[Coliseo del Olimpo] Copa Phil - Semifinales

[Sombra]

Fyk se levantó de su sitio, su piel azul se había puesto un poco más palida por unos segundos fruto del ¿miedo?.Salió del vestuario .

—Fyk... —susurré sin saber bien que es lo que pasaba. Estaba un poco preocupado por su estado.

Me levanté con cuidado para poder ir junto a mi compañero para ayudarle en lo que necesitase pero...

Un empujón hizo que estuviese a punto de caer de espaldas, me incorporé y vi que se trataba del compañero de Alexis ¿Cloud se llamaba? Aquel tipo se puso de espaldas a mí mirando hacia el exterior.

—¿Por qué has hecho eso? —interrogué sin llegar a parecer hostil, pese a que dejaba que se notase que aquel gesto no me había agradado en absoluto.

[Soul Artist]

Hades pareció algo impresionado por la reacción del pequeño extraterrestre azul. Sin embargo, borró toda sonrisa de su cara y se agachó a él, rodeándole con el brazo.

—¿Tienes problemas, muchacho? Se te ve mal —señaló el Dios, algo preocupado—. ¡Con lo bien que estás luchando ahí fuera! Pero no hagas caso a ese pesado de Neso. Debió malinterpretar mis palabras. Le dije que le daría la llave de la victoria, no es mi culpa si pensó que invitarte a participar significaba que venías para perder ante él. ¡Mira lo que te traigo!

El Señor del Inframundo sacó de su túnica un helado azul clarito, un polo. Dedicó una de sus sonrisas típicas mientras lo señalaba con la mano, esperando que el chico se emocionara con aquello.

—¡Traído por una amiguita para ti de un lugar muy lejano! Cógelo rápido, que se me derrite —indicó Hades, invitando al joven a cogerlo—. Mira, ignora a ese tipo: tú sigue participando, puedes ganar. ¿Qué mal puede haber en que te haya invitado a unos juegos que estás ganando? Yo te lo diré: ¡traer otro héroe que luche contra los malos y todas esas tonterías! Soy un filántropo, ya sabes.

Hades parecía sincero. Los argumentos que daba parecían sinceros; ¿qué mal podía haber tras todo aquello? Quizá Fyk se había equivocado con él, o quizá no se fiaba todavía.

* * *
Cloud se giró para observar por encima del hombro a Ragun. Echó una pequeña risa irónica para sí mismo y perdió el interés en él casi de inmediato, volviendo a dirigirse hacia fuera.

—¿A que es un soso?

Tras la espalda de Ragun, Alexis sonreía traviesa observando a su compañero. La chica se había aproximado a ellos al ver que el chico le había hablado, y al parecer ya imaginaba que Cloud no le iba a dar respuesta. La sonrisa de la niña llegaba a asustar, pues más que travesuras parecían ocultar algo macabro.

—Perdónale, puede ser algo borde —explicó ella, dirigiéndose hacia el aprendiz de la Llave Espada—. Es curioso que luche conmigo. Pero hacemos un buen trabajo en equipo: él lucha y yo me quedo sentada en un rincón jugando. No existe pareja más unida.

—Me da igual que no hagas nada mientras pueda seguir participando —soltó en voz alta Cloud, todavía dándoles la espalda y cruzado de brazos—, mientras me permitas seguir participando.

—Claro que sí, querido —la niña soltó una pequeña risita traviesa, aunque con un pequeño tono macabro.

[Sombra]

El participante se giró observándome con aires de superioridad, aunque ignorando mis palabras, echó una pequeña risa y volvió a colocarse en la misma posición nuevamente dandome la espalda.

—¿A que es un soso?

La niña sonrió de una manera un tanto divertida y se había acercado a nosotros dos.

—Lo es —admití, aunque sabía que yo no podía hablar mucho ya que no era tan diferente de él en algunos aspectos.

—Perdónale, puede ser algo borde —se disculpó por él sin quitar ni un instante su extraña sonrisa—. Es curioso que luche conmigo. Pero hacemos un buen trabajo en equipo: él lucha y yo me quedo sentada en un rincón jugando. No existe pareja más unida.

