[Bastión Hueco] Una noche de terror

Encuentro de Saito y Saeko

¡Pásate por aquí para encontrarte con todo aquello relacionado con el rol y que no encontrarás en el resto de subforos! Libres, Eventos, Eventos Globales... ¡Pásate, rolea y échate unas risas!

Moderadores: Suzume Mizuno, Denna, Astro

Re: [Bastión Hueco] Una noche de terror

Notapor H.S Sora » Lun Dic 30, 2013 6:15 pm

Luz…Oscuridad…¿Qué era aquella sensación de paz?

Solamente recordaba haberme puesto en pié gracias a la acción de la oscuridad, la cual actuaba con libertad en aquellos instantes. Ahora no era capaz de ver demasiado, sabía que seguía en aquel lugar de Bastión Hueco y que estaba vivo. ¿Necesitaba más?

Quiero… Quiero que detengas esto.

¿Aún eres capaz de aguantar consciente?

Sí… Y detén esto.

¿Para que quieres que haga eso? Además… aún estás gravemente herido Saito, no te conviene volver por ahora.

¿No te das cuenta de que no me he ido? ¿De que sigo aquí?

¿De verdad? Intenta estar atento, por una vez al menos.

S-saito, cuidado… T-todavía quedan dos…

Aquella voz… ¿Era la voz de Yukiko?—intenté levantar levemente la cabeza, pero no podía, apenas sabía cómo seguía estando consciente.

Bueno es hora de acabar con esos dos Sincorazón para pasar a la atracción principal.

No voy a dejarte andar a tus anchas…

¿Ni siquiera por Louise?

¿Qué?...

Si no hubiese desplegado ese poder, no tendrías ninguna oportunidad de volverla a ver… Quizá deberías tener más confianza en mí.

Claro, ¿Y volverme loco a las primeras de cambio? No, gracias.

Ring…

¿Qué estás haciendo ya?

Aún nada.

Ring…Ring…

Aquel sonido me resultaba extrañamente familiar y tranquilizador… ¿Pero a qué se debía? ¿De dónde provenía? Intenté levantar la vista para buscar al causante de aquello, ¿Sería de algún objeto que llevaba Saeko o Yukiko? Entonces recordé que era bastante complicado que fuese de alguna de ellas, pues no había visto que llevasen ningún objeto con el que hacer aquel ruido.

Ring…Ring…Ring…

Deja de buscar donde no debes.

¿Cómo?...

Lo que oyes. Buscas en el lugar equivocado… el sonido que oyes no proviene de ningún lugar en el que te puedas fijar así como así.

¿Y qué sabes tú de ese sonido que yo no sepa?...

No demasiado. Solo que se encuentra en tu interior, y que puede significar cualquier cosa… desde nada, un aviso, o un recuerdo incluso.

¿Cómo puedo saber que no me engañas?...

No tengo porque hacerlo.

Y tú… ¿Podrías mandarme a buscar el origen de ese sonido?

Claro, pero no te puedo asegurar que vuelvas.

Sabía que no debía hacerlo, que era la peor opción por escoger… ¿Pero qué podía hacer? Había muchas cosas en juego, entre ellas quizá, cosas que no fuese capaz de recordar. O incluso una pista del paradero de Louise… No quería quedarme de brazos cruzados.

Simplemente mándame allí, yo me encargaré de volver.

Entonces simplemente cierra los ojos, y libera tu mente… e intenta localizar a lo que sea que haga ese sonido.

Entendido… Allá voy.

Y cerré los ojos completamente, olvidándome de la voz, de Yukiko y de Saeko las cuales seguramente estarían preocupadas por mí… quería que todo quedase en silencio, todo lo que me impedía concentrarme en aquello…

Ring…Ring…

Y los volví a abrir. No sabía describir donde estaba… era un lugar tan extraño que no podía describirlo. Me encontraba en un amplio pasillo que daba a una escalera de caracol cuyos peldaños iban combinándose entre rojos y negros y aunque había luz, no había antorchas por ningún lugar.

¿Qué diablos es esto?... —dije en un susurro que parecía quebrantar el silencio que reinaba en aquel lugar.

Ring…Ring…Ring…Ring…

Aquel sonido parecía provenir de un cascabel o algo similar… pero parecía venir de un lugar muy alejado aún. Empecé a subir las escaleras, intentando quedarme con algunos detalles como la escasez de ventanas, las cuales aún no había vislumbrado ninguna y eso dificultaba saber como era posible que hubiese luz en aquél lugar... Decidí entonces acelerar el paso, para llegar cuanto antes al final de aquella escalera.

Pero antes de llegar una voz volvió a hablar dentro de mi cabeza, pero era diferente de aquella oscura voz… esta era, sin duda, una voz diferente.

¿Qué haces aquí? ¿Vienes a buscar lo perdido quizá? ¿O simplemente buscas algo sin saber el qué?...

Coloqué una mano sobre mi cabeza y me di cuenta de que me encontraba arrodillado, y casi al final de la escalera.

No me detendré por esto…—me levanté y subí el último peldaño que quedaba.

Con aquella acción llegué a una puerta de un color dorado abierta, la cual daba acceso seguro a otra instancia diferente.

Así que buscar lo perdido ¿eh?—no pude evitar esbozar una sonrisa— Ahora sí que no pienso marcharme por las buenas.

Y dicho esto, avancé sin rumbo hacía lo que fuese que me esperaba

***

¿Realmente piensa ser capaz de volver?

Ante aquello, no pude evitar esbozar una sonrisa. Confiaba en que Saito sería capaz de volver de cualquier lugar, pero no confiaba en lo que había ido a buscar. ¿Qué diantres sería? Si no volvía quizá me aburriría bastante, por ello confiaba en que lo hiciese.

Aunque ahora tengo juguetes con los que podría divertirme un rato…

Decidí hacer que saliese una parte de mi oscuridad, ya que me encontraba con energías de hacerlo. La prueba de ello era que había sido capaz de liberar ambos brazos oscuros y derrotar a aquel primer Sincorazón sin esfuerzo alguno. Aunque como había dicho Yukiko aún quedaban dos.

Aquella chica Yukiko, me había intrigado desde un principio, y me serviría como calentamiento juntamente con Saeko y Gengar, sabía que sería un espléndido combate. Chasqueé los dedos y pude notar como aquella oscuridad empezaba a emerger hacia el exterior, naturalmente tenía que hacerlo con moderación, pues si aquellos Maestros de Bastión Hueco lo notaban seguramente me encontraría en problemas.

Spoiler: Mostrar
http://www.deviantart.com/download/106542791/Ragnarok_fanart___Soul_Eater__by_nelson1990.jpg


Antes de decir nada, me hice con el control del monstruo y destrocé por completo al primer Sincorazón con escudo, realmente resultó fácil ya que Saito lo había dejado bastante tocado. El segundo fue algo más complicado, pero aún así demasiado fácil y aburrido. Empecé a golpear aquel escudo con cabeza una vez y otra vez, y otra… hasta que el escudo se rompió en pedazos.

Pude observar como aquellos ojos amarillentos sentían terror y sin pensármelo terminé con su vida.

Bueno…—dije girándome hacía ellas una vez que ambos corazónes de aquellos monstruos hubiesen ascendido a los cielos— ¿Qué os parece si combatimos? Realmente necesito algo con lo que entretenerme, y por ahora sois lo único que me vale… —Miré a Yukiko y esbocé una sonrisa algo cínica. — Realmente no es una pregunta, combatiréis queráis o no.

Cuando terminé de hablar pude ver como todos estaban bastante alejados, y en posición de defensa… por lo que mi ataque seguramente sería fácilmente interceptado, aún así quería ver de que eran capaces empecé a acercarme y entonces pillé un retazo de conversación entre Saeko y la extraña Yukiko.

Bien, pues yo sugiero esperar a que esa cosa realice el primer movimiento…

¿Con qué eso queremos eh Saeko? Entonces te daré lo que quieres, un primer movimiento.

Sin acabar de escuchar el resto de la frase pegaría un chirrido bastante metálico y sin más dilación, atacaría a Saeko con mi brazo izquierdo para ver si era capaz de bloquear aquello al menos.

Si Saeko intentaba protegerse con su Llave Espada y su otra arma me encargaría de pegarle un puñetazo a la altura del estómago con mi otro brazo libre.

Aquí tienes su primer movimiento —diría sonriendo levemente.

Spoiler: Mostrar
???
Nivel: ???
Vit: ???
PH: ???
Observaciones:
* ???
* ???
Habilidades:
* Regeneración: A medida que el combate avanza, el usuario con el que hace contacto el monstruo va regenerando las heridas graves que tenga, llegándolas a convertir en heridas superficiales.
* ???
* ???
* ???
* ???
* ???
Imagen

Muchas grácias por el avatar Mepi ^^
H.S Sora
22. Espectro
22. Espectro
 
Mensajes: 655
Registrado: Mar Sep 25, 2012 7:43 pm
Dinero: 3,775.22
Banco: 213,774.43
Sexo: Masculino
Karma: 3

Re: [Bastión Hueco] Una noche de terror

Notapor Tsuna » Lun Dic 30, 2013 11:47 pm

Yukiko no respondió ante mi sugerencia, es más, se mostró algo preocupada o incómoda por mi forzada sonrisa.

¡Saeko cuidado!

No lo vi llegar, aquel monstruo dio un grito terrorífico y se aproximó a mí rápidamente gracias al cuerpo de Saito… ¿Se estaba transformando acaso en un Sincorazón? No lo parecía pues ni siquiera portaba su característico emblema u ojos amarillentos. ¿Qué podría ser aquella cosa?

¡Maldición! —Exclamé desesperada, bloqueando su ataque con mi Llave Espada en el último segundo y a duras penas, pero antes de poder reaccionar…


¡Agg! ¡N-no!


Me golpeó brutalmente con su puño libre en el estómago, obligándome a caer varios metros atrás. El golpe que me llevé en la cabeza a causa del piso fue peligroso, sentí cómo mi sangre resbalaba a través de mi frente entre las gélidas gotas de lluvia, permitiéndome saborearla al desembocar en mis labios. Me llevé de inmediato mi mano libre al estómago, intentando calmar el dolor.

¡C-cuidado! ¡S-saeko! N-no te dejaré acercarte a ella…

Y pude ver entre la lluvia cómo Yukiko se adelantaba sola para encarar a la criatura.

A-aseguraos de atacar al monstruo… sino Saito podría resultar herido… c-creo. —Y lanzó a través de sus manos un hechizo Hielo, que impactaría con toda precisión en el cuerpo del monstruo.

Saeko… ¿Te encuentras bien? —Me preguntó Gengar, ayudándome a incorporarme.

Me levanté aturdida por el golpe, sin saber bien qué pensar o qué hacer… ¿Se suponía que derrotando a aquel ser Saito podría volver? ¿Sería esa cosa el auténtico Saito? ¿Y si Saito resultaba herido por dañar al monstruo? Desconocía todo acerca del enemigo pero…

Tenemos que arriesgar e intentar derrotarlo, puede que de ese modo consigamos traer a Saito de vuelta. ¡Gengar, prepárate para atacar! —Le ordené y lanzándome yo sola al combate.

Gengar por su parte emplearía un hechizo Libra sobre el enemigo, intentando averiguar más datos sobre él desde la retaguardia.

Veamos de qué está hecha esta cosa, entonces, jejeje.

Por mi parte, me situé junto a la otra joven la miraría con algo de desesperación, necesitaba saber acerca de su estilo de combate y su magia afín, confiando en que de esa manera pudiésemos sincronizarnos mejor.

Dime, ¿sabes hacer algo útil aparte de lanzar un hechizo básico?

La chica me miró intimidada, parecía asustada por mi actitud.

¡Responde rápido, no tengo toda la noche, ni Saito tampoco! —Y salté hacia el monstruo sujetando mi katana con ambas manos, propinándole algunos cortes rápidos para volver a retroceder, teniendo cuidado durante el proceso de no dañar a mi compañero, a Saito.

S-sí, cuando hace frío… soy más fuerte y me cuesta menos concentrarme...

¡¿Y eso nos ayudará a ganar o qué?! ¡Te pregunto por hechizos o movimientos ofensivos! ¡Por tu estilo de combate! ¡Tu magia afín!

Me juntaría a su lado, preparada para cualquier cosa que pudiese hacer el monstruo. A pesar de desconocer prácticamente todo sobre mi enemigo, sí tenía clara una cosa, y era que no volvería a caer dos veces en el mismo truco.

Spoiler: Mostrar
Saeko
Nivel: 6
Vit: 16
PH: 12

Gengar
Nivel: 5
Vit: 36
PH:3


Yukiko
Nivel: ???
Vit: ???
PH: ???
Observaciones:
* En ambientes fríos puede alcanzar su máximo potencial.
* ???
Habilidades:
* ???
Cuerpo hipotérmico (HM) [Habilidad pasiva; Requiere Magia Afín: Hielo]. El cuerpo del personaje se mantiene a una temperatura bajo cero por tiempo indefinido, recibiendo así +1 de Poder Mágico constante. En ambientes muy calurosos (Como un desierto) la habilidad perderá su efecto, mientras que en ambientes húmedos y de muy baja temperatura, el efecto de habilidad se multiplicará por dos, recibiendo hasta +2 de Poder Mágico extra constantemente.
Hielo (HM) [Nivel 2] [Requiere Poder Mágico: 3]. Proyectil de hielo lineal, con muy pocas posibilidades de congelar.
* ???
* ???
Avatar de Usuario
Tsuna
57. Ferrocustodio I
57. Ferrocustodio I
The Unknowns
 
Mensajes: 1680
Registrado: Mar Ene 03, 2012 5:12 am
Dinero: 691,216.48
Banco: 0.00
Ubicación: Perdida en el océano.
Sexo: Femenino
Clan: The Unknowns
Estantería de objetos
Karma: 17

Re: [Bastión Hueco] Una noche de terror

Notapor H.S Sora » Dom Ene 05, 2014 4:08 am

Tras caminar durante un largo rato, encontré otra puerta abierta, ¿Me esperaba de nuevo subir una larga escalera? Esperaba que no fuese así, pues ya había tenido bastante con la escalera anterior.

