[Coliseo del Olimpo] Copa Phil - Semifinales

[Soul Artist]

El mundo pareció detenerse por un instante. Un momento clave, vital para el joven Fyk. El público y sus gritos parecían haberse callado; casi habían desaparecido. Alexis no importaba. Ni siquiera él mismo. Solo podía estar concentrado en una cosa: su puño en la cara de Cloud.

El tiempo volvió a correr a velocidad normal, mientras su contricante caía de espaldas y soltaba la espada mientras perdía en conocimiento. Una vez en el suelo, algo de sangre brotó de su nariz; aquel golpe contenía toda la fuerza del niño, y desde luego no era poca.

El público enloqueció. Gritos de emoción, potentes aplausos, silbidos. El extraterrestre podía oír cómo la gente gritaba a la vez "¡Blue Kid! ¡Blue Kid! ¡Blue Kid!"; de verdad aquello parecía el cielo. Le querían. Había ganado, al fin, gracias a la ayuda de Ragun.

Pero una vez la gente se relajó, pudo oír cómo alguien más le aplaudía a sus espaldas. Alexis no se había quedado atrás en aquella celebración. Sus poco potentes aplausos acompañaban su sonrisa, nada relajante.

—¡Bravo, chico, bravo! —le felicitó, parando de aplaudir—. Finalmente lo has logrado. Ha sido difícil, pero has demostrado todo tu potencial. ¿Ves cómo no eres tan débil?

Alexis dio dos pasos hacia él, acortando algo de distancia. Se llevó las manos a la espalda y se inclinó ligeramente hacia delante, balanceándose como una niña juguetona.

—Siento decepcionarte, pero todavía quedo yo —recordó la chica—. Sí, a estas alturas estarás más que agotado. Y ya solo te quedarán fuerzas para invocar tu Llave Espada, ¿verdad? Sería muy cruel hacerte luchar contra mí.

El cielo se volvió negro de golpe. Al levantar la vista, Fyk pudo ver cómo en realidad lo que sucedía es que había sido invocado una especie de campo oscuro, un gigantesco techo semicircular que se había tragado toda la luz que llegaba al ring. El público ya no era visible con aquella cosa, ni tampoco llegaban sus gritos; todo era silencio y frío. Quizás aquello le recordara a su antiguo hogar: el espacio...

—Sé que buscas respuestas —señaló Alexis con una sonrisa, sin dar importancia a aquel extraño fenómeno—. Respuestas que nadie te puede dar. Hemos investigado sobre ti, Fykhjaal. Vine para observarte, a ti y a Ragun... Todavía es demasiado pronto para que vengas conmigo.

Alexis extendió su brazo hacia el chico, deseosa de que se acercara.

—Pero no quiero irme sin ver tu auténtico poder. No quiero irme sin ver la luz de tu corazón... Atácame con ella, Fykhjaal. No puedo marcharme sin verla.

[Final Fan]

Lo había hecho.

Cloud yacía tumbado en el suelo y yo jadeaba, definitivamente cansado. Los vítores de la multitud ya no cantaban el nombre de mi adversario, ni de Ragun... "Blue Kid", decían. No sabía cómo sentirme en aquel momento, pero... no estaba mal.

—¡Ragun, Ragun! —grité, corriendo hacia él—. ¡Despierta! ¡Hemos ga...!

—¡Bravo, chico, bravo! —me interrumpió la voz de Alexis, aplaudiendo desde atrás—. Finalmente lo has logrado. Ha sido difícil, pero has demostrado todo tu potencial. ¿Ves cómo no eres tan débil?

Casi me había olvidado de ella. Entonces... ¿todavía no se había acabado? ¿Tenía que enfrentarme a ella?

—Siento decepcionarte, pero todavía quedo yo —confirmó mis sospechas—. Sí, a estas alturas estarás más que agotado. Y ya solo te quedarán fuerzas para invocar tu Llave Espada, ¿verdad? Sería muy cruel hacerte luchar contra mí.

