[Monstruo] Viaje al centro de la ballena

Trama de Fykhjaal H'Gaajk y Aru Petrikov + Saito y Malik

La aparente traición de Tierra de Partida en un acuerdo de paz provocó el anuncio de la guerra por parte de Bastión Hueco. Los aprendices deben enfrentarse entre sí, entre antiguos amigos y compañeros. ¿Cómo lograrán sobrevivir cuando otras amenazas acechan?

Moderadores: Suzume Mizuno, Denna, Astro, Sombra

Re: [Monstruo] Viaje al centro de la ballena

Notapor Tanis » Lun Oct 06, 2014 10:45 pm

Malik frunció ligeramente el ceño. León era desconfiado, no dudaba de ello, y tampoco le extrañaba, jamás habría esperado que de repente asintiera y sonriera, pero... No le gustaba su modo de amenazarle, existían maneras. Tragó saliva, y su nuez casi rozó el filo de la espada del joven. Asah agitó furiosamente las alas y revoloteó hasta colocarse sobre a cabeza de su dueño, lanzando una iracunda mirada en realidad nada amenazante a León. Malik siseó, lo último que quería era entablar un enfrentamiento.

¡Espera, León, reconozco a esa criaturita! Es la mascota de uno de los aprendices que conocimos en Bastión Hueco.

¿Qué? —musitó Malik, desconcertado ante la repentina revelación de Aeris.

¿Estás segura, Aeris?

Lo estoy.

El repentino destello de luz hizo parpadear a Malik. No parecía haber empezado con buen pie la misión, pero bueno, al menos los había encontrado.

Tranquilo —Le aseguró a León, con cierto retintín y acritud.

Perdona nuestra reacción —miró a la chica entonces, algo más suave—. La situación de la ciudad es bastante mala y León se toma muy en serio su seguridad.

Malik asintió. Lo comprendía perfectamente, aunque había sido su cuello el que casi habían seccionado sin compasión.

No importa, en serio.

Has venido por la misión de rescate, ¿verdad? Ven, acompáñanos.

Malik atrapó al vuelo a Asah entonces, quien se había separado de él de repente. La conejita pretendía echarse encima de León, con afán de venganza, al ver que ahora estaba desarmado. Por fortuna, él consiguió sujetarla antes de seguir con algo de reticencia a Aeris y a León.

Allí, donde se había separado de sus compañeros, se encontró con que Fyk estaba enzarzado en una pequeña pelea con un moguri cargado con una mochila considerable. Y con que Aru ya no estaba...

¿Fyk? ¿Dónde está... ?

Sin embargo no logró completar la pregunta, porque nada más reunirse en aquel punto con el grupo entero, León, Aeris y el moguri procedieron a explicar a grandes rasgos, un poco más minuciosos que los de Lyn, el objetivo de la misión. Dos de sus camaradas, llamados Cid y Yufie, estaban junto con la carga de provisiones y medicinas dentro de Monstruo y su cometido era, naturalmente, sacarlos de allí.

No podemos irnos con esta situación, y tampoco hemos encontrado voluntarios que quieran juntarse con vosotros, así que sólo os podrá acompañar Mogear —Mantuvo sujeta a Asah mientras León estuviera cerca. La mascota no paraba de revolverse, aunque sin demasiada fuerza—. Es un gran piloto y experto en tecnología gumi, él os indicará qué hacer cuando encontréis la nave.

De acuerdo.

Tomad esto, es posible que Yuffie y Cid puedan necesitarlas. Por favor, volved todos sanos y salvos —Malik miró de reojo a Fyk y convino procedente el custodiar él mismo las pociones, de modo que se acercó a la muchacha y las tomó de sus manos, para guardarlas—. ¿Tenéis alguna pregunta?

¿Algo que debamos saber sobre el interior de la ballena? —aprovechó Malik para preguntar, sólo por si acaso.

No sabía a qué tenían que atenerse realmente.

Tened cuidado.

¿Listos? ¡Pues vamos allá, kupó!

Malik caminó junto al moguri y contempló la nave gumi, pequeña en comparación a la única que ya había visto y dejó suelta a Asah por el interior, para que se acomodara a su gusto. La conejita no tardó en quedarse posada sobre uno de los aparatos de Mogear, sin saber si era adecuado o no, o no importándole. Malik procuró no tocar nada, antes de sentarse y pensar que gracias a Dios, prefería que la ballena le tragara estando en una nave que montado en el glider.

Se despidió brevemente de Aeris y León, a pesar de que este último tan sólo observaba la partida con su cara de palo seco.

«Os devolveremos a vuestros amigos, y la carga, no os preocupéis.»

Contuvo el aliento al despegar, y recogió a una un poco asustada Asah en el regazo, para que se tranquilizara. Entonces recordó a Aru, y volvió a preguntarse dónde se habría metido...
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Re: Ronda #4 - Viaje al centro de la ballena

Notapor Final Fan » Mar Oct 07, 2014 6:39 am

¡Hola, Aeris! ¡León! —exclamé, un tanto falto de aire—. Perdonad la falta de formalidades, es que tengo la cabeza en donde no debería.

Literalmente. Podía notar cómo, con un poco más de presión, el mochilón de Mogear podría romperme el cuello con facilidad. No pude disimular mi alivio cuando al fin estuve de pie de nuevo. Hacía mucho tiempo que no veía a los dos habitantes de Ciudad de Paso, sobre todo a León, pero aun así la situación no era la idónea para un reencuentro demasiado largo. Aun así, tuve tiempo para encogerme de hombros ante la pregunta de Malik y señalar la tienda de accesorios. Seguramente se habría entretenido dentro con alguna compra.

No podemos irnos con esta situación, y tampoco hemos encontrado voluntarios que quieran juntarse con vosotros, así que sólo os podrá acompañar Mogear. Es un gran piloto y experto en tecnología gumi, él os indicará qué hacer cuando encontréis la nave.

"Espero que en su nave se maneje mejor que en tierra", pensé, dedicándole una sonrisa que pretendía ocultar lo que estaba pensando.

Acto seguido, Aeris nos ofreció dos pociones que, según ella, podrían hacerles falta a sus dos compañeros, que habían sido tragados junto con el cargamento de su nave por la ballena a la que nos dirigíamos. Malik, ni corto ni perezoso, si agenció las dos botellas.

