —Dijo Saeko, intentando captar la atención del joven, agudicé el oído sin moverme para intentar seguir oyendo bastante bien— Intentaba... intentaba llevarle el arma recién encargada a la maestra pero... un grupo de hombres me ha asaltado... manejaban armas extrañas... p-parecían llaves. D-debe avisar... a alguien.

Mátalos a todos. Vamos.

Volví a notar aquella sensación de oscuridad, que se hacía cada vez más fuerte. Lejos de esperar varios minutos a que esta se calmase y le pudiese pasar cualquiera cosa a Saeko, o a dejarme controlar por ella, decidí hacer algo mejor: Controlarla a mi voluntad, como había dicho Saeko.

Estiré mi brazo libre utilizando esa oscuridad que intentaba controlarme sobre la propia Llave Espada, imbuyéndola con mi oscuridad. El arma había adquirido un aspecto tétrico ciertamente, tenebroso por así decirlo. Decidí llamar a aquella extraña habilidad, Arma Tenebrosa.

Los mataré, no lo dudes. Pero por mi propia voluntad.

Entonces silenciosamente salí del arrozal, y me lancé contra el joven guardián con todas mis fuerzas atacándole con aquella Llave Espada "oscura", intentando herirlo de máxima gravedad atacándole en la zona del pecho, intentando herir o golpear algún punto vital. El factor sorpresa tenía que jugar de mi parte por lo que esperaba que no pudiese esquivar ni defenderse de mi principal acometida e intentaría realizar varios cortes más.

No deberías hacerle caso a una desconocida.—Aquello probablemente nos sorprendió a ambos, Saeko parecía que estaba intentando realizar alguna clase de hechizo o ataque, pero desde mi posición no podía verlo con claridad.

Lejos de intentar descansar o darle pié a que pudiese esquivar el probable ataque de Saeko, y tanto si mi sucesión de ataques había tenido éxito como si no, agarraría por el brazo con mi mano libre al joven y le daría un cabezazo intentando desequilibrarle y esperando a que Saeko lanzase lo que fuese que tenía pensado lanzar.
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Muchas grácias por el avatar Mepi ^^
H.S Sora
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