Me puse en guardia, preparado por si decidía atacarme. Aquella sonrisa no era nada halagüeña, y me temía que todavía guardase un as en la manga...

Y tanto que lo guardaba.

Los oídos se me taponaron cuando el ruido de las gradas cesó de repente. Los ojos tardaron en acostumbrarse a la nueva oscuridad que de repente imperaba en el coliseo. ¿Qué había pasado? El ring había sido aislado por completo, y estábamos atrapados dentro. Un escalofrío me recorrió la columna.

—¡¿Qué pretendes si no vas a luchar, entonces?! —exclamé, intentando espantar el miedo.

—Sé que buscas respuestas. Respuestas que nadie te puede dar. Hemos investigado sobre ti, Fykhjaal. Vine para observarte, a ti y a Ragun... Todavía es demasiado pronto para que vengas conmigo.

—¿"Hemos"? ¿Quiénes? ¡¿Quién os da derecho a espiarnos?! ¡¿Quiénes sois?!

Quizás me estaba alterando más de la cuenta, pero aquel lugar no daba para menos. El vacío negro a mi alrededor hacía florecer en mi memoria recuerdos que intentaba dejar dormidos. ¿Pero qué recuerdos? No lograba discernir nada, todo era muy confuso... y aquello me hacía sentir impotente.

—Pero no quiero irme sin ver tu auténtico poder. No quiero irme sin ver la luz de tu corazón... Atácame con ella, Fykhjaal. No puedo marcharme sin verla.[/quote]

—¿Luz? ¿¡Qué luz!?

Miré a Alexis a los ojos, sosteniéndole la mirada. No supe adivinar qué contaban sus ojos, pero sí sabía que tenía razón: no podía luchar contra ella. Extendí el brazo izquierdo y abrí mi mano sobre mi cabeza, invocando a la Brisa Descarada. Mis dedos temblaron un poco al cerrarse sobre el arma, el cual no estaba acostumbrado a empuñar. Sin embargo, tenía que actuar con fortaleza... así que comencé a correr hacia la chica, pegué un salto, y me lancé para propinarle un tajo con la Llave...

—¡Si acechas a la luz y te obsesionas con ella... acabarás pareciéndote a un mosquito! —exclamé.

[Soul Artist]

Los ojos de Alexis brillaron con fuerza al ver cómo su contrincante invocaba la Brisa descarada. La "luz de su corazón" se materializó en sus manos con un destello, tal y como había ella había estado deseando desde que había comenzado el torneo.

—¡Eso es! —gritó ella, haciéndose escuchar—. ¡Esa es tu luz, Fykhjaal! ¡Nunca la pierdas de vista!

—¡Si acechas a la luz y te obsesionas con ella...!

El niño echó a correr hacia su contrincante, manteniendo preparada su arma para golpearla con todas sus fuerzas. Era muy rápido, y en cierto modo podía infundir algo de temor en una persona ordinaria; pero ella no se echó atrás. Se colocó en posición defensiva, sonriente.

—¡... Acabarás pareciéndote a un mosquito!

Dio un salto hacia Alexis, bajando su arma con fuerza. Dispuesto a golpearla. Pero el ataque no llegó a dañarla.

Algo había surgido entre los dos. Un arma invocada en la mano derecha de Alexis, con un extraño destello negro que revelaba toda la oscuridad oculta en su corazón. No solo debió impresionar al niño cómo la había invocado, sino también su forma, su aspecto. Era familiar. Demasiado familiar.

—No pierdas nunca de vista tu luz, Fykhjaal... —susurró, borrando su sonrisa y con un tono mucho más triste que antes—... porque nunca sabes cuando uno de tus queridos Maestros te la puede robar.

Era una Llave Espada.

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[Final Fan]

*Clang*

El ruido que hizo mi arma al chocar contra Alexis no había sido el que esperaba. No había logrado acertarle de lleno, había aparecido algo entre los dos, envuelto en un aura oscura... un arma.

—No pierdas nunca de vista tu luz, Fykhjaal... porque nunca sabes cuando uno de tus queridos Maestros te la puede robar.