Creo que sería mejor que, um —empecé, señalando las botellas durante la transacción—... quiero decir, que ya que son dos, pues que eso. Que una para cada uno. Si se puede. Digo yo. Más eficiente.

Esperé a ver qué decía Malik de la proposición, pero no había tiempo para andarse con muchos rodeos. En poco tiempo ya nos encontrábamos rumbo a Monstruo dentro de la nave gumi de Mogear. Al menos se le veía entusiasmado.

Pasaron unos cuantos minutos antes de que me diese cuenta de que Aru no había subido con nosotros a la nave. Al volver a Tierra de Partida le esperaba una buena regañina por parte de Lyn al líder asignado del grupo.
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Ronda #5 - Viaje al centro de la ballena

Notapor Astro » Mié Oct 08, 2014 12:07 am

Fyk y Malik

¿Algo que debamos saber sobre el interior de la ballena?

León y Aeris intercambiaron miradas nerviosas antes de responder.

Sabemos poco de ese sitio.

Hay gente que ha conseguido salir, pero no demasiada —añadió Aeris, cabizbaja—. Tened mucho cuidado, y procurad estar lo menos posible.

Manteneos alerta.

No pudieron decirles más. La K-27 les esperaba.

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Saito — Vientre #1

Lo que el aprendiz de Bastión Hueco se encontró al internarse fue una zona pequeña, cuyo suelo y paredes parecían estar hechos de un material blando con muchas formas y colores. Si se paraba mucho quieto, incluso notaría que había zonas que se movían e incluso salía aire de ellas. Normal, estaba dentro de una ballena. Más adelante había dos nuevas salidas, dos caminos a elegir en el caso de querer seguir continuando.

Pero seguramente Saito no tendría mucho tiempo de admirar la decoración. Porque allí se encontró con una sorpresita: tres sincorazón Soldado y dos Rapsodia Azul estaban en mitad del vientre, girando alrededor de lo que parecía ser una silueta humana. Desgracidamente, desde su posición el aprendiz no podría determinar con seguridad de quién se trataba. Pero humano era, seguro.

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Una de las Rapsodias se percató de la presencia de Saito, y sin dudarlo disparó un Hielo contra él, que podría esquivar con facilidad.

Situación: se había encontrado con sincorazón nada más llegar, que parecían estar atacando a alguien y de paso a él. Y encima, por un vistazo rápido, no había ni rastro del loro, ni de Shinju (¿o sería ella la que estaba siendo atacada?).

¿Qué haras, Saito?

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Fyk y Malik

¿Una palabra para definir a Mogear al volante? Psicópata.

Malik y Fyk lo descubrieron por las malas. Si no se habían puesto el cinturón de seguridad antes de que la K-27 despegara, se arrepintieron enseguida. El moguri conducía como loco, poniendo la nave a máxima velocidad y haciendo piruetas casi imposibles con ella. Casi lo peor era que mientras lo hacía, no paraba de gritar como un histérico, disfrutando de la experiencia. Los aprendices también podrían disfrutarla, aunque no sería raro que alguno acabara vomitando.

Llegar hasta Monstruo fue sencillo, sobre todo a esa velocidad. El frenazo que metió la nave al plantarse frente a la cabeza del gigantesco ser haría que más de uno de los pasajeros acabara dándose un golpe con el asiento de delante.

Anda, qué raro, kupó —comentó Mogear, completamente ajeno al posible estado de los aprendices que tenía detrás—. Parece como si la ballena estuviese herida, kupó...

Si miraban por las ventanas, podrían ver a qué se refería. Uno de los ojos de Monstruo estaba muy irritado, casi completamente rojo, y el inmenso animal parecía emitir pequeños lamentos de dolor. ¿Quién habría sido capaz de cometer semejante crueldad...?

¡¡Está abriendo la boca, ahora, kupó!! —chilló de pronto el pequeño piloto, fijándose en que la boca se abría aprovechando un gemido de la criatura.

Y aceleró una vez más a máxima potencia, directos hacia el interior del animal.

Pero algo pasó. Ninguno de los tripulantes pudo saber muy bien qué ocurrió, pero por el movimiento de la nave parecía que algo había chocado contra ellos a la vez que entraban en la boca. La K-27 dio un par de vueltas de campana antes de tocar tierra y estabilizarse. Aunque más que tierra, era carne: al menos habían conseguido entrar en la boca.

Malik y Fyk tendrían alguna magulladura, ambos podían considerarse afortunados de estar enteros. Mogear, por su parte, se quejaba de un feo chichón que le había salido en la frente, pero tampoco parecía haber salido herido del accidente.

Cuando salieran de la nave, descubrirían el mismo escenario al que Saito había llegado minutos antes. Con una diferencia: en el extremo contrario de la boca donde estaban ellos, una pequeña nave gumi roja, uniplaza, y bastante moderna estaba medio sumergida en el agua. De sus motores, salía humo.

Habían entrado en Monstruo. ¿Ahora qué harían?

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De momento las pociones cuento que Malik tiene las dos, podéis poneros de acuerdo durante el viaje en la nave (antes de llegar a Monstruo) si queréis compartirlas o no.

Fecha límite: domingo 12 de octubre.
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Re: [Monstruo] Viaje al centro de la ballena

Notapor H.S Sora » Dom Oct 12, 2014 9:23 pm

Nada más adentrarme en el interior de la ballena, supe que no me había equivocado en absoluto escogiendo aquel camino. Jamás había visto un lugar tan comprimido como aquel, y lo que no no comprendía era como a pesar de encontrarme en el interior de una criatura – y más concretamente, en su estómago – un lugar así podía ser tan bello y demostrar tanta “vida”, por irónico que pudiese parecer.

Al dar un par de pasos me quedé prácticamente embobado observando el suelo y las paredes, las cuales tenían una mezcla de colores que hacían de aquella especie de... ¿habitación? O mejor dicho, de cavidad, un lugar hermoso, como si de una obra de arte se tratase. Traté de encontrar algún patrón en los colores y las figuras que se formaban, pero de pronto todo empezó moverse ligeramente a mi alrededor.

¿Un t-terremoto?...

