[Tierra de Dragones] Mal de amores

[A Nerd Girl]

El hombre no dudaba en sentirse sorprendido por como ambos, Nadhia y Tandy parecían bastante tensos y preocupados.

Levantó las manos y los brazos, para mostrar que solo tenía una daga de aspecto valioso. Dio un giro y volvió a su posición.

— Tranquila chica, ni que fuera a raptarte. Déjate de sentirte atacada, sólo soy un viajero de paso, tampoco soy de por aquí como tu. Así que guardarte la idea de atacarme, ¿por qué la gente cree que soy malvado? Así que jovencita de luz, y bicho raro dejaos de estar tan atacados.

Se acercó a ambos, tranquilo, más de cerca se podía ver como que le sacaba una cabeza y media a Nadhia y como miraba a Tandy ya no parecía un peligroso hombre.

— En cuanto a tu amiga, puedo notar que estas temiendo que yo le haya hecho algo... ¿Qué habrás hecho para que se aleje de ti? Y siento decirla que parece esa chiquita que le han roto el corazón.

>> Si es así quizá sea un peligro. La gente hace locuras si se les despoja del amor—miró al suelo y murmurando dijo:—.Sólo rezo que no se vuelva loca

[EspeYuna]

—¿¡A quién llamas bicho raro, kupó!?

Agarré a Tandy por sus ropas antes de que se lanzara a por aquel hombre. Seguidamente, cuando Tandy se hubo calmado, me crucé de brazos. El asunto cada vez era más liante y las palabras del extranjero no me inspiraba confianza alguna. Es más, ¡extranjero!

—¿Que no eres de... estas tierras? —pregunté, con una ceja alzada— ¿De alguna tierra más lejana de la misma China, o...?

Dejé la pregunta en el aire. No debía sacar a la luz el secreto de los mundos si no era necesario. Quizás se refiriera a que provenía de tierras más lejanas que aquella —era mi primera vez en aquel mundo, no podía saber cuál era su extensión—, por lo que callé y seguí analizando todo lo que me estaba contando.

—Dices cosas muy raras, tan, tan.

Estaba de acuerdo con Tandy.

—Yo no le he hecho nada malo —de pronto, me empezaron a sudar las manos.

Realmente estaba preocupada por ella. Todo lo referente a su pasado, que cargara con algo así y, para colmo, haber destrozado algún atisbo de esperanza para ella. Quería encontrarla, y dejarle claro que no me iba a interponer en su camino.

Repitiéndome aquello en la cabeza, no pude evitar torcer el gesto de mis labios, en señal de que, por primera vez, se me iba a hacer difícil cumplir aquello. ¿Pero por qué? ¿Por qué me molestaba la idea de que estuviera con Xefil?

—¿Locuras...? —dije en un suave hilo de voz— Mei no se volvería loca. Es una chica que sólo necesita comprensión. Y yo no he podido explicarme bien. Quiero ayudarla.

>> Así que, con su permiso.

Pasé a su lado, con toda la calma que me fuera posible. Si aquel tío andaba suelto en las montañas y decía tales barbaridades, ahora sí que sí debía encontrar a Mei y llevarla sana y salva a Tierra de Partida.

[A Nerd Girl]

—¿Estas segura que conoces a tu amiga? Por cierto—miró a Nadhia—, no hace falta que escondas de donde eres para mi, conozco la ropa de Villa Crepúsculo desde lejos. Colores cálidos y fríos temáticamente colocados, incluso tu acento o tu aroma.

Nadhia sentiría un olor a humo, no se sabía la razón, ¿o si? Entonces pudo observar gente huyendo de la aldea y, casa ardiendo. ¿Sincorazón? No parecía existir presencia de ellos.

— Todas las rosas hermosas tienen sus espinas. Me da que ese fuego es provocado y con mucha envidia. ¿Entramos princesa?

La gente huía gritando, una pareja salía con fuego en su ropa y niños pequeños lloraban. Era un caos. ¿Sería verdad lo que dijo ese hombre? ¿Lo provocó alguien?

[EspeYuna]

Ignoraba sus palabras, cuando de repente escuché el nombre de mi mundo de origen. Me giré y Tandy se erizó como un gato a punto de arañar a una amenaza. Apreté los nudillos, en pos de invocar mi Llave-Espada, cuando noté un olor desagradable en el aire: humo. A lo lejos, escuché gritos y, asomándome un poco más, divisé fuego en la aldea.