Me aparté con otro mandoble y vi qué era lo que había convocado la chica. Una...

—¡Tú! ¿¡Por qué tienes la Llave Espada!? —exclamé, sin dar crédito a mis ojos abiertos como platos—. ¿Q-quién eres? ¡¿Qué pasa con los Maestros?!

¿Alexis era una portadora de la Llave? Y si conocía a los Maestros... ¿había sido también Aprendiz en Tierra de Partida? Mis ojos se movían de un lado a otro como si estuviesen en la fase REM del sueño, en un intento de organizar mis pensamientos con todo lo que estaba descubriendo poco a poco. ¿Los Maestros robando la luz...?

—Alexis... ¿qué... qué te hicieron? —pregunté, con clara tristeza.

Tuve el impulso de bajar mi Llave Espada, pero recordé a quién me estaba enfrentando. Por mucho que hubiese sufrido, por mucho que tuviese que contar... todavía era mi adversaria.

Debía seguir en guardia.

[Soul Artist]

El extraterrestre reaccionó apartándose de Alexis con un mandoble, ligeramente asustado al ver su arma. Ella apartó ligeramente la vista; no dijo nada, ni siquiera sonrería ya. Hizo desaparecer la Llave Espada, dando a entender que no quería luchar contra él.

—¡Tú! ¿¡Por qué tienes la Llave Espada!? ¿Q-quién eres? ¡¿Qué pasa con los Maestros?!

—Los Maestros de Tierra de Partida no son de fiar, Fykhjaal —aseguró, con los ojos clavados en el suelo—. Todavía no lo ves, pero el camino que sigues... No es el correcto.

—Alexis... ¿qué... qué te hicieron?

Ante aquello la niña no contestó. Suspiró y dirigió la mirada a su contrincante, seria. Se sentó en el suelo y extendió sus piernas en él para después dejar su cuerpo tumbado, tirado. Como si acabara de ser derrotada.

—Te he mostrado mi corazón. Por favor, no le digas a nadie lo que acabas de ver ni informes a los Maestros de mí. No quiero que nos vuelvan a encontrar.

La luz volvió a entrar de golpe, cegando a Fyk durante unos instantes. La cúpula de oscuridad había desaparecido; el público volvió a ser visible una vez más, y a los tímpanos del chico volvieron a llegar sus gritos.

—¡Blue Kid y Scarf Man ganan las Semifinales!

El coliseo entero enloqueció. Nadie sabía qué acababa de pasar, pero sin duda había sido un combate de lo más emocionante; al fin y al cabo, tres de las cuatro personas se encontraban en el suelo, derrotadas. Aunque en realidad la niña solo estuviese fingiendo.

No tardaron en aparecer los enfermeros con las camillas correspondientes, las cuales llevaban a cuestas al no tener ruedas, como hamacas. Un primer grupo se llevó a Cloud, el cual no había recuperado el conocimiento. El segundo grupo se dirigió a Ragun, el cual podría haber despertado o no; y el tercero a Alexis, a quien tomaron y transportaron hacia la salida. Sin embargo, antes de desaparecer por el marco, la chica lanzó un pequeño papel al muchacho, directo a su cabeza.

En él estaban escritas unas palabras claras para él:

"Volveremos a vernos, Fykhjaal H'Gaajk."

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Último post para los dos.

[Final Fan]

No entendía qué pretendía Alexis haciéndome invocar mi Llave Espada. ¿Qué quería confirmar observando "mi luz"?

—Te he mostrado mi corazón —dijo Alexis, tumbándose en el suelo—. Por favor, no le digas a nadie lo que acabas de ver ni informes a los Maestros de mí. No quiero que nos vuelvan a encontrar.

No respondí a aquella petición. La voz de la chica sonaba tan triste como el más sentido réquiem. Sentía que no me estaba mintiendo y que, detrás de todas aquellas tinieblas, se encontraba el corazón de una elegida. Fue cuando la vi echarse al suelo cuando decidí que nunca le contaría a nadie lo que había ocurrido en aquel lugar.

