[Agrabah] Arenas Traicioneras

Saeko, Kai Sheng, Neru y Saito+Hikaru

La aparición del bando de Bastión Hueco ha colocado a la Orden de los Caballeros de la Llave Espada en una tensión creciente difícil de remediar. ¿Llegarán a enfrentarse ambos bandos en conflicto, o será posible la paz?

Moderadores: Suzume Mizuno, Astro, Sombra

Re: [Agrabah] Arenas Traicioneras

Notapor H.S Sora » Mié Feb 26, 2014 10:05 pm

¿Q-Que?...

Mi plan se quedó a la mitad, por no decir que apenas pude realizarlo. En cuanto golpeé al principito, un guardia que no había avistado clavó una lanza de considerable tamaño en mi costado. Aquella inesperada acción me impulsó hacia el suelo donde caí con fuerza. Hice todo mi esfuerzo por no chillar, aunque el dolor inesperado me abrumaba. Hice todo lo posible por taparme la herida con las manos, pero antes de que pudiese hacer nada, otros dos energúmenos me esposaron las manos a gran velocidad sin darme tiempo a poder librarme.

Joder vamos, piensa…

Mientras pensaba en cómo podía librarme de aquella situación, pude ver como el principito me miraba con odio, aquello no le había gustado. Tenía cara de que nunca le habían desafiado, y menos delante de toda su “gente”. Aquello me hizo esbozar una ligera sonrisa por dentro, no podía creerse que por ser un noble no podría ser tocado, ni hablar. Él podía ser golpeado y humillado tanto o más que el resto, y acababa de demostrarlo.

―¡Tu! ―me señaló el príncipe, intenté omitir una mueca de dolor por la herida que tenía—. Me las vas a pagar muy caro. ¡Guardias! Lleváoslo, quiero su cabeza como trofeo.

Pensé en responderle, pero no dudaba que alguno de los guardias me diese una ligera “reprimenda” por ello. Mi cuerpo no se encontraba en condiciones para soportar aquello, notaba mi costado arder, solo esperaba poder recuperarme lo antes posible de aquello. Aquello y, naturalmente, pensar en la manera de escapar de que me ejecutasen como acto de diversión y disfrute de aquel engreído.

Miré entre todas las personas que se encontraban en aquella sala, buscando a Saeko. Debido a que su vestuario era de lo más habitual en aquel mundo, me costaba encontrar algo que me indicase si a quien estaba mirando era Saeko. De cualquier manera, miré durante varios segundos a la que creí con bastante certeza que era Saeko, y pensé para mí mismo.

Espero que tú puedas ayudarme a salir de este lio…

Aunque sabía que no tenía nada parecido a poderes mentales, me reconfortaba pensar que quizá Saeko me ayudaría. Sabía que ella no echaría por tierra la misión, ni aunque aquello supusiese que me ejecutasen… Pero confiaba y creía en los lazos que había establecido con ella, durante todo el tiempo que la había conocido. Esperaba que si no podía ingeniármelas por mí mismo, ella me ayudase.

Dos de aquellos guardias que había allí empezaron a arrastrarme hacía el interior del palacio, quizá me llevasen a una especie de calabozo, puesto que dudaba que me fuesen a ejecutar sin el príncipe para verlo.

Mientras me arrastraban, miré sin ningún tipo de sentimiento a la multitud de criados del príncipe. Tragué saliva mientras aun me dolía la herida provocada por aquel guardia.

¿Creéis que sois especiales? En absoluto. De la misma manera que ha dejado morir a los de allí fuera, puede que os toque a vosotros antes de lo que creéis. ¿Y pensáis que siquiera significareis algo? Para nada, os sustituirá como hará con los fallecidos aquí hoy. Para él no sois personas, sois solo criados que deben morir por el si hace falta, su carnada ante el peligro —les miré a todos con un sentimiento de melancolía y pura sinceridad mientras seguía tratando de no retorcerme de dolor—Y eso seguiréis siendo, carnada, mientras no hagáis nada al respecto.

Y cerré mi boca. Ellos podían pensar lo que quisiesen, mas la verdad era esa, y esperaba que cada uno de ellos lo estuviese pensando en su interior. Podían hacer que las cosas dejasen de ser de aquella manera, ellos decidían. Quizá una sola chispa podía bastar, para encender el fuego que cada uno de ellos llevaba dentro.
Imagen

Muchas grácias por el avatar Mepi ^^
H.S Sora
22. Espectro
22. Espectro
 
Mensajes: 655
Registrado: Mar Sep 25, 2012 7:43 pm
Dinero: 3,775.22
Banco: 213,774.43
Sexo: Masculino
Karma: 3

Re: [Agrabah] Arenas Traicioneras

Notapor Sombra » Mar Mar 04, 2014 8:38 pm

Saito


¿Creéis que sois especiales? En absoluto. De la misma manera que ha dejado morir a los de allí fuera, puede que os toque a vosotros antes de lo que creéis. ¿Y pensáis que siquiera significareis algo?

—Ya tuve suficiente. ¡Guardias! Calladle —interrumpió el Príncipe por la mitad el discurso de Saito.

Una sombra se cernió sobre Saito haciendo que no pudiese soltar todo su discurso; un enorme guardia de pelo en pecho muy, muy musculoso que con toda su fuerza golpeó la cabeza del joven con el mango de su sable dejando al muchacho inconsciente al instante.

—Ya hemos perdido mucho tiempo gracias a ese plebeyo —soltó con desprecio escupiendo en la cara al muchacho antes de girarse para internarse en el palacio.

Saeko


Saeko pudo ver aquella escena mientras se alejaba, como se llevaban a su compañero inconsciente hacia lo que sería su prisión antes de que se llevase a cabo la ejecución.

La joven por supuesto, había decidido continuar su misión. No era su problema que su compañero fuese un enorme bocazas y ella nunca pondría en peligro aquello que en Bastión Hueco le habían encomendado.

El palacio era enorme, colosal. Podía abrir todas las puertas que quisiese, pero prácticamente el castillo estaba vacío a expcepción de alguna mujer que parecía trabajar limpiando los pasillos y demás estancias.

Pero al final, tras subir varios pisos encontró una habitación que a pesar de estar cerrada a cal y canto pudo abrir sin problema gracias al poder de su llave espada.

Aquella habitación resultó un poco chocante para la joven e hizo que su propio instinto gritase que aquel lugar era peligroso.

Spoiler: Mostrar
Imagen


Paredes, puertas, techo... Todo estaba pintado de un intenso color rojo como la sangre. En el centro de la amplia sala se alzaba un pequeño colchón con varios cojines, también había una mesa al fondo donde había numerosas pociones que emanaban vapores de diferentes y que llenaban la estancia con un fétido olor que provocaba que los ojos empezasen a enrojecerse y a picar.

¿A quién tenemos por aquí?

Tras Saeko, un hombre que rondaba los cincuenta años había aparecido. Aquella persona era delgaducha y vestía una larga túnica negra y un peculiar sombrero del mismo color. En su mano izquierda llevaba un largo bastón de oro cuya zona superior estaba tallada la cabeza de una cobra con unas preciosas piedras rojas en el lugar de los ojos. También llevaba una capa que caía hasta su cintura cuyo interior también era rojo.

Spoiler: Mostrar
Imagen


¿Se puede saber quien eres?

Saito


Los guardias lanzaron a Saito al interior de la prisión y cerraron la puerta con la llave y con algo de madera que sería lo que empezase a despertar al joven.