Me relajé un poco al ver que mis sospechas de alguna clase de terremoto quedarán descartadas al fijarme como solo algunas zonas escogidas aparentemente al azar, eran las culpables del movimiento, e incluso desprendían un poco de aire; pero si se suponía que estaba en un estómago o cerca de él, no podía esperar nada menos que aquello. Había una bifurcación más adelante que daba a dos caminos diferentes, por lo que esperaba que antes de tener que decidirme, pudiese encontrar alguna pista del paradero de Lolo o la cosa se complicaría.

Aunque a decir verdad el loro había dejado de importarme bastante, sobretodo teniendo en cuenta que lo que me había llevado a adentrarme hasta el interior de aquel lugar, habían sido los sollozos misteriosos que provenían de algún lugar del estómago.

Avancé con decisión un par de pasos pensando de dónde podían provenir los llantos en cuestión, cuando por fin me percaté de que no estaba solo. En absoluto.

¿Acaso nos seguís a todas partes o qué?

Frente a mí se encontraba un buen puñado de Sincorazón, de aquello no cabía duda; habían 3 Sincorazones Soldados y dos especies de “hechiceros” azules ,que había visto alguna que otra vez. Lo raro de la escena es que no me estaban prestando la más mínima atención a mí, es más, parecían concentrados en otra cosa, o mejor dicho, otra persona. Maldije mi posición y la de los Sincorazón dado que la de estos últimos no me permitía ver con exactitud si se trataba de algún humano conocido o no, pero por lo menos tenía una ligera certeza de que lo que estaba siendo atacado era humano.

Mis últimas experiencias con alienígenas no habían sido demasiado buenas, así que no tenía más remedio que confiar en que su objetivo fuese alguien con 2 piernas, 2 brazos, 2 ojos , 1 cabeza y 0 tentáculos. De no ser así, quizá acabaría metido en un lío, en uno más gordo si podía ser.

Habrá que ayudarlo quiera o no... no me puedo quedar de brazos cruzados de todas formas.

Fue entonces cuando me di cuenta como uno de aquellos hechiceros azules se había dado cuenta de que yo estaba allí – ya era hora – y sin pensárselo demasiado me lanzó una magia de tipo hielo, probablemente del nivel más básico que hubiese.

Me moví rápidamente hacia mi derecha, mientras esquivaba la pequeña magia y aprovechaba para invocar mi Llave Espada, la cual alcé en dirección hacia la pequeña criatura mientras echaba a correr en dirección a ella.

Ahora es mi turno de atacar.

Cuando me hube acercado lo suficiente, pegué un buen salto tratando así de poder colocarme a su altura. Si lo conseguía lo golpearía con todas mis fuerzas para enviarlo al suelo y proporcionarle un buen choque que esperaba que lo eliminase. Si con aquello no había sido suficiente – o mi salto no había llegado a donde me proponía y no llegaba a alcanzarle – le lanzaría un Electro que esperaba que terminase con el Sincorazón.

Si por mi desgracia no lograba acabar con él ni por aquellas, no dudaría en acercarme rápidamente para golpearle con la Llave Espada y eliminarlo.

Si por el contrario lograba acabar con él, me dirigiría lo más rápido posible al Soldado más cercano y tras lanzarle un Perla, le daría varias estocadas esperando que fuese suficiente para eliminarle.

Tras aquello retrocedería en dirección a la entrada por la que acababa de llegar y estaría preparado con mi Llave Espada para defenderme de los ataques que pudiese recibir o si era necesario, rodar para evitarlos.

La suerte estaba ya echada, y era el momento para ver a quién le sonreía más en aquella batalla: a los Sincorazón, o a mí.
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Muchas grácias por el avatar Mepi ^^
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Re: [Monstruo] Viaje al centro de la ballena

Notapor Final Fan » Dom Oct 12, 2014 9:45 pm

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Tanis, si Malik le da una de las pociones a Fyk ponlo en tu post, please!


Nos acaba de tragar una ballena enferma, ¿verdad?

Al menos era un buen resumen de lo que acababa de ocurrir. En un principio pensé que la conducción temeraria de Mogear había sido el principal desencadenante de aquel aterrizaje forzoso, pero entonces recordé el impacto que sacudió la nave poco antes del accidente... Fuese como fuese, me alegraba ver que no habíamos aterrizado en un mar de jugos gástricos y que aquel sitio era más o menos habitable.

Otro acontecimiento a agradecer era que, al menos, nuestra nave no había acabado tan mal como aquella otra que nos encontramos accidentada dentro de la ballena. Sin embargo, al recordar de quién debía ser y lo que contenía, sí que me permití preocuparme.

¡Oh, no! ¡El cargamento!

Corrí hacia la nave medio sumergida y busqué un modo de acceder a ella para buscar a sus tripulantes y lo que cargaba. Si no encontrábamos a los amigos de León y Aeris tocaría buscarlos un poco más a fondo, pero si era el cargamento lo que faltaba era muy probable que ya no pudiésemos recuperarlo.

¡Ayudadme, ayudadme! —les pedí a mis compañeros.
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Re: [Monstruo] Viaje al centro de la ballena

Notapor Tanis » Mar Oct 14, 2014 11:02 pm

Nos acaba de tragar una ballena enferma, ¿verdad?

Sí, eso parece —comentó en respuesta, justo antes de pensar en darle una de las pociones que Aeris les había entregado, sólo por si acaso.

Era la primera vez que sentía un miedo tan atroz a tener un accidente aéreo desde que se uniera a la Orden. La manera de conducir de aquel moguri tenía que estar prohibida en algún sitio, de eso estaba seguro. Malik no tuvo demasiado tiempo de ver la ballena gigante desde fuera, salvo las indicaciones de Mogear sobre su ojo irritado. Estaba ocupado sujetando a Asah para que no saliera volando por la nave, aterrorizada, y apenas si se enteró de que entraron por la boca hasta que no que demasiado tarde.

Muy demasiado tarde.

Al salir de la nave se encontró con que pisaba carne, carne de la ballena, lo cual no le pareció raro, pero si un poco... asqueroso. Soltó a Asah, que revoloteó hasta posarse en su hombro.

¡Oh, no! ¡El cargamento!

Malik giró la cabeza para mirar a su compañero, descubriendo que había echado a correr hacia una nave siniestrada, no muy lejos de ellos, que estaba medio hundida en aua. Malik no dudó ens eguirlo, al ver la nave.

¡Espera, Fyk!