¿¡Sincorazón!?

— Todas las rosas hermosas tienen sus espinas. Me da que ese fuego es provocado y con mucha envidia. ¿Entramos princesa?

Antes de que se acercara a mí para seguir mi camino, invoqué mi arma y el filo se quedó a escasos milímetros de su ojo visible. Contempló la amenaza de mi gesto acercando el filo de Ángel Forjado mucho más.

—Ni se te ocurra decir que esto lo ha provocado Mei —dije, con Tandy a mi hombro—. Y como vuelvas a llamarme princesa, te quedarás sin ojo.

No sería capaz de hacer tal salvajada, pero a ese tipo de gente, aquella que conocía el secreto de los mundos y decía cosas como aquella de la pequeña Mei o de cualquiera de mis compañeros, no era de mi agrado. Y no iba a permitir que jugara conmigo. Un poco de miedo en sus venas no me vendría mal.

Aunque, ¿quién decía que yo no estaba asustada? No quería creer en las palabras de aquel enigmático personaje, ni siquiera sabía si tenía algún tipo de relación con Mei. Pero de lo que estaba segura, es que tenía que darme prisa e ir en busca de la muchacha.

—Vamos, Tandy.

Salí corriendo hacia la aldea con Tandy sobrevolando los obstáculos del camino.

[A Nerd Girl]

El hombre no parecía asustado ni se sentía amenazado por Nadhia ni su ofensiva, más bien estaba tranquilo completamente sin tensión. No parecía preocuparse por su único ojo.

— Entonces si digo la verdad y es ella te haré un trato. Si no es ella la ciudad la volveré como estaba usando mi magia. Pero si yo gano tu me tendrás que ver después de esto para cobrar. Y tranquila estoy casado y tengo ya una hija. No es nada en especial sólo una ayuda...

>> Tu luz la guiará, joven luciérnaga.

Y con eso el hombre parecía esfumarse, como si fuera un mero fantasma.

***

Miré mis manos, temblando estaban. El fuego lo había hecho yo. Nunca pensé que un piro con tanta rabia y odio llegase a provocar esto. Sólo era un problema el no saber por qué me deje llevar por mi envidia y mis celos.

¿Qué dirán todos?

Miré adelante y ahí se acercaba Nadhia. Un escalofrío pasaba por mi espalda y miré mis manos. Vi a un niño siendo tragado por las llamas hace un minuto y me dolía el pensar que hice. ¿Por qué todos tienen felicidad y yo no?

—¡Alejate de mi! No deberías dejarme vivir. Yo ya no sé que quiero ni que debo querer.¡Soy como una maldita muñeca! Nunca seré nada ni nadie... ¡Déjame morir por mis propias llamas!

El fuego se fue acercando a mi. Ya casi tocaba mis pies. ¿Debería huir? Más bien creo que he de ver si a ella le importa él o sólo su orgullo. ¿Me salvará o será tan cobarde como para dejarme?

[EspeYuna]

—¿Luciérnaga?

Medité sus palabras una vez el extraño se desvaneciera en el aire. Eché hacia atrás el arma, ¿acaso había estado conversando con una especie de proyección? ¿Con una aparición? ¿Un fantasma, o espíritu? ¿Quién diablos era...?

Zarandeé la cabeza. ¡No había tiempo para ponerme a buscar el origen de aquella desagradable presencia! ¡Tenía que dar con Mei, y llevarla sana y salva a Tierra de Partida! Corrí colina abajo, con Tandy detrás. ¿Los sincorazón estaban atacando a los inocentes del poblado?

* * *

—¿Mei?

Me había quedado completamente en shock cuando entré en la aldea. Gente gritando por sus hijos, gente que se consumía en las llamas... gente que huía. Por alguna razón, y raro era en mí, busqué desesperada a Mei en vez de ayudar en lo que pudiera a los habitantes de la aldea. Y también cualquier rastro de sincorazón. Pero era extraño, no encontraba indicios de aquellos monstruos, y habiendo invocado la Llave-Espada tardaban demasiado en acudir a luchar contra su enemiga. ¿Y si Mei les atraía...? Pensé que sería lo más lógico, si estaba asustada, su miedo le estaría atrayendo como una manada de lobos hambrientos.