Atravesé aquella puerta y pude ver como el sitio en el que me encontraba era bastante inusual. Era una salada bastante oscura donde las paredes de la izquierda y de la derecha estaban rodeadas por espejos; estos eran altos, grandes, pequeños, anchos, ovalados… de todo tipo. Y en el centro de la sala había una lámpara de araña que lanzaba una tenue luz azulada sobre el lugar

¿Hay alguien ahí?...

No obtuve respuesta, aquella otra voz no acudió a mí esta vez. Por primera vez en todo el rato que llevaba en aquel lugar, me empecé a replantear donde me encontraba. No era capaz de recordar haber estado en aquel lugar… ¿Sería todo una trampa de aquella voz oscura y odiosa? Dudaba que fuese así, pero aún tenía mis dudas.

Ring...

Empecé a andar hacia el centro de la sala, esperando encontrar una puerta más allá que me condujese al lugar de donde provenía el sonido… Pues era capaz de presentir que se encontraba muy cerca, ¿sería capaz de hallar lo que fuese que se encontrase perdido o fuera de lugar si encontraba aquel objeto o al poseedor de este?

Al poco tiempo de echar a andar, reconocí a una figura que se encontraba parado allí en medio.

¡Eh tu! ¿Se puede saber por qué no me has respondido?...

Avancé rápidamente, y me acerqué a la figura la cual seguía allí parada, sin pronunciar palabra.

¿Se puede saber qué te pasa?—toqué ligeramente su hombro para avisarle, pero entonces algo me manchó la mano.

Sangre.

***
Nada más golpear a Saeko en el estómago pude ver como esta se precipitó algunos metros hacia atrás, adolorida por el golpe. Quizá me hubiese pasado con la fuerza que había utilizado.

Me dispuse a acercarme a ella, sin ninguna idea clara en la mente cuando algo me lo impidió.

¡C-cuidado! ¡S-saeko! N-no te dejaré acercarte a ella…

Yukiko, la tan interesante chica helada se acercó a mí para encararme. Había que reconocer que la chica tenía lo que había que tener para atreverse a encararse a mí sin ningún arma en sus manos.

A-aseguraos de atacar al monstruo… sino Saito podría resultar herido… c-creo. —Y uso sus manos para lanzarme un… ¿hechizo?

Fuese lo que fuese aquello dado mi estado y la rapidez de esta no fui capaz de esquivarlo a tiempo y noté como una especie de carámbano de hielo impactaba contra mí cuerpo. Solo sufrí un daño ligero, pero si le dejaba seguir repitiendo aquello podría causarme algunos problemas.

¿De verdad quieres jugar a eso?... Tu misma, jugaremos pues.

Propiné un fuerte golpe al suelo con ambas manos, esperando una reacción más eficiente esta vez por parte de mi nueva rival, y así fue, esquivó mi ataque con una agilidad sorprendente. Me disponía a atacar con un poco más de seriedad cuando pude ver como Saeko se colocaba al lado de ella, sin pensármelo retrocedí algunos pasos ya que no sabía que clase de estrategia podían tener pensada esas dos.

Entonces no pude evitar sonreír. Parecían estar discutiendo sobre algo, y la mirada de Saeko reflejó un terror que hizo aumentar aquella sonrisa monstruosa de mi cara.

¿Vienes a por más golpes Saeko? Te los daré encantado…

Y al abalanzarme hacia delante me encontré con la sorpresa de que Saeko también lo hacía, empuñando su katana simplemente. Al no contar con la agilidad de sus movimientos no pude evitar que me hiciese algunos cortes poco importantes en los brazos ya que me había cuidado de protegerme la cara, y por su parte ella esquivo con elegancia algunos torpes golpes que le propiné

Y retrocedió instintivamente. Parecía que aquellas dos no tenían un plan y aquello me alegraba bastante ya que sería una batalla realmente improvisada.

Miré a ambas contrincantes y lo pensé bien… ¿Realmente suponía Yukiko más amenaza que Saeko?

Dada su falta de armas, aquello me daba una ventaja cuerpo a cuerpo que podía aprovechar sin problema alguno. Ahora bien, si tenía más hechizos o magias como aquella, me las vería en problemas si simplemente me concentraba en atacar a Saeko…

Bien, decidido —dije sonriendo y precipitándome hacía ambas. Tenía un hechizo preparado para otra ocasión, pero me sentía con fuerzas de intentarlo ahora, aunque seguramente perdería fuerza dado mi estado de poder actual— ¿Quién quiere ser la primera en perecer aquí?

Alcé mi puño en dirección a Saeko, y aprovechando que seguramente Yukiko intervendría cambié la trayectoria en el último momento para intentar golpearla a ella mientras que en mi otra mano clavaba mis uñas parecidas a zarpas en el hombro hasta notar que tenía sangre en ellas y cuando me las hubiese hundido suficiente tiraría la sangre en dirección de las probablemente aturdidas Yukiko y Saeko.

Agujas Negras.

Aquellas gotas de sangre, se convirtieron en algunas agujas más pequeñas de lo que había pensado, pero que se dirigieron a ambas, Saeko y Yukiko, esperando atravesar sus cuerpos o impactar y atravesar un poco de ellos. No tenía muy claro la fuerza que tendría aquel hechizo en aquel instante.

Pero me quedé allí sin defenderme mientras esperaba ver la forma en la que recibían el ataque con una extraña sensación de diversión.


***

La cabeza me estallaba… ¿Qué había pasado? Todo había ido tan rápido... Aquel suelo se encontraba manchado de sangre y alguien exactamente igual a mí se encontraba tendido en él.

Sigues insistiendo en recordar… Cuando solo debes olvidar…

Muéstrate y deja de decir gilipolleces… ¿Quién eres?

Soy tú y a la par soy yo… ¿Quién soy?

¿Qué?—Aquello me había dejado algo estupefacto. ¿A qué diablos estaba jugando aquello?

Simplemente no deberías haber venido… Ya no hay marcha atrás. Desaparecerás con este lugar.

Me disponía a replicarle, pero el estrépito de todos los cristales de la sala me sobresaltó. ¿Qué estaba pasando? Intenté levantarme en cuanto me di cuenta de que toda la habitación había empezado a temblar. Y para colmo yo me había arrodillado enfrente del cadáver de aquel yo tan estrafalario.

Tengo que cruzar la puerta de enfrente y avanzar… debo encontrar la salida.

Nada más dar un paso pude ver como el suelo empezaba a romperse y como un retazo de este caía en una oscuridad en la que no sabía que encontraría, ni si podría salir de ella.

Decidí apresurarme, pero mi esfuerzo no fue el suficiente. El suelo empezó a quebrarse a medida que avanzaba y cada vez veía más difícil llegar a la salida de donde fuese que estuviese. ¿Hasta ahí llegaba todo mi esfuerzo?...

¡¡Pienso recordar!!—Dije gritándole a la nada sin motivo aparente— ¡¡Si os gusta bien, y sino también!!

Sin pensármelo dos veces salté al siguiente trozo de plataforma más o menos estable que tenía delante de mí. Nada más aterrizar aquello tambaleó, por lo que decidí saltar a la siguiente más cercana y así sucesivamente en un continuo derrumbe de trozos del suelo que se entremezclaban con la luz azulada de la lámpara que se balanceaba aún, colgada de aquel techo que no parecía inmutarse.

Con suerte, pude llegar hasta la última plataforma que era capaz de divisar sin demasiados problemas, quizá tuviese alguna herida o arañazo, pero nada grave. Al empezar a andar hacia la puerta que se encontraba al otro lado no me había dado cuenta, pero algo me esperaba allí, en medio de la plataforma.

¿Qué demonios?...

No pasarás. Para eso primero tendrías que pasar por encima de mí, y no podrás hacerlo.

Aquello se estaba convirtiendo en una mala costumbre… ¿Desde cuándo las voces podían acudir a mi cabeza de esa manera? Me acerqué más al individuo en cuestión, y pude ver cómo era una réplica exactamente igual a mí. Pero esta vez estaba viva, mirándome con ojos desafiantes.

¿Así que no vas a dejarme pasar por las buenas?...

Sabes la respuesta. ¿Qué vas a hacer al respecto?

Era una buena pregunta, ¿Qué se suponía que debía hacer? ¿Enfrentarme a aquella cosa en una batalla a contrarreloj?... Realmente no tenía tiempo que perder, pues quizá en cualquier momento el suelo caería y no podía arriesgarme a comprobar en cuánto tiempo pasaría eso, pero algo estaba claro. Aquella copia no tenía intención de moverse de mi camino…

¡Prepárate para perder!—dije mientras salía corriendo hacia él y estiraba mi brazo derecho a un lado.

Por lo que tendría que moverlo yo.

Spoiler: Mostrar
???
Nivel: ???
Vit: ???
PH: ???
Observaciones:
* Su sangre es de un color negro azabache, no se sabe si el color de esa sangre es debida al Monstruo o a otro factor
* Su cuerpo parece resistente, aunque algunos factores parecen demostrar que no ha alcanzado todo su potencial posible.
Habilidades:
* Regeneración: A medida que el combate avanza, el usuario con el que hace contacto el monstruo va regenerando las heridas graves que tenga, llegándolas a convertir en heridas superficiales.
* Agujas Negras: Utiliza la Sangre Negra para crear agujas afiladas, la cantidad de agujas depende de la cantidad de sangre que tire.
* ???
* ???
* ???
* ???
Imagen

Muchas grácias por el avatar Mepi ^^
H.S Sora
22. Espectro
22. Espectro
 
Mensajes: 655
Registrado: Mar Sep 25, 2012 7:43 pm
Dinero: 3,775.22
Banco: 213,774.43
Sexo: Masculino
Karma: 3

Re: [Bastión Hueco] Una noche de terror

Notapor Tsuna » Lun Ene 06, 2014 12:25 am

Ante mis exclamaciones la chica solo se encogió aun más, me miraba completamente aterrada, ¿acaso le daba más miedo mi actitud que el monstruo o perder la vida de Saito? Bajé la guardia por completo, observándola a los ojos, incrédula.

Y-y.. b-buen… e-e-es qu…

Oye, no es momento para esto. —Le diría con un ligero tono menos agresivo que el anterior, intentando tranquilizarla. A pesar de que me costase admitirlo, necesitaría de su ayuda, por muy poca que fuera.

Yukiko retrocedió un paso a la vez que intentaba vocalizar cosas, pero inmediatamente su mirada cambió, parecía haberse acordado de algo, algo desconocido para mí y que no podía importarme menos. La joven se enderezó, mostrando una mirada llena de valor y determinación, ¿a qué se creía que estaba jugando?

Yukiko, ¿cierto? Mira, no es momento para tonterías, la vida de Saito está en juego, ¿a qué te crees que estás jug-? —Fui interrumpida poco antes de que pudiese terminar de hablar, todo lo siguiente sucedió demasiado rápido para mí.

Agujas Negras.

Dolor. Sentí mucho dolor al notar cómo se me clavaban en el muslo derecho, en mi estómago y mi hombro izquierdo lo que parecían agujas de tamaño considerable. Caí al suelo irremediablemente, dolorida. La sangre brotó de nuevo, en esta ocasión a lo largo y ancho de mi cuerpo.

¡Aaah! —Exclamaba mientras me arrancaba de cuajo aquellos pinchos y los tiraba al suelo. Me comenzaría a desangrar pero prefería moverme con total libertad a tenerlos clavados en la carne— Esto está llegando demasiado lejos… —Y esta vez fui yo misma la que cambié mi expresión.

Había vuelto a bajar la guardia y a recibir otra herida. Tendría que acabar con el monstruo por mis propios medios, ¡lo destrozaría! ¡Sí!

Saeko atenta… Al parecer este monstruo no ha alcanzado todo su potencial, tampoco sabría decir qué o quién es pero… esa última habilidad que ha usado, esas agujas se forman a raíz de su sangre. Y mientras siga esta criatura aquí, Saito irá recuperando sus heridas. Es lo único que he podido sacar, ¿qué piensas?

Sonreí con malicia, satisfecha por la información que me había dado mi pequeña mascota, le dirigí la mirada y asintiendo con la cabeza para que comprendiese que le había escuchado. Elevé esta vez mi Llave Espada al aire lentamente, centrando mi mente en el dolor sufrido por las agujas y la frustrante sensación de haber bajado la guardia dos veces.

NigroCura. —Susurré, observando de manera sádica al monstruo.

Unos destellos oscuros recubrieron mi cuerpo, lo sentía, era el poder de la Oscuridad el que había aliviado mis heridas, pues ya no sangraban. Sentí además que aquel improvisado hechizo Cura, basado en el que Saito había empleado tiempo atrás, me recuperó un poco más que el propio hechizo empleado por Saito. En esa ocasión, la Oscuridad era mi mejor aliada.

Sonreí orgullosa y llena de satisfacción.

¡¿Conque agujas hechas por tu sangre, eh?! —Le gritaría al monstruo directamente. También extendería uno de mis brazos ante Gengar, dándole a entender que no se entrometiera en la batalla, en su estado lo mejor era que se mantuviera a salvo.