¡Ayudadme, ayudadme!

Espera —repitió, al llegar hasta él. Había frenado casi en seco al llegar junto al accidente medio sumergido—. ¿Asah?, ¿crees que podrías buscar alguna entrada? Hay que ir con cuidado, la nave podría... hundirse más.

La conejita emitió un dulce ruidito chirriante, y alzó el vuelo por sobre la nave roja, buscando alguna abertura, a alguien, alguna ventana, algo, cualquier cosa que les pudiera servir para entrar y acceder al vehículo, o averiguar algo de los desaparecidos tripulantes..
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Ronda #6 - Viaje al centro de la ballena

Notapor Astro » Mié Oct 15, 2014 12:30 am

Saito — Vientre #1

Saito tuvo que recurrir al Electro para rematar a la Rapsodia Azul, que se desvaneció cuando el rayo le impactó. Misma suerte corrió el Soldado que estaba más cerca de Saito: un Perla y varios golpes con la llave sirvieron para que se desvaneciera en humo negro y liberase el corazón.

El resto, sorprendentemente, desaparecieron en pequeños portales oscuros, tal vez temerosos de la llave de Saito. O tal vez no. Fuese como fuese, dejaban al aprendiz plena vista de la persona que estaba acurrucada en el suelo, temblando de miedo y emitiendo pequeños sollozos.

Una niña.

¿S-se han ido ya los monstruos? —preguntó de pronto, sacando la cabeza de entre los brazos.

En ese momento, Saito pudo verle mejor la cara. Pelo negro, largo, y unos ojos de un bonito color azul (de los que ahora caían lágrimas). Vestía con un sencillo vestido rosa y unos zapatitos rojos. No debería tener más de siete u ocho años.

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En su mano derecha tenía un objeto, aferrado con fuerza para que no se le cayera: una pluma blanca. Igual que la que el joven había encontrado en la cápsula del barco.

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Fyk & Malik — Boca

Los dos aprendices corrieron a auxiliar a la nave roja, mientras que Mogear por su parte luchaba por intentar salir de la suya propia cargado con el mochilón de siempre. Por supuesto, no lo tenía nada fácil.

Pero Fyk, Malik y Asah no tuvieron que buscar demasiado una entrada a la nave. Apenas habían empezado cuando el cristal que cubría el asiento del conductor se abrió de golpe, y de dentro salió una criatura saltando a toda velocidad. Y fue a aterrizar a la cara de Fyk, quien se había acercado el que más.

Poco duró ahí: de un nuevo salto aterrizó en la parte seca de la zona en la que estaban (bastante cerca de los dientes, por cierto, aunque por ahora seguían cerrados). Entonces, pudieron verle. Un ser pequeño, vestido con un mono naranja, con pelaje azul, cuatro brazos y dos antenas.

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Parecía muy nervioso, se movía en todas direcciones inspeccionando el terreno y cada vez que el "agua" (¿seguro que era agua?) se acercaba a la orilla se aseguraba de que no le tocara. Fijó su mirada primero en Malik, luego en su mascota y por último en Fyk.

Y habló:

¿Gaba?

Habían encontrado un misterioso ser, aunque ni rastro de los dos que habían ido a buscar. Pues si volvían a mirar en la nave roja, no encontrarían a nadie ni a nada más: era uniplaza, y se podía ver el asiento vacío. Y ni siquiera tenía sitio para colocar carga de ningún tipo.

¿Qué harían?


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Re: [Monstruo] Viaje al centro de la ballena

Notapor Tanis » Dom Oct 19, 2014 8:28 pm

La repentina abertura de la cabina de la nave asustó a la conejita, que casi saltó en vuelo picado para refugiarse en los brazos de Malik. Este también retrocedió unos pasos, temeroso, sobre todo cuando vio a la pequeña criatura azul que salió de la nave roja, aterrizando sobre la cara y cabeza de Fyk.

¿Qué demonios? —musitó.

Observó el ir y venir nervioso de aquella cosa por los alrededores de la nave siniestrada en la boca de la ballena. No entendía qué hacía allí, ni qué era exactamente. ¿Era uno de esos... aliens como lo era Fyk? Le costaba aún pensar en que existieran cosas no humanas, pero... bueno, después de todo cada Mundo era eso, un mundo. No se acercó mucho a él por si acaso, fijándose en lo poco que parecía gustarle acercarse al agua, si es que eso era agua.

¿Primo tuyo, Fyk? —preguntó mezclando un tono de broma con otro un poco más curioso.

Se tensó cuando el ser les miró, uno a uno, aunque sí se aguantó las ganas de seguir retrocediendo. No les había atacado aunque no podía descartar que fuera peligroso. ¿Y si escupía ácido o algo así?

¿Gaba?

Malik miró a Fyk, sin saber exactamente qué hacer. Suponía que debían buscar la nave perdida de verdad, y no entretenerse con otro pobre intergaláctico extraviado que no conocían.

¿Fyk? ¿Qué hacemos? Esta no es la nave que nos dijeron. Y esta... cosa... ¿Puedes hablar con ella? ¿Nos la llevamos por si acaso?

Asah seguía temblando en sus brazos, por alguna razón no le gustaba esa criatura azul. Suspiró, mirando hacia el interior de la ballena. ¿Dónde estaría la nave que buscaban?
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Re: [Monstruo] Viaje al centro de la ballena

Notapor Final Fan » Lun Oct 20, 2014 6:28 pm

¡Ay, ay, ay!

Lo que me esperaba encontrar dentro de la nave eran dos personas un tanto desesperadas protegiendo un cargamento a punto de hundirse en saliva o lo que fuese aquel líquido. Sin embargo, la cosa que salió del vehículo no parecía estar protegiendo nada precisamente. Más bien al contrario, ensañándose con mi cara. ¿Por qué todo el mundo se me abalanzaba de esa forma últimamente? ¡Ya tenía suficiente con Mogear y su mochila!

¡Toraj-mo dolai en! —exclamé, alterado tras el inesperado ataque.

Me sacudí a aquella cosa de mi cara y desenfundé mi escudete casi desesperadamente al darme cuenta de que mi asaltante podría ser un sincorazón... y lo tenía sobre mi cabeza. Podría haber muerto en un abrir y cerrar de ojos. Cuando la criatura se alejó al fin casi suspiro de alivio, pero me reprimí para no bajar la guardia. Al fin y al cabo, no sabíamos qué era aquella cosa. Era azul y tenía orejas, eso sí que podíamos decirlo.

