La Princesa y el Sirviente - Cuento, relato, historia, etc.

¿Eres un artista y te gusta dibujar o escribir? Entra aquí y comparte tus dibujos / historias con nosotros.

La Princesa y el Sirviente - Cuento, relato, historia, etc.

Notapor Zee » Mar Abr 13, 2010 3:53 am

Pensé que era una soberana mierda. Pensé que me la iban a meter entera. ¿Y qué pasó? Actualmente estoy concursando en un concurso nacional (desgraciadamente, sólo a nivel de mi escuela, aunque si hay bastantitos campus en mi país). ¡Dios me comió la polla entera, qué emoción! =DDD
Y sí, para los que la conozcan y noten "ciertas semejanzas", el cuento está basado en las dos canciones bien conocidas de los Vocaloids Kagamine Rin y Kagamine Len: Daughter of the Evil y Servant of the Evil (las cuales recomiendo muchísimo, al igual que las demás canciones de la misma saga. Son preciosas y llegan al corazón. Claro, tendréis que buscar la versión subtitulada, porque están en japonés xD). Por supuesto, sólo la idea general fue tomada de allí, profundizando un pelín más en los personajes (lógicamente no mucho, pues es un simple cuento) y agregando algunos extra (además de que los dos protagonistas de este cuento no son gemelos xD).
Así que, no. En mi opinión, no es ningún plagio.

Pues eso, disfrutad (:



La Princesa y el Sirviente


Hace mucho tiempo, tanto que ya nadie lo puede recordar, existió un pequeño reino, el País del Salmón. A su gobernante, una joven y bellísima princesa, no le importaba el bienestar del reino; sólo se preocupaba por sus propios deseos: Un magnífico castillo en la punta de la montaña, decenas de caballos de raza pura, y cientos de sirvientes preparados para obedecer sus órdenes. La joven princesa Lyn sí que era afortunada. Todo era suyo.

Sin embargo, a la población le preocupaba el hecho de no conocer a su gobernante. La princesa nunca salía ni se interesaba por el pueblo. Corrían rumores sobre un viejo hechicero que vivía en la torre del castillo, observando el reino con un inhumano desinterés; otras lenguas decían que quien gobernaba era un apuesto y fuerte príncipe, que siempre se encontraba en la guerra, defendiendo a su país. Pero que una princesa de catorce años gobernase era algo que no se le pasaba por la cabeza a nadie.

Todos los que vivían en el castillo admiraban la belleza de la princesa Lyn: Su lacio y rubio cabello estaba perfectamente peinado, y le caía hasta la cintura; tenía unos brillantes y pequeños ojos de color miel, que siempre mostraban una inquebrantable tranquilidad; y una delgada boca rosada, que esbozaba una serena sonrisa. Además, su cuerpo ya comenzaba exhibir la figura de una mujer, y resaltaba por los hermosos vestidos que siempre llevaba.

Eran éstas y muchas otras cosas las que hacían que el sirviente personal de la princesa, Arazec, estuviese perdidamente enamorado de ella. La cuidaba como si de un frágil pétalo se tratase y hacía todo lo posible para estar la mayor parte del tiempo con ella.

Arazec era ya un hombre prácticamente. A sus dieciséis años, tenía el físico de un poderoso guerrero, pero por dentro era sensible, amable y solidario. Con su cabello negro atado con una coleta, con sus ojos marrones siempre reflejando su entusiasmo y con sus fuertes brazos que solía llevar descubiertos, se ganaba los corazones de muchas de las mujeres del pueblo. Sin embargo, los ojos de Arazec sólo podían mirar a Lyn.



Tal parecía que todo estaba en buenas condiciones, pero la aparente paz del País del Salmón se vio perturbada por una seria crisis económica, causada por una sequía. La mayor parte del ganado murió debido al calor, las plantas se marchitaron antes de poder ser cosechadas y el río que pasaba por el pueblo dejó de llevar agua.

La primer reacción de la princesa Lyn fue hacer llamar a sus consejeros, para que ellos se encargaran de problema. No solía interesarse por ese tipo de cosas. Mientras no le faltara nada en el castillo, el exterior no le perturbaba en lo absoluto.

Un poco preocupado por la irresponsabilidad de la joven, Arazec le dijo una mañana:

—Princesa, ¿no crees que sería una mejor decisión que intentases solucionarlo por tu cuenta? —a pesar de estar muy por debajo de la princesa jerárquicamente, Arazec ya sabía que Lyn lo consideraba lo suficientemente importante para darle el permiso de dirigirse a ella de esa manera. Habían estado juntos desde pequeños, desde antes de que el rey muriera de una extraña enfermedad que algunos consideraron envenenamiento.

—¿Te he preguntado, acaso, cuál sería la mejor decisión? —respondió Lyn, altanera, sin levantarse de su cama, donde Arazec y otra sirvienta le habían llevado el desayuno. La alfombra, cortinas y cobijas eran de color amarillo, con bordados góticos en negro; los muebles estaban fabricados con maderas finas de colores oscuros, que brillaban con los rayos mañaneros que entraban por la ventana.

—Fiora, déjanos solos —ordenó la joven. Acto seguido, la sirvienta desapareció por la puerta—. Repito, ¿te he preguntado cuál sería la mejor opción?

—No… Alteza… —respondió Arazec, desviando la mirada hacia el suelo, apenado, a pesar de que en fondo sabía que el error había sido por parte de la princesa. Sin embargo, la amaba demasiado para hacersélo notar.

—¿¡Y bien!? —vociferó Lyn, lanzando el desayuno al suelo—. ¡Ve y llama a esos ancianos! —añadió la joven, refiriéndose a su séquito de consejeros.

—Tú eres la princesa; yo, tu fiel sirviente... —susurró el muchacho, mientras dejaba la habitación.



Después de varios días en los que los consejeros se reunían, y durante los cuales Arazec tuvo la obligación de cooperar en todo lo posible, dichos hombres llegaron a una conclusión: El reino no podría mejorar por sí mismo. Las acciones eran necesarias para sacar al país del problema en el que se encontraba sumergido, cual carreta en un charco de fango. Por lo tanto, acordaron que el País del Salmón debía hacer una alianza con otra nación.

El país vecino, el Reino de los Cerezos, era un lugar muy próspero, debido a su clima tropical. Colindante con el mar al este, la tierra era muy fértil, perfecta para agricultura y ganadería.

Los consejeros se encargaron de que el Reino de los Cerezos enviara un representante en su nombre para discutir los términos de la alianza entre ambos países. Y así fue como, días después, al País del Salmón arribó un apuesto príncipe. En los hombros de Caín, hijo único del rey, descansaba el destino de ambos reinos.

En el momento en que Caín pisó el castillo, Lyn quedó maravillada por su bien parecer. Muy pronto, los sentimientos de la princesa se vieron intensificados al llegar a conocer mejor al hombre. Aun así, la joven no podía pasar tiempo con él, debido a que las reuniones duraban casi todo el día, además de que la princesa generalmente no salía de su habitación, pues los sirvientes se esforzaban en protegerla de las consecuencias que podría conllevar la sequía. Lyn ni siquiera estaba segura de que Caín supiera que ella existía.

—Debería de hacerlo. Después de todo, soy la princesa, ¿no es así? —le decía Lyn a
Arazec, quien cuidaba de ella día y noche.

—No estaría tan seguro. A pesar de que él debería estar al corriente, no has podido salir de tu habitación en días —cabe decir que a Arazec no le agradaba la idea de que ambos nobles pasaran tanto tiempo juntos. El desconsolado joven sólo podía decirse a sí mismo “Tú eres la princesa; yo, tu fiel sirviente. No seré yo quien influya en tus decisiones”.

Después de unos cuantos días más, el País del Salmón y el Reino de los Cerezos llegaron a una alianza: El último le proporcionaría bienes al país, siempre y cuando éste se comprometiera a reponer todo en cuanto a sequía parase. Fue así como el pequeño país salió adelante.



Sin embargo, el momento de que Caín partiera había llegado. Un lujoso carruaje tirado por blancos caballos lo esperaba a la puerta del castillo durante una mañana de agosto. Tanto nobles como plebeyos salieron de sus casas para despedir al apuesto príncipe, al que todos habían apreciado durante su estadía. Lyn había pedido a los músicos de la corte que tocaran una suave y triste melodía mientras él salía de la fortaleza, subía a su carruaje y desaparecía lejos, en el horizonte. Tal como ella lo había imaginado.

Pero la alegría de la princesa se esfumó cuando Caín se acercó a su carro. La puerta se abrió lentamente, y del transporte descendió una joven que rondaría los diecisiete años. Tenía una largo y lacio cabello de color azabache, atado con un listón de color blanco. Sus rasgos eran muy estilizados y llamativos, y portaba un vestido verde tenue, con decenas de listones y bordados en color blanco. Su dulce voz cantó “Caín”, mientras se lanzaba a los brazos de éste y le daba un suave beso en los labios.

Lyn se desmoronó por dentro. El príncipe, Caín, a quien tanto quería, estaba comprometido, o incluso casado, con esa mujer. El corazón le escocía con el simple hecho de pensar que alguien como esa mujerzuela había sido capaz de conquistar a su amado Caín. Ella tenía que alejarse del príncipe, ¡tenía que irse para siempre! ¡Todo era suyo, Caín lo sería también!

—Ella... ¿De dónde viene...? —susurró la princesa. Por desgracia, fue Arazec quien la escuchó y, celoso, le respondió con un tono brusco:

—Es la hija del gobernador de la República de la Brisa. Y está comprometida con el príncipe Caín. Ambos se casaran en noviembre... —Arazec miró con odio a Caín mientras decía esto. Él, él y sólo él había vivido con Lyn desde que eran pequeños. ¿Por qué una simple cara bonita como la de Caín podía ganarse el corazón de su princesa? Lleno de ira, Arazec añadió¬—: Y seguramente serán muy felices...

Y, tal como Lyn lo había imaginado, los músicos tocaron una triste melodía mientras Caín desaparecía por el horizonte, mientras las lágrimas corrían por sus mejillas.



—Arazec... —llamó la voz de Lyn, desde el interior de la habitación. Desde el día de la partida de Caín, hacía ya una semana, la princesa se había encerrado en su habitación, abriendo la puerta solamente para recibir sus comidas. Arazec se había ofrecido voluntariamente para hacer guardia frente a la pieza, en caso de que la joven necesitase algo. El joven se sorprendió un poco al escuchar la voz de su amada venir desde su habitación, después de haber pasado una semana sin haber oído siquiera un simple gemido.

—¿Necesitas algo? —preguntó el sirviente, mientras entreabría la puerta.

—Arazec... Llama a todas las tropas y... —Lyn se interrumpió. Su voz sonaba un poco ronca, como si estuviese estado llorando. Además, se escuchaba un poco ahogada, probablemente porque la princesa se encontraba bajo las cobijas.

—¿Sí? —inquirió Arazec, preguntándose qué habría ocurrido para que Lyn se viese obligada a reunir al ejército.

—Llama a todas las tropas y... —repitió. Después de lo que pareció un momento de
reflexión, añadió, con un tono inexpresivo—: Que destruyan la República de la Brisa...

—¡Lyn! —gritó Arazec, dejando de lado el poco respeto que se le pedía— ¡N-No serías capaz!

—He dicho —dio por respuesta—. Y a ti te tengo una misión especial: Tú te encargarás... De que no quede ningún rastro de ella, la hija del gobernador... La prometida de Caín...

—¡N-No podría! —balbuceó Arazec, mientras entraba por completo a la habitación. Ésta estaba completamente destrozada: La cama estaba completamente deshecha, y las cobijas estaban por el suelo. Los libros del estante estaban rasgados y regados sobre la alfombra, mientras el estante se encontraba volcado, en el otro lado de la habitación. El ropero, donde Lyn guardaba todas sus finas prendas, estaba tirado en el suelo, con las puertecillas mirando hacia el techo. En una de las sillas que quedaban en pie, frente a un tocador con el espejo roto, estaba sentada Lyn, con la espalda hacia Arazec. La chica alzó una mano, en la cual llevaba una marchita rosa blanca, y dijo:

—Lo harás... En mi nombre —acto seguido, la joven separó los pétalos de la flor con los dedos y dejó que se precipitaran al suelo de la habitación.

—Tú... —intentó decir Arazec, pero un nudo en la garganta se lo impedía. Después de respirar y tragar saliva varias veces, continuó—: Tú eres la princesa; yo, tu fiel sirviente...



—Miles de casas fueron incendiadas... Decenas de familias fueron separadas... Cientos de personas murieron en la guerra... ¿Qué tan importante podría ser una vida menos...? —se decía Arazec, sosteniendo un puñal ensangrentado en la mano derecha, temblando—. ¿Entonces por qué estoy llorando...?

Frente a él, en el suelo, se encontraba la hija del gobernador. La sangre que empapaba tanto su vestido como el césped del bosque brillaba de una tétrica manera bajo a luz de la luna llena. Arazec había solicitado hablar con ella, en nombre del País del Salmón, horas antes de que comenzara el ataque. La llevó a una caminata por el bosque y, mientras la distraía con una conversación, la guió hasta el punto donde se encontraban. Allí, le reveló sus intenciones y, disculpándose, la apuñaló en el corazón.

—Si la princesa quiere que esta chica sea eliminada, así será... ¿Entonces por qué las lágrimas no se detienen...? Todo es por ti, mi amada princesa...



Fueron días; no, semanas, durante las cuáles la República de la Brisa estuvo sometida. Las ciudades se convirtieron en colonias, y muchos sobrevivientes fueron vendidos como esclavos, mientras el resto se ocultaba en Dios sabría dónde. Además, el País del Salmón se recuperó rápidamente, respecto a economía, gracias a los bienes que consiguió de la República.

La princesa Lyn parecía ser feliz, debido a que su único obstáculo para acercarse a Caín ya había sido eliminado. Sin embargo, su paz duró poco, pues los rebeldes comenzaron a surgir de lugares inesperados. No obstante, éstos no eran una preocupación para Lyn, pues estaba segura que los consejeros sabrían encargarse. Aún así, eran muy pocos para superar a su ejército.

Arazec, en cambio, se encontraba bastante afectado. Escuchaba ruidos y veía sombras donde no había absolutamente nada. Los monstruos de su propia mente lo acechaban durante el sueño, y le llamaban durante el día. Su misma conciencia era su tortura.

Los temores de la princesa y el sirviente se volvieron realidad una fría mañana:

—¡Lyn! ¡Princesa! —gritaba una lejana voz— ¡Despierta, Lyn! —continuaba. Lyn podía escucharle. Era muy familiar, pero parecía ahogada. No, más bien, cubierta, por los sonidos del ambiente. Juraría que escuchaba explosiones a lo lejos, y decenas de gritos simultáneos formaban un rugido aterrador.

—¡Lyn! —siguió Arazec. Esta vez, la sacudió fuertemente, despertándola al instante. La princesa, aún con la vista borrosa, pudo distinguir a su sirviente, con la preocupación reflejada en su rostro. Estaba empapado en un sudor de color negro, que había adquirido esa coloración debido al polvo —¿O era ceniza?—, y tenía varios rasguños y magulladuras que le surcaban su blanca piel.

—¿Mmm...? ¿Qué está pasando allá afuera? —preguntó Lyn, semi-inconsciente sobre lo que la rodeaba.

—Nos han traicionado, princesa— respondió Arazec rápidamente, entre jadeos—. Son las tropas del Reino de los Cerezos. Tus consejeros nos han traicionado, y no han dado el aviso.

—¿E-El Reino de... Los Cerezos? ¿Eso significa...? —balbuceó Lyn, mientras se ponía en pie, incrédula.

—Sí. Caín está con ellos. Es él quien les está comandando.

—Caín... —Lyn intentó buscar unas zapatillas para poder escapar, pero Arazec la tomó del brazo y le dijo:

—Escúchame: El ejército “ya” —hizo énfasis en ésta palabra— está dentro del castillo. Dentro de unos minutos sabrán dónde están los aposentos. Antes de que todo termine, quiero decirte una última cosa...

—Arazec... —Lyn le observó por primera vez en su vida. Parecía tan fuerte y maduro, y al mismo tiempo, preocupado por lo que pudiera pasarle. No a él, sino a ella. ¿Realmente le había pasado por alto?

—No hables. Sólo quiero que hagas algo por mí —respondió. La besó en la frente y le dijo lo que tal vez serían las últimas palabras que sería capaz de decirle.



Caín estaba sentado sobre su caballo. Por alguna razón, las tropas habían detenido su ataque.

—¿Habrán desobedecido...? ¿O...? —pensó. Alguien en aquél castillo había asesinado a su amada Lucía. No sabía quién era el culpable, pero le encontraría, fuese quien fuese.

—¡Vuestra majestad! —gritó un hombre con armadura, que venía corriendo desde el castillo.

—¿Habéis encontrado algo? —preguntó Caín, mientras le cedía su cantimplora al hombre. Éste bebió un largo trago antes de continuar:

—Gracias, señor. Y sí, señor, ya le hemos capturado. Estaba en la torre este; allí se encontraban sus aposentos. Ofreció un poco de resistencia, pero no le sirvió de nada —soltó una carcajada— ¿Retiramos las tropas?