Si necesitaba de su sangre para atacar, significaba que tendría que herirse a sí mismo, y eso me daba una enorme ventaja.

Oh, ¿h-has usado el hechizo Libra? Yo también sé usarlo… —Yukiko juntó ambas manos y formando así un círculo, a través del cual observaba al enemigo con uno de sus ojos, analizando a la bestia.

¡Pues a ver si tienes tiempo de seguir hiriéndote a ti mismo mientras te ataco! Nos harías un favor. —Le expliqué a la criatura de oscuridad al mismo tiempo que me acercaba corriendo, esforzándome por no resbalarme a causa del suelo encharcado.

A continuación le propiné numerosos golpes con mi Llave Espada, sin descanso, aunque tenía que encontrar otra manera de atacar, imaginaba que no tardaría en lanzar un feroz contraataque.

¡Saeko, aparta!

Observé a Yukiko asombrada por su inesperada intervención, la joven giró ambos brazos mientras concentraba copos de nieve a su alrededor, al instante disparó un… ¡¿copo de nieve gigante?! Gigante era un decir, podría medir lo mismo que yo y flotaba en el aire, sin duda lo dirigía hacia el monstruo.

Parece que a fin de cuentas sabes hacer algo útil. —Y retrocedí en la dirección opuesta al copo de un salto.

Hagas lo que hagas… el copo de nieve te perseguirá hasta darte caza…

Miré asombrada la peculiar habilidad de la muchacha, un copo de nieve de tamaño considerable que flotaba en el aire y perseguía al enemigo… Una habilidad ciertamente temible.

Je, te tenemos.

Y sonreí, preparada por si el copo o el monstruo iban directos a por mí.

Spoiler: Mostrar
Saeko
Nivel: 6
Vit: 19
PH: 5/12

Gengar
Nivel: 5
Vit: 36
PH:3/10


Yukiko
Nivel: ???
Vit: ???
PH: ???
Observaciones:
* En ambientes fríos puede alcanzar su máximo potencial.
* ???
Habilidades:
* ???
Cuerpo hipotérmico (HM) [Habilidad pasiva; Requiere Magia Afín: Hielo]. El cuerpo del personaje se mantiene a una temperatura bajo cero por tiempo indefinido, recibiendo así +1 de Poder Mágico constante. En ambientes muy calurosos (Como un desierto) la habilidad perderá su efecto, mientras que en ambientes húmedos y de muy baja temperatura, el efecto de habilidad se multiplicará por dos, recibiendo hasta +2 de Poder Mágico extra constantemente.
Hielo (HM) [Nivel 2] [Requiere Poder Mágico: 3]. Proyectil de hielo lineal, con muy pocas posibilidades de congelar.
Libra (HM) [Nivel 7] [Requiere Poder Mágico: 9]. El usuario es capaz de conocer algunos datos de su enemigo, como su balance de poder, alguna habilidad propia, su magia afín, etcétera.
Copo criogénico (HM) [Nivel 8] [Requiere Poder Mágico: 12; Afinidad: Hielo]. El personaje genera un gran copo de nieve congelado en el aire, el cual perseguirá a un solo enemigo y provocando en éste Congelación durante una ronda, si transcurrido este tiempo el copo no ha impactado con nada, se evaporará.


Spoiler: Mostrar
Edit para modificar la expresión "con qué" por "conque", no había caído antes, mil perdones ewe
Última edición por Tsuna el Jue Ene 09, 2014 7:55 pm, editado 1 vez en total
Avatar de Usuario
Tsuna
57. Ferrocustodio I
57. Ferrocustodio I
The Unknowns
 
Mensajes: 1680
Registrado: Mar Ene 03, 2012 5:12 am
Dinero: 691,216.48
Banco: 0.00
Ubicación: Perdida en el océano.
Sexo: Femenino
Clan: The Unknowns
Estantería de objetos
Karma: 17

Re: [Bastión Hueco] Una noche de terror

Notapor H.S Sora » Jue Ene 09, 2014 7:35 pm

¡Aaah! —Aquel sonido maravilloso fue un grito de Saeko al extraerse las agujas por su cuenta— Esto está llegando demasiado lejos… —Su expresión cambió. Y aquello me puso en guardia, no era una expresión de miedo ni de terror, era una expresión de dureza.

Una especie de “fantasma” al que atribuí que sería el famoso Gengar se acerco a Saeko y le dijo algo que la hizo sonreír de manera algo extraña. Entonces Saeko elevó su Llave Espada y susurró algo que no pude comprender mientras me miraba sádicamente. Esperaba recibir cualquier ataque, pero solo vi como unos destellos oscuros cubrían el cuerpo de Saeko.

Entonces lo comprendí, al ver que las heridas causadas por mí dejaban de sangrar. Seguramente sería una variación del hechizo que Saito había usado en Saeko nada más llegar.

¡¿Con qué agujas hechas por tu sangre, eh?! —Me gritó, y aquello me desconcertó. ¿Cómo sabía ella que las agujas estaban hecha con mi sangre?... Miré al que debía ser Gengar y comprendí. Me habían analizado con alguna extraña magia.

Oh, ¿h-has usado el hechizo Libra? Yo también sé usarlo… —Así que aquel era el extraño hechizo que había usado… pero dudaba que hubiesen sido capaces de analizarme por completo, de lo contrario hubiesen huido.

Yukiko se colocó en una extraña posición, aquello si que realmente parecía un verdadero análisis…

¡No te voy a dejar analizarme por las buenas!

Me lancé a por ella pero algo se interpuso en mi camino

¡Pues a ver si tienes tiempo de seguir hiriéndote a ti mismo mientras te ataco! Nos harías un favor.

***

¿P-Por qué no acudes a mí llamada?

Me encontraba en el suelo de aquel sitio aún. Mientras este se seguía hundiendo.

Aquella copia barata me había vencido usando una Llave Espada mientras que yo no era capaz de invocar la mía siquiera… ¿Aquello era el verdadero final? Si no podía usar mi Llave Espada solo podía huir… pero tampoco podía, ya lo había intentado pero lograba hacerme retroceder de una manera u otra

¿Te rindes ya? Entonces desaparece junto este lugar…

No pienso ponértelo tan fácil… ¡Pelearé hasta mi último aliento! —Hice ademán de ir a golpearlo con algún hechizo y al hacer que intentase bloquearlo salí corriendo hacia la puerta.

Patético… Veo que te has quedado sin estrategias. Simplemente patético.

Apareció delante de la puerta y me golpeó con la Llave Espada en el estómago haciendo que cayese de rodillas en aquel suelo que dentro de poco caería.

Maldita sea… ¡Aún puedo luchar!

No. No puedes.

Volvió a golpearme en el estómago, esta vez más fuerte, haciendo que tuviese que apoyar mis dos manos en el suelo para sostenerme.

Esto se ha acabado. Tu fin, el mío. El fin de todo y el comienzo de nada. Adiós.

Mi yo, alzó su Llave Espada y se dispuso a terminar con mi vida. Pero todo el lugar retumbó, en un impresionante estrépito. Como si unas cadenas se hubiesen roto.

Ring….Ring…

¡No te des por vencido! ¡Lucha por vivir!

Aquella voz era diferente. Era una voz angelical… no podía ver a quien pertenecía, pero sabía que pertenecía a una mujer… ¿Era Louise? ¿Dónde estaba?

Sin saber como me tiré hacia atrás instintivamente, esquivando aquel ataque.

C-Como?...

¿De donde había sacado fuerzas?, no lo sabía pero noté romperse algo dentro de mí.

Sentí frío. No me inmuté ante él. Levanté mi vista y miré a aquella copia barata.

Tú no eres yo. Ni yo soy tú.

¿Qué estás diciendo? ¡Claro que lo soy! ¡Y claro que lo eres!

Cerré los ojos y recogí los trozos de mi mente juntándolos.

Era Saito el Portador de una Llave Espada, nacido en otro mundo que no recordaba pero que no era Ciudad de Halloween. Era Saito el aprendiz de Bastión Hueco, a cargo del Maestro Ryota. Era Saito, quien buscaba a Louise desesperadamente. Era Saito.
Noté como era yo. Como me sentía más vivo que nunca, notaba la oscuridad brotar de mí, pero esta vez siendo mi aliada. Estiré mi brazo derecho e invoqué a mi Llave Espada, con la cual señalé a mí rival.

Desaparece.

Algo extraño sucedió, y antes de que mi rival fuese capaz de reaccionar noté como una oscuridad que desconocía lo atravesaba y lo hacía desaparecer por completo.

Di un par de pasos hacia la puerta mientras aquella última plataforma se preparaba para desaparecer. La plataforma no era lo único que desparecía, aquella extraña sensación de poder se empezaba a disipar. Empujé con todas mis fuerzas la puerta, mi cuerpo volvía a doler y aquella sensación se estaba yendo por completo… Pero la sensación de ser yo y de todo lo que yo era se quedó como si estuviese atada a mí.

No puedo quedarme aquí…

Apreté los dientes y empujé la puerta hasta que se abrió, entré en el justo momento en que la plataforma se rompió por completo.

No me fijé en la habitación poco iluminada en un primer momento, pues estaba buscando ver a la persona que había hablado en aquel momento. Estaba seguro de que era Louise, tenía que ser ella a toda costa…

Saito…—una fina y delicada mano trazó una caricia en mi cara

Louise yo…—me detuve al ver que la chica no era Louise. Mi cabeza ardía y mi pecho dolía.

Me fijé en que aquella chica se acercó más a mí y rozó sus finos labios con los míos, sin darme tiempo a detenerla. Al besarme noté que el dolor de mi pecho disminuía.

No sabía nada de ella, ni de que la conocía, pero mi corazón dijo un nombre cuando separó sus labios de los míos.

A-Alice…

Spoiler: Mostrar
Imagen


***

Saeko apareció de la nada, blandiendo su Llave Espada, y sin detenerse un segundo empezó a relizar golpes con su Llave Espada, provocándome algunos cortes superficiales y otros algo más dolorosos… Por suerte pude esquivar algunos de ellos que me habrían puesto en apuros.

¿Eso es todo lo que tienes? ¡Prepárate!

Golpeé en el estómago a Saeko y evité que fuese despedida varios metros cogiéndola con mi otro brazo.

Es hora de que te unas a mí y aumentes mi oscuridad. Devorar.

Abrí mis fauces de una manera extraordinaria, en ellas era evidente que cabía una persona humana. Me disponía a hacerlo cuando alguien me interrumpió

¡Saeko, aparta!

Antes de continuar con aquello, decidí que podía esperar y solté a Saeko retirándome hacia atrás. Yukiko giró sus brazos y concentró copos de nieve a su alrededor, conocía aquella técnica… Al instante disparó un copo de nieve de tamaño considerable contra mí

Parece que a fin de cuentas sabes hacer algo útil. —Saeko retrocedió hacía el lado opuesto

Hagas lo que hagas… el copo de nieve te perseguirá hasta darte caza…

Je, te tenemos.

¿¡Crees que puedes vencerme con esto!?

Avancé en dirección al copo de nieve mientras notaba oscuridad concentrándose en mi boca. Me disponía a dispararla contra el copo cuando algo me paralizó.

No había sido el copo, ni Yukiko, ni Saeko… era diferente, algo había le había sucedido a Saito, algo lo suficientemente poderoso como para interferir en el control del monstruo durante unos instantes.

Cuando recuperé el control era tarde, el copo impactó contra mí y noté como empezaba a congelarme…

Spoiler: Mostrar
???
Nivel: ???
Vit: ???
PH: ???
Observaciones:
* Su sangre es de un color negro azabache, no se sabe si el color de esa sangre es debida al Monstruo o a otro factor
* Su cuerpo parece resistente, aunque algunos factores parecen demostrar que no ha alcanzado todo su potencial posible.
*Parece que el monstruo en sí es inestable, por lo que algo/alguien lo debe de estar controlando
*No parece ser un Sincorazón
*Su magia o habilidades suelen estar relacionadas con la oscuridad, por lo que podría decirse que el monstruo es afín a esta.
Habilidades:
* Regeneración: A medida que el combate avanza, el usuario con el que hace contacto el monstruo va regenerando las heridas graves que tenga, llegándolas a convertir en heridas superficiales.
* Agujas Negras: Utiliza la Sangre Negra para crear agujas afiladas, la cantidad de agujas depende de la cantidad de sangre que tire.
* Devorar: Abre sus fauces y devora al objetivo, no se conoce demasiado sobre que sucede al devorarlo, probablemente coja todo el poder del usuario devorado y lo combine con el suyo.
* ???
* ???
* ???
Imagen

Muchas grácias por el avatar Mepi ^^
H.S Sora
22. Espectro
22. Espectro
 
Mensajes: 655
Registrado: Mar Sep 25, 2012 7:43 pm
Dinero: 3,775.22
Banco: 213,774.43
Sexo: Masculino
Karma: 3

Re: [Bastión Hueco] Una noche de terror

Notapor Tsuna » Vie Ene 10, 2014 11:19 pm

Spoiler: Mostrar


La criatura finalmente fue golpeada por el hechizo helado de Yukiko, sonreí, satisfecha con el resultado. Envainé mi arma blanca para empuñar únicamente la Llave Espada y me aproximé lentamente hacia el enemigo.

Vaya, vaya, al final no eras gran cosa. Qué lamentable… —Y le apunté con mi Llave desde pocos metros, riendo de manera prepotente y observándolo con arrogancia.— No evadir un hechizo tan lento… Ridículo. —Y alcé mi brazo en el aire, dispuesta a cortar por la mitad a la criatura, sin embargo…

¿D-de veras… es lento? Vaya… s-supongo que… he de mejorar eso… —Y la chica se volvió a cubrir con sus brazos, cabizbaja.