¿Primo tuyo, Fyk?

Miré a Malik, confuso, perdiendo la postura de ataque, y le señalé con un dedo acusador.

Eso es racista —contesté, aunque la situación no era de las que te permitían indignarte por esas cosas.

¿Gaba?

Volví la vista de nuevo hacia el ser azul, sin saber a qué se refería. Parecía muy nervioso y no parecía tener intención de atacarnos. Volví a enfundar mi escudo para que mi aspecto no resultase amenazante (¡ja!) e intenté pensar en qué estaba ocurriendo. Observé al pequeño ser, su indumentaria, y por último la nave roja que había estrellado dentro de la ballena. ¿Dónde había visto yo naves así...?

¿Fyk? ¿Qué hacemos? Esta no es la nave que nos dijeron. Y esta... cosa... ¿Puedes hablar con ella? ¿Nos la llevamos por si acaso?

¡Te digo que eso es racis...!

De repente, recordé en dónde había visto transportes iguales a aquél. Era igualito a los que usaban las autoridades del Transporte Penitenciario Durgon en sus misiones de busca y captura. La criatura venía de Espacio Profundo.

Oh —musité, un tanto sonrojado. A ver si íbamos a ser primos de verdad—. Intentaré comunicarme. Con él, digo. Esta lengua es común en Espacio Profundo. Eh... Mientras tanto Mogear y tú buscad por los alrededores, um... algún signo de otro accidente. Por favor. Está claro que este no es el que buscamos.

No quería ser demasiado asertivo, pero si me habían asignado como líder de aquella misión tenía que empezar a actuar como tal o mi papel acabaría reduciéndose a ser atacado por criaturas peludas. Sin acercarme a la que nos ocupaba ahora, me senté en el suelo para ponerme a su nivel y resultar lo más amigable posible.

Ohai —empecé, sin saber muy bien qué decir—. ¿Hovaj he'sabrokhjo? Fais siroioj. ¿Hovaj yihja jaa en kah? ¿Jaa troioj?*

Todavía no quería mencionar qué hacía con una nave de Espacio Profundo, ya que no parecía que fuese miembro de la milicia de Durgon o Turo. Pero en fin, uno no se puede dejar engañar por las apariencias.

*
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Re: Ronda #6 - Viaje al centro de la ballena

Notapor H.S Sora » Lun Oct 20, 2014 10:41 pm

Arf...

Suspiré algo cansado tras eliminar a aquellos dos Sincorazón, los cuales me habían hecho recurrir incluso a las magias de que disponía. Pero para bien o para mal, aún quedaban unos cuantos por vencer; un calentamiento era un calentamiento, se mirase por donde se mirase.

Entonces me llevé una desagradable sorpresa: los Sincorazón restantes empezaron a desaparecer uno por uno a través de portales oscuros, dejándome completamente solo.

No hay quien entienda a estos bichos...

Fue entonces cuando me acordé del motivo que me había llevado hasta allí dentro, y de que precisamente no me encontraba solo. Me acerqué lentamente hacia el lugar donde había estado todo aquel grupo de monstruos apenas unos instantes atrás, y observé a una figura menuda acurrucada sobre el suelo —¿aquello era realmente un suelo o era alguna clase de cavidad de la ballena?

No es más que una niña... ¿cómo ha acabado aquí dentro?...

¿S-se han ido ya los monstruos? —dijo súbitamente, sacando su pequeña cabecita de entre sus temblorosos brazos.

Con aquello, pude verla mejor: una chica que no tendría ni diez años, la cual vestía de rosa y que además de tener la misma tonalidad de pelo que la mía, poseía unos preciosos ojos azules como el mar y de los cuales no dejaban de caer lágrimas: era imposible que no me diese un mínimo de pena o lástima.

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Me acerqué a ella y me arrodillé para situarme más o menos a su altura:

Ya se han ido, no te preocupes, no volverán —dije sonriendo mientras me acercaba un poco— . Estás a salvo, de verdad.

Le di un par de segundos por si tenía alguna reacción o cosa que decir, y entonces añadí:

>>Yo me llamo Saito, ¿tu como te llamas? —dije sonriendo mientras le tendía una mano en señal de amistad— ¿Sabes como has acabado aquí? ¿Estabas con algún familiar o algo?...

Fue entonces cuando no pude evitar fijarme en sus pequeñas manos: en la izquierda no parecía tener nada, pero la derecha estaba siendo apretada con mucho vigor. Al fijarme mejor, no pude evitar ver que lo que sujetaba era exactamente igual a la pluma que me había guardado apenas unos minutos atrás; una hermosa pluma blanca que pertenecía al lorito Lolo.

Así que has pasado por aquí...

Tras que la chica respondiese a mis preguntas — o no — trataría de sacar el tema del pájaro.

Oye, ¿has visto a un pájaro pasar por aquí hace un rato? Es que lo estoy buscando y pensé que quizá tu podrías ayudarme... —le sonreiría— ¿Quieres venir conmigo a buscarle? Mientras estés conmigo, no dejaré que esos monstruos te molesten de nuevo.

Esperaría a ver si de aquella manera, conseguía una compañera de misión mucho más útil y adorable que Shinju.
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Ronda #7 - Viaje al centro de la ballena

Notapor Astro » Jue Oct 23, 2014 7:44 pm

Malik & Fyk — Boca

El extraño ser reaccionó de forma violenta a las palabras de Fyk. De quién-sabe-dónde sacó cuatro pequeños blasters naranjas, una en cada mano, y apuntó con ellos al aprendiz mientras le gritaba en su idioma. Malik, más atrás, seguramente no entendería nada, mientras que Fyk podía captar que le indicaba que no se acercara a él de muy malas maneras. Insultos y palabras malsonantes incluidas.

Por suerte, no disparó. Al menos hasta que Mogear apareció en escena.

Capto la señal de la nave de Cid, parece estar aquí cerca, kupó... —El patoso moguri había conseguido sacar su mochila gigante de la nave, y se acercaba a los demás con la vista clavada en un aparto que tenía entre las manos—. Seguramente esté...