No había nada allí dentro. Solo piedras viejas y hedor a sudor, aunque no había nadie allí dentro además de él.

Nadie... Salvo un par de puntos amarillos que acechaban con lanzarse a por él en cualquier momento...

Hikaru, Kai y Neru


¿Ya conocías de antemano la ubicación de la lámpara? Es decir, el desierto es enorme, y no parecía haber ningún tipo de seña para encontrarte ni a tí ni ningún sitio dentro de él... ―preguntó entonces uno de los aprendices a Aladín llamando su atención.

b]No, no la conocía[/b] ―admitió―. Un hombre viejo nos guió con un extraño artefacto que señalaba el camino. Cuando llegamos del suelo salió una cabeza que era la entrada a la gruta donde estaba guardada.

Spoiler: Mostrar
Pregunta: ¿Se os hace muy incómodo el color de Aladín? No me importa cambiarlo por uno diferente en ese caso.


Así que Genio, ¿ya has conocido a alguien igual que nosotros antes? ¿Y cómo has averiguado nuestros nombres sin decírtelos? ―también decidió preguntar Hikaru curioso por aquel ser que vivía dentro de una lámpara.

Pues... ―el djinn se llevó la mano al mentón pensativo―. Sí, conocía a una chica hace varios cientos de años como vosotros. Una gran mujer, pero apenas recuerdo esa época...

Genio... ―Aladín se acercó triste y puso una mano en el hombro de la criatura―. Tiene que ser duro.

¡Dejemos de hablar de mí! ¿Por qué no me dices cual es tu Primer Deseo, amo? ―se dirigió al joven moreno.

La verdad es que... Estoy enamorado de una chica... Su nombre es Yasmín, es una preciosidad pero... Ella nunca se fijaría en una rata como yo.

>>Es la princesa de éste país al fin y al cabo, y yo soy una simple rata...

Ah, ah... ―negó con la cabeza el genio desaprobando el comentario del muchacho―. Al, puedo llamarte Al, ¿verdad? Verás. Una mujer cuando se enamora de ti es de corazón, no por el estatus social. Si la quieres lucha por ella. Pero recuerda que las reglas no permiten hacer que alguien se enamore de ti incluso si quieres ese deseo. No se puede cambiar la voluntad de otra persona.

Lo sé, Genio. Mi deseo es... ¡Conviérteme en un Príncipe!

Tus deseos son órdenes.

Genio apuntó su dedo hacia el joven y un rayo de luz salió desde éste impactando en el jóven. Un intenso destello los cegó a todos.

Las ropas harapientas de Aladín habían cambiado por otras de finas telas de lino y seda blanca y beige, el aspecto sucio del joven era más impecable que nunca.

Dime, Genio. ¿Ahora tengo entonces un país propio? ¿Y un castillo? ¿Y súbditos? ¿Puedo ver ya a la princesa?

Eh, eh, eh. Tranquilo muchacho. Sí, tienes todo eso y sí, puedes ver a la princesa. ¡Vamos a preparar una cabalgata por todo lo alto!

Chicos, ¿vendréis también? Me gustaría que la conociéseis.

Spoiler: Mostrar
Siento mucho la ausencia de la semana pasada, la fecha límite será el 10-3-2014

Spoiler: Mostrar
Faltas: Hikaru I
Kai I
Imagen

Imagen
Avatar de Usuario
Sombra
149. Lingering Sentiment
149. Lingering Sentiment
Bohemia Lectura
 
Mensajes: 4720
Registrado: Mar Mar 31, 2009 9:01 pm
Dinero: 27,410.40
Banco: 0.00
Ubicación: Behind in the musgo
Sexo: Mucho, gracias por preguntar
Clan: Bohemia Lectura
Estantería de objetos
Karma: 23

Re: [Agrabah] Arenas Traicioneras

Notapor Darkness Seeker » Mar Mar 04, 2014 9:25 pm

No, no la conocía ―Dijo Aladdin, mientras se relajaba y meditaba sobre lo que había dicho Genio―. Un hombre viejo nos guió con un extraño artefacto que señalaba el camino. Cuando llegamos del suelo salió una cabeza que era la entrada a la gruta donde estaba guardada.

Ahora que ya había logrado llamar la atención de Aladdín, Genio proclamó:

¿Por qué no me dices cual es tu Primer Deseo, amo? ―Mientras giraba y hacía gran cantidad de aspavientos alrededor de Aladdín.

Spoiler: Mostrar
Sombra escribió: [...] Fue entonces cuando decidió su primer deseo: Salir de la Cueva de las Maravillas. Aquel ser azul lo sacó como por arte de magia dejándole fuera, pero se sentía mareado y muy, muy somnoliento...


¿No sería ya el segundo deseo? Es una tontería pero... A ver si al final le vamos a dar a Aladdin 4 deseos XD


La verdad es que... Estoy enamorado de una chica...―Confesó Aladdín, mientras continuaba― Su nombre es Yasmín, es una preciosidad pero... Ella nunca se fijaría en una rata como yo.

De pronto Aladdin bajó la cabeza y comentó por lo bajo:

Es la princesa de éste país al fin y al cabo, y yo soy una simple rata...

Si era cierto que la chica era miembro de la realeza, no me extrañaba que el pobre Aladdin estuviera desanimado. No le conocía de nada, pero teniendo en cuenta sus ropas y la calidad de su casa, no me era difícil deducir su estilo y nivel de vida.

Ah, ah... ―negó con la cabeza el genio estando en desacuerdo por lo que Aladdín se desilusionaba―. Al, puedo llamarte Al, ¿verdad? Verás. Una mujer cuando se enamora de ti es de corazón, no por el estatus social. Si la quieres lucha por ella. Pero recuerda que las reglas no permiten hacer que alguien se enamore de ti incluso si quieres ese deseo. No se puede cambiar la voluntad de otra persona.

Aladdin, no deberías de desilusionarte―dije, tratando de animarle de alguna manera y poniéndome de lado de Genio ―¿Quién sabe? Quizás una vez que os conozcáis a fondo , ella llegue a quererte tal y cómo eres― A mi parecer era lo más estúpido y ridículo que había dicho en toda mi vida, pero teniendo en cuenta la situación de Aladdín, lo mejor era animarle de alguna manera.

Lo sé, Genio. Mi deseo es... ¡Conviérteme en un Príncipe!

Tus deseos son órdenes.― exclamó el genio, mientras hacía que una niebla similar a la que le había rodeado cuando hizo aparición transformará las ropas de Aladdín en unas mucho más exquisitas y de mayor alcurnia y belleza.

Dime, Genio. ¿Ahora tengo entonces un país propio? ¿Y un castillo? ¿Y súbditos? ¿Puedo ver ya a la princesa?―Exclamó Aladdin, ilusionado ante lo que estaba pasando.

Eh, eh, eh. Tranquilo muchacho. Sí, tienes todo eso y sí, puedes ver a la princesa. ¡Vamos a preparar una cabalgata por todo lo alto!

Chicos, ¿vendréis también? Me gustaría que la conociéseis.

Las habilidades mágicas de aquel genio parecían no tener fin. A decir verdad, no quería perderme la cara de la chica y amada de Aladdin cuando le viera.