—Perfecto. Dad la orden de retirada, ya tenemos a quien queríamos. Me encargaré de fijar el día y hora de la ejecución. Habéis hecho un buen trabajo.

Caín miró a castillo por última vez, antes de girarse. El humo salía de las ventanas, y algunos bloques caían desde los pisos más altos.

No pudo evitar recordar su estancia en lo que antes fue el amable y reconfortante castillo del País del Salmón.

El rugido de la multitud era ensordecedor. Tanto aldeanos del País del Salmón, como del Reino de los Cerezos estaban en la plaza de la capital. Seguramente también había rebeldes, pero preferían ocultar su identidad. A pesar de que todo había acabado, la hostilidad en contra del País del Salmón no les dejaba perdonarles.

En el centro de la plaza, habían construido una tarima de por lo menos dos metros de alto. Un poste se alzaba aun más, y sostenía una gruesa cuerda. Dicha cuerda bajaba hasta enroscarse en el cuello de una triste silueta

—Las tres en punto —dijo el hombre, al escuchar las campanadas de la iglesia.

La gente comenzó a gritar más fuerte “¡Matadlo, matadlo!”. Sin embargo, Arazec hizo oídos sordos.

Lo único importante era Lyn.

—¡Matadlo, matadlo!

Su princesa.

—Arazec, hijo de Arazec. Heredero de la tierra de...

No le hizo caso a la voz que había comenzado a enlistar sus crímenes. Después de todo, ya nada evitaría su muerte.

—... Por lo consiguiente, se le ha condenado a la horca. Arazec, hijo de Arazec, será ejecutado el primero de noviembre, a las tres de la tarde, en la plaza principal de...

Lyn... Lo que importaba era que la había salvado.

Y allí estaba, frente a él, llorando. La princesa llevaba puesta una larga capa que le cubría desde la cabeza hasta los pies. En sus manos tenía el listón con el que Arazec solía atarse el cabello.

La chica que alguna vez se hacía llamar princesa besó suavemente el listón y cerró sus ojos. No quería ver el momento en el que su Arazec se iría para siempre.

—Yo soy la princesa... Tú, la fugitiva —dijo Arazec, lo suficientemente bajo para que sólo ella lo escuchara.

Segundos después, la trampilla que estaba a sus pies cedió...
—You're like that coffee machine: from bean to cup, you fuck up—

~Dondequiera que el arte de la medicina es amado,
también hay un amor a la humanidad~


Imagen
Avatar de Usuario
Zee
Miembro del Hall de la Fama
Miembro del Hall de la Fama
Bohemia Lectura
 
Mensajes: 3280
Registrado: Mié Mar 04, 2009 1:37 am
Dinero: 213,288.72
Banco: 15,374.00
Ubicación: .mx
Sexo: Masculino
Clan: Bohemia Lectura
Facebook: Pregunta por MP
Estantería de objetos
Karma: 36

Re: La Princesa y el Sirviente - Cuento, relato, historia, etc.

Notapor kaori » Mar Abr 13, 2010 9:52 am

waa me gusta como hiciste esta historia, era un poco difícil de imaginar sin los gemelos XD pero esta genial me gusta como desarrollaste la historia he hiciste una propia, eso de que estas compitiendo no te entendí muy bien pero mucha suerte ^w^.
Imagen
Imagen
Imagen


Spoiler: Mostrar
mi blog
Imagen (Remodelando)
Imagen
Imagen
Imagen xor_juan.
Imagen
Imagen

╔═══╗ ♪
║███║ ♫
║ (●) ♫
╚═══╝ ♪♪
Copia y pega esto en tu firma y ayuda a los Vocaloid's a dominar el mundo
Avatar de Usuario
kaori
19. Espinas de Sombra
19. Espinas de Sombra
AnimeDesign
 
Mensajes: 540
Registrado: Lun Abr 02, 2007 7:45 am
Dinero: 149.42
Banco: 34,688.35
Ubicación: Twlight Town
Sexo: Femenino
Clan: The Unknowns
Estantería de objetos
Karma: 0

Re: La Princesa y el Sirviente - Cuento, relato, historia, etc.

Notapor Many » Mar Abr 13, 2010 9:09 pm

Genial Zero, está genial. ^^
Te deseo mucha suerte en el concurso.


Spoiler: Mostrar
ImagenImagen
ImagenImagen
Imagen - ¿2008?
http://osu.ppy.sh/stat/Satoshu-0.png
^sign Osu is dead

_Music is life_
Imagen
¡Baila agua Trapinch baila!
ImagenImagen
Imagen

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
Imagen
~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

Imagen
qué divertido es masmolar :DD (medalla hecha por Gambit que a veces furula y otras no)

Imagen
Take us away from here
Protect us from further harm
RESISTANCE!


10/11 - Imagen
Imagen - 2012
2013 - Imagen
Imagen - 2014
2015 - Imagen
:quefeto:
Avatar de Usuario
Many
73. Electricorn
73. Electricorn
The Unknowns
 
Mensajes: 2187
Registrado: Dom Mar 22, 2009 3:53 pm
Dinero: 306,620.00
Banco: 0.00
Sexo: Mucho, gracias por preguntar
Clan: The Unknowns
Tumblr: darkylight
Estantería de objetos
Karma: 7

Re: La Princesa y el Sirviente - Cuento, relato, historia, etc.

Notapor Sokana » Jue Abr 15, 2010 9:57 pm

Bueno, pues en mi opinión la narración está bien y es muy amena, pero a mi gusto sí es un plagio , no es una historia original y creo que si es un concurso a nivel nacional lo importante es que lo sea , puesto que te presentas con algo que es tuyo y ha surgido de tu propia imaginación. Aunque si decides ignorarlo , el título es un poco soso y no llama demasiado la atención , es como "La princesa y el guisante" , "La princesa cisne" "La princesa y...." , deberías cambiarlo para que logre impactar y producir curiosidad.

Suerte xD
htt[img]p://i32.tinypic.com/6joadh.jpg[/img]
[img]http://i29.tinypic.com/2me26uu.jpg[/img]
[img]http://i45.tinypic.com/2d8niix.png[/img]
[b]"Ves cosas y dices, ¿por qué? , pero yo sueño cosas que nunca fueron y digo, ¿por qué no?"[/b][i][color=#0080FF][/color][/i]
Sokana
1. Sombra
1. Sombra
 
Mensajes: 28
Registrado: Vie Jul 10, 2009 5:19 pm
Dinero: 14,769.71
Ubicación: En el Infierno.
Karma: 0

Re: La Princesa y el Sirviente - Cuento, relato, historia, etc.

Notapor Zee » Vie Abr 16, 2010 5:57 am

Sokana escribió:Bueno, pues en mi opinión la narración está bien y es muy amena, pero a mi gusto sí es un plagio , no es una historia original y creo que si es un concurso a nivel nacional lo importante es que lo sea , puesto que te presentas con algo que es tuyo y ha surgido de tu propia imaginación. Aunque si decides ignorarlo , el título es un poco soso y no llama demasiado la atención , es como "La princesa y el guisante" , "La princesa cisne" "La princesa y...." , deberías cambiarlo para que logre impactar y producir curiosidad.

Suerte xD

1.- Ya sabía que me lo reprocharían xD Sí, de hecho, la conciencia me estuvo atacando durante un tiempo. Me deshice de ella pensando que no habría ningún problema con las reglas, que la canción no tenía copyright, etc... Pero sí, durante mucho tiempo me dolió el hecho de haberme basado en una cosa ya existente.
2.- Demasiado tarde. El título, junto con todo lo demás, ya no puede ser editado xD(Sí, el foro es otra cosa, pero lo que son las primeras copias, en absoluto xD)

Gracias a los (las, en este caso) que han comentado n_n Que veo que incluso a mis colegas les vale pito... ¿¡O NO, DEATH!?

Zero sez: Cya!
—You're like that coffee machine: from bean to cup, you fuck up—

~Dondequiera que el arte de la medicina es amado,
también hay un amor a la humanidad~


Imagen
Avatar de Usuario
Zee
Miembro del Hall de la Fama
Miembro del Hall de la Fama
Bohemia Lectura
 
Mensajes: 3280
Registrado: Mié Mar 04, 2009 1:37 am
Dinero: 213,288.72
Banco: 15,374.00
Ubicación: .mx
Sexo: Masculino
Clan: Bohemia Lectura
Facebook: Pregunta por MP
Estantería de objetos
Karma: 36

Re: La Princesa y el Sirviente - Cuento, relato, historia, etc.