Yo detuve mi ataque, molesta por su interrupción, de todos modos parecía que al monstruo le costaría esfuerzo salir de esa situación, pues parte de su cuerpo estaba congelado… y el de Saito también. Saito, debía salvar a ese tonto, el Maestro Ryota no podía permitirse perder a un aprendiz como él.

¿Has terminado? —Le pregunté a Yukiko directamente, algo agresiva.

Mmm… T-tengo información de esta cosa… P-parece que… alguien lo está c-controlando… Y esa h-habilidad de Devorar…

Si esa cosa te come, tu energía pasará a ser parte de ella. ¡Qué terrorífico! —Exclamó Gengar, excitado por tal habilidad y con esa sonrisa rebelde suya.

Observé a Gengar, incrédula y asustada todavía por aquello…

***


Es hora de que te unas a mí y aumentes mi oscuridad. Devorar.

***


Cierto era que estuvo a muy poco de engullirme con aquellas fauces, y tenía miedo de que volviese a utilizar una habilidad así, tampoco permitiría que Gengar fuese devorado por nada en el mundo, respecto a Yukiko… Quizás pudiese usarla de señuelo. Sonreí con malicia ante la idea.

Je, bueno, ¿y por dónde iba? —Sin perder un segundo más, le propiné desde atrás fuertes y violentas estocadas a la criatura, golpearla con todas mis fuerzas me aliviaba por dentro.— Con que alguien te controla, ¿eh? ¡Pues te obligaré a que lloriquees para que salga! ¡Si su juguete favorito se rompe, no se podrá negar! ¡Jajajaja! —Y le golpeé una última vez más con fuerza, asegurándome de que le doliera.

Gengar permaneció quieto desde la distancia, aterrorizado por mi actitud, prefería no meterse en medio del combate ni decir nada al respecto, Yukiko también estaba más pálida que de costumbre, con los ojos en blanco, me observaba incrédula. Debido a mi último golpe el hielo terminó por resquebrajarse, liberando así al monstruo. Yo retrocedí, en guardia, sabía perfectamente que iría a por mí, y en cuanto se giró para observarme…

¡H-hielo! —Yukiko empleó un nuevo hechizo básico elemental contra el monstruo. La chica cayó de rodillas al suelo, agotada.

Yo no perdí mi tiempo y empleé rápidamente una nueva Flama Tenebrosa. Jadeé lentamente, cansada y algo exhausta, lo sentía, apenas me quedaban fuerzas ya.

Maldita sea… Mira que es resistente. —Retrocedí lentamente y Gengar se aproximó a través del aire hasta mi lado, protegiéndome.

Comenzaba a pensar que nuestras posibilidades de victoria eran escasas, pero tenía que ayudar a Saito como fuese, no iba a permitir que un monstruo semejante acabara con él, pues suponía que la peor parte se la estaba llevando el pobre chico.

Gengar, en guardia…

Spoiler: Mostrar
Saeko
Nivel: 06
Vit: 19/22
PH: 02/12

Gengar
Nivel:05
Vit: 36/36
PH:03/10


Yukiko
Nivel: 11
Vit: 15/22
PH: 03/22
Observaciones:
* En ambientes fríos puede alcanzar su máximo potencial.
* ???
Habilidades:
* ???
Cuerpo hipotérmico (HM) [Habilidad pasiva; Requiere Magia Afín: Hielo]. El cuerpo del personaje se mantiene a una temperatura bajo cero por tiempo indefinido, recibiendo así +1 de Poder Mágico constante. En ambientes muy calurosos (Como un desierto) la habilidad perderá su efecto, mientras que en ambientes húmedos y de muy baja temperatura, el efecto de habilidad se multiplicará por dos, recibiendo hasta +2 de Poder Mágico extra constantemente.
Hielo (HM) [Nivel 2] [Requiere Poder Mágico: 3]. Proyectil de hielo lineal, con muy pocas posibilidades de congelar.
Libra (HM) [Nivel 7] [Requiere Poder Mágico: 9]. El usuario es capaz de conocer algunos datos de su enemigo, como su balance de poder, alguna habilidad propia, su magia afín, etcétera.
Copo criogénico (HM) [Nivel 8] [Requiere Poder Mágico: 12; Afinidad: Hielo]. El personaje genera un gran copo de nieve congelado en el aire, el cual perseguirá a un solo enemigo y provocando en éste Congelación durante una ronda, si transcurrido este tiempo el copo no ha impactado con nada, se evaporará.
Avatar de Usuario
Tsuna
57. Ferrocustodio I
57. Ferrocustodio I
The Unknowns
 
Mensajes: 1680
Registrado: Mar Ene 03, 2012 5:12 am
Dinero: 691,216.48
Banco: 0.00
Ubicación: Perdida en el océano.
Sexo: Femenino
Clan: The Unknowns
Estantería de objetos
Karma: 17

Re: [Bastión Hueco] Una noche de terror

Notapor H.S Sora » Mar Ene 21, 2014 7:53 pm

No retrocedí, era una sensación algo extraña que sentía en aquellos instantes… ¿De que conocía yo a aquella chica? ¿Cómo sabía su nombre?... Mi pecho había dejado de doler, pero mi cabeza estaba confusa, era un hervidero de pensamientos contradictorios unos con otros.

Me dispuse a decir algo, cualquier cosa para romper aquel silencio u obtener alguna respuesta que pudiese ayudarme pero ella me puso delicadamente un dedo en la comisura de la boca, haciéndome entender que quería que callase.

En aquella ocasión la miré mejor. Tenía el pelo negro y largo y un vestido a juego con él, aquel vestido tenía mangas a juego, aunque se había quitado parte de la manga de su mano derecha cuando me había acariciado. Sus ojos tenían un tono de violeta algo oscuro y claro, era ambas cosas la vez. No era extremadamente alta, aunque me llegaba casi por los hombros yendo descalza. Era una chica hermosa, pude notar como mi pecho empezaba a latir con más fuerza casi sin control, como si aquella chica fuese algo más aún.

Entiendo que estés confuso, todo esto lo es…—hasta aquel momento no me había fijado en que tenía la voz más dulce que había oído nunca— Pero lo importante es que has venido a buscarme al fin, mi caballero —sonrió angelicalmente, como una princesa a la que habían venido a buscar.

Me llevé una mano a la cabeza y me tambaleé la cabeza me ardía y antes de que me diese cuenta estaba a punto de desmayarme, pero Alice me lo impidió tirando suavemente hacía mí y rodeándome con los brazos como si yo fuese una frágil figura de porcelana.

Gracias… —dije una vez que mi cabeza hubo recuperado un poco el rumbo—C-Creo que tienes muchas cosas que contarme que no sé Alice… Ni si quiera sé como sé tu nombre…

Alice asintió con la cabeza y nos sentamos en una especie de cama los dos.

¿De qué nos conocemos?—pregunté al sentarnos

¿N-No recuerdas nada en absoluto de mí?

L-Lo siento Alice…Solo recuerdo tú nombre y no sé ni como…

Alice pareció afectada ante eso y tuvo una reacción que no me esperaba. Me rodeó con sus brazos y me susurró al oído.

N-No quiero estar sola de nuevo…

Alice empezó a sollozar antes de que pudiese abrir la boca. Una sensación en mi pecho me inundó… ¿Era preocupación? ¿Dolor? No, quería que dejase de llorar, una parte de mí, desconocida hasta el momento quería que Alice dejase de llorar ya que también le dolía cuando ella lloraba.

No te dejaré sola, te lo prometo –aquellas palabras sorprendentes salieron de mi ser antes de que pudiese siquiera pensarlas.

Alice pareció sorprendida, dejó de sollozar y se apartó para mirarme

¿De verdad?

Sí, pero antes necesito saber cosas que desconozco…

Alice asintió y me dio un ligero empujón haciendo que quedase tumbado encima de la cama.

Se colocó a horcajadas encima de mí y agarró el colgante con la mano que no tenía la manga puesta. Pronunció una palabra que no pude entender y noté como todo se iba oscureciendo.


***

Mierda.

Aquel hechizo de categoría media había impactado contra mí por pura suerte, pero aquella suerte había logrado congelarme. Estaba empezando a hartarme de la situación de combatir sin restricciones, al descongelarme se enterarían de lo que era un buen golpe.

Sakeo empezó a aproximarse a mí con la Llave Espada en mano, ahora tendría que soportar a aquella cría.

Vaya, vaya, al final no eras gran cosa. Qué lamentable… —Me apuntó entonces con la Llave mientras reía de una forma arrogante, cargada de prepotencia y arrogancia..— No evadir un hechizo tan lento… Ridículo. —Alzó su brazo en el aire, parecía querer cortar aquella marioneta que utilizaba, realmente era un esfuerzo patético ya que invocaría otra criatura algo más débil y tendría el combate ganado...

¿D-de veras… es lento? Vaya… s-supongo que… he de mejorar eso… —Yukiko intervino en aquel momento justamente, cosa que medio agradecí ya que hizo que Saeko detuviese su ataque en seco

¿Has terminado? —Preguntó algo malhumorada.

Mmm… T-tengo información de esta cosa… P-parece que… alguien lo está c-controlando… Y esa h-habilidad de Devorar…

Si esa cosa te come, tu energía pasará a ser parte de ella. ¡Qué terrorífico! —Exclamó Gengar, quien había terminado de realizar el análisis que dictaba Yukiko en un principio. Aquello me molestó, ahora quedaría como que alguien concretamente había hecho aquello, tendría que encargarme de que aquella información no saliese de allí.

Saeko parecía metida en sus pensamientos, pero de pronto me miró de nuevo.

Je, bueno, ¿y por dónde iba? —Sin perder un segundo, Saeko empezó a realizar estocadas muy fuertes a la cintura de aquel monstruo que controlaba aún, la cara de felicidad que expresaba Saeko me hizo infundir una sonrisa macabra, si lograba engullirla sería un espécimen más que interesante.— Con que alguien te controla, ¿eh? ¡Pues te obligaré a que lloriquees para que salga! ¡Si su juguete favorito se rompe, no se podrá negar! ¡Jajajaja! —Y me golpeó una última vez, aquella dolió más que las otras y acabó de enfurecerme. Me encargaría de que aquella de dejar a aquella niñata tan malherida que me pediría a gritos que la devorase.

Debido aquel último golpe el hielo terminó por romperse, liberándome. Estiré un poco mis brazos entumecidos y miré con odio a Saeko. Ella retrocedió un poco y se puso en guardia. Me dirigí a por ella velozmente cuando pude escuchar a tiempo a Yukiko.

¡H-hielo! —Yukiko empleó un nuevo hechizo y entonces cayó de rodillas al suelo, agotada. Vi la oportunidad de oro para terminar el combate y Devorar a aquellas dos.

Sin perder tiempo giré bruscamente sorprendiendo seguramente a Saeko, dejé qie aquel conjuro Hielo impactase contra mí ya que habría sido demasiado difícil controlar el recorrido intentando esquivarlo. Noté como me daba una especie de hormigueo en el brazo, ya que lo había puesto para que encajase el golpe y me planté precipitadamente enfrente de Yukiko, la cual estaba agotada.

Has estado bien, pero no lo suficiente.

Con una mano agarré la cabeza de la joven y la hice impactar varias veces contra el suelo, después de unas 3 veces retrocedí al sentir como otro hechizo, algo más poderoso impactaba contra mí. No pude evitar jadear un poco, estaban debilitando mucho al monstruo. Me giré para ver a Saeko, la cual jadeó también, el combate estaba a punto de terminar ¿Quién saldría victorioso de él? Aquella era la pregunta clave…

Empecé a acercarme a ella al mismo tiempo que Gengar lo hacía me acerqué lo suficiente hasta poder oir a Saeko decirle.

Gengar, en guardia…

Todos seréis devorados, no cuentes con que te salvarás otra vez.

Y antes de llegar a ellos con el puño hacia delante, me mordí parte del hombro hasta hacerme sangre, y sin que pudiesen preverlo con demasiada claridad, volví a lanzar mi ataque de Agujas Negras esperando diezmar las fuerzas restantes de Saeko

***

Imágenes vagas acudieron a mi cabeza, aquel paisaje que había recordando en Bastión Hueco en el que había luz y color, parecía estar en guerra… Los dos bandos enemigos parecían estar a punto de enfrentarse entre sí… Alguien gritaba mi nombre… Y… Y…

Abrí los ojos, notaba como si me hubiesen golpeado muy fuerte la cabeza con algún objeto varias veces. Alice seguía sentada encima de mí y me miraba algo preocupada.

S-Siento si te ha hecho daño, imagino que el proceso para que recuerdes todo nos llevaría demasiado tiempo… Tiempo que sé que no posees ahora. Ya he tenido que intervenir antes para ayudar a tus amigos…

Recordé a aquella voz, ¿Estaría poniendo en apuros a Yukiko y Saeko?... Tenía que volver aquello estaba claro, pero por otra parte quería saber más acerca de todos los misterios que me rodeaban y que Alice al estar involucrada en la mayoría podría desvelarme.

Alice me miró con mayor curiosidad.

Parece que recuerdas más ahora, veo en tus ojos una mirada distinta a la de antes. —esbozó una sonrisa triste—Sé también que te tienes que ir pero aún no, aún hay cosas que debes ver…

Volvió a rozar mis labios con los suyos, esta vez juntándolos aún más, como si de un sello se tratase. Noté aquella cálida sensación en mi pecho, y el colgante que llevaba encima empezó a emanar luz. Y entonces separó sus labios de los mios con una sonrisa algo picarona y alzó el colgante y lo abrió para que pudiese verlo con mayor claridad.