La verdad es que me encantaría ir si no tuvieras ningún problema al respecto Aladdin

Spoiler: Mostrar
Insisto, habría que revisar lo de los deseos no vayamos a dar más de la cuenta. Sobre el color de Aladdín, a mí al menos no me molesta
Última edición por Darkness Seeker el Vie Mar 07, 2014 9:49 pm, editado 2 veces en total
LET YOUR HEART SURRENDER BY THE DARKNESS¡

Imagen

Logros ~ Neru
Spoiler: Mostrar
Imagen
Imagen
Imagen


Awards

~ 2014 ~

Spoiler: Mostrar
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen

~ 2015 ~
Spoiler: Mostrar
Imagen
Avatar de Usuario
Darkness Seeker
34. Tahúr
34. Tahúr
 
Mensajes: 1004
Registrado: Vie Ago 16, 2013 5:18 pm
Dinero: 171,944.51
Banco: 15,730.00
Ubicación: The Realm of Darkness
Sexo: Masculino
Estantería de objetos
Karma: 7

Re: [Agrabah] Arenas Traicioneras

Notapor Tsuna » Mié Mar 05, 2014 1:27 am

¿Creéis que sois especiales? En absoluto. De la misma manera que ha dejado morir a los de allí fuera, puede que os toque a vosotros antes de lo que creéis. ¿Y pensáis que siquiera significareis algo?

Idiota, cállate de una vez. Sólo vas a complicar las cosas.


—Ya tuve suficiente. ¡Guardias! Calladle.

Y un enorme guardia se aproximó a Saito. Por un momento pensé en lanzar una Flama Tenebrosa, temerosa porque lo fueran a ejecutar allí mismo, pero si lo hacía, toda la misión fracasaría. La vida de Saito estaba en mis manos en ese momento, un instante que no volvería a repetirse nunca, y sin embargo… me negaba a mover mi cuerpo.

¿Acaso era más importante mi labor como aprendiza a salvar a Saito? Sí, lo era. Él se lo había buscado, aunque no me gustase nada la idea. Entre esa escena y los ciudadanos asesinados anteriormente por los demonios negros, una especie de sensación negativa se acrecentaba en mi pecho, ahogándome.

No eres más que un tonto.


Y para mi alivio, el guardia no lo mató, sino que le golpeó en la cabeza para dejarlo inmóvil. Temí que ese golpe lo dejara aun peor de lo que estaba.

—Ya hemos perdido mucho tiempo gracias a ese plebeyo.

Confié en que Saito estuviese a salvo de momento. Contaba con el tiempo suficiente para encontrar a Yafar y convencerlo para que liberasen a mi compañero. Me adentré en el enorme edificio sin problemas, y para mi sorpresa, se encontraba casi vacío. Mucho mejor sin duda, ¿pero y si no estaba Yafar tampoco? Eso era algo que tenía que comprobar.

Avancé con todo el sigilo y precaución posible, ignorando a las pocas sirvientas que me pudiesen salir al paso. Intenté abrir las habitaciones que consideré más importantes, pero ni rastro de Yafar. Fue después de un buen rato subiendo escaleras, girando esquina a esquina, y abriendo puertas, cuando me topé con una cerrada a cal y canto. Sin duda, era el momento para probar aquella habilidad tan útil de la Llave Espada.

Con cuidado, asegurándome de que nadie más en la zona me viese, invoqué mi Llavero para a continuación apuntar a la cerradura de la puerta, sujetándolo con ambas manos. Deseé que de algún modo, la puerta se abriese, y de la llave surgió un hilo de luz que me permitió el acceso.

Asentí, convenciéndome de que lo estaba haciendo todo bien, e hice desaparecer mi arma cuanto antes. Abrí la puerta y entré sin prisa alguna, silenciosa. Me bastaron unos pocos segundos para asimilar que aquel lugar no era normal, o al menos, no como los anteriores. No encajaba con el resto del castillo: predominaba el color rojo sangre, uno muy intenso, además de varios colchones y frascos de los que salían vapores extraños.

Me vi obligada a meter la mano bajo mi ropa para esclarecer mis ojos, que parecían haberse irritado por culpa de dichas sustancias.

¿A quién tenemos por aquí?

Di un brinco nada más escuchar aquello. Temí porque fuese algún que otro guardia, dispuesto a llevarme a una celda o algo como a Saito, pero me equivocaba. Cuando me giré muy despacio para comprobarlo, lo vi claramente… túnica negra, sombrero oscuro, cetro con aspecto de serpiente y un largo manto negro que lo recubría. Sí, no tenía duda, aquel se trataba de Yafar.

¡Por fin! Estoy de suerte.


¿Se puede saber quien eres?

Supuse que era el momento idóneo para revelar mi identidad, pero no sabía cómo empezar, o qué palabras elegir para que no acabase aquello en un malentendido. Tenía que explicarle además el asunto de Saito, el cual esperaba que siguiese vivo.

Me quité la capucha que escondía mi rostro, mostrando un cabello alborotado y un poco sudoroso. Lo miré fijamente, intentando evitar aquel bastón; por alguna razón, las gemas rojas de la serpiente me daban malas vibraciones. Tragué saliva antes de hablar.

Usted debe ser el visir de Agrabah, Yafar. Le he estado buscando, vengo de parte de Hisa Wix. No me ha explicado los detalles, pero sí tenía que encontrarle. —Esperé a que continuara él, y cuando tuviese la ocasión, le nombraría lo de Saito— Verá, Wix me ha enviado a mí junto con un compañero, pero éste ha tenido algunos problemas y posiblemente esté encarcelado. ¿No tiene alguna forma de liberarlo? —Recé en mi interior para no parecer una tonta haciendo peticiones absurdas, si se negaba a liberarlo, tendría que abandonarlo a su suerte. Ya se las apañaría para escapar, o puede que no volviese a verlo nunca. Igualmente, yo había cumplido con mi parte— Puede dirigirse a mí como Saeko.

Spoiler: Mostrar
Sobre el color de Aladdín, no me importaría que fuese un poquito más oscuro. Desde el móvil se ve muy bien, pero desde el PC cuesta un poco seguir sus frases.
Avatar de Usuario
Tsuna
57. Ferrocustodio I
57. Ferrocustodio I
The Unknowns
 
Mensajes: 1680
Registrado: Mar Ene 03, 2012 5:12 am
Dinero: 691,216.48
Banco: 0.00
Ubicación: Perdida en el océano.
Sexo: Femenino
Clan: The Unknowns
Estantería de objetos
Karma: 17

Re: [Agrabah] Arenas Traicioneras

Notapor H.S Sora » Dom Mar 09, 2014 11:09 pm

—Ya tuve suficiente. ¡Guardias! Calladle.

Hijo de puta...

Antes de que pudiese pronunciar una palabra más o siquiera defenderme, uno de los guardias se plantó frente a mí y me dio un golpe, haciendo que todo se volviese oscuro de pronto.

***

Tab.

¿Qué diablos?...

Intenté moverme y por poco solté un quejido de dolor. Con la inconsciencia había olvidado el delicioso placer del dolor que era producido por la herida. Tampoco podía usar mis manos, pues se encontraban esposadas a mis espaldas.

Lo primero es ponerse de pie...

Me di la vuelta después de varios intentos amortiguados por el dolor y reculé de manera bastante penosa hasta la puerta de mi instancia, gracias al “apoyo” que tenía mi espalda, logré alzarme y analicé lo mejor que pude la habitación ya que se encontraba a oscuras.

Después de aquel esfuerzo por mi parte respiré con algo de fatiga, aquel ambiente estaba cargado con un olor nauseabundo, la boca me sabía a sangre y el costado me dolía como mil demonios golpeándome a la vez... pero tenía suerte al fin y al cabo. Seguía vivo, al menos de momento.

Lamentarás no haberme ejecutado en el acto...

La ira se acumulaba en mí con cada momento que pasaba. Tenía que pensar en una forma de salir de allí para escapar y, quizá, incluso poder llegar a reunirme con Saeko y proseguir con la misión tal y como estaba planeado.

Pero primero de todo tenía que quitarme las esposas que me impedían realizar casi cualquier acción. Entonces, por primera vez en todo lo que llevaba de día, la fortuna pareció que me sonreía.

Varios puntos amarillos, similares a ojos, estaban observándome en la oscuridad.

Quizá por primera vez en lo que llevo como Portador, me podáis ser útiles...

Intenté estirar mis manos a los lados todo lo que aquellas esposas me permitiesen, respiré durante un par de segundos y corrí de espaldas y mirando hacia aquellos puntos amarillentos que era más que probable que fuesen Sincorazón. Lo que haría sería interponer las esposas cuando me atacasen con tal de que las rompiesen y poder liberarme de ellas.

Aun si me encajaban algún golpe o zarpazo intentaría resistir el dolor y seguir poniendo las esposas hasta que se rompiesen. Cuando lo hiciesen, retrocedería e invocaría mi Llave Espada, para a continuación utilizar un Cura sobre mí mismo y ponerme en posición defensiva.

No me iba a dar por vencido, aun se podían cambiar las cosas.
Imagen

Muchas grácias por el avatar Mepi ^^
H.S Sora
22. Espectro
22. Espectro
 
Mensajes: 655
Registrado: Mar Sep 25, 2012 7:43 pm
Dinero: 3,775.22
Banco: 213,774.43
Sexo: Masculino
Karma: 3

Re: [Agrabah] Arenas Traicioneras

Notapor James Bond » Mar Mar 11, 2014 5:40 pm

Genio respondió a mi pregunta. Resultó que conoció a una chica hace varios cientos de años, y parecía que le gustó, por que la alabó. Aladín fue a consolarle y fue cuando nuestro azul amigo dijo:

¡Dejemos de hablar de mí! ¿Por qué no me dices cual es tu Primer Deseo, amo?
La verdad es que... Estoy enamorado de una chica... Su nombre es Yasmín, es una preciosidad pero... Ella nunca se fijaría en una rata como yo. Es la princesa de éste país y al fin y al cabo, y yo soy una simple rata....
Aladín, amigo, no digas eso de ti mismo.― Me dolía ver cómo mi propio amigo se auto-degradaba.
Ah, ah... Al, puedo llamarte, Al, ¿verdad? Verás. Una mujer cuando se enamora de ti es de corazón, no por el estatus social. Si la quieres lucha por ella. Pero recuerda que las reglas no permiten hacer que alguien se enamore de ti incluso si quieres ese deseo. No se puede cambiar la voluntad de otra persona.
Bien dicho, Genio. Así se habla. Choca esos cinco― le ofrecí mi mano para que la chocase mientras mi compañero Neru le comentaba a Aladín lo mismo que Genio le había dicho con otras palabras.
Lo sé, Genio. Mi deseo es... ¡Conviérteme en un Príncipe!
Tus deseos son órdenes.

Un brillo me cegó, y cuando por fin pude ver, lo que observé me dejó impactado. Allí estaba Aladín, sí, pero no parecía él mismo. Ahora llevaba unos ropajes muchos más blancos y parecían de mejor calidad, además de caros. El joven pareció excitarse mucho ante su nueva apariencia.

Dime, Genio. ¿Ahora tengo entonces un país propio? ¿Y un castillo? ¿Puedo ver ya a la princesa?
Eh, eh, eh. Tranquilo muchacho. Sí, tienes todo eso, y sí, puedes ver a la princesa. ¡Vamos a preparar una cabalgata por todo lo alto!― Tuve que admitir que la idea me emocionó bastante.
Chicos, ¿vendréis también? Me gustaría que la conocierais.― Nos preguntó. Nunca me hubiera imagino que formaría parte de una comitiva real, aunque fue de mentira, sería una experiencia inolvidable.
¡Por supuesto amigo!― Dije excitado―. Aunque, si te vamos a acompañar, ¿no crees que sería mejor que fuéramos como Guardias Reales o algo así? Ah, Neru, a Aladín no le importará que le acompañemos, ¿verdad?

Spoiler: Mostrar
En cuanto a lo del color de Aladín, a mí sí se me hace molesto leerlo, tengo que acercarme mucho para poder leerlo. Creo que sería mejor que le quitaras la negrita
Imagen
Imagen
Avatar de Usuario
James Bond
28. Samurai
28. Samurai
AnimeDesign
 
Mensajes: 826
Registrado: Mié Dic 05, 2007 6:00 pm
Dinero: 200,000.00
Banco: 15,728.25
Sexo: Masculino
Clan: AnimeDesign
Estantería de objetos
Karma: 4

Re: [Agrabah] Arenas Traicioneras

Notapor Sombra » Vie Mar 14, 2014 3:16 am

Saito


Su plan tuvo un excelente resultado, por extraño que pareciese. Desde las sombras de la prisión surgió un sincorazón similar a una hormiga negra que se lanzó sobre la "desprotegida" espalda del aprendiz.

Sin embargo aquel era el plan del aprendiz. En cuanto la sombra se tiró sobre él, Saito levantó sus brazos un poco y las afiladas garras chocaron contra el hierro del que estaban hechas las esposas.

Viéndose liberado el aprendiz invocó su llave espada poniéndose en guardia. No debería tener problemas para derrotarle de un par de simples golpes por lo que simplemente tendría que destruir a la criatura. ¿Qué haría después de vencer al sincorazón?

Si se asomaba por los barrotes de la puerta, que dejaban pasar un poco las manos del aprendiz se daría cuenta de que la puerta estaba atrancada con un trozo de madera seco. ¿Podría hacer algo con eso? La cerradura no sería un problema.

También quedaba la opción de hacer nada, pero aquello era cosa suya.

Saeko


¿Encarcelado? —inquirió el hombre con cierta extrañeza—. ¿Qué clase de inútil acabaría encarcelado?

>>Bien, veré si puedo hacer algo. Pero esto no entraba en el trato, deberéis darme algo más a cambio, ¿queda claro?

Con esas palabras, el visir silbó con fuerza. Al momento un guardia se acercó y se arrodilló ante él sin mediar palabra alguna. El visir lo miró por encima del hombro.

Quiero que liberéis a un joven encarcelado —Yafar se giró hacia Saeko—. ¿Cómo se llamaba ese compañero tuyo? —esperó que la chica respondiese.

>>Ya lo habéis oido. Id a por él. Vamos, entra.

El hombre hizo un gesto para invitarla al interior de la habitación roja.

La razón por la que os he llamado es porque quiero recuperar un objeto muy valioso —ofreció asiento mientras hablaba—. Su nombre es la Lámpara Mágica. Quiero que la consigáis para mí, esa es vuestra misión.

>>Toma esto, os servirá para encontrarla.

De la manga de su túnica sacó una especie de roca tallada en forma de escarabajo. Al posarse sobre la palma de la mano de Saeko el peculiar objeto giró de golpe apuntando hacia un punto concreto.

Alguien tiene ese objeto que me pertenece por derecho —apretó su puño—. Recuperadlo sea cual sea el precio y saldréis ganando.


Spoiler: Mostrar
Saeko logra la Habilidad Temporal "Detectar Lámpara Mágica". Dura solo durante esta trama mientras posea la Piedra Escarabajo.

Detectar Lámpara Mágica [Nivel 0] (HM) El portador de la Piedra Escarabajo puede averiguar la dirección en la que se encuentra la Lámpara Mágica.


Hikaru, Neru y Kai


Muchas gracias, chicos —dijo sonriente el ahora Príncipe Aladín mientras Genio volvía a la lámpara—. ¡Vamos puesa nuestra cabalgata!
*
Spoiler: Mostrar
*Mucho mejor este color, ¿verdad?


El jovial muchacho salió de su casa hasta la calle principal, donde ya esperaban cuatro elefantes para que los montasen en ellos.

La hermosa y viva cabalgata empezó a avanzar. Los sirvientes lanzaban monedas de oro a los plebeyos, era simplemente hermoso.

Poco a poco avanzaron hasta el palacio y mientras más se acercaban más notaban un ambiente raro en la gente.

Como si estuviesen... demasiado quietos. Era un grupo de personas pequeño, de no más de siete, algo realmente raro. Todos ellos vestían igual, tapados por enormes túnicas con capucha que impedían que sus rostros fuesen vistos.

Las puertas del palacio se encontraban cerradas a cal y canto.

Y los siete extraños no eran humanos.
Spoiler: Mostrar
Imagen

Imagen


Eran sincorazón, de los cuales seis de ellos eran extrañas flores naranjas mientras que el último era una especie de guerrero que portaba dos espadas rojas.

Al momento en el que se descubrieron, Genio salió de su lámpara y lanzó una barrera alrededor de donde estaban para evitar que los sincorazón tratasen de herir a los civiles.

Aladín bajó de un salto del Elefante y deseimbainó su sable.

¡Demonios negros! —nombró—. ¡Tenemos que acabar con ellos!


Spoiler: Mostrar
Faltas: Hikaru I
Kai II >Una falta más y estás expulsado de la trama.


Spoiler: Mostrar
Fecha límite 19-3-2014
Imagen

Imagen
Avatar de Usuario
Sombra
149. Lingering Sentiment
149. Lingering Sentiment
Bohemia Lectura
 
Mensajes: 4720
Registrado: Mar Mar 31, 2009 9:01 pm
Dinero: 27,410.40
Banco: 0.00
Ubicación: Behind in the musgo
Sexo: Mucho, gracias por preguntar
Clan: Bohemia Lectura
Estantería de objetos
Karma: 23

Re: [Agrabah] Arenas Traicioneras

Notapor James Bond » Vie Mar 14, 2014 7:09 pm

Muchas gracias, chicos. ¡Vamos pues a nuestra cabalgata!— Dijo un animado Aladín.
Muy bien, vamos, Neru, Kai.— Ordené.

Nada más salir de la casa, ya nos estaban esperando cuatro elefantes. Me costó lo mio subirme, pues era la primera vez que me montaba en un animal, y mi primera vez en uno de tales características.

Mientras avanzábamos, los falsos sirvientes que hasta hace nada no existían, lanzaban monedas de oro a los ciudadanos que nos veían. Y cuando llegamos a palacio, vi que las puertas estaban cerradas, como si quisieran que nadie pasara por ellas.

Entonces, figuras extrañas nos atacaron. Y uno de nuestros atacantes llevaba el símbolo de los sincorazón en el pecho. Estaba muy claro lo que había que hacer. Como Aladín ya había visto mi llave-espada, la invoqué rápidamente y me bajé del elefante en el que estaba montado. Usé un hechizo Libra sobre el sincorazón de las dos espadas, y respondería a su duelo desenvainando la que llevaba, de modo que peleásemos a dos espadas. Atacaría de frente, con ambas espadas, tratando de engañar a mi rival cambiando la dirección de la estocada de ambas armas blancas en el último segundo, tratando de coger desprevenido al rival.

¡Demonios negros! ¡Tenemos que acabar con ellos!— Oí decir a Aladín.
¡No, Aladín! Esto es cosa nuestra.

Spoiler: Mostrar
Sobre el color de Aladín, ahora está mucho mejor y no he de forzar la vista para poder verlo. Gracias
Imagen
Imagen
Avatar de Usuario
James Bond
28. Samurai
28. Samurai
AnimeDesign
 
Mensajes: 826
Registrado: Mié Dic 05, 2007 6:00 pm
Dinero: 200,000.00
Banco: 15,728.25
Sexo: Masculino
Clan: AnimeDesign
Estantería de objetos
Karma: 4

Re: [Agrabah] Arenas Traicioneras

Notapor Darkness Seeker » Vie Mar 14, 2014 7:12 pm

Spoiler: Mostrar


No conozco alguna otra canción de cabalgatas o desfiles, si alguien conoce alguna mejor, que me la diga please ;)


La calle principal de Agrabah se había convertido en una fiesta de gran envergadura a la llegada de los elefantes de Aladín por la ciudad. Los elefantes, las bailarinas, músicos y toda clase de invitados y espectáculos traídos de mano de Genio, daban a la ciudad una razón para que todos los curiosos se acercaran a la calle, ya fuera desde sus ventanas o desde las puertas de sus casas.

Era un verdadero espectáculo para la vista. Pequeños y grandes, pobres y medianamente ricos disfrutaban del enorme desfile y de sus vivos colores y detalles. Las bailarinas saltaban, danzaban a la par que la música y dejaban boquiabiertos a los niños y grandes ante su belleza y habilidad. Los sirvientes que nos acompañaban se dedicaban a tirar monedas de oro, para así dejar claro la riqueza de su nuevo señor, Aladdín.

Para mí era casi imposible dejar la mirada fija en un lugar concreto, pues todo me llamaba enormemente la atención y me distraían casi por completo de mi cometido. Además, me recordaban a las fiestas de mi tierra, las cuáles probablemente sería incapaz de volver a ver.

Con todo este ajetreo en mente, anduvimos un rato hasta llegar a la puerta del palacio real, donde aguardaría la amada de Aladín, Yasmin. Pero a medida que nos acercamos notamos algo extraño, la puerta estaba cerrada, y frente a ellas varias personas parecían esperarnos. Hasta que dejaron ver sus verdadera naturaleza.

Spoiler: Mostrar


¡Demonios negros! —nos avisó Aladdín—. ¡Tenemos que acabar con ellos!

¿Demnios negros? Los Sincorazón...—pensé para mis adentros—

¡No, Aladín! Esto es cosa nuestra.— Proclamó Hikaru mientras bajaba de uno de los elefantes

No había llegado a luchar antes contra ellos, pero había leído acerca de ellos. Eran demasiados peligrosos como para dejarles rondando la zona. De los siete sincorazón seis parecían flores, mientras que uno de ellos, que parecía ser el líder de la comitiva, era una especie de soldado armado con dos espadas.

Teniendo en cuenta mi poca, por no decir nula, experiencia contra los sincorazón, no podía aventurarme a luchar contra el que parecía el más fuerte de los siete, así que decidí ir a por las extrañas flores que aguardaban fijas cerca de la puerta.

Puesto que tampoco tenía idea de cómo actuaban aquellas extrañas plantas, opté por lo que más lógico me parecía en aquel momento: Tratar de acercarme por un lado para no cruzarme con el sincorazón de dos espadas y esquivar cualquier tipo de ataque que tratara de alcanzarme.