El campo oscuro se desvaneció...

—¡Blue Kid y Scarf Man ganan las Semifinales!

Todo volvió a correr a mi alrededor. La anterior alegría por haber ganado el combate se convirtió en indiferencia, comparando la victoria con lo que me acababa de pasar. Los gritos de júbilo de los espectadores del torneo me ensordecieron, la luz del sol de Tebas me cegó... y toda lo que había pasado me hizo enmudecer, quedarme sin palabras viendo cómo los asistentes se llevaban a los heridos para atenderles como era debido. Cloud. Ragun. Alexis... Me quedé en el centro del ring, viendo sin mirar cómo me iba quedando solo poco a poco. Pero no podía hacer nada más... mi cuerpo no me respondía.

Algo me hizo reaccionar por un segundo: un papel que chocó contra mi cabeza y cayó al suelo. Lo cogí, curioso por lo que pudiese contener, aunque casi no me sorprendí al leer lo que en él había escrito:

"Volveremos a vernos, Fykhjaal H'Gaajk."

Eché la vista atrás y clavé los ojos en la fingidamente desmayada Alexis, que desaparecía tumbada en la camilla por la puerta del coliseo...

—Eso espero, Alexis Blackblood.

[Sombra]

Lo único que podía recordar era aquel electro que se me venía encima otra vez. ¿Cuántas veces había caído en aquel pozo de oscuridad que inundaba mi mente en aquel momento? Podía sentir cosas, y escuchaba de lejos las voces de Fyk y Alexis aunque no entendía que decían. De pronto, unos gritos empezaron a escucharse, gritos que aclamaban a un ganador, aunque no sabía quien.

Maldecí mi estado actual. Si hubiera sido un poco más fuerte...

—Así que quieres más fuerza —escuché una siniestra voz dentro de mi cabeza. En cierto sentido se hacía familiar, aunque no podría decir exactamente por qué—. Si lo que buscas es poder, yo podría darte un poder ilimitado, es tan facil como...

—No me hace falta tu ayuda —corté al desconocido—. Me haré fuerte por mis propios medios.

La extraña voz desapareció de pronto, justo cuando sentía que me levantaban y me colocaban en una camilla, en aquel momento había recuperado la consciencia, pero no podía moverme. Mi cuerpo estaba totalmente entumecido por aquel rayo. Pude ver a Fyk de pie y a una Alexis en el suelo. ¿Había ganado? Era simplemente increíble, me habría gustado verlo.

Los enfermeros me llevaron a la enfermería y me colocaron en una camilla junto a un Cloud durmiente, varias personas me hacían curas utilizando pociones que colocaban sobre mis heridas curando al momento. Pero todavía me sentía cansado.

No era un cansancio físico, era una especie de desgaste mental, como si aquella batalla me hubiese quitado cualquier tipo de interés por combatir.

Me fui levantando lentamente y pude ver que había cuatro camillas preparadas para nosotros, de las cuales tres estaban tres estaban ocupadas, dos por mis dos contrincantes y por supuesto en la tercera estaba, yo mismo. Aquello aseguraba que el ganador había sido Fyk puesto que no se se le veía el...¿pelo?

Ahora tenía que buscarlo y darle la enhorabuena. ¿Dónde se habría metido aquel pequeñajo? Todabía quedaba un combate más.

[Soul Artist]

El Inframundo nunca había sido un lugar famoso por ser acogedor. Todo lo contrario; las dominios de Hades eran unas tierras frías, oscuras y de colores de tonos apagados. Una serie de cavernas lo conectaban, como si de túneles se tratasen; y nadie circulaba entre ellos, pues todas las almas en pena descansaban en el río Styx.