—¿Jugando a qué? —levanté una ceja negándome a mí mismo que se refiriese a jugar con aquel aparato con el que había estado antes.

—Me da igual que no hagas nada mientras pueda seguir participando —comentó sin girarse ni para mirarnos—, mientras me permitas seguir participando.

—Claro que sí, querido —la niña rió sin que yo pudiese entender el por qué, no entendía su humor, supuse.

—No eres de por aquí ¿Verdad? —me dirigí a la niña, solo para asegurarme. Ya imaginaba que era de otro mundo, pero quería estar totalmente seguro—. Ese aparato y tus conocimientos sobre los sincorazón... Alguien de por aquí no debería saber nada.

[Final Fan]

—¿Tienes problemas, muchacho? Se te ve mal —dijo Hades, serio de repente—. ¡Con lo bien que estás luchando ahí fuera! Pero no hagas caso a ese pesado de Neso. Debió malinterpretar mis palabras. Le dije que le daría la llave de la victoria, no es mi culpa si pensó que invitarte a participar significaba que venías para perder ante él.

—Ah, así que era eso... —pensé en alto.

Entonces era Neso el que había pensado aquello. Me sentía mucho más aliviado sabiendo que Hades no había tenido nada que ver.

—¡Mira lo que te traigo!

El dios me tendió algo que identifiqué al momento: un helado de color azul claro que, si no estaba equivocado, debía ser de sal marina. ¡Igual que el que Saxor me había comprado el día anterior, en Villa Crepúsculo. No me solían hacer regalos así porque sí...

—¿Pero por qué...?

—¡Traído por una amiguita para ti de un lugar muy lejano! Cógelo rápido, que se me derrite —dijo, atropelladamente, a lo que respondí agarrando el palo del helado para que no le pasase nada—.Mira, ignora a ese tipo: tú sigue participando, puedes ganar. ¿Qué mal puede haber en que te haya invitado a unos juegos que estás ganando? Yo te lo diré: ¡traer otro héroe que luche contra los malos y todas esas tonterías! Soy un filántropo, ya sabes.

No había entendido muy bien sus últimas palabras, quizás porque me había obcecado un poco con lo que había dicho del helado... ¿Que me lo traía de parte de quién?

—¿Una amiguita? ¿Qué... qué amiguita? —pregunté, no muy convencido.

Hablando con Hades estaba consiguiendo dejar de pensar en lo que me había hecho recordar la carta de Lyn. Al final había conseguido relajarme saliendo a tomar el aire, aunque no de la forma que pensaba.

[Soul Artist]

El Señor del Inframundo dedicó una sonrisa como respuesta a Fyk, dejándole claro que no contestaría a su pregunta. Puso su mano izquierda en la espalda del chico y le acompañó hasta la entrada del Coliseo, invitándole a volver a entrar.

—¡Mira la hora, ya van a comenzar las semifinales! —señaló el dios—. No dudes que estaré atento viendo cómo mi chico favorito gana. ¡Acuérdate de mi nombre cuando estés en lo más alto! Y, eh, ánimo. ¡Ya verás cómo demuestras a todos que los de color azul somos superiores!

Era cierto, pronto su combate empezaría. En cuanto llegase Phil iban a poder pasar a la zona de combate y a enfrentarse a Alexis y el chico rubio.

Si pensó en darle las gracias a Hades, no fue posible. El señor de los muertos había desaparecido sin dejar rastro, sin apenas esperarle.

* * *
La niña frunció el ceño ante las palabras de Ragun. Con un salto se agarró a su cuello, obligándole a agacharse para colocar su oído al nivel de su boca.

—¡Tontorrón, claro que soy de Tebas! —gritó en alto mientras se lanzaba a por él, de forma que todos los participantes pudieran escuchar su afirmación. Una vez le tuvo agarrado, bajó el volumen a susurros—. ¿Qué haces? ¡Es un secreto, idiota! ¿No te han enseñado nada los Maestros?

Aquello era prácticamente una confirmación a la pregunta de Ragun. Lo cierto era que a todo el mundo le había llamado la atención lo que el joven había dicