por Soul Artist » Dom Mar 22, 2009 6:24 pm
En episodios anteriores…
-Estás bromeando –se contestó a sí mismo Narrador-. Tienes que hacerlo.
-Sabes que no lo hago. Pero mira qué bien me vienes, necesitaba a alguien que me ayudara a hacer este trabajo.
[center]Episodio 1x07[/center]
Tilan se acercó al todoterreno más grande, de color negro y ruedas enormes, y observó su interior. Techo abierto, airbags, y el cartel de la oferta aseguraba que el aire acondicionado funcionaba. Habían ido a un concesionario de coches de segunda mano al aire libre para comprar un 4x4 que se pudiese mover con facilidad por el desierto, y aquel era perfecto para aquella situación.
-Me llevo éste –indicó al vendedor.
-¡Muy buena elección, señor! –Señaló con una sonrisa-. Éste 4x4 es perfecto para desiertos y está en perfecto estado, casi de primera mano. Si me acompaña para llevar a cabo los trámites…
Tilan siguió con la mirada al vendedor, y caminó tras él con paso normal. Se detuvo al lado de Narrador y le dedicó una sonrisa.
-Espera aquí –le ordenó-. Y no mires al coche que hay a tu izquierda.
Tilan se alejó, detrás del vendedor, y el joven se dedicó a esperar. Pasaron más o menos quince minutos hasta que Narrador giró la cabeza, harto de esperar; ni rastro de Tilan. Observó el coche a su izquierda y se mordió la mano, intentando ahogar un grito: la palabra “extra” venía con una s en un cartel naranja fosforito del coche. Miró a los dos lados, asegurándose de que no hubiese nadie cerca, y sacó un rotulador negro de su bandolera. Se acercó al cartel donde venía la oferta y remarcó una x encima de la s.
-Así mucho mejor –susurró con una sonrisa.
Giró la cabeza y vio otro coche con el mismo error. Agarró con fuerza el rotulador, enfadado, y se acercó a él para corregir el error. Tras hacerlo, se secó la frente y miró a su derecha. Se quedó horrorizado ante lo que veía: todos los coches en oferta venían con la palabra “estra”.
-Me cago en los concesionarios de segunda mano… -susurró, casi doblando el rotulador de la ira.
Se acercó al primer coche que pudo y arregló la falta ortográfica. Suspiró y se dirigió al siguiente, para corregir su error, cuando, sin previo aviso, un muchacho impactó, lanzado desde lejos, sobre el parabrisas del coche que acababa de corregir.
Narrador se quedó quieto en su sitio. El chico había llegado volando desde el otro lado de la calle y casi se lo llevaba a él. Se giró, le dirigió un vistazo y el muchacho se llevó una mano a la cabeza, confuso. El coche presentaba múltiples daños debido al choque, empezando por el parabrisas, que tenía una fisura tremenda. Cuando por fin pudo reaccionar, se acercó a él.
-¿Estás bien? –preguntó, aún asustado por el suceso.
-Creo que sí… -contestó el muchacho-. Yo… Me ha atacado…
Narrador miró por encima de los coches al otro lado de la calle, pero estaba llena de gente. No encontraba a nadie con un aspecto sospechoso.
-¿Quién te ha atacado? –preguntó, mientras el chico se levantaba y bajaba del capó del coche.
-El encapuchado… -respondió-. Un encapuchado vestido de negro…
Narrador buscó un emo encapuchado entre la multitud, pero no encontraba a tal.
-Yo no veo ningún encapucha… ¡¡Ahh!!
Se había girado hacia el chico, y en su camino había un encapuchado que ocultaba su cara entre las sombras. Llevaba un traje bastante hortera, gris oscuro, y una cremallera recorría todo el traje. Para colmo, unos guantes y botas negras acompañaban el traje, volviéndole oscuro y con un tonto misterioso. El desconocido cogió a Narrador por la camisa y lo lanzó hacia otro coche, a diez metros de allí. Se acercó al muchacho y le agarró por la ropa.
-Tú te vienes conmigo –ordenó, con una voz ronca y bruta.