Una vez cerca, a base de llave espada y golpe de cadena trataría de acabar con aquellas criaturas, y en el caso de que lograra derrotar a aquellas flores, debería prestar atención al guerrero de dos espadas, puesto que no parecía que alguien solo pudiera contra él.
LET YOUR HEART SURRENDER BY THE DARKNESS¡

Imagen

Logros ~ Neru
Spoiler: Mostrar
Imagen
Imagen
Imagen


Awards

~ 2014 ~

Spoiler: Mostrar
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen

~ 2015 ~
Spoiler: Mostrar
Imagen
Avatar de Usuario
Darkness Seeker
34. Tahúr
34. Tahúr
 
Mensajes: 1004
Registrado: Vie Ago 16, 2013 5:18 pm
Dinero: 171,944.51
Banco: 15,730.00
Ubicación: The Realm of Darkness
Sexo: Masculino
Estantería de objetos
Karma: 7

Re: [Agrabah] Arenas Traicioneras

Notapor Tsuna » Sab Mar 15, 2014 3:40 am

¿Encarcelado? ¿Qué clase de inútil acabaría encarcelado? —Deseé en ese momento que la tierra me tragase y no dejase rastro de mí, pero no pudo ser. Bajé la vista sin saber qué decir, muerta de vergüenza

Si tú supieras…


Pensé para mis adentros, con la idea en mente de que el visir se negaría y Saito sería ejecutado. Aunque yo más por él no podía hacer. Pensaba que aquel plan saldría bien, pero estaba equivocada.

Suspiré.

>>Bien, veré si puedo hacer algo. —Dijo sorprendentemente para mi alivio, yo alcé la vista, incrédula. ¡Estaba dispuesto a ayudar!— Pero esto no entraba en el trato, deberéis darme algo más a cambio, ¿queda claro?

No me gustó nada aquel giro inesperado de la situación, pero aquel hombre tenía toda la razón. Me sentía ridícula diciendo que mi compañero había sido encarcelado, aunque no tenía otra opción. Igualmente, no pretendía llevarle la contraria, de hecho me parecía justo pagar la estupidez de Saito con algo más a cambio, a pesar de que no me hiciese ninguna gracia el cargar más problemas a los Maestros.

Por supuesto. —Afirmé con voz neutra

Yafar silbó con fuerza, provocando con ello que diese un pequeño brinco. Al instante, un guardia se acercó para escuchar al visir.

Quiero que liberéis a un joven encarcelado. ¿Cómo se llamaba ese compañero tuyo?

Saito. —Revelé su nombre sin siquiera pensarlo

>>Ya lo habéis oido. Id a por él. —Y los guardias marcharon, para mi fortuna. Con un poco de suerte, la misión no sería un fracaso— Vamos, entra. —Y me invitó a la sala de enfrente, la que no me dio buena vibraciones minutos atrás

Le seguí sin mediar palabra, esperando a que me diese todos los detalles. Me invitó a sentarme y le correspondí, con los ojos levemente irritados.

La razón por la que os he llamado es porque quiero recuperar un objeto muy valioso. Su nombre es la Lámpara Mágica. Quiero que la consigáis para mí, esa es vuestra misión. —Y por fin todo cobró sentido

Me llamó mucho la atención el nombre del objeto: Lámpara Mágica. Sin embargo, los motivos por los que el visir la deseaba, o incluso lo que fuese capaz de hacer esta, no me interesaban para nada; yo estaba allí por Bastión Hueco, si tenía que ayudar a aquel hombre, le ayudaría. Tan simple como eso.

>>Toma esto, os servirá para encontrarla. —Y me tendió en una mano una pequeña roca con aspecto de insecto. La miré con curiosidad, tocándola y palpando su tacto

En un primer momento no supe cómo me ayudaría aquella cosa a encontrar una lámpara, mi tarea se volvía a cada momento más compleja y Saito lo había empeorado todo.

Mantén la calma.


Me dije a mí misma mentalmente. Antes de poder hacer nada más, el insecto de roca cambió de dirección en mi mano, quedando fijo. Parecía señalar algo.

Alguien tiene ese objeto que me pertenece por derecho. Recuperadlo sea cual sea el precio y saldréis ganando. —Recuperar una lámpara en un enorme mundo desértico a cualquier costo. No sería fácil, pero aceptaba el reto, contaba con la ayuda del insecto de roca, el cual era idéntico a una brújula, por lo que había relatado Yafar y por el comportamiento del objeto

Y entonces, llegó el momento de actuar, de realizar el siguiente movimiento. Tenía que pensar con calma, analizar la situación.

Estuve a punto de levantarme e ir en la dirección señalada por el insecto, pero apenas tenía información sobre la persona que llevaba la lámpara, y tampoco sabía cómo era. ¿Y si me hacía accidentalmente con una lámpara falsa? Tenía también que esperar a Saito, y se me ocurrió la mejor manera para ganar tiempo e información.

Entonces, entregarle esa Lámpara Mágica a usted. No le quepa duda que lo lograré, sin embargo, agradecería que me diese un poco más de información: ¿Cómo es esa Lámpara? ¿Color, forma, tamaño…? —Pregunté, intentando mostrarme convencida y segura de lo que hacía. Una vez hubiese respondido, continuaría— Y sobre esa persona que posee la Lámpara, ¿sabe cómo se llama? ¿Algún dato que pueda usar a mi favor y en su contra? ¿Se le ocurre algo? —Esperé con paciencia a todo lo que tuviese que decir— No hay nada más que hablar, supongo.

Me levanté lentamente, esperando a que Saito apareciese de un momento a otro por la puerta, si no lo hacía, tendría que continuar con mi labor sola, siguiendo la pista del insecto. Oculté de nuevo mi rostro bajo la capucha, aquello me daba más posibilidades de pasar desapercibida, a pesar de sentir cierta incomodidad por la humedad que había dejado el sudor en su interior.
Avatar de Usuario
Tsuna
57. Ferrocustodio I
57. Ferrocustodio I
The Unknowns
 
Mensajes: 1680
Registrado: Mar Ene 03, 2012 5:12 am
Dinero: 691,216.48
Banco: 0.00
Ubicación: Perdida en el océano.
Sexo: Femenino
Clan: The Unknowns
Estantería de objetos
Karma: 17

Re: [Agrabah] Arenas Traicioneras

Notapor H.S Sora » Mar Mar 18, 2014 10:00 pm

Crack.

¡Eureka!

Me di la vuelta sorprendido porque mi plan hubiese tenido éxito y retrocedí invocando mi Llave Espada, a la que había estado echando de menos con todo mí ser. El tacto del mango en mis manos resultaba reconfortante después de todo lo que había estado pasando.

Vale lo primero es lo primero…

Utilicé un Cura sobre mí mismo, para sanarme un poco de la fatiga y el cansancio (además de la herida de mi costado), entonces decidí pasar al ataque. Mi enemigo era un Sincorazón hormiga, no parecía aguardar ninguna sorpresa para mí.

Me abalancé sobre mi enemigo, aunque aún no estaba en plenas condiciones, y me dediqué a darle una estocada tras otra, sin apenas descansar intentando dañarle lo máximo posible hasta que lo eliminase.