Ya no me encontraba besando a Louise en él, sino a Alice.

Abrí los ojos como platos, mientras Alice volvió a sonreír. Movió ligeramente el colgante y la imagen cambió a la original. Abrí aún más los ojos, incrédulo por lo que acababa de ver.

¿Qué como he hecho eso? —dijo sonriendo anticipándose a mi pregunta.

Solo fui capaz de asentir con la cabeza.

Solo he ayudado a recuperar partes de tus recuerdos…—movió ligeramente el colgante y la imagen se quedó con la mía y la suya— Ambos sucesos han pasado, solo que no recordabas el nuestro.

>>Y hay muchas más cosas que no recuerdas, por desgracia… aunque te ayudaré a hacerlo, aunque no tengamos mucho tiempo, la hora de que te vayas se acerca, aunque te haré un último regalo antes de tu partida mi caballero para asegurarme de que me buscarás de la misma forma que la buscas a ella —sonrió y me besó de nuevo.


Spoiler: Mostrar
???
Nivel: ???
Vit: ???
PH: ???
Observaciones:
* Su sangre es de un color negro azabache, no se sabe si el color de esa sangre es debida al Monstruo o a otro factor
* Su cuerpo parece resistente, aunque algunos factores parecen demostrar que no ha alcanzado todo su potencial posible.
*Parece que el monstruo en sí es inestable, por lo que algo/alguien lo debe de estar controlando
*No parece ser un Sincorazón
*Su magia o habilidades suelen estar relacionadas con la oscuridad, por lo que podría decirse que el monstruo es afín a esta.
Habilidades:
* Regeneración: A medida que el combate avanza, el usuario con el que hace contacto el monstruo va regenerando las heridas graves que tenga, llegándolas a convertir en heridas superficiales.
* Agujas Negras: Utiliza la Sangre Negra para crear agujas afiladas, la cantidad de agujas depende de la cantidad de sangre que tire.
* Devorar: Abre sus fauces y devora al objetivo, no se conoce demasiado sobre que sucede al devorarlo, probablemente coja todo el poder del usuario devorado y lo combine con el suyo.
* ???
* ???
* ???
Imagen

Muchas grácias por el avatar Mepi ^^
H.S Sora
22. Espectro
22. Espectro
 
Mensajes: 655
Registrado: Mar Sep 25, 2012 7:43 pm
Dinero: 3,775.22
Banco: 213,774.43
Sexo: Masculino
Karma: 3

Re: [Bastión Hueco] Una noche de terror

Notapor Tsuna » Mié Ene 22, 2014 7:37 pm

¡Arg! ¡D-detente..! —Exclamaba Yukiko mientras era apaleada por la criatura de oscuridad.

Muy en el fondo temí porque ese monstruo la devorase… nadie merecía aquel trágico destino, y el culpable era, o provenía de, Saito. ¿Qué le habría pasado a mi compañero para terminar de semejante forma? ¿Habría tenido problemas con algún Sincorazón en una misión? Me preocupaba bastante, demasiado.

Y entonces lo recordé:

***


¡Fiuu, fiuuu!

Vaya, parece que ha sido provocado.

¿¡Quién es el imbécil que está atrayendo a los Sincorazón!?

Ryota, me parece que vamos a tener que hacer algo. Como siga así, tendremos que eliminarlo, ¿no crees?

No te precipites, Ariasu. Saito, escúchame. Sé que aún puedes.

¡Así que ya sabes, Saeko!¡ Si la cosa se pone fea, tendrás que actuar!

Maestra, no le quepa duda de ello, cuente conmigo.

***


Aquella vez ya mostraba síntomas de que algo no iba bien, en la Prueba de Afinidad que tuvimos que superar, tanto Saito como yo, él liberó una gigantesca cantidad de oscuridad, todavía recordaba claramente aquellos tentáculos oscuros que lentamente lo engullían y el piso encharcado de un líquido color negro. Cómo olvidarlo. ¿Tendría ya Saito esa clase de problemas desde aquel entonces? ¡Si ese era el caso…

Todos seréis devorados, no cuentes con que te salvarás otra vez.

Y empleó de nuevo sus agujas oscuras, penetrándome la piel e hiriéndome de gravedad esta vez. Hice lo posible por evadir el ataque en el último instante, pero en vano, mis reflejos no fueron capaces de contraatacar aquel inesperado movimiento. Solamente gruñí, herida, cansada y frustrada mientras intensas punzadas de dolor me recorrían el cuerpo.

… no puedo permitirme perder este combate! —Le grité al monstruo desde el suelo, completamente empapada y helada por el agua. No me resultaría extraño estar las siguientes semanas en cama, enferma, incapaz de entrenar o acudir a clases, pero ya mi salud daba igual.

Tenía que salvar a Saito.

Por una vez agradezco el haber tomado una decisión estúpida… —Comenté, con una voz que denotaba mi extremo cansancio, haciendo ademán por levantarme y colocarme en posición de combate, sin embargo mis fuerzas me abandonaban—. Solamente a mí se me hubiese ocurrido salir en plena madrugada a la ciudad, ¿pero sabes…? —Y me esforcé como nunca antes había hecho para poder levantarme del suelo con mi Llave en mano, observando al único enemigo con una mirada asesina, sedienta de sangre y ansias de venganza— ¡No voy a permitir que Saito muera por tu culpa! —Exclamé, encogida en mí misma, conteniendo las pocas fuerzas que me quedaban para mantenerme en pie.

Y de inmediato me lancé a por el monstruo, corriendo a la máxima velocidad que mis fuerzas me permitiesen, empapándome todavía más al pisar los charcos del suelo, sintiendo auténticos horrores con cada movimiento por las agujas clavadas en mi cuerpo y articulaciones. Agarré con fuerza mi Llave Espada y la sujeté con ambas manos, a la par que me preparaba para el inminente golpe. Mi último golpe. Un golpe cargado de ira y voluntad.

¡Yiaah! —Exclamé, golpeando con todas mis fuerzas a mi enemigo, el cual fue incapaz de defenderse pues Gengar le había inmovilizado las manos por sorpresa— Confío en Saito, sé que él también está luchando en su interior. ¡No te atrevas a subestimar su corazón, bestia inmunda!

Y caí de rodillas al suelo, a espaldas de la criatura. Mi Llave Espada desapareció junto con un destello blanco al entrar en contacto con el suelo, y yo caí detrás sin remedio, bajo la lluvia. No me quedaban fuerzas, había propinado mi último golpe y confiaba en que aquello fuese suficiente, por el contrario, estaba segura de que me devoraría sin dudar y pasaría a formar parte de él. No tenía excusa, lo había dado todo y estaba orgullosa de mí misma, a pesar de perder.

¡Saeko!

Las voces de todos quedaban lejanas, notaba cómo iba perdiendo el conocimiento, todo se volvía oscuro como la misma noche que nos abrazaba. Me dejé llevar…

***


Spoiler: Mostrar
Off-rol: Cambio de narrativa para narrar las escenas de Gengar y Yukiko, pues Saeko ya no puede con su alma, la pobre =(


¡No… ella lo ha d-dado todo por ayudar a su compañero…! ¡Yo no pienso quedarme atrás tampoco!

Saeko había caído tras su ataque final, perdiendo todas las fuerzas en el proceso. Pese a todo, su enemigo se mantenía en pie, dispuesto a devorarla. Gengar intentó enfrentarlo pero en vano, pues la criatura se libró de él al instante, abriendo sus enormes fauces hacia la aprendiza inconsciente.

¡¡Hielo!! —Exclamó, llena de rabia e impotencia. Confiando en su última carta.

Yukiko malgastó sus últimas fuerzas lanzando un potente hechizo Hielo hacia el interior de sus fauces, congelándole con ello la garganta. Cayó al suelo también, jadeando, y se apoyó sobre una de sus rodillas, casi sin energía.

Spoiler: Mostrar
Saeko
Nivel: 06
Vit: 09/22
PH: 02/12

Gengar
Nivel:05
Vit: 25/36
PH:03/10


Yukiko
Nivel: 11
Vit: 07/22
PH: 01/22
Observaciones:
* En ambientes fríos puede alcanzar su máximo potencial.
* Destaca sobre todo en Poder Mágico y Reflejos, sin embargo tiene muy poca resistencia.
Habilidades:
* ???
Cuerpo hipotérmico (HM) [Habilidad pasiva; Requiere Magia Afín: Hielo]. El cuerpo del personaje se mantiene a una temperatura bajo cero por tiempo indefinido, recibiendo así +1 de Poder Mágico constante. En ambientes muy calurosos (Como un desierto) la habilidad perderá su efecto, mientras que en ambientes húmedos y de muy baja temperatura, el efecto de habilidad se multiplicará por dos, recibiendo hasta +2 de Poder Mágico extra constantemente.
Hielo (HM) [Nivel 2] [Requiere Poder Mágico: 3]. Proyectil de hielo lineal, con muy pocas posibilidades de congelar.
Libra (HM) [Nivel 7] [Requiere Poder Mágico: 9]. El usuario es capaz de conocer algunos datos de su enemigo, como su balance de poder, alguna habilidad propia, su magia afín, etcétera.
Copo criogénico (HM) [Nivel 8] [Requiere Poder Mágico: 12; Afinidad: Hielo]. El personaje genera un gran copo de nieve congelado en el aire, el cual perseguirá a un solo enemigo y provocando en éste Congelación durante una ronda, si transcurrido este tiempo el copo no ha impactado con nada, se evaporará.
Avatar de Usuario
Tsuna
57. Ferrocustodio I
57. Ferrocustodio I
The Unknowns
 
Mensajes: 1680
Registrado: Mar Ene 03, 2012 5:12 am
Dinero: 691,216.48
Banco: 0.00
Ubicación: Perdida en el océano.
Sexo: Femenino
Clan: The Unknowns
Estantería de objetos
Karma: 17

Re: [Bastión Hueco] Una noche de terror

Notapor H.S Sora » Jue Ene 23, 2014 9:09 pm

Y pasamos un largo rato, ella me contaba algunas cosas extrañas yo intentaba recordarlas pero no podía… la cabeza me empezaba a arder con fuerza, ella me calmaba como podía y volvíamos a empezar el proceso…

Después de varios intentos comprendimos y coincidimos en que no me encontraba en condiciones de intentar hacer esfuerzos muy brutos con mi mente. Había logrado rescatar algunos recuerdos junto a Alice pero eran algo confusos… ¿Cómo explicarlo? Era como si aquellos recuerdos vividos con Alice los hubiese vivido también con Louise y al revés… Y cada vez que intentaba hacer hincapié en qué había pasado concretamente ella me persuadía con dulces besos y afirmando que tampoco tenía las respuestas demasiado claras.

Aquello me hacía dudar de mi mismo… ¿Qué era real y qué no? Alice decía que todo aquello lo era, pero sin embargo… ¿Tenía Alice todas las respuestas? Si ella no estaba cerca al igual que Louise supondría otra búsqueda… ¿A quién terminaría encontrando antes? ¿Desvelarían más verdades que yo desconocía? Aquello era seguro, pero… ¿Aquellas verdades destrozarían mi corazón? Las verdades podían ser de muchos tipos, y algunas eran más afiladas que cuchillos… Noté mi pecho latir con fuerza, como si de una manera u otra, apoyase mi pensamiento.

No te preocupes—dijo Alice esbozando aquella radiante sonrisa mientras me abrazaba y me sacaba de mi ensimismamiento, era como si me ayudase a soportar todo lo que sentía de una extraña forma— No fuerces tu mente y menos tu corazón mi salvador…

Lo sé, pero quiero recordar, quiero saber todo lo necesario pero no tengo el suficientemente tiempo…

Y era cierto, estaba preocupado por aquello que Alice había dicho anteriormente de que “Había tenido que intervenir” ¿En qué clase de problemas se encontrarían?

¿Estás preocupada por ellos?—me miró con indecisión, como si no pudiera leer mis pensamientos y posó una mano cálida en mi mejilla.

Una vez resonó con fuerza, una voz cansada y decidida.

¡No voy a permitir que Saito muera por tu culpa!

¿Qu-Qué? ¿Esa es la voz de Saeko?—pregunté a Alice abriendo mis ojos de par en par

Asintió.

Ahora se encuentra luchando contra un monstruo de oscuridad, está prácticamente agotada y por eso mismo debo hacerte volver cuanto antes…

Confío en Saito, sé que él también está luchando en su interior. ¡No te atrevas a subestimar su corazón, bestia inmunda!

Lo comprendí en aquel momento. La voz se estaba aprovechando de mí ausencia, no iba a consentir aquello más tiempo. La ira se empezó a acumular dentro de mí, pero intenté serenarme cuando noté una mirada de angustia en Alice la cual retiró la mano de mi mejilla.

Veo que realmente se nos acaba el tiempo…—esbozó una sonrisa triste y posó una mano con la mía, murmuró una palabra mientras cerraba su palma con la mía y noté el ligero peso de un objeto en mi mano levantó la mano y vi unos cascabeles de color plata que relucían— Aquí está tu último regalo, quizá no lo entiendas ahora, pero cuando vuelvas a tu sitio y necesites de mi ayuda aprieta el cascabel con todas tus fuerzas, rompiéndolo… Quizá esté algo cansada por el esfuerzo que supondrá pero…—juntó sus labios con los mios de nuevo— Volveremos a hablar mi caballero, aunque solo sean parte de mis recuerdos. Recuerda, búscame y encuéntrame, confío en ti más que en nada y en nadie.