Los aposentos del Dios de los Muertos reunía las mismas características. Sin embargo, se notaba que era un lugar mucho más "especial"; la decoración de los pilares, adosados a las paredes, tenía una forma ciertamente diabólica y retorcida, con delgadas líneas que componían las efiálticas y negras figuras que formaban. Una mesa circular se encontraba justo en el centro de la habitación, la cual en ese momento tenía extendido un gigantesco mapa a escala de Tebas y sus alrededores, con algunas figuras colocadas en él tales como una miniatura de Neso o del propio Cloud. Enormes agujeros abrían la vista entre las columnas para poder vigilar el Inframundo en su totalidad, demostrando que a su dueño le gustaba tener todo bajo control.

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El humor de Hades era alarmantemente preocupante para los dos diablillos que le acompañaban. Mientras él caminaba de un lado a otro de la estancia con las llamas de su cabeza ligeramente enrojecidas, ellos sonreían nerviosos a la par que sus piernas temblaban de terror. Bien sabían que si su amo terminaba de enfadarse, acabarían más chamuscados que un pollo al horno; podría decirse que eran sus sacos de boxeo de desahogo.

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—Bien, dejad que repase los planes, ¿ok?

El Señor del Inframundo, algo más relajado, se acercó a la mesa y e invocó entre sus dedos con una pequeña cortina de humo la pequeña figura de un personaje dorado que alzaba sus músculos, triunfante.

—En uno de mis tantos intentos por acabar con el niñito de Zeus —colocó la ficha en el mapa— contraré un pequeño ejército y me gasté un dineral para apuntarlos a todos a la Copa Phil, donde tras ganar podrían hacerle frente y acabar con su miserable vida. Gente como Neso, el guardián del río; o el pelopincho rubiales, subordinado reciente; aparte de, claro, algún que otro inútil Sincorazón... ¿Se entiende?

Los dos diablillos afirmaron con la cabeza, asustados. Más les valía no contradecir a su jefe en ningún momento por su propio bien, el cual acababa de invocar la figurita de una niñita con Llave Espada. La colocó frente a otras dos miniaturas de lo que parecían ser un extraterrestre azul y un joven con bufanda negra que le tapaba el rostro.

—Vino la entrometida de turno de su castillito por ahí perdido y me dijo —Hades imitó la voz de Alexis con un tono burlón—: "¡eh, invoca a uno de tus Sincorazón más fuertes que tengas en la torre abandonada donde se entrenan aprendices de héroe! Tal vez consigas alguien más para tus tropas y venga alguien interesante". Y así fue: invocamos a Lyn "la bestia", ¡¡el grano en el trasero que me faltaba!!

El Dios de los Muertos enfureció al mencionar a la heroína, explotando en llamas y convirtiendo la figurita de Blackblood en cenizas. Sus dos sirvientes corrieron a protegerse la cabeza, temerosos de lo que su amo podía hacerles si lo deseara; uno de ellos, el verde, se apresuró a decir algo.

—¡P-p-pero no fue la única que vino! —señaló en voz alta, sin pensar en lo que decía—. También vinieron los otros dos, los que te iban a servir como poderosos Sincorazón... ¡Es lo que ella te dijo!

Hades desató un grito y lanzó una llamarada al pequeño ser, el cual quedó completamente negro tras el inesperado ataque. Sopló una nube de humo y cayó al suelo, inconsciente.

—¡Ese es el problema, Pánico! —ahora el dios solo hablaba para el diablillo rojo, aunque se dirigiese al otro—. Nunca sabes cuándo estos tipos te la pueden estar dando con queso. No solo ha sido derrotada por alguien que me aseguró que no iba a durar una sola ronda, sino que no puedo confiar nada en sus intenciones. ¿Quién puede asegurarme que lo que quieren no es otra cosa? ¡Y ahora he perdido todas mis posibilidades de acabar con ese Hércules! ¡Acabaría con todos!

Hades se cubrió nuevamente de llamas al rojo vivo, dirigiéndose hacia el diablillo rojo, el cual se tiró al suelo asustado y comenzó a retroceder. No pudo escapar de su fatal destino cuando su jefe le agarró por el cuello y le alzó, furioso.

—¿Y el plan B de Alexis? —preguntó el pequeño, intentando salvarse.