-No…
-¡¡Te vienes conmigo!!
El rugido de un motor enorme se puso en marcha, y cuando el encapuchado giró la cabeza a su izquierda, fue atropellado por un 4x4, soltando al joven al acto. La puerta se abrió y Tilan le hizo un gesto al muchacho, indicándole que subiera.
-Compro mi nuevo coche y ya empiezan los problemas –se quejó-. ¡Vamos! ¡Sube de una vez!
Con un segundo de duda, el chico subió y se puso en los asientos traseros. Cerró la puerta y Tilan se puso en marcha. Narrador estaba de pie encima del coche al que le habían lanzado, preparado para que su compañero le recogiera. Til pasó completamente de él, y el joven se asustó cuando vio que no frenaba para recogerlo. Saltó al coche automáticamente, intentando entrar a su interior, pero se quedó colgando en la ventanilla.
-¡¡Paraparaparaparapara!! –suplicó, mientras intentaba subir sus pies a cualquier cosa. Tilan se detuvo y Narrador saltó al interior.
-Ponte el cinturón de seguridad –ordenó el conductor mientras ponía en marcha el coche.
Narrador negó con la cabeza y se lo puso, obediente.
-¿Estás bien? –preguntó al chico, el cual parecía asustado.
-Sí, lo estoy –contestó-. Iba caminando por la calle cuando ese loco me atacó. Ha sido muy repentino…
-¿Cómo te llamas? –interrogó Tilan, mientras giraba el volante para acabar en otra fila de coches interminable.
-C-Creo que Sora –contestó.
-No es por nada, pero nuestro amigo el encapuchado ha desparecido –señaló Narrador, ignorando al chico y mirando por el retrovisor-. Cinco platines a que sabes qué o quién era.
-Es un Unknown –explicó Til, mientras giraba el volante para salir de allí-. Pertenece a un Clan de Cazadores de Corazones que se dedica a investigar gilipolleces del corazón. Tienen más fuerza y resistencia que un humano normal, pero están obligados a trabajar para sus superiores por el resto de su vida.
-¿Qué quiere de mí? –preguntó el joven, mirando a los lados.
-Eso me lo tendrás que decir tú, chaval.
Ya casi habían salido del concesionario cuando el encapuchado saltó del cielo sobre el capó del coche. Tilan giró el volante lo máximo posible mientras Narrador gritaba como un histérico de la sorpresa, girando el coche en noventa grados y tirándole a la carretera. Cuando su compañero paró de gritar, arrancó y comenzó a correr entre los coches de la ciudad.
-¡Loco! –Gritó un conductor cuando el coche le pasó por al lado, a toda velocidad-. ¡Nos vas a matar a todos!
El encapuchado se colocó en la puerta del coche del conductor y se quedó mirándole.
-Sal del coche –ordenó.
-¿Qué coño dices? Vete a la mie…
El encapuchado le golpeó con el puño a través de la ventanilla, abrió la puerta y, tirando el hombre al suelo, se metió en el coche. Arrancó, lo puso en primera y, saltándose un semáforo, comenzó a correr por la ciudad.
Narrador se agarraba a su bandolera con fuerza mientras Tilan esquivaba coches en marcha, sin ni siquiera rozarlos.
-¿¡Hace falta que vayas tan rápido!? –preguntó, histérico-. ¡¡Le hemos perdido de vista!!
A través del retrovisor, Til observó que un coche le estaba persiguiendo, esquivando el tráfico con maestría. Hizo una mueca y pisó más el acelerador.
-Aún no nos hemos librado de él.
Se saltó un semáforo en ámbar y el otro coche desapareció un momento de vista con el tráfico de peatones que cruzaban el paso de cebra, para aparecer de nuevo a través de una especie de túnel oscuro, con un salto. Narrador se quedó boquiabierto con aquel truco de magia, y negó con la cabeza.
-¡Yo también quiero aprender a hacer eso! –gritó-. ¿Dónde tengo que firmar para unirme a ese clan?