Pero encontrármela armada con su Llave-Espada inhalada en el filo por una humareda negra, con un rostro demacrado observando su alrededor y aterrada por mi presencia, paré en seco. ¿Acaso ella... había incendiado la aldea?

—¡Alejate de mi! No deberías dejarme vivir. Yo ya no sé que quiero ni que debo querer.¡Soy como una maldita muñeca! Nunca seré nada ni nadie... ¡Déjame morir por mis propias llamas!

Pero no salí huyendo.

—¡¡Nadhia, kupó!!

Salté entre las llamas y abracé a Mei, apartándola antes de que el fuego llegara a sus pies. Ambas caímos a una zona menos peligrosa.

—¿¡Nadhia!? —el pequeño moguri se acercó a las dos y observó las heridas de su protegida— ¡Necesito cantarte enseguida, tan, tan!

—¡No, primero tienes que ayudar con el incendio! ¡Usa magia para apagar, aunque sea con Aero! —tosí por el humo de alrededor y me dirigí a la pequeña Mei— ¿Mei, estás bien? ¿Estás herida? ¿Y dónde está Happy? ¡Tenemos que encontrarle y salir de aquí cuanto antes!

Si no recibía respuesta de Mei, le pediría a Tandy que lo buscara. No quería creer que Mei hubiese provocado el incendio intencionadamente. En aquel momento, lo mejor era salir de allí.

[A Nerd Girl]

Miré como me abrazaba y me trataba de salvar. ¿En verdad prefiere salvarme?¿Tras la atrocidad que hice? Me abracé a ella mientras notaba que estaba malherida levemente, Tandy parecía preocupado por ella.


Pero le mandó a apagar el fuego. Ella me preguntó el paradero de Happy. ¿Acaso no estaba con ella? Me abracé fuertemente a Nadhia.

—¿No estaba contigo?

El fuego retrocedía gracias a Tandy. Pero no podía evitarlo, como un impulso la agarré de nuevo del cuello.

—Mientras que tú... ¿¡Por qué él te ama!?

[EspeYuna]

—M-Mei.

Otra vez. Agarrándome con violencia por el cuello, me estaba costando más respirar que la última vez. No comprendía su comportamiento. ¿Y si de verdad... ella...?

—¡¡Perla, tan, tan!!

Un ataque mágico impactó entre nosotras, dirigido a la pequeña. No tuve tiempo para reaccionar, girándome hacia Tandy.

—¿¡Por qué has hecho eso, Tand...!? —comencé a toser de forma desenfrenada. Entre el fuego que nos rodeaba y el agarre, estaba perdiendo fuerzas para respirar.

—¡Ese tío tenía razón! ¡Algo raro pasa con ella, kupó! —exclamó el moguri— ¡Soy tu guardián, y pienso protegerte aunque te enfades conmigo, tan, tan!

—¡¡Mei, escúchame!! —le grité— ¡Quiero ayudarte! ¡Deja que te ayudemos!

[A Nerd Girl]

Tandy me atacó para proteger a su dueña. Yo nunca lo llegué venir, Nadhia parecía preocupada. Decía que podía ayudarme, ¿como? ¿Ella en verdad puede? Lo dudaba.

—¿Tanto te cuesta entenderlo? Yo provoque este incendio, ¡yo! ¡Yo mate a mi propia madre!—miré a Nadhia a los ojos, llenos de rabia—¿¡Como piensas ayudarme!?

Miré a Tandy amenazante, no permitiría otro ataque de ese peluche viviente, si se le ocurría hacer algo menos apagar el fuego le partiría con un rayo, literalmente con un electro.

— Nadhia, dime como vas a ayudarme, ¡ahora!

Apunté con mi llave espada a Tandy. Estaba en verdad con ganas de sangre.

[EspeYuna]

—¿Tanto te cuesta entenderlo? Yo provoque este incendio, ¡yo! ¡Yo mate a mi propia madre!—mis ojos se abrieron como platos. Entonces, ¿aquel desconocido tenía razón? ¿Mei era peligrosa?—¿¡Como piensas ayudarme!?

Cuando sus ojos se dirigieron a Tandy, vi cómo le apuntaba con su Llave-Espada. Alejado gracias a sus alas, sabía que mi guardián no tendría problemas en esquivar alguno de sus ataques. Y huir de allí no iba a ser tan difícil. Pero no podía hacer eso. Mei necesitaba ayuda, ¿pero era conveniente que fuese yo, precisamente?

—Nadhia, dime como vas a ayudarme, ¡ahora!

Su amenaza contra Tandy me hizo despertar. Me lancé contra ella e invoqué a Ángel Forjado en un haz de luz. Estocando mi arma contra la suya, hice que la joven retrocediera y chocara contra una pared de las viejas casas de la aldea, ahora hechas polvo por el incendio.

—¡Antes que nada, Mei, tienes que calmarte! ¡No llegarás a nada si amenazas a mi compañero!

>> ¡Es más, así no ganas confianza alguna conmigo!

No aparté mi Llave-Espada hasta que Mei se hubiera tranquilizado. Pensándolo mejor, aquel no era el lugar más idóneo para discutir aquello. Tenía que llevármela de allí, si no correría la voz y los maestros... quién sabe si no se habrían enterado ya del accidente en la aldea.

—Mei, vámonos de aquí. Te ayudaré, te lo prometo.

Buscando ganarme de nuevo su confianza, aparté el arma y le ofrecí mi mano.

—Nadhia, tan...

—Tandy, busca a Happy.

[A Nerd Girl]

Nadhia invocó a su llave espada y chocó su espada contra la mía de tal manera que me hizo retrocede. Parecía alterada por que amenazase con su moguri. Me tiró contra los restos de una casa ya carbonizada. No me dio tiempo a reaccionar.

—¡Antes que nada, Mei, tienes que calmarte! ¡No llegarás a nada si amenazas a mi compañero!

>> ¡Es más, así no ganas confianza alguna conmigo!

¿Ganar confianza? En el fondo sentía miedo, ¿de que? No sabía de qué tenía miedo... Más bien me duele pensarlo. Desaparecí mi llave espada en medio de unas lágrimas y de mis manos tocando la ceniza aún caliente, esa sensación de que se me quemaba la piel. Como cuando era pequeña y me mandaban a servir el té a los tres años ya quitando las sonrisas de mi vida. Como si de la noche a la mañana intentasen evitar que pudiera tener acceso al exterior.

—Mei, vámonos de aquí. Te ayudaré, te lo prometo.

Cogí su mano, no sin antes dudar... Me temblaba, la miraba pero cedí. Ella no parecía mala persona, quizá solo me dejé llevar por las emociones... Quizá solo necesito saber como no dejarme llevar por mi envidia y mi odio sinrazón hacia otros.

—Nadhia, tan...

—Tandy, busca a Happy.

Miré a Nadhia y a Tandy me limpié la falda algo rota y quemada por los restos del fuego que parecía disiparse lentamente... No me solté de la mano de Nadhia. Me temblaba, me temblaba la mano de lo que había hecho. Tenía miedo de mi misma.

¿Era realmente yo? ¿En verdad soy un monstruo? Mi madre me decía que los monstruos se esconden en las personas que menos lo parecen, Nadhia no se acercaba a eso. Ella era alguien diferente a muchos que conocí. Ella me parecía perdonar aunque hubiese visto lo que hice. En un instante de rabia, confusión y temor.

—Tengo miedo...

***

En otro lado el mismo hombre de antes caminaba cerca de la aldea...

— ¿En verdad fue ella? ¿O fuiste tú?

El hombre se acercó a una persona que estaba por la parte de un pequeño despeñadero. Era una mujer rubia con capucha vestida con un vestido de color ocre que más bien parecía una camiseta.

Spoiler: Mostrar

—No sé— con una voz femenina se ponía a mover las piernas —, Puede que yo hubiese propagado el incendio o incluso hecho... Ella se lo tragó entero... — La voz se distorsionaba volviéndose masculina.

Esa mujercita empezó a deformarse a ser un chico de la misma edad y mismas características, era como la versión masculina de esa chiquita. Solo que parecía quitarse una máscara a su vez.

Spoiler: Mostrar

—Es divertido jugar con ella, la dejé más confusa que lo es de por sí... Espero que te valga...

>> ¿No tienes una apuesta que cobrar verdad?

[EspeYuna]

Mientras Tandy buscaba al compañero de Mei, no dudé dos veces y agarré a la muchacha sin esperar a que ella aceptara mi ayuda. No iba a dejarla en su mundo natal en aquel estado. Cuando la recogí entre mis brazos, se encontraba con la mirada perdida, y temblaba como un flan.

Escuché el escándalo formado en las afueras de la aldea. Cargaba con Mei como si fuera un peso muerto, por lo que necesitaba de su colaboración para sacarla de allí antes de que el fuego se extinguiera y nos descubrieran allí. Seguramente las autoridades de aquel mundo se estarían preguntando quién había provocado el incendio. Y no podía consentir que le hicieran daño a Mei. Fuese o no la culpable, quienes debían decidir aquello y ayudarla eran los Maestros.

—Mei, vamos. Volvamos a casa.

Me costó cargar con ella. Llegando a una de las sendas rocosas y nevadas que daban a la montaña, decidí montarla a mi espalda. Le susurré que descansara y que intentara cerrar los ojos.

Pensé entonces en todos los inocentes que habían sufrido el incendio de sus casas. Recordé a los sincorazón, y luego le eché un ojo a Mei. Me había compadecido de ella, pero... ¿otro aprendiz lo hubiera hecho? ¿La hubiera dejado allí a su suerte para luego informar a los Maestros?

Temía porque el comportamiento de Mei le interesara a Bastión Hueco. Una niña tan perdida, sin amigos fieles que le ayudaran a salir de aquella locura que atormentaba su mente, ¿no sería un blanco perfecto para Ryota?

"De nuevo, estoy pensando demasiado."

Seguí subiendo por la senda rocosa, hasta que llegamos a una zona plana a medio camino donde dejé a Mei descansar mientras contemplaba la aldea desde las alturas.

Sólo esperaba que Tandy no tuviera problemas en encontrar a Happy y que pudiéramos regresar a Tierra de Partida lo antes posible. Mei necesitaba ayuda.

[A Nerd Girl]

Nadhia me llevaba lejos de la aldea pero podía verla en la lejanía, lloraba, no sabía que estaba haciendo. ¡Era un monstruo! ¡Destrocé las vidas de personas inocentes! Me abracé a Nadhia fuertemente llorando. Yo estaba bastante cansada, ella por su parte quería que yo descansara. Quizá debía poner en orden mis sentimientos y mis ideas. Debía calmarme, era como si me hubiera dado un ataque de ira contra gente inocente, buscando excusas para darle la culpa al resto y no a mi.

¿Debería estar agradecida a Nadhia? Estoy triste, no es por saber que Xefil amase a otra, sino que estoy triste por como he llegado a ser. Nadhia podía haberme dejado quemarme viva y haber huido (quizá Light hasta lo hubiese hecho), o podía dejarme arrestar y tener pena de muerte.

—Gracias por ser tan buena conmigo...

Entonces no supe la razón de por qué... Cerré los ojos y me dormí...

***

Tandy encontró al otro lado del pueblo a Happy pero no estaba solo. Una chica misteriosa de pelo rubio, ojos amarillentos con toques rojizos y vestida de una manera poco tradicional para ese mundo estaba de una manera cuidando a Happy.

Spoiler: Mostrar

En vez de cuidarlo parecía dormido pero a su vez herido, la chica emergía un tipo de miedo a Tandy...

—Vaya, ¡un nuevo juguete! Ya sabía yo que podría divertirme, mi hermano se enfadará por llevar demasiados aunque no me duren ni un día...

Dejó a Happy encima de una piedra llena de nieve. La joven sonreía de manera sádica su mano empezaba a mutar cuando una mano tocó la mano que se transformaba, una joven sin ojo pero con otro vidrioso, pelo blanco corto cuernos de ciervo y con un vestido que parecía de una muñeca si no fuera por que estaba sangrado y en sangre estaba escrito "Lamy".

Spoiler: Mostrar

—¿Eh? Lamiere, ¿no deberías estar en la mansión? Mira que venir sin zapatillas...—La chica suspiró y devolvió como estaba su mano—.Bueno pues dejo de divertirme.—decía con un tono masculino y ambas desaparecieron.

***

Nadhia al ver a Mei dormida pudo ver en la lejanía el cuerpo del mismo hombre de antes, llevaba una caja de madera en vez de la daga y parecía muy tranquilo.

—Es gracioso que no me creyeras, he venido a cobrar el favor que te dije... ¿o tienes memoria de elefante, princesa? Tan llena de luz eres... Me recuerdas a mi difunta esposa, ella era pura luz... La asesinó mi hermano por envidia. En verdad era la mujer más amable del mundo, se sacrificó por salvar a su querida recién nacida hija, aunque no sirvió de mucho...—miraba a Mei mientras suspiraba, esperaba que la joven pillara la indirecta—. ¿Tu moguri no está? No quería que se perdiera esto...

Nadhia no llegó a ver venir al hombre atravesando de forma inhumana el pecho de ella, sentía un dolor increíble, pero no había un ápice de sangre alguna... Al sacar la mano Nadhia vería un corazón, no el bonito que todas las chicas dibujan en los cuadernos con el nombre del chico guapo de clase, sino el biológico que se solían ver en los cuadernos. Palpitaba, pero Nadhia seguía viva.

—Mi hermano hizo esto mismo solo que lo estrujó nada más tenerlo en la mano, ¡Qué desagradable! Tranquila, solo es una réplica, el tuyo sigue latiendo alegremente en tu luz. Solo te diré una cosa, jovencita. Atrévete a hacer daño a esa chica y juro que haré lo mismo... Ah, y si eres lista... No le digas nada de mi o lo volveré ceniza... Y eso te matará...

Lo guardó en la caja y se esfumó. Mei seguía dormida, para cuando llegasen Tandy y Happy, ella despertaría.

[EspeYuna]

El pequeño guardián de Nadhia logró encontrar a Happy, pero el compañero azulado de aquella niña no estaba solo. Malherido e inconsciente, Happy estaba bajo el regazo de una chica rubia de ojos extraños, amarillos como los sincorazón y e inyectados en sangre a la vez.

Spoiler: Mostrar

—¿Q-Qué le pasado, kupó? —cuestionó Tandy, sintiendo temor. Aunque no entendía el por qué. Aquella chica parecía inofensiva, ¿o no?— ¡Tú! ¿¡Qué le has hecho a Happy, tan, tan!?

—Vaya, ¡un nuevo juguete! Ya sabía yo que podría divertirme, mi hermano se enfadará por llevar demasiados aunque no me duren ni un día...

Al dejar a Happy encima de una roca nevada, el moguri se estremeció. Tenía que llevarse a Happy de allí, pero la idea de sobrevolar a aquella misteriosa joven le provocaba escalofríos. Y más cuando, en un extraño y sádico fenómeno, la mano de la chica mutó para unirse a la aparición de otra joven, cuyo aspecto era mucho más escalofriante que la otra. Como una de las muñecas de porcelana que Tandy tanto detestaba. ¿Qué de bonito tenían con aquella fría piel y esa expresión vacía? El guardián tragó saliva al ver como en su blanco vestido sangraba un nombre:

—¿Lamy... tan...?

Spoiler: Mostrar

—¿Eh? Lamiere, ¿no deberías estar en la mansión? Mira que venir sin zapatillas... Bueno pues dejo de divertirme.

"¿Acaba de... cambiarle la voz, kupó?"

Antes de que Tandy pudiera reaccionar, las dos muchachas —o fuera lo que fuesen— desaparecieron delante de su hocico. El moguri, confuso, voló hasta Happy y lo socorrió con un hechizo curativo. Sin esperar a que reaccionara o no en él, cargó con el pequeño mientras sobrevolaba el lugar, deseando reunirse con Nadhia lo antes posible.

Porque tenía un mal presentimiento... y casi nunca se equivocaba.