Me disponía a protestar, a decir algo, pero volvió a darme un plácido beso y noté como las fuerzas me abandonaban, y mientras cerraba los ojos perdiendo toda noción de mí alrededor sí que noté algo: Como Alice no se separaba de mi lado.

***

Saeko no puedo esquivar el ataque, simplemente escuché a Saeko gruñir, parecía que el fín del combate había llegado. Me acerqué a ella, dispuesto a terminar aquello.

… no puedo permitirme perder este combate! —Gritó desde el suelo, completamente herida y empapada por el agua. Aquella era una visión magnífica de mi presa antes de ser devorada.

Pues ya lo has perdido—comenté en voz baja con una sonrisa terrorífica.

Por una vez agradezco el haber tomado una decisión estúpida… —Comentó, con una voz cansada al mismo tiempo que intentaba levantarse, pero fue en vano no logré alzarse demasiado antes de golpear levemente de nuevo aquel suelo mojado. Ella no podía más, si bien era cierto que yo tampoco aguantaría un ritmo muy elevado, aquel combate lo había ganado.—. Solamente a mí se me hubiese ocurrido salir en plena madrugada a la ciudad, ¿pero sabes…? —Y sorprendiéndome mucho, se levantó del suelo empuñando con dificultad su Llave Espada mientras me miraba con una mirada digna de ver, era una mirada que era capaz de inculcar temor en mi interior, ¿Y si me había equivocado y aún le quedaban fuerzas suficientes como para derrotar a la criatura que controlaba?— ¡No voy a permitir que Saito muera por tu culpa! —Exclamó y me intenté preparar para lo peor.

Y se lanzó a por mí, corriendo a una velocidad bastante difícil de creer teniendo en cuenta lo cansada que debía de estar, agarró con ambas manos la Llave Espada y se dispuso el último golpe que no iba a dejarle asestarme, me dispuse a bloquear aquel ataque y contraatacar cuando algo me agarro las manos por detrás.

¿Qué demonios?—giré mi cabeza y vi como Gengar me estaba sujetando las manos con todas sus fuerzas, para cuando me dispuse a soltarme fue tarde.

¡Yiaah! —Exclamó Saeko, realizando un gran golpe que realmente me dolió, cortó la respiración del monstruo durante unos instantes y pensé que habría sido capaz de acabar con él pero por sorpresa aún era capaz de aguantar en pie mientras miraba a Saeko con sorpresa— Confío en Saito, sé que él también está luchando en su interior. ¡No te atrevas a subestimar su corazón, bestia inmunda!

En aquel instante oí el golpe de algo contra el suelo, me giré para observar justo a tiempo a Saeko cayendo de rodillas al suelo, su Llave Espada desapareció junto a un destello blanco. Aunque una de mis curiosidades era estudiar la Llave Espada, me alegraba de que Saeko hubiese quedado por fin fuera de combate, aquel último golpe que me había asestado había sido capaz de dañarme severamente.

¡Saeko!—gritó Gengar, aproveché aquel instante para soltarme de su agarre y valorar plenamente la situación.

Saeko estaba seguramente inconsciente, Gengar no sería un rival a destacar en mi estado y confiaba en que Yukiko tampoco fuese mucha competencia en aquellas circunstancias.

¡No… ella lo ha d-dado todo por ayudar a su compañero…! ¡Yo no pienso quedarme atrás tampoco!—escuché como gritaba Yukiko a lo lejos. Debía darme prisa antes de que ella actuase.

Había golpeado a Gengar con fuerza suficiente como para hacerle retroceder, y había cogido a Saeko mientras abría mi boca preparado un Devorar mientras mi primera presa seguía inconsciente.

¡¡Hielo!! —Exclamó Yukiko furiosa, ni siquiera le presté atención, el hechizo de la joven entró en mi garganta y la congeló profiriéndome una sensación muy desagradable, miré a Yukiko para ver cómo estaba apoyada sobre una rodilla, exhausta también.

Quizá hubiese congelado mi garganta unos instantes, pero mis dientes seguían pudiendo trocear Saeko. Entonces, cuando la estaba acercando a mis dientes, la solté. No voluntariamente. Mi cuerpo entero se paralizó y cedió soltando a Saeko. Gengar con una expresión de sorpresa y desconcierto que no entendí, cogió a Saeko a tiempo antes de que se diese un buen golpe y se alejó un poco.

Me dispuse a avanzar hacia ellos, pero no pude, era como si algo arrastrase de mí hacía atrás. Gengar me miró con una extraña mirada de perplejidad incluso parecía terror, pero me fijé que no me miraba a mí.

Una larga respiración, una más corta, otra más larga…

Sa—Saeko…—Dijo una voz, cargada de preocupación y rabia.

No era mi voz, ni la voz de Gengar, ni la de Yukiko ni por supuesto la voz preocupada de algún Maestro o Aprendiz de aquellas tierras… Sin duda era la voz de Saito.

***
Spoiler: Mostrar
Saito ya ha vuelto *epic music intro*(?) xDD Por lo que pasa a narrar lo principal


Spoiler: Mostrar
http://www.youtube.com/watch?v=PWxqd90-XWI&list=RD02PLrxT8Vu978


Desperté de repente, y abrí los ojos en el justo momento que aquel monstruo situado en mi espalda intentaba abalanzarse sobre una Saeko inconsciente y sobre Gengar, se lo impedí haciendo uso de todas mis fuerzas.

Estaba iracundo, notaba la sangre fluir con mayor fuerza. Todos habían sido heridos por mi culpa, miré a Gengar que tenía heridas algo superficiales, pero heridas al fin y al cabo. Desvié levemente la mirada para ver a una Yukiko exhausta y cansada, también con heridas. Entonces volví a posar mi mirada en Gengar y Saeko. Respiré varias veces exhausto, como si todo aquel tiempo hubiese estado sin respirar.

Sa—Saeko…

En aquel momento, observé realmente como se encontraba. Estaba realmente herida, con agujas clavadas en su piel, más heridas del combate aparte de esas, empapada, inconsciente… Y era responsable de más de la mitad de aquellas cosas sino lo era de todas. Hubiese sido fácil para ella dejarme allí tirado, correr al Castillo para avisar al Maestro Ryota o a alguien, pero no lo había hecho, ella había intentado salvarme sabiendo e imaginando tan bien como hubiese hecho yo que si se iba a buscar ayuda no volvería a verme.

No iba a permitir que aquello continuase más tiempo, me libraría del monstruo a cualquier precio.

Spoiler: Mostrar
???
Nivel: ???
Vit: ???
PH: ???
Observaciones:
* Su sangre es de un color negro azabache, no se sabe si el color de esa sangre es debida al Monstruo o a otro factor
* Su cuerpo parece resistente, aunque algunos factores parecen demostrar que no ha alcanzado todo su potencial posible.
*Parece que el monstruo en sí es inestable, por lo que algo/alguien lo debe de estar controlando
*No parece ser un Sincorazón
*Su magia o habilidades suelen estar relacionadas con la oscuridad, por lo que podría decirse que el monstruo es afín a esta.
Habilidades:
* Regeneración: A medida que el combate avanza, el usuario con el que hace contacto el monstruo va regenerando las heridas graves que tenga, llegándolas a convertir en heridas superficiales.
* Agujas Negras: Utiliza la Sangre Negra para crear agujas afiladas, la cantidad de agujas depende de la cantidad de sangre que tire.
* Devorar: Abre sus fauces y devora al objetivo, no se conoce demasiado sobre que sucede al devorarlo, probablemente coja todo el poder del usuario devorado y lo combine con el suyo.
* ???
* ???
* ???
Imagen

Muchas grácias por el avatar Mepi ^^
H.S Sora
22. Espectro
22. Espectro
 
Mensajes: 655
Registrado: Mar Sep 25, 2012 7:43 pm
Dinero: 3,775.22
Banco: 213,774.43
Sexo: Masculino
Karma: 3

Re: [Bastión Hueco] Una noche de terror

Notapor Sombra » Jue Ene 23, 2014 10:08 pm

Habéis dado un buen espectáculo —admitió alguien que había estado observando desde un lugar cercano. Nadie había notado su presencia ni cuando había llegado, pero una cosa estaba clara; había estado observando de cerca—. Pena que ya no déis más de sí.

La mujer saltó desde lo alto del edificio en el que había estado cayendo grácilmente. Se acercó a Saito a Saeko y a la chica que no conocían

Yo me encargaré de esto —invocó su llave espada y apuntó hacia aquella criatura—. Fulgor.

Una esfera de llamas se generó en la punta de la llave espada de la Maestra y se disparó contra aquel monstruo. La criatura no pudo esquivarlo y cuando aquella esfera llameante hizo contacto con él…

Una enorme explosión envolvió el monstruo. Las llamas de aquella poderosa magia se esparcieron casi quemando también a los aprendices y a la mujer de hielo en el proceso. La onda expansiva les obligó a tirarse al suelo para no salir por los aires e incluso la temperatura del lugar subió tanto que era imposible permanecer con los ojos abiertos sin que estos empezaran a sentir un increíble ardor en estos.

En donde había estado el monstruo de oscuridad había un cráter del que salía humo negruzco. No tenían que acercarse para deducir que no existía ninguna cosa capaz de resistir tal ataque por tanto seguramente nadie se acercó a comprobar si aquella cosa seguía o no viva… Tampoco es que le interesase especialmente a la Maestra al parecer.

Volvamos al castillo.

Dijo finalmente ignorando a la (para ella) desconocida Yukiko. Probablemente dudaba que pudiese sobrevivir siquiera.

Ariasu ayudó a levantarse a Saeko (o la levantó para llevarla en brazos en caso de que estuviese inconsciente) y empezó a caminar en dirección al castillo sin esperar a que Saito la siguiera.
Imagen

Imagen
Avatar de Usuario
Sombra
149. Lingering Sentiment
149. Lingering Sentiment
Bohemia Lectura
 
Mensajes: 4720
Registrado: Mar Mar 31, 2009 9:01 pm
Dinero: 27,410.40
Banco: 0.00
Ubicación: Behind in the musgo
Sexo: Mucho, gracias por preguntar
Clan: Bohemia Lectura
Estantería de objetos
Karma: 23

Re: [Bastión Hueco] Una noche de terror

Notapor Tsuna » Vie Ene 24, 2014 9:14 pm

Las oscuras y sombrías nubes de Bastión Hueco se disipaban lentamente, al mismo tiempo que una suave brisa acompañada de leves rayos de sol acariciaban el helado desierto que rodeaba las ruinas de la gran ciudad.

Spoiler: Mostrar

Fire Emblem: Awakening – It’s right after this mountain


Gabriel permanecía sentado en la entrada de la nave claramente preocupado. Miraba fijamente al suelo, desviando la mirada de vez en cuando a los alrededores alerta a cualquier enemigo que osase acercarse, fue durante la noche cuando se vio obligado a enfrentar diversas oleadas de aquellos seres oscuros llamados Sincorazón; había salido con vida de milagro. Entonces se dio cuenta de que su vestimenta seguía húmeda.

Me pregunto si Yukiko estará bien… Este lugar también está infestado de monstruos, no debí haberla dejado ir sola. —Susurró para sí mismo, acto seguido se levantó, dispuesto a ir a buscarla. No iba a dejar el mundo sin ella, eso estaba claro.

Gabriel, ya e-estoy aquí… —Dijo con su característica timidez la joven desde lo alto de un muro de hielo, frente a la nave.

Gabriel abrió los ojos como platos, entre asombrado y aliviado, éste corrió directo hacia su compañera, quien saltaba de modo descendente entre las ruinas con apenas fuerzas.

Yukiko, menos mal que estás… bien —Le costó pronunciar esa última palabra, pues viendo el aspecto de su compañera “estar bien” no era la expresión adecuada— . Por un momento me imaginé que… —Y se vio interrumpido por la chica, quien colocó su dedo índice en sus labios con la intención de silenciarlo.

Desvió la mirada cabizbaja, agarrándose el brazo izquierdo, en el que tenía una importante y visible quemadura. Su aspecto era deplorable, completamente negruzco por lo que parecían restos de carbón o cenizas, y además tenía varias marcas más en su cuerpo que demostraban las heridas que había sufrido durante la noche.

Sabía que debería haberte acompañado, o no haberte dejado ir directamente, mira cómo has terminado —Se detuvo, cogió aire y prosiguió— . Es increíble de lo que son capaces estos monstruos, ¿verdad? Aquí no ha sido fácil tampoco, esas bolas negras con antenas son más fuertes de lo que aparentan.

Yukiko volvió a mirarlo fijamente, tímida.

Escucha, e-este mundo… H-hay caballeros aquí… —Y avanzó hacia la nave, Gabriel se apartó, dejando paso a una Yukiko que apenas se podía sostener en pie.

No me digas que… ¿Además de Tierra de Partida? —Preguntó, claramente asombrado por el hecho de que hubiesen más caballeros aparte de los de Tierra de Partida. Era incapaz de comprender si Yukiko se topó con un grupo aislado, separado del resto cumpliendo una misión, o si se trataban de posibles traidores.

Gabriel no le dio más vueltas y siguió a Yukiko hasta la nave, esta de pronto cayó al suelo, abatida. El chico se apresuró con cierta prisa hasta su posición para socorrerla; concentró en lo que parecía energía mágica en su mano, siendo su miembro rodeado por un aura púrpura con finos hilos verdes que iban de un lado a otro. Cerró los ojos y en silencio materializó lo que parecía una nota musical de color verde gracias a la magia.