Notapor Sombra » Vie Abr 16, 2010 4:20 pm

Si que esta basada en la cancion de los gemelos Kaganime. Espero que hagas una segunda parte basada en "Regrat mesage"
Imagen

Imagen
Avatar de Usuario
Sombra
149. Lingering Sentiment
149. Lingering Sentiment
Bohemia Lectura
 
Mensajes: 4720
Registrado: Mar Mar 31, 2009 9:01 pm
Dinero: 27,410.40
Banco: 0.00
Ubicación: Behind in the musgo
Sexo: Mucho, gracias por preguntar
Clan: Bohemia Lectura
Estantería de objetos
Karma: 23

Re: La Princesa y el Sirviente - Cuento, relato, historia, etc.

Notapor Yuuki Kiseki » Vie May 07, 2010 7:09 pm

Yo en realidad, y lo digo por ti Sokana, no veo plagio alguno. En sí, la historia transcurre de una manera algo diferente (y más característica), y, quitando eso, no protagonizada por los gemelos. La historia es muy amena, y nos presenta personajes de cuento muy desarrollados y característicos, lo que hace darle a este cuento un gran énfasis en lo que a "gran historia" se pudiera referir.

A mi gusto, buenísimo, Zero. Sigue así.
Imagen
Scott Pilgrim contra el Mundo.

Firmas:
Spoiler: Mostrar
Imagen
Imagen

Cosmos & Chaos Dessigns:
Spoiler: Mostrar
Imagen
-Ifrit-
Imagen
-Hope Estheim-
Imagen
-Moogle-
Imagen
-Cloud Strife-

||·My hands·||

"No te recomiendo que sigas haciéndome burla o mi ira se cernirá sobre ti." xD
Avatar de Usuario
Yuuki Kiseki
19. Espinas de Sombra
19. Espinas de Sombra
 
Mensajes: 569
Registrado: Sab Feb 28, 2009 1:26 pm
Dinero: 1,813.83
Banco: 0.00
Ubicación: Supongo que en mi casa, ¿no? // Puerto de la Torre, Málaga.
Sexo: Mucho, gracias por preguntar
Clan: AnimeDesign
Estantería de objetos
Karma: 0

Re: La Princesa y el Sirviente - Cuento, relato, historia, etc.

Notapor Deray » Sab May 08, 2010 4:09 pm

*_* Me ha gustado mucho, pero me da pena por el pobre chaval, que no tiene la culpa de nada...bueno, algo sí, pero él sólo obedecía órdenes de la princesa mimada ¬¬ XDD

:bravo:
-Si me voy nadie me echará de menos
-Eso no es cierto, yo sí


"Aunque no es que los incorpóreos existamos realmente"
"Creo que paso, no podría echarle corazón, sabes? no tengo"
Deray
1. Sombra
1. Sombra
 
Mensajes: 12
Registrado: Vie Abr 30, 2010 12:04 pm
Dinero: 14,777.52
Ubicación: Bajo un cielo iluminado por tres lunas
Sexo: Moriré solo y virgen
Karma: 0

Re: La Princesa y el Sirviente - Cuento, relato, historia, etc.

Notapor Sophonax » Jue May 13, 2010 8:54 pm

Caray, no solo me ha gustado, sino que me ha impresionado. La narración se siente -y, aunque no soy precisamente un experto en esto, creo que estoy en lo cierto- más madura y el ritmo es fantástico, no decae en ningún momento. Por si fuera poco, te has currado bastante el desarrollo de los personajes, poniéndolos en situaciones que les hacen elegir para así hacerlos más complejos. No he escuchado esas canciones que dices, pero tras leer esto me han entrado ganas. En fin, me parece que este relato es uno de los mejores y más entretenidos que hay en este foro. Punto.
[center] Una obra de arte de Risoka
[img]http://i28.tinypic.com/21dnak0.png[/img]
Gracias Kiba
[img]http://i32.tinypic.com/288a5xt.png[/img]
Avatar de Usuario
Sophonax
20. Parca Pirata
20. Parca Pirata
Bohemia Lectura
 
Mensajes: 572
Registrado: Sab Ago 30, 2008 4:20 pm
Dinero: 17,672.50
Ubicación: Quinto pino
Karma: 0


Volver a Fan Place

¿Quién está conectado?

Usuarios navegando por este Foro: No hay usuarios registrados visitando el Foro y 1 invitado