***

—Es gracioso que no me creyeras, he venido a cobrar el favor que te dije... ¿o tienes memoria de elefante, princesa? Tan llena de luz eres... Me recuerdas a mi difunta esposa, ella era pura luz... La asesinó mi hermano por envidia. En verdad era la mujer más amable del mundo, se sacrificó por salvar a su querida recién nacida hija, aunque no sirvió de mucho...—ver a aquel hombre acercarse a ambas hizo que me pusiera en guardia, invocara a Ángel Forjado y le amenazara con el filo. Estaba segura de que iba a proteger a Mei de aquel hombre. Desde que me lo encontré antes del incidente, dejó claro que conocía a Mei, que sabía de su pasado y, por desgracia, conocía lo que se suponía que era la auténtica naturaleza de Mei, aquella que la pequeña desconocía y no podía controlar. ¿Su difunta esposa, decía? Cuando miró a Mei al pronunciar aquello, ¿acaso...? No, imposible. No podía ser que en realidad aquel hombre fuera, ¿lo era?—. ¿Tu moguri no está? No quería que se perdiera esto...

"¿Qué?"

No lo vi venir. Ni siquiera supe qué estaba pasando cuando el dolor me recorrió las entrañas y permanecía inmóvil frente a la presencia de aquella persona, quien, para cuando conseguí recobrar algo de consciencia perdida, me había atravesado el pecho. Lo que agarraba en su mano era...

"¡No! ¡No es posible!"

Aquello no podía ser... ¿¡mi corazón!?

—¿¡Qué...!?

—Mi hermano hizo esto mismo solo que lo estrujó nada más tenerlo en la mano, ¡Qué desagradable! Tranquila, solo es una réplica, el tuyo sigue latiendo alegremente en tu luz. Solo te diré una cosa, jovencita. Atrévete a hacer daño a esa chica y juro que haré lo mismo... Ah, y si eres lista... No le digas nada de mi o lo volveré ceniza... Y eso te matará...

Admití que su truco ilusorio y sus palabras consiguieron lo que proponían: asustarme. Pero él no sabía que ya había estado bajo el efecto de aquellos hechizos. Cada cual mucho más terrorífico: el acompañante de la Reina Dusk que intentó acabar con la vida de Light y jugar con la mente de Xefil. La aprendiz de Bastión Hueco que consiguió hacerme creer que Akio había muerto. Aquello, para mí, era una chiquillada. Y el corazón, el que creí conocer, no era ni mucho menos así. El corazón que brillaba, del que se alimentaban los sincorazón... no tenía nada que ver.

—¿Por qué crees... que le haría daño...? —alcé a Ángel, quien permanecía atada a mi diestra con fuerza— ¿Y... y por qué...?

A pesar de luchar contra la ilusión, era agotador.

—¡¡Nadhia, tan, tan!!

Me pareció escuchar a Tandy incluso, pero la ilusión me hacía concentrar mis sentidos en mi supuesto corazón poseído por el acosador de las pesadillas de Mei.

—¿Por qué... no quieres que ella sepa de ti...?

>> ¿Acaso un... padre no quiere... que su hija sepa de... él...?

El hombre se alejó de mí mientras guardaba el corazón en una caja de madera que había portado en todo momento. Cuando éste desapareció de mi vista, caí de rodillas e, inevitablemente, mi alrededor dio vueltas.

Mi cuerpo se desplomó en la fría nieve, escuchando a Tandy gritar mi nombre.

[A Nerd Girl]

Me desperté escuchando los gritos de Tandy. Nadhia se había desmayado, rápidamente la traté de poner tumbada, y moldee la nieve como una almohada. Tenía miedo, no quería que le pasara nada. Miré a Tandy con Happy algo dormido. Happy se puso abrazado a mi, Tandy gritaba a Nadhia, para ver si respondía.

Bajé la mirada, yo no quería verla así, triste o mal. Más bien me ponía triste pensando que había hecho, como había sido con ella. Me comportaba como una niña tonta, no debí hacer nada de ese drama por un estúpido mal de amores, ella no tenía culpa. Yo era quien no se daba cuenta de que yo no puedo ser tan buena y bondadosa. Ella era como un ángel: Hermosa y piadosa.

No cualquiera hubiera sido tan bueno conmigo...

—Nadhia, desearía ser tan increíble como tú... No me merezco a Xefil, ¡tú eres tan genial!—Me salía una lágrima mientras la miraba—.¡Gracias por intentar ayudarme!

Me abracé a ella, y cuando estuviera mejor nos iríamos a Tierra de Partida. En verdad me alegré de conocer a alguien como ella...

Spoiler: Mostrar

Todos mis PX a Happy <3