Spoiler: Mostrar
Imagen


No voy a permitir que mueras. —Abrió los ojos con calma y la nota musical comenzó a moverse en el aire, como si tuviese vida propia o el joven la controlara. Esta impactó en el cuerpo inerte de Yukiko, introduciéndose en él y generando varias ondas verdes por la zona a modo de pentagrama, junto con el tono característico de la nota al sonar esta.

Yukiko no despertó al instante, Gabriel la recogió y se la llevó a la nave…

***


La luz del sol impactó contra mi rostro, obligándome a despertar y salir de aquella oscuridad que me abrazó… ¿desde cuándo? Había soñado algo muy extraño, unos Sincorazón desmembraban a Saito en la plaza y el maestro Ryota se negaba a prestar ayuda alguna, mientras tomaba una taza de té con Gengar y… ¡¿Nadhia?! ¡¿Por qué demonios soñaba con esa enana debilucha?!

Aturdida y con la cabeza dándome vueltas, me llevé una mano a la frente mientras intentaba abrir los ojos y desperezarme, revolviéndome en la cama de un lado para otro.

Un momento… ¿dónde estoy? —Susurré con la voz ronca. Imaginé en ese momento que me había puesto mala, o enferma.

Me esforcé y sufrí para que mis ojos se acostumbrasen lo más rápido posible a la luz de la habitación en la que me encontraba. Observé mi alrededor con calma, no había rastro alguno de Gengar, la única ventana de la habitación estaba abierta y el aire del exterior me golpeaba directamente. Me toqué la piel, ¡estaba helada!

Uf, qué frío… —Y jalé de las sábanas para cubrirme por completo con ellas, acurrucada en mí misma.

Me di cuenta de que sólo vestía mi ropa interior, el resto estaba colocado de manera ordenada en una silla situada a la izquierda de la ventana, junto con la ropa de otra persona… Abrí los ojos como platos, casi en estado de shock, comprendiendo lo que aquello significaba.

¡¿Q-qué…?! —Me giré hacia el otro extremo de la cama, el más cercano a la entrada de la habitación, efectivamente, allí estaba Saito durmiendo. ¿Acaso… acaso se había atrevido a…?— ¡¡¿QUÉ SIGNIFICA ESTO?!! —Y tosí. Sentía cómo mi garganta estaba hecha trizas, me notaba acalorada; probablemente tuviese mucha fiebre.

Salí apurada de la cama, tapada por completo por las sábanas y algo más roja de lo normal. Retrocedí nerviosa hasta la ventana para cerrarla yo misma. Me giré de nuevo hacia Saito, intentando convencerme de que no hubo nada extraño entre ambos, y recordé entonces lo sucedido la noche anterior… La nave Gumi, la chica forastera, el monstruo que poseyó a Saito… Pero por alguna razón no recordaba con exactitud lo sucedido en los últimos momentos, antes de, ¿caer inconsciente?

Como mucho recordaba la parte en la que golpeaba a la criatura sin parar pero después de eso, era como una página en blanco. Me preguntaba cómo es que había terminado en esa cama con él.

Lo importante es que estamos ambos a salvo.


Saito seguía durmiendo como un tronco, por lo que no vi problema alguno en desprenderme de las sábanas, tirándoselas encima al chico, e irme a duchar y vestirme.

Jum, no creas que estaré siempre ahí para salvarte el pellejo, idiota. —Y salí del lugar.

[…]

Una vez terminé de asearme, algo preocupada por la terrible infección que sufrieron mis amígdalas, volví a la habitación con Saito para terminar de vestirme. Una vez estuve preparada, me senté en la silla cruzándome tanto de piernas como de brazos, esperando a que despertara. Una vez lo hiciera…

Es la una de la tarde, pedazo de vago. Veo que al fin despiertas.

Esperé su respuesta.

***


La nave seguía su rumbo hacia el Mundo Inexistente. Yukiko se había recuperado y le había contado a Gabriel todo lo sucedido. En aquel momento la nave la dirigía el piloto automático, aunque ambos seguían en la cabina, sentados ante los controles del vehículo.

Entonces se hacía llamar Saeko y era idéntica físicamente…

Yukiko asintió con la cabeza.

Me recordó mucho a la antigua S-saeko… pero m-más agresiva, más violenta… más malvada.

Gabriel permaneció pensativo unos instantes, meditaba muy bien acerca de todo aquello.

¿Y no se te ocurrió que pudiese ser la misma Saeko?

N-no lo creo… esta era portadora, usaba la Llave y…

Oh, ¿no la habrás usado tú también verdad? Aunque nos crucemos con portadores, tenemos prohibido revelar nuestra habilidad para controlarla. Ya lo sabes, si Ellos se enterasen…

Gabriel extendió su mano y un haz de luz iluminó el lugar. Entre sus manos se hallaba ahora un arma mágica e imponente.

Spoiler: Mostrar
Imagen
Este modelo de Llavero no está en la tienda, por eso no es oficial tampoco que Gabriel lo tenga. Si resulta que es un Llavero especial y no puede usarse, avisadme por MP para cambiarlo.


Claro que no la usé… Y r-respecto a Saeko… Obviamente pensé que p-pudiese ser ella, p-pero… ¿me hubiese reconocido, v-verdad? Pero no lo hizo...

Gabriel no supo qué contestar, puede que realmente se hubiesen equivocado de persona. La nave siguió el rumbo señalado hacia su destino, perdiéndose posiblemente para siempre.
Avatar de Usuario
Tsuna
57. Ferrocustodio I
57. Ferrocustodio I
The Unknowns
 
Mensajes: 1680
Registrado: Mar Ene 03, 2012 5:12 am
Dinero: 691,216.48
Banco: 0.00
Ubicación: Perdida en el océano.
Sexo: Femenino
Clan: The Unknowns
Estantería de objetos
Karma: 17

Re: [Bastión Hueco] Una noche de terror

Notapor H.S Sora » Dom Ene 26, 2014 3:14 am

Guardé el cascabel en el bolsillo de mi pantalón, bien protegido para que no se rompiese por el momento, ya tendría tiempo de investigar más tarde. Ahora tenía cosas más importantes de las que preocuparme.

¡Te mataré!—dije con todas las fuerzas que fui capaz de decir, mi voz me comenzó a sonar algo ronca y me dolía, quizá hubiese pillado un resfriado debida a la temperatura que hacía afuera.

Noté algo extraño en la atmosfera de aquel lugar. ¿Serían imaginaciones mias? Fuese como fuese, el combate tenía que terminar lo antes posible. El monstruo se había separado de mi espalda y había acontecido como un ente, sin piernas solo con una larga sombra que impactaba contra el suelo y se alargaba.

¿De verdad crees eso? Disfrutaré mucho devorando a tu amiguita enfrente de tus ojos.

Aquello terminó de enfurecerme. Mi respiración se aceleró otro tanto, probablemente tuviese fiebre, la cabeza me iba a estallar de dolor… ¿Cuánto aguantaría en un combate normal contra él? Esperaba de buena mano que Yukiko, Gengar y Saeko le hubiesen debilitado lo suficiente.

¡Yo disfrutaré cortándote en pedacitos pequeños, maldito saco de basura!—exclamé furioso dirigiéndome hacia él mientras invocaba la Llave Espada, no tenía un plan para ganar, pero debía ganar.

Yo me encargaré de esto —De pronto Ariasu, se plantó frente a nosotros, se plantó delante a mi lado y frené mi avance en seco, como si aquello hubiese sido una orden directa. ¿Desde cuándo estaba allí? Antes de poder decir nada más, esta invocó su llave espada y apuntó hacia el monstruo el cual actuó desconcertado por unos instantes, pero al darse cuenta de la situación fue demasiado tarde—. Fulgor.

Una esfera llameante se generó en la punta de la Llave Espada de Ariasu y se disparó inmediatamente contra aquel engendro. Nada más hacer contacto, una explosión de una magnitud impresionante aconteció, las llamas de aquella magia saltaron provocándome alguna que otra quemadura, miré a la Maestra la cual ni se inmutaba a pesar de que parecía estar rodeada de llamas.

Desvié mi mirada hacia Saeko y al ver que ella aun seguía inconsciente decidí usarme de escudo para protegerla de las pequeñas llamas que siguiesen saltando, me coloqué encima suyo sin apoyarme en ella, solo manteniendo las manos en el frío y húmedo suelo en el cual ahora chisporroteaban algunas llamas del hechizo. La temperatura del aire empezó a subir repentinamente, haciéndome cerrar mis ojos no acostumbrados a aquella temperatura tediosa. Parecía que estuviésemos en el mismísimo infierno, no sabría decir cuando termino todo, notaba algunas llamas en dirección a Saeko impactar en mi cuerpo pero a pesar de ello no me importaba, era lo menos que podía hacer por ella en aquellos momentos…

Volvamos al castillo.

La danza de fuego había terminado ya, Ariasu se encontraba de de pié al lado de Saeko y de mí, me aparté y la Maestra cargó en brazos con Saeko y empezó a caminar en dirección al Castillo, no parecía importarle si la seguía o no.

Miré en la dirección donde había estado el monstruo momentos antes, ahora solo quedaba un cráter el cual seguía desprendiendo un humo negro. Aquella cosa no podía ser un Sincorazón… aquello había quedado claro. Dudé varios instantes en si debía acercarme o no, me dispuse a hacerlo cuando escuché a Yukiko toser. Me giré para ver que se encontraba en un estado bastante desastroso y acudí a ella.

Yu-Yukiko te p-pondrás bien… —Volví a materializar mi Llave Espada, la cual había hecho desaparecer en cuanto la Maestra había utilizado su hechizo. Apunté con ella a Yukiko y me concentré.

>>C-Cura…

Una especie de aura verde envolvió a Yukiko, curó algunas de sus heridas y las más graves hizo que dejasen de sangrar y que pareciesen menos graves. Me quedé un rato allí, a su lado y cuando reaccionó me miró con un sentimiento de entre sorpresa y preocupación por verme en un estado “mejor” que el de ella, al menos físicamente hablando.

S-Saito… ¿Qu-qué ha sido eso… te encuentras bien?

Suspiré.

Supongo que te debo una explicación Yukiko, te acompañaré y te iré contando por el camino…

En un principio, la chica pareció que iba a negarse pero asintió con la cabeza y echamos a andar.

Por el camino le fui contando la situación saltándome algún que otro detalle que me hiciese parecer un joven paranoico con problemas mentales, pero si más no le conté todo lo necesario para que se quedase bastante satisfecha, ella a su vez me había contado como había transcurrido aquel combate y lo asombrada que estaba por la facilidad con que la Maestra Ariasu había vencido al monstruo. También preguntó un poco sobre si había más portadores aparte de nosotros 3, asentí y le expliqué un poco sobre el Maestro Ryota y lo demás aprendices, parecía que aquel tema le causaba una cierta… ¿Emoción? Pero en cuanto pregunté el motivo por el que lo preguntaba, cambió de tema drásticamente.

¿Por qué le había contado todo aquello? Quizá simplemente quisiese contarle todo aquello a alguien, aunque fuese a alguien a quien había conocido apenas 24 horas atrás, quizá simplemente pensaba que se lo debía por lo que ella había hecho por mí…

C-Creo que a-a partir de aquí... de-debería continuar sola…

¿Seguro que estarás bien? ¿No prefieres que te acompañe hasta la nave?

Yukiko negó con la cabeza varias veces, comprendí que era mejor no insistir.

N-no creo que a Gabriel le guste… la i-idea...

¿Quién?—Pregunté vagamente desconcertado, la verdad es que llevaba varios minutos pensando en todo lo que había estado sucediendo.

Yukiko se tapó la boca con ambas manos, como cuando un niño dice algo que no debía haber dicho.

N-Nada... olvida eso —me dio un abrazo que a pesar de lo fría que estaba ella, podía considerarse "cálido". Un abrazo que decía todo lo que a veces, no somos capaces de decir con palabras. —. Adiós Saito, cuídate...

Igualmente Yukiko.

Se giró y continuo andando perdiéndose en la lejanía, cuando la hube perdido de vista volví a invocar mi Llave Espada con esfuerzo y la tiré hacia el cielo haciendo que mi Glider apareciese. Me monté en él y puse rumbo al Castillo, donde esperaba poder descansar apropiadamente.

Llegué en escasos minutos al Castillo, una vez desmaterializado tanto mi Glider como la Llave Espada, que volvió, en vez de ir hacia mí habitación busqué a la Maestra Ariasu para preguntar por el estado en el que se encontraba Saeko, tardé lo que para mí fue una eternidad en encontrarla. Como temía que esta me hiciese demasaidas preguntas sobre lo que había pasado allí decidí entrar con cuidado en las diversas opciones del pasillo donde la había visto salir.

Cuando entré en la habitación correcta lo primero que hice fue notar la fuerza con la que el frío entraba por la ventana, lo segundo ver como Saeko se encontraba dormida. Su ropa se encontraba pulcramente colocada encima de una silla a la izquierda de la ventana. Me acerqué a ella, y con una mano toqué su frente, parecía que tenía fiebre o que había sufrido una especie de infección, coloqué la misma mano en la mejilla y pude ver como estaba helada. La arropé un poco más con las sábanas y me tumbé encima de la cama sin siquiera estar dentro, prefería esperar a que se despertase para poder hablarlo con tranquilidad.

Pasaron los minutos, y sin poder evitarlo empezaba a cerrar los ojos, ¿Cuándo iba a despertar? Volví a cerrar los ojos involuntariamente y así durante un rato en un vano intento de luchar contra el cansancio y el sueño, hasta que finalmente y sin darme cuenta me dormí en aquella postura.