El encapuchado salió de la ventanilla con una mano al aire y agarró unas sombras, formando un puño envuelto en oscuridad, que lanzó al todoterreno. Se pegaron a la matrícula y comenzaron a ascender, dirección al interior del coche.
-¡Iván, encárgate tú!
Narrador hizo una mueca y se agarró con más fuerza al esquivar a un coche en marcha, asustado.
-¿¡Tengo que hacerlo!?
-¡Hazlo o te echo por la puerta!
Se pasó una mano por el pelo, asustado, y se mordió el labio inferior. Soltó el cinturón de seguridad y saltó al asiento trasero, junto con el muchacho. Dejó su bandolera allí y sacó de ella una cuchilla, de cuarenta centímetros de largo más o menos, cubierta con una fina capa de hielo aparentemente muy frío y una especie de anillo grande por el que introdujo el brazo, formando así un brazo-cuchilla. Observó un momento a Sora, y sonrió.
-¿Te gusta? –Preguntó, señalando la cuchilla, mientras se quitaba las gafas y sacaba unas especiales con una cinta de goma, que se colocó detrás del pelo-. Está recubierta por hielo de Shiva, chaval. Tan sólo un centímetro de grosor, pero lo suficiente como para…
-¡Deja de fardar y haz tu trabajo! –ordenó Til, furioso. Narrador hizo una mueca.
-Te odio –susurró, mientras pasaba al techo del maletero.
-¡Intenta no rayarme el coche! –pidió el conductor.
El techo del maletero era, para su suerte, plano. Perfecto para colocarse de pie en él, sin más molestias que el viento. Buscó por el coche lo que había lanzado el encapuchado, y vio que las sombras seguían avanzando, pegadas al suelo. Con la cuchilla de su mano derecha, las cortó por la mitad sin apenas rayar el automóvil y respiró tranquilo.
-¡Ya está! –gritó, ilusionado-. ¡No ha sido tan difícil!
Las sombras se convirtieron en un bicho de 1’80 metros de alto y ojos amarillos, con garras y una especie de trenzas caídas en la cabeza. Narrador hizo una mueca.
-¡Uooo, oooh! ¿¡Qué coño es esto!?
-¡Es un Sincorazón! –Reconoció inmediatamente el joven-. ¡Uno muy grande!
-¡¡Yo no debería enfrentarme a esto!! –Gritó Narrador, mientras se ponía en posición-. ¡No soy un Cazador de Corazones!
Unas luces rojas y azules se reflejaron en el retrovisor de Tilan, y éste dijo una palabrota. Lo que le faltaba, la policía en un momento como aquel.
-¡Al habla la policía! –Sonó un altavoz-. ¡Deténganse de inmediato!
El coche del encapuchado, que estaba a su izquierda, embistió a la patrulla y lo dejó fuera de la carretera, volcándolo con otro coche civil.
-No va a ser tan fácil –susurró Tilan.
¡En el próximo episodio…!
-Concéntrate… -susurró para sí mismo-. Concéntrate…
¡No os perdáis el próximo episodio![center]- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -[/center]
Este capítulo era más corto originalmente, pero para mejorarlo, pues se ha “alargado” un poco de la corrección, sabiendo que el 1x03 fue un desastre por el contenido de acción. No os cortéis con las críticas, ¿demasiada acción desenfrenada o no? Yari, sé que puedo confiar en tu crítica.
Por cierto, Yari, no tiene que ver con este FanFiction, pero tenía una duda... ¿Se puede continuar un FanFiction que se dejó hará un año, o se consideraría necroposting? Porque tenía la intención de retomar uno antes o después, pero dudo sobre si se puede o no. Como tiene un año...
Axelpower, siento lo de tu ropa xD Lo cierto es que no se me ocurría NADA, ya que no quiero que todos cistan con la misma ropa.
Perri, sobre los moderadores... No puedo contestar, pero como en esta vida, hay de todo.
Babass, me alegro de que te guste. Cuantos más lectores felices, mejor =D
Última edición por
Soul Artist el Dom Mar 22, 2009 8:38 pm, editado 4 veces en total