No siguió hablando, pues en ese momento había levantado la vista y contemplaba la peculiar escena de los aprendices y la criatura de los cuatro brazos. Por cómo abrió los ojos, pareció reconocerla.

¡A-alejaos de él, kupó! ¡Es el experimento 626, un...!

El disparo de un blaster, que consiguió esquivar por los pelos de su pompón, evitó que terminara la frase. Pero el ahora nombrado como experimento no se quedó ahí: disparó los otros tres blasters, apuntando con cada uno a los otros tres presentes: Fyk, Malik y el conejito Asah.

A toda prisa, la abominación azul dio un gran salto hasta subirse a una de las plataformas de madera que había en la boca, huyendo a toda prisa hacia el interior de Monstruo. Si le seguían por la mirada, verían que se movía con rapidez y agilidad, demasiada comparada con la de ellos como para poder alcanzarle.

¡Es un fugitivo de la Federación Galáctica, kupó! —anunció Mogear, tirando en el suelo y haciendo esfuerzos para levantarse. Otra vez—. ¡Escapó hace poco y es considerado como muy peligroso, kupó!

Así estaban las cosas. 626 se alejaba hacia las profundidades de Monstruo, concretamente por un agujero en la parte superior de la boca. Si querían seguirle, tendrían que escalar las plataformas y recurrir, al menos una vez, a Doble salto para poder llegar hasta tan arriba.

Por otra parte, su misión era distinta. La nave perdida y los dos tripulantes les esperaban en alguna parte de la ballena, y parecía que el moguri piloto había detectado algo.

¿Perseguir al experimento 626 o quedarse con Mogear? Tal vez cada uno optaba por algo diferente...

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Opciones:
> Perseguir a 626, en cuyo caso necesitaréis usar Doble salto para poder hacerlo. O también otra habilidad que os eleve lo suficiente, pero corréis el riesgo de que nos diga nanai y os deje en tierra.
> Quedaros con Mogear en busca de la nave y los dos desaparecidos.
> ¡Una sorprendente tercera e innovadora tercera opción de vuestra cosecha!

Podéis separaros o seguir juntos, a vuestro gusto.

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Saito — Vientre #1

¡No me toques, baboso!

La reacción de la niña cuando Saito se acercó a ella y le ofreció la mano fue la mar de curiosa. Se levantó con rapidez alejándose de él, alisándose el vestido y secándose las lágrimas de los ojos a toda prisa. Parecía que no le gustaba que la vieran llorar.

Mi nombre es Shinju —se presentó al fin, todavía manteniendo la distancia con el joven.

Sí, Saito había escuchado bien. Se llamaba Shinju.

¡Estoy buscando a mi loro! ¿Lo has visto? —levantó la mano en la que tenía agarrada la pluma, enseñándosela—. Es de este color, y se llama Lolo. No le encuentro...

Un abrumador rugido, proveniente de las profundidades de Monstruo, hizo que soltará un grito por el susto y se acercara a toda prisa hasta el chico, escondiéndose tras él. Se agarró a su brazo con fuerza, visiblemente asustada.

Pero, en ese momento, algo extraño sucedió alrededor de Saito. Fue cosa de dos o tres segundos, y durante ese instante le pareció estar en un lugar completamente distinto. ¿Que dónde? En lo que parecía un antiguo parque de atracciones. Una noria, una montaña rusa, el ruido de las risas de los niños que pasaban corriendo a su lado...

Pero, cuando parpadeó, volvía a estar donde debía: en el vientre de una ballena espacial gigante.

Saito todavía estaría intentando comprender lo que había visto cuando el sonido de un graznido de pájaro se escuchó. Venía de la misma dirección por donde había venido el primer rugido, y no parecía estar demasiado lejos.

¡¡Lolo!! —gritó la niña Shinju, soltándose de Saito y echando a correr en esa dirección.

La pequeña estaba entrando por el agujero más cercano hacia otro vientre. ¿Saito la seguiría? Puede que sí, puede que no. Dependía de él.


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Re: Ronda #7 - Viaje al centro de la ballena

Notapor H.S Sora » Mié Oct 29, 2014 12:51 am

¡No me toques, baboso!

¿Cómo?...

Me quedé de piedra al comprobar aquella reacción tan grotesca por parte de una niña que en un principio me había parecido tan mona y dulce. ¿Acaso me había equivocado con aquella pequeña?

Confirmé aquellas sospechas cuando en vez de aceptar mi mano — la cual le había ofrecido con toda la buena fe que tenía — se levantó y alejó todo lo que pudo de mí, mientras alisaba su bonito vestido y se frotaba los ojos secándose así las lágrimas que apenas unos instantes atrás, habían brotado sin cesar. ¿Acaso creía que no veía lo que estaba haciendo?

Suspiré, pensando que quizá la chica simplemente estuviese nerviosa por encontrarse con un desconocido en medio de toda aquella extraña situación, lo cual era bastante comprensible si de paso se había topado con unas criaturas como los Sincorazón. Yo mismo estaba algo “aterrado” en mi primer encuentro contra ellos, no podía culparla por estar arisca y asustada de todo.

Vamos a probar otra vez...

Mi nombre es Shinju —dijo de pronto, a pesar de que seguía tan alejada de mí como podía. Un comienzo era un comienzo...

Espera, ¿qué? ¿Shinju?...

Tenía que ser una casualidad, una simple y llana casualidad de aquellas que la vida a veces nos ofrece para que nos podamos reír a carcajadas durante unos minutos... O era eso, o realmente había muchas cosas que no encajaban, en absoluto. ¿Coincidencia de nombres, hermanas separadas al nacer o mentir a un desconocido sin tener motivo alguno? No sabía cual de las posibilidades me asustaba más.

¡Estoy buscando a mi loro! ¿Lo has visto? —levantó aquella pequeña mano que tenía, enseñándome la pluma que ya había visto que la pequeña “Shinju” portaba con anterioridad—. Es de este color, y se llama Lolo. No le encuentro...

Vamos no me jodas... ¿Eres Shinju de verdad?

Fue entonces cuando todo aquello quedó en segundo plano, pues como si una ola impactase con todas sus fuerzas contra una roca, un extraño rugido resonó por todo el lugar con una fiereza alarmante. Ni tan siquiera sabía que era, pero el instinto de supervivencia que había ido adquiriendo a lo largo del tiempo, se activó diciéndome que algo debía estar sucediendo. ¿El qué? No lo sabía, pero lo que estaba claro era que fuese lo que fuese, provenía del interior de la gran ballena espacial.