***
Spoiler: Mostrar
http://www.youtube.com/watch?v=Zeo8wCIRERA


Una nave con el piloto automático puesto, avanzaba sin un rumbo fijo conocido.

Spoiler: Mostrar
Imagen


Vaya… Completamente inesperado.

Un joven que no debía tener más de 16 o 17 años se levantó de un amplió sofá y estiro sus brazos y piernas perezosamente.

Veo que los Maestros siguen siendo una fuente de poder y de misterios más que interesante. Lástima que no haya ido todo según lo planeado… Pero no ha sido para nada una mala experiencia después de todo, sigues siendo tan testarudo como siempre, Saito…

El desconocido dejó de estirar, se acercó a una venta de la nave y observó la oscuridad que envolvía al espacio. Sus ojos color carmesí destacaban en el reflejo de la ventana y el color negro de su cabello no ayudaba a que no destacase. Dio un amplio suspiro de cansancio.

Sigo sin saber que ha pasado en tu “viaje” interior, pero no dudo que habrás aprendido algo nuevo y que nos sorprenderás gratamente…

Se dirigió a lo que parecía una habitación extraña en la nave. Y encendió un pequeño interruptor que dio paso a que una lámpara en el techo iluminase la estancia como por arte de magia.

Ante él, una joven de cabello largo y rosáceo se encontraba con las manos esposadas. Parecía inconsciente o dormida, y aunque sus ojos del mismo color que el pelo lo miraban, al mismo tiempo no lo miraban.

¿No lo crees tú también, Louise?...

La chica no respondió. Y la nave siguió avanzando, hacia un rumbo incierto.

***

La luz de lo que debía ser el sol impactó directamente contra mi cara, me di la vuelta para evadirla ya que aun tenía sueño y cansancio que deseaba aplacar.

Es la una de la tarde, pedazo de vago. Veo que al fin despiertas.

Abrí los ojos al escuchar eso, y me reincorporé de inmediato para ver a Saeko cruzada de piernas y brazos en una silla a mi lado.

S-Saeko… —casi no podía pronunciar una palabra, me dolía todo.

La miré mejor, algo más despejado, y vi como parecía estar mejor que cuando la había visto desmayada contra aquel monstruo.

Y-Yo… —me acerqué todo lo que pude e intenté tocar su mejilla, al hacerlo retiré la mano algo avergonzado, pues las sabanas que me cubrían se desprendieron. Volví a taparme con ellas de inmediato.

¿Quién diablos me ha quitado la ropa?

>> B-Bueno… ¿Cómo te encuentras?
Imagen

Muchas grácias por el avatar Mepi ^^
H.S Sora
22. Espectro
22. Espectro
 
Mensajes: 655
Registrado: Mar Sep 25, 2012 7:43 pm
Dinero: 3,775.22
Banco: 213,774.43
Sexo: Masculino
Karma: 3

Re: [Bastión Hueco] Una noche de terror

Notapor Tsuna » Dom Ene 26, 2014 5:44 pm

S-Saeko… —Pudo apenas pronunciar, de verdad estaba hecho polvo. Quizás había sido muy dura con él al llamarlo vago.

¡Levanta! ¿Y tú eres aprendiz del maestro Ryota? ¡Ja! —Dije todavía desde mi posición, intentando provocarlo para que no se aflojase.

Y-Yo… —Y se acercó a mí, intentando tocar mi mejilla, ¡¿qué demonios se le pasaba por la cabeza en ese momento a aquel idiota?!

¿¡Qué crees que estás hac-¡? —Sin embargo no pude llegar a decir mucho más, su manta cayó al suelo y…— ¡Tápate, hazme el favor! —Y me levanté de manera brusca, dando un grito ahogado y apartándome de su lado, impactada por lo que había visto; sostenía mi frente con una mano, indignada.

No sabía qué intenciones tenía pero preferí mantener las distancias.

¿Qué manera de comportarse frente a una mujer es esa? Debí haberte dejado a tu suerte —Y chasqueé con la lengua. Me dolía mucho la garganta, por lo que no pude gritar demasiado. Aparté mi vista de Saito, observando la puerta de salida.

Esperaba que mis últimas palabras le hubiesen causado el suficiente daño como para que no volviese a repetir aquella escena… El chico se volvió a tapar, para mi alivio.

>>B-Bueno… ¿Cómo te encuentras?

¿Aquella pregunta era una broma o algo así? No me hizo ni la menor gracia, ¡mi estado era evidente!

¿Qué cómo me encuentro? ¡Pues enferma por tu culpa! —Y me aparté dirigiéndome hacia la salida, frustrada y sin ganas de hablar, con ganas de tirarlo todo por la borda, ¿pero iba a dejar las cosas así? No, tenía curiosidad por saber qué había sido aquel monstruo… o qué era exactamente Saito, por lo que me giré nuevamente hacia él— Saito, dime… ¿Qué eres tú exactamente? ¿Ese monstruo…? —Me lo pensé dos veces antes de seguir la conversación, quizás me estuviese entrometiendo en asuntos muy personales de Saito, pero si era cierto que lo tenía desde la Demostración… puede que yo u otro maestro pudiésemos ayudarlo— ¿Ese monstruo… lo tienes desde la prueba en la que nos conocimos? ¿Qué es… exactamente esa cosa?

Esperé su respuesta, algo asustada por lo que me fuera a decir. Me esperaba cualquier cosa.
Avatar de Usuario
Tsuna
57. Ferrocustodio I
57. Ferrocustodio I
The Unknowns
 
Mensajes: 1680
Registrado: Mar Ene 03, 2012 5:12 am
Dinero: 691,216.48
Banco: 0.00
Ubicación: Perdida en el océano.
Sexo: Femenino
Clan: The Unknowns
Estantería de objetos
Karma: 17

Re: [Bastión Hueco] Una noche de terror

Notapor H.S Sora » Vie Ene 31, 2014 1:10 am

¡Levanta! ¿Y tú eres aprendiz del maestro Ryota? ¡Ja! —Dijo ella con aquel tono tan habitual y mordaz suyo.

Aquello me sorprendió y no pude evitar esbozar una sonrisa interior. Aquella Saeko tan sarcástica como siempre, me alegraba verla así.

Pero como siempre he dicho, tengo una gran capacidad para arruinar momentos y mi “talento especial” actuó justo a tiempo.

¿¡Qué crees que estás hac-¡? —Dijo Saeko cuando intenté tocar su mejilla, cuando mi manta se cayó aquello ya acabó de arruinar lo que fuese que pensaba Saeko bueno de mi, se desvaneció en aquel instante— ¡Tápate, hazme el favor!

Saeko se levantó enfadada, apartándose de mí. Colocó una mano en su frente y comprendí que fuese lo que fuese que hiciese en aquel instante para intentar arreglarlo sería en vano. Debería esperar a que se calmase para intentar disculparme.

¿Qué manera de comportarse frente a una mujer es esa? Debí haberte dejado a tu suerte —Mi sangre hirvió levemente ante aquello. Había sido ella la que me había dejado abandonado medianamente, mientras yo me tuve que enfrentar a todo aquello yo solo. Apreté un puño con fuerza.

Decidí cambiar de tema y preguntarle por cómo se encontraba, aunque aquello pareció enfadarla aun más.

¿Qué cómo me encuentro? ¡Pues enferma por tu culpa! —Y mi sangre hirvió un poco más mientras Saeko se dirigía a la salida. No quería dejar que se marchase sin explicarle lo que había pasado… Por lo que me apuré en ponerme los pantalones y antes de que pudiese ponerme la camiseta, se volvió hacia mí de nuevo.

Saito, dime… ¿Qué eres tú exactamente? ¿Ese monstruo…?

¿Q-Que que era?.... ¿Acaso me insinuaba si aquel monstruo o yo éramos la misma persona?... Aquello, realmente me logró herir.

¡Soy una persona humana como tú! ¡Como el Maestro Ryota! ¡Como cualquiera de este maldito mundo!—estallé, aunque intenté tranquilizarme mientras me acercaba a ella.

¿Ese monstruo… lo tienes desde la prueba en la que nos conocimos? ¿Qué es… exactamente esa cosa?

Intenté tranquilizarme, Saeko solo estaba intentando preocuparse por mí en el fondo… Suspiré varias veces hasta calmarme lo suficiente y asentí.

No sé lo que es… Solo sé que llevaba asediándome desde entonces, y lo que ha pasado hoy no mejora las cosas…—cerré los ojos y al abrirlos la miré directamente— Ya no puedo estar seguro de nada…Ni siquiera sé si lo que he vivido antes de convertirme en caballero de la Llave Espada es real o no… Todo sobre lo que me sostenía se ha desmoronado, y ya no puedo estar seguro de nada.

Podía oír como mi voz sonaba rota, pero no podía hacer otra cosa que contarle aquella verdad a Saeko, la merecía. Mi estado era lamentable para un momento como aquel, respiré algo fatigado durante unos segundos. ¿Cómo diablos me estaba comportando así frente a Saeko?

>> Pero si de algo puedo estar seguro Saeko… es de que soy Saito. Saito Portador de una Llave Espada, nacido en otro mundo. Saito aprendiz de Bastión Hueco, a cargo del Maestro Ryota. Saito quién cumplirá sus objetivos a toda costa. Saito y nadie más —esbocé una ligera sonrisa— Y no tienes que hacerlo pero sé que si me ayudas… Podremos acabar con esa cosa, no ahora, pero sí un día de estos.

Estiré mi mano derecha para invocar mi Llave Espada, pero antes que la aparición de esta, una guadaña se posó en mi mano. Miré alternadamente a la guadaña y a Saeko, sin entender muy bien que había pasado.
Imagen

Muchas grácias por el avatar Mepi ^^
H.S Sora
22. Espectro
22. Espectro
 
Mensajes: 655
Registrado: Mar Sep 25, 2012 7:43 pm
Dinero: 3,775.22
Banco: 213,774.43
Sexo: Masculino
Karma: 3

Re: [Bastión Hueco] Una noche de terror

Notapor Tsuna » Vie Ene 31, 2014 7:49 pm

¡Soy una persona humana como tú! ¡Como el Maestro Ryota! ¡Como cualquiera de este maldito mundo! —Retrocedí un poco, intimidada por sus repentinos gritos— No sé lo que es... Solo sé que llevaba asediándome desde entonces, y lo que ha pasado hoy no mejora las cosas... Ya no puedo estar seguro de nada... Ni siquiera sé si lo que he vivido antes de convertirme en caballero de la Llave Espada es real o no... Todo sobre lo que me sostenía se ha desmoronado, y ya no puedo estar seguro de nada.

>>Pero si de algo puedo estar seguro Saeko... es de que soy Saito. Saito Portador de una Llave Espada, nacido en otro mundo. Saito aprendiz de Bastión Hueco, a cargo del Maestro Ryota. Saito quién cumplirá sus objetivos a toda costa. Saito y nadie más —Y sonrió, yo me mantuve callada en todo momento, esperando a que terminase—. Y no tienes que hacerlo pero sé que si me ayudas... Podremos acabar con esa cosa, no ahora, pero sí un día de estos.

Saito extendió uno de sus brazos, parecía que iba a invocar la Llave, mas fue grande mi sorpresa cuando me encontré con un arma de singular aspecto. Yo me adelanté un poco con brazos cruzados, en un intento de ayudarlo, y sin mirarlo a la cara.

Saito, yo no recuerdo absolutamente nada anterior a cuando me convertí en Portadora, bueno, te he mentido un poco pero... es lo mismo. Sufro amnesia, no recuerdo nada, pero he comprendido que con el tiempo esos recuerdos, quizás vuelvan. Lo que me mantiene a seguir junto a los maestros es mi afán por ayudarlos, a su lado me he vuelto muy poderosa, estoy segura de que terminaré logrando mis metas —Y lo miré directamente a los ojos— Por eso no me he rendido hasta ahora, Saito, ¿comprendes lo que quiero decir? Sirve a los maestros, a Bastión Hueco, y hazte más fuerte, imparable. Algún día serás capaz de acabar con esa oscuridad tan horrible que hay en ti, o mejor, controlarla a tu voluntad. Si te mantienes firme y leal a este mundo, tendrás las fuerzas necesarias para seguir adelante. Tu familia, tu hogar... está ahora aquí, Saito —Y esperé convencerlo con ello, haberle dado el empujón para que continuara luchando.

>>Por cierto, bonita arma. Nunca había visto una igual, ¿de dónde la has sacado?

Me giré hacia la puerta de la habitación para abrirla, algo fatigada.

Sí, como sea. Por cierto, yo tengo un hambre atroz, ¿te vienes o te quedas?

Y salí de la habitación sin esperarlo y sin mirar atrás, obviamente confiaba en que me siguiera, sería muy aburrido ir al comedor sola, y eso me recordaba...

¿Dónde se habrá metido Gengar?

Esa misma noche, me terminaría dando cuenta que fue él el responsable de quitarnos tanto la ropa a Saito como a mí, y su merecido castigo llegó al fin. Esa había sido para Gengar… una noche de terror.

Spoiler: Mostrar
Todos los PX para Gengar, por favor =)
Espero que os haya gustado el encuentro!
Avatar de Usuario
Tsuna
57. Ferrocustodio I
57. Ferrocustodio I
The Unknowns
 
Mensajes: 1680
Registrado: Mar Ene 03, 2012 5:12 am
Dinero: 691,216.48
Banco: 0.00
Ubicación: Perdida en el océano.
Sexo: Femenino
Clan: The Unknowns
Estantería de objetos
Karma: 17

AnteriorSiguiente

Volver a Otros temas

¿Quién está conectado?

Usuarios navegando por este Foro: No hay usuarios registrados visitando el Foro y 1 invitado