Entonces, desmaterializaría mi Llave Espada me quedaría observando como el corazón empezaba a ascender hacia el cielo, traspasando el techo de aquel calabozo. Era irónico ver este proceso cuando no hacía demasiado que había observado el proceso inverso: Como un corazón pasa a pertenecer a la oscuridad y a convertirse en un siervo de ella en forma de Sincorazón.

Bueno he dejado que varias vidas se perdiesen… al menos he podido salvar a una…—diría acercándome a los barrotes de la puerta que me mantenía preso—Veamos que tenemos aquí…

Pasé un poco mi mano, para comprobar que había un trozo de madera atrancando la puerta. Aquello dificultaba las circunstancias, con la Llave Espada podía abrir cualquier cerradura que intentase ponerse en mi camino pero si la puerta estaba atrancada necesitaba romper aquello fuese como fuese…

Ya lo tengo…—dije sonriendo para mis adentros.

Podía romper aquella madera con una Flama Tenebrosa, o con cualquier otro hechizo, lo complicado sería escapar pero ya me preocuparía de ello a su debido tiempo. Empecé a preparar una Flama Tenebrosa, pero cuando me disponía a lanzarla… me detuve.

¿Qué diablos estoy haciendo?...

Saqué mi mano de los barrotes, y retrocedí algunos pasos.

¿Acaso no le he dado suficientes problemas ya a Bastión Hueco intentando hacerme el héroe?... Si ahora me doy a la fuga seguro que solo conseguiré que me ejecuten o pondré en peligro aun más la misión…

Me senté en el suelo, mirando a la puerta.

Solo puedo esperar a que realmente Saeko intente hacer algo para salvarme… O de lo contrario tendré que ingeniármelas cuando vengan a buscarme para ajusticiarme… Pero por ahora nada de heroicidades, tengo que confiar en Saeko y mantener la calma…

Fijé la vista en el suelo y coloqué mis manos a mis espaldas, simulando que estas seguían esposadas. Si tenía que defenderme, prefería aprovecharme del factor sorpresa de parecer aun más indefenso de lo que ya era.
Imagen

Muchas grácias por el avatar Mepi ^^
H.S Sora
22. Espectro
22. Espectro
 
Mensajes: 655
Registrado: Mar Sep 25, 2012 7:43 pm
Dinero: 3,775.22
Banco: 213,774.43
Sexo: Masculino
Karma: 3

Re: [Agrabah] Arenas Traicioneras

Notapor Sombra » Sab Mar 22, 2014 7:07 am

Hikaru y Neru


En cuanto aparecieron aquellos monstruos, los aprendices actuaron rápido y no dudaron en enfrentarse a los monstruos devora corazones.

Neru corrió hacia una de las flores y la golpeó varias veces. No es que fuesen golpes muy potentes, pero el que sus enemigos no pudiesen moverse le daba mucha ventaja.

Al cuarto golpe, la criatura se desvaneció como por arte de magia, aunque Neru sabría que había ganado a la primera de las seis plantas gracias a que un precioso corazón rojo como un rubí se lanzaba hacia el cielo, lo que significaba que había sido liberado.

La planta más cercana al aprendiz se giró hacia él y sus pétalos empezaron a girar mientras la "cara" que tenía empezaba a volverse roja.

Otra más de aquellas plantas, tras varios segundos empezó a imitar a la primera de aquellas criaturas. Fuese lo que fuese, lo que iban a hacer no sería bueno.

Por otro lado, Hikaru había utilizado Libra para desvelar los secretos de su enemigo. Pero el aprendiz decidió no hacer más por algún motivo, por lo que la criatura se lanzó contra el aprendiz con la intención de clavar sus espadas en su pecho. Pero no pudo hacerlo, puesto que Aladían intervino bloqueando el ataque con su sable, el cual manejaba con bastante maestría. El sincorazón dio unos pasos hacia atrás desconcertado.

Yo también puedo luchar —aseguró el joven.

¿De verdad quería Hikaru preiscindir de la ayuda del ex-mendigo?

Spoiler: Mostrar
Datos proporcionados por Libra:

Cantidad X1
Nombre: Asesino
Raza: Sincorazón Emblema
VT: 20/20
PH: 14/14
Habilidades:

-Micro Autoéter [Nivel X] (HM) Gana 1 PH al principio de cada ronda.
-Sigilo [Nivel X] (HC) El sincorazón no hace sonido al moverse por lo que puede situarse a espaldas de sus enemigos para atacarles por sorpresa sin ser notado.
- ???
- Apuñalamiento [Nivel 6] (HC) El sincorazón utiliza sus dos armas para dar tres golpes rápidos con su arma. Puede provocar Reducción de Resistencia (probabilidad baja).
- ???


Flores ??? Cantidad: 5/6

Spoiler: Mostrar
Neru:
VT: 8/8
PH: 4/4

Hikaru:
VT:32/32
PH: 13/20




Saeko


Tiene forma de lámpara de aceite de cobre —respondió—. No pudo asegurar que la tenga esa rata... Pero probablemente se trate de un joven llamado Aladín, un simple mendigo —su tono arrogante mostró gran desprecio en su descripción.

Pero por desgracia, no parecía saber mucho más de aquella persona, ni debilidades o puntos fuertes. Seguramente no se conocían demasiado, aunque algún roce habían tenido por como hablaba de él.

Saito


Sin embargo, cuando derrotó al sincorazón nada salió de él. Quizás haciendo memoria podía llegar a tener algún vago recuerdo de alguna clase en la que explicaban las dos clases de sincorazón existentes: Los Emblema, que contenían un corazón que se liberaba al derrotarlos y los Purasangre, que no liberaban nada tras ser vencidos.

No le habían explicado el por qué aquella diferencia, pero no era difícil reconocerlos ya que unos portaban el símbolo de los sincorazón —un corazón con espinas— mientras que los otros no tenían nada.

La idea de escapar fue buena y podría haber usado su habilidad para romper aquella tabla de madera que impedía que escapase, sin embargo no lo hizo.

Se sentó a esperar, y por suerte para él —o desgracia— aparecieron dos guardias que abrieron la puerta al cabo de unos minutos.

—¿Saito? —preguntó entonces uno de los guardias—. Hemos venido en nombre del visir Yafar, acompañanos.

Saito y Saeko


...Así que tu eres Saito —analizó el visir en cuanto el joven apareció por la puerta acompañado de dos guardias que se retiraron al momento—. Bien, tu compañera ya conoce de que se trata la misión, confío en que pueda informarte correctamente —les invitó a irse haciendo un gesto con su mano hacia la puerta.

Si no querían preguntar nada más, era hora de que ambos se pusiesen en marcha. Sin embargo, Saito tendría que andarse con pies de plomo en el palacio. Aquel príncipe seguía allí, en alguna parte. ¿Quién sabe que intentaría hacerle si le veía?

Spoiler: Mostrar
Kai está expulsado de la Trama dado a su desaparición sin justificar motivos de ausencia o similares.


Spoiler: Mostrar
Fecha límite: Jueves, 27-3-2014
Imagen

Imagen
Avatar de Usuario
Sombra
149. Lingering Sentiment
149. Lingering Sentiment
Bohemia Lectura
 
Mensajes: 4720
Registrado: Mar Mar 31, 2009 9:01 pm
Dinero: 27,410.40
Banco: 0.00
Ubicación: Behind in the musgo
Sexo: Mucho, gracias por preguntar
Clan: Bohemia Lectura
Estantería de objetos
Karma: 23

Re: [Agrabah] Arenas Traicioneras

Notapor Darkness Seeker » Sab Mar 22, 2014 5:45 pm

Spoiler: Mostrar


A medida que la flor que había logrado derrotar parecía consumirse por su propia oscuridad, una gema con forma de corazón comenzaba a ascender a los cielos. No tenía ni la más remota idea de que podía significar aquello en realidad, lo único que sabía con seguridad es que aquella flor no me daría más problemas. Sin embargo, quedaban otras cinco flores, y Hikaru y Aladdín estaban ocupados enfrentándose al sincorazón de las dos espadas.