Me llevé la agradable sorpresa de notar como la pequeña se había intentado resguardar de aquello tan sobrecogedor en mí. Se encontraba aferrada a mi brazo con toda la fuerza que una niña de su edad podría tener, y era más que claro que se encontraba muy asustada. En el fondo, no parecía ser una maleducada o grosera, tan solo parecía tener miedo.

Aun hay cosas que debemos aclarar de todas formas.

Me disponía a tratar de preguntarle el cómo había llegado allí, cuando una extraña sensación me invadió de arriba a abajo. No era posible de describir, tan solo era como si la atmósfera hubiese cambiado de pronto. Pero no fue lo único que cambió, pues por lo visto yo ya no me encontraba dentro de la ballena.

Parecía que me encontrase en un gran y antiguo parque, dónde había una gran rueda cuya función desconocía por completo. ¿Era aquello uno de los parques de “atracciones” sobre los que había oído hablar? En Ciudad de Halloween no teníamos nada parecido, por lo que tan solo conocía información gracias a los libros, los cuales en ocasiones hacían referencias a ello.

A pesar de lo antiguo que aparentaba ser el lugar, me imponía cierto respeto y emoción el contemplarlo tan de cerca...

Jajajajaja.

Jijijijiji.

Parpadeé un instante tras oír lo que me había sonado como un par de risas infantiles, pero allí no había nada. Ni parque, ni rueda gigante, ni niños... seguía dentro de la ballena, tal y como cabía esperar logicamente. ¿Qué diantres había sido todo aquello? Esperaba no estar alucinando por haber inhalado alguna sustancia que no fuese saludable para mi cuerpo y que aquel ser se dedicase a expulsar por algún motivo.

Un sonido mucho menos espectacular que el que había removido todo el lugar se escuchó, provinente de la misma dirección en que creía haber escuchado aquella especie de rugido. Parecía un sonido animal común, ¿podría ser Lolo que trataba de comunicarse por fin?

¡¡Lolo!! —confirmó la pequeña niña, la cual me negaba a creer que fuese la misma Shinju que yo conocía.

Esta se soltó de mi brazo antes de que me diese tiempo a siquiera protestar, y corrió en la dirección del sonido de su supuesto pájaro... ¿Podía fiarme de algo tan básico como mi sentido de la oída si el de la vista ya me había fallado con aquella alucinación?

No tenía muchas más opciones, ya que la chica no me dio tiempo a que pudiese pensármelo dos veces, y ella ya estaba entrando por un agujero hacia lo que sería otro lugar dentro de Monstruo. ¿Podía dejar a una niña sola, y más si decía ser Shinju y había pistas del paradero de Lolo de por medio? Por supuesto que no, tanto si tenía mi sentido activo como sino, tenía que seguirla.

Por lo que me acerqué al agujero lo más rápido que pude y me adentré en él — agachándome si era necesario — persiguiendo a la misteriosa “Shinju”.

Muchas preguntas rondaban por mi mente mientras entraba, pero la que más resonaba en el medio de aquel caos y confusión era:

¿Realmente eres tú, Shinju?
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Re: [Monstruo] Viaje al centro de la ballena

Notapor Tanis » Jue Oct 30, 2014 12:06 am

Malik se echó para atrás instintivamente en cuanto vio aparecer las pistolas, vaya uno a saber de dónde. Apretó a una temblorosa Asah contra su pecho, no sabiendo exactamente que rayos y demonios decía la pequeña criatura azul, aunque por el tono... se imaginaba que nada bueno.

Fyk... —llamó no muy seguro, echándose más pasos atrás.

Casi estaba seguro de que iban a lograr librarse de que ese bicho les dispara hasta que apareció el moguri piloto. Malik giró la cabeza para mirarle, y frunció el ceño. No paraban de acumularse los problemas, y para colmo tenían a ese pseudo pariente alienígena de su compañero de fatigas en medio. Los avisos de Mogear no ayudaron a suavizar la situación y Malik tan sólo tuvo tiempo de volver a girar la cabeza para mirar al supuesto experimento, despacio, casi a cámara lenta, a tiempo de ver cómo la criatura disparaba contra Mogear y apuntaba contra ellos. Asah entonces tuvo un repentino ataque de temeridad y quiso perseguir al experimento 626, aunque Malik tuvo tino al atraparla de nuevo.

Con impotencia, ya que en su cabeza sólo resonaban las palabras «peligro» y «misión», contempló la huida del dichoso ser, acercándose al moguri sin intención de echar a correr tras 626. Ayudó al moguri a levantarse, pensando que si era tan peligroso... a lo mejor debían ir con más cuidado al rescatar a los tripulantes desaparecidos, por si se lo cruzaban otra vez. Pero no sabía qué querría hacer Fyk.

¿Fyk? —llamó, esta vez menos asustado, pero sí serio—. ¿Vas a querer ir tras él, o algo... ? No me importa, ya sabes, ir yo a por la nave perdida... Si es un fugitivo alguien tendrá que capturarlo para devolvérselo a la Federación.

No sabía mucho de ese organismo, sólo lo básico, leído en libros y él pensaba, por supuesto, encontrar a los amigos de León y Aeris, pero imaginaba que a lo mejor Fyk querría ocuparse de seguir a 626, a pesar de ser un fugitivo peligroso. Consideraba lógico que de hacerlo uno de los dos, debía ser el pequeño alien, ya que era más veterano y fuerte. Malik dejó libre a Asah, que revoloteó muy digna y ufana a su alrededor hasta posarse en su cabeza, mirando en la dirección en la que se había ido 626.

Nrrr...

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Me quedo con Mogear en busca de la nave perdida ~
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Re: [Monstruo] Viaje al centro de la ballena

Notapor Final Fan » Jue Oct 30, 2014 1:13 am

¡Mogear! ¡Serenidad! ¡Por favor!

Exclamé, gesticulando vehementemente con las manos al ver cómo la criatura se escapaba de allí como una exhalación. Bajé los brazos, frustrado, y suspiré. No quería echarle aquello en cara a Mogear, ya bastante ansioso se le veía.