La temperatura del cuerpo del Señor de los Muertos descendió, algo más relajado. Se giró y observó su señorial asiento, oculto entre las sombras de la habitación. A su lado había un saco negro, el cual la niña había traído días antes. Se acercó a él y lo abrió, observando su interior.

—Ajá, así que se trata de eso... —señaló Hades—. Es tu día de suerte, pena... Nuestra amiguita nos ha dejado un buen regalo aquí. Un viejo conocido...

El personajillo se acercó a su amo y echó una ojeada a lo que había dentro. Pegó un gritito y se echó atrás, realmente asustado.

—¿É-él? ¡Pero si murió!

—Bueno, por algo soy el Señor de los Muertos... Le daremos una hora, lo suficiente como para acabar con Blue Kid, Scarf... Y le sobra tiempo para convertir a media Tebas en Sincorazón.

Con una seña, indicó a Pena que cargase con el saco para que le siguiese mientras abandonaba sus aposentos. El siervo acató las órdenes y lo levantó con un gran esfuerzo, casi incapaz de llevar el contenido consigo. El peso de la bolsa le hizo inclinarse hacia su derecha, y al hacerlo y no haberlo cerrado previamente, algo cayó de él; algo metálico, un casc de larguísimos cuernos.

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—¡Ay, madre!

Dejó el saco en el suelo y recogió lo que acababa de caer, no sin antes evitar hipnotizarse mirándolo. ¿Realmente Hades estaría dispuesto a resucitar al dueño de aquella armadura... solo para acabar con aquellos jóvenes aprendices de la Llave Espada y con Hércules?

Por muy locura que sonase... Sí, estaba dispuesto a ello.

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"Él" luchará en "Copa Phil - Final"...



¿Emocionante la Trama? ¿Esperabais lo de Alexis? Os he visto muy emocionados los dos hacia el final, y con razón con todo lo que se ha ido soltando. ¿Volverá Fyk a ver a la misteriosa niña pronto? ¿Y Ragun se enterará de qué ha pasado, se encontrará con ella? Es todo un misterio... ¿Pero sabéis lo que no lo es? ¡Vuestra puntuación!

Estas son las máximas que podéis ganar...

Victoria combate: 15 PX
Estilo combate: 15 PX
Narrativa e interpretación: 30 PX

Final Fan.
Victoria combate: 15 PX
Estilo de combate = 9 PX. ¡Soy algo estricto con el estilo de combate! Sé que Fyk es un personaje de apoyo, pero ha quedado mucho en el segundo plano durante el combate hasta que has llegado al ataque final. Pese a que tus habilidades estén orientadas a la ayuda de otros personajes, ¡debes volver a tu modo protagonista en tus turnos y no quedar tan al margen! Y más con las leches que pegas...
Narrativa & Interpretación = 26 PX. Creo que en esta Trama has bajado con respecto a la anterior, pues aunque has arrancado de maravilla, has tenido importantes bajones para ser tu nivel de escritura que no puedo pasar por alto, en especial en la tercera página. Supongo que el combate en sí te estaba desmotivando, pero pese a todo lo haces bien. ¡Ánimo!
Total = 50 PX.
Level 10 reached!
46 PX para Nivel 11.

Sombra.
Victoria combate: 15 PX
Estilo de combate = 11 PX. Todo el día atacando a Cloud, pero en mi opinión a veces con algunas malas estrategias. Has sido bastante protagonista durante la batalla, pero os faltaba a los dos organización; vuestro rival no debería haber sido tan duro al final si hubieseis planteado una estrategia conjunta para él. No dudéis en la siguiente Trama en pensar en equipo, ¡o quizás acabéis sirviendo a Hades en el Inframundo!
Narrativa & Interpretación = 24 PX. Algunos posts han sido potentes... Pero solo algunos. ¡Debes esforzarte más! Aumenta tus ganas y motivación y sobre todo, repasa tus mensajes para mejorar la expresión y sentido de tus párrafos, y evitar retóricas.
Total = 50 PX.
Level 11 reached!
44 PX para Nivel 12.