La figurita, fea de cojones, estaba pensada para que al darle cuerda diera una voltereta hacia atrás, pero parece que la gente le está dando otro uso, y es que se ha descubierto que la cabeza del muñeco es increíblemente estable para colocar todo tipo de objetos y mantenerlos firmes sin importar su peso, tamaño o forma.
Al grano, os dejo con unas fotos y un vídeo de la televisión Taiwanesa que cubrió este peculiar caso:
Os podéis imaginar viendo esto, la cantidad de niños que fueron corriendo al McDonalds a comprar su happy meal...