Vale, no pasa nada. ¿Podemos contactar con alguien desde la nave? De la Federación, digo. Para que sepan que está aquí el fugitivo. Si la Federación lo busca también es un asunto que nos compete a los Portadores, pero ya tenemos una misión y sólo somos tres...

Me dispuse a volver a entrar en la nave para verificar si el sistema de comunicación seguía funcional y no se había estropeado con el aparatoso accidente. Antes de llegar a ella, Malik, que se había quedado un tanto paralizado ante la situación de la cosita azul pistolera, propuso algo:

¿Fyk? ¿Vas a querer ir tras él, o algo... ? No me importa, ya sabes, ir yo a por la nave perdida... Si es un fugitivo alguien tendrá que capturarlo para devolvérselo a la Federación.

Ladeé la cabeza, sopesando las palabras de mi compañero.

Prefiero confirmar la prioridad de la misión —respondí—. Intentaré comunicarme con la Federación y que ellos me den instrucciones. No me parece buena idea actuar por nuestra cuenta.

Me encogí de hombros y me volví de nuevo hacia la K-27.

¡Podéis adelantaros, si queréis! —dije, una vez ya dentro y delante de la consola de la nave—. ¡Os alcanzaré en un momento si mandan a otro equipo para capturar al fugitivo!
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Ronda #8 - Viaje al centro de la ballena

Notapor Astro » Vie Oct 31, 2014 7:33 pm

Saito — ¿Vientre #3?

El efecto de cruzar de un vientre a otro fue inmediato. En un segundo, Saito ya no se encontraba en el interior de una ballena. Había vuelto al parque de atracciones, el mismo que había visto segundos atrás durante un momento. Pero esta vez era diferente.

Era más real.

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A diferencia de antes, no desapareció cuando el aprendiz parpadeó. En su lugar, pudo comprobar de primera mano cómo varios niños de unos ocho-diez años de edad pasaban a su lado, corriendo entre risas, directos hacia las atracciones.

¿Lo más raro? Que, aunque tardaría un poco en darse cuenta, Saito mismo había cambiado. Ya no era un muchacho de dieciséis años, no señor. De alguna manera, su cuerpo había vuelto a tener el aspecto que tenía cuando era un niño. Debía de tener la misma edad que los otros que habían pasado a su lado. ¡Incluso su ropa había cambiado!

No había rastro ni de la pequeña Shinju, ni de Lolo, ni ruido alguno que demostrase que seguía dentro de un estómago. Simplemente, se oían los ruidos típicos de un parque de atracciones.

¡Venga, vamos a montarnos! —alguien cogió de la mano a Saito, tirando de él hacia delante—. ¡Mamá nos ha dado permiso!

Se trataba de una niña de su misma edad (bueno, la edad que él tenía en ese momento), de pelo negro corto y grandes ojos castaños. Vestía con una cinta en la frente y sus ropas no parecían pegar mucho con el ambiente de ese lugar. Pero sonreía, e insistía en que el aprendiz fuese con ella hacia las atracciones.

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Por raro que pareciera, Saito descubriría que unas inmensas ganas de jugar y divertirse en aquel parque de atracciones le inundaban. La misión, Shinju, Lolo, la ballena... Todas esas ideas se disipaban en su mente, y lo único en lo que parecía poder pensar era en pasárselo pipa allí.

Algo raro ocurría. ¿Podría Saito darse cuenta...?

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Malik & Fyk — Boca

¡Kupopó, ¿estáis bien?! —preguntó Mogear, una vez de pie gracias a la ayuda de Malik, comprobando el estado de los aprendices.

Recibir el disparo del blaster no había sido agradable para ninguno de los tres (mascota incluida), pero sobrevivirían.

Sin intención de perseguir al fugitivo 626, el equipo de rescate se puso manos a la obra. La idea de contactar con la Federación para consultar fue bien recibida por el moguri piloto, pero el pequeño aprendiz no contaba con que la nave que buscaban no estaba demasiado lejos.

Al menos, en teoría.

Según el radar de Mogear, la nave se encontraba en lo más profundo de la boca, hundida en el agua/saliva. Y le tocó a Malik sumergirse ahí para buscarla y atar los cables con los que remolcarla, mientras los demás comprobaban el estado de la radio para intentar enviar el mensaje.

Y allí estaba. Malik no tuvo que nadar demasiado para encontrarla (la boca tampoco era tan profunda, lo suficiente como para ocultarla a simple vista). No le fue complicado enganchar los cables del sistema de remolque de la K-27 con los que conseguir sacarla de ahí.

Por su parte, Fyk y Mogear no tuvieron tanta suerte. Según el moguri, la radio funcionaba bien, no estaba estropeada, pero... No había señal alguna. Ni ellos escuchaban ninguna frecuencia, ni podían enviar mensajes. Menudo chasco. Hasta que, en uno de los últimos intentos...

Fykhjaal...

Fue un leve susurro entre las interferencias, y uno casi podría decir que se lo había inventado. Pero, para Fyk, aquella voz había sido la de su madre. Llamándole.

Con la nave perdida remolcada, no hubo tiempo para seguir prestando atención a la radio. Además, Mogear no parecía haber escuchado nada.

Las malas noticias llegaron cuando piloto y aprendices entraron en la nave. Estaba bastante estropeada, y necesitaría unos arreglos para que pudiera despegar (nada grave, según el moguri). La mercancía estaba empapada, pero intacta. Sólo faltaban...

No están, kupó —sentenció Mogear, bajando la cabeza—. Y si no están aquí...

No terminó la frase. Se limitó a levantar el brazo y señalar la entrada a las entrañas de Monstruo. El mensaje era obvio.

Qué hacer ahora, dependía de Fyk y Malik.

Spoiler: Mostrar
"Pero el ahora nombrado como experimento no se quedó ahí: disparó los otros tres blasters, apuntando con cada uno a los otros tres presentes: Fyk, Malik y el conejito Asah."

¡Ninguno ha hecho mención alguna de esquivar el disparo! Cuidad esos detalles, que acabáis de perder VIT por no añadir una frase xD

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Fyk
VIT: 27/32
PH: 30/30

Malik
VIT: 27/32
PH: 22/22

Asah
VIT: 3/8
PH: 8/8



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Fecha límite: miércoles 5 de noviembre.
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