Cuando volví la vista a las flores, me fijé en que varias de ellas habían empezado a girar sobre sí mismas y comenzaban a volverse de un rojo tono fuego a la vez que empezaban a mover sus “cabezas”.

Tenía la sensación de haber vivido antes algo parecido, y además no hacía mucho. Entonces me acordé:
-¡El chico de los refrescos ¡- Pensé para mí mismo mientras recordaba nuestro “desafortunado encuentro”.

Cuando mi mundo natal desapareció, aparecí en una ciudad de ladrillos y trenes, que según me dijeron después se llamaba “Villa Crepúsculo”, en la que un vendedor de refrescos bastante loco trató de acabar conmigo a base de lanzarme refrescos. También me acordé de que, cuando aquel chico me iba a atacar, se ponía rojo como un tomate y empezaba a agitar los refrescos hasta que me los tiraba.

Era consciente de que aquella flor podía actuar de una forma completamente diferente pese a que los dos “modus operandi” fueran casi idénticos, pero tenía que intentarlo solo para descartar aquella idea.

Así pues, si tal y como suponía me atacaban las flores a distancia, me haría a un lado y les arremetería con la cadena hasta estar lo suficientemente cerca como para atacarles con la llave espada. En caso de que me atacaran cuerpo a cuerpo, trataría de hacerme un lado y contraatacar después.

-Crucemos los dedos-Me dije mientras me preparaba para lo que estuviera por venir.

Spoiler: Mostrar
Sobre lo del chico de los refrescos, es parte de mi prólogo. No sé si era la mejor opción, pero teniendo en cuenta que Neru no tiene NI IDEA de sincorazones, algo tendría que hacer XD.
LET YOUR HEART SURRENDER BY THE DARKNESS¡

Imagen

Logros ~ Neru
Spoiler: Mostrar
Imagen
Imagen
Imagen


Awards

~ 2014 ~

Spoiler: Mostrar
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen

~ 2015 ~
Spoiler: Mostrar
Imagen
Avatar de Usuario
Darkness Seeker
34. Tahúr
34. Tahúr
 
Mensajes: 1004
Registrado: Vie Ago 16, 2013 5:18 pm
Dinero: 171,944.51
Banco: 15,730.00
Ubicación: The Realm of Darkness
Sexo: Masculino
Estantería de objetos
Karma: 7

Re: [Agrabah] Arenas Traicioneras

Notapor Tsuna » Mié Mar 26, 2014 1:49 pm

Tiene forma de lámpara de aceite de cobre. No pudo asegurar que la tenga esa rata… Pero probablemente se trate de un joven llamado Aladín, un simple mendigo. ―Aclaró, mostrando lo que parecía ser desprecio hacia esa persona

El visir no parecía saber nada más, pero aquella información me resultó muy útil: Aladín, aquel era su nombre, además, si se trataba de un mendigo no sería gran cosa en combate. La misión estaba resultando muy sencilla.

No hay nada más que hablar, supongo. ―Me levanté, escondiéndome detrás de mi vestimenta nuevamente

* * *


...Así que tu eres Saito ―Abrí los ojos como platos, incrédula, cuando el mayor idiota de Bastión Hueco apareció por la puerta. Suspiré, aliviada―. Bien, tu compañera ya conoce de que se trata la misión, confío en que pueda informarte correctamente. ―Tragué saliva ante su acusación. Era cierto, ahora me tocaba a mí explicar todo lo sucedido, no quería cargar con más trabajo y problemas al visir

Por mi parte no tuve nada que preguntar, ya que lo habíamos dejado todo claro en la habitación. Esperé a que Saito terminase lo que tuviera que hacer para avanzar junto a él por los pasillos, siguiendo la pista del insecto de piedra e intentando seguir su camino a través de las escaleras y pasillos del enorme palacio.

Miré a mi compañero, todavía sin creerme lo que había hecho.

Oye, Saito, ¿se puede saber qué estabas pensando cuando hiciste eso? ¿Sabes la de trabajo que me has cargado encima? Casi tiras por la borda nuestra misión, y tu vida ―Le susurré al lado, intentando que nadie más escuchase nuestra conversación―. Bueno, como sea, no vuelvas a hacer eso. Me has asustado mucho, que lo sepas. A todo esto, el visir quiere que recuperemos un objeto que le pertenece y parece estar en posesión de otra persona. Se llama Aladín, y se trata de una Lámpara Mágica de cobre ―Hice una pequeña pausa para coger aire―. Mira, esta Piedra Escarabajo indica su localización, tenemos que seguirla y hacernos con la Lámpara sin importar qué. ¿Lo has entendido?

>Y no vuelvas a hacer algo así.

Spoiler: Mostrar
Me hace gracia, porque fue hace dos días cuando derroté a Yafar en el KH 1.5 xD
Avatar de Usuario
Tsuna
57. Ferrocustodio I
57. Ferrocustodio I
The Unknowns
 
Mensajes: 1680
Registrado: Mar Ene 03, 2012 5:12 am
Dinero: 691,216.48
Banco: 0.00
Ubicación: Perdida en el océano.
Sexo: Femenino
Clan: The Unknowns
Estantería de objetos
Karma: 17

Re: [Agrabah] Arenas Traicioneras

Notapor James Bond » Mié Mar 26, 2014 5:47 pm

Nos dividimos para eliminar a los monstruos de pura oscuridad que nos habían salido al paso. La habilidad que había empleado antes me dio jugosa información sobre los enemigos, aunque solo la tuve detallada del sincorazón con dos espadas. Traté de analizar los datos que poseía, pero mientras lo hacía, mi rival se lanzó contra mi, con intenciones claras de atravesarme.

No pude reaccionar lo bastante rápido para poder bloquear su ataque, pero mi amigo Aladín logró llegar a tiempo y paró con su sable el golpe enemigo y este retrocedió.

Yo también puedo luchar— me dijo el muchacho.

Sí, podría saber luchar. Pero, si le pasaba algo sería por nuestra culpa. Además, no era tan fácil vencer a un Sincorazón. ¿Qué debía de hacer? ¿Debía dejarle que se uniera al combate?

Al final, tomé la decisión.

Muy bien, Aladín, pero no hagas ninguna tontería que pueda ponerte en peligro.

Entonces miré fijamente a mi enemigo, y con espada en mano, me lancé contra él para darle una estocada, y en el caso de que lograse detener mi golpe, emplearía el hechizo Perla delante de él.
Imagen
Imagen
Avatar de Usuario
James Bond
28. Samurai
28. Samurai
AnimeDesign
 
Mensajes: 826
Registrado: Mié Dic 05, 2007 6:00 pm
Dinero: 200,000.00
Banco: 15,728.25
Sexo: Masculino
Clan: AnimeDesign
Estantería de objetos
Karma: 4

AnteriorSiguiente

Volver a Segunda Saga

¿Quién está conectado?

Usuarios navegando por este Foro: No hay usuarios registrados visitando el Foro y 1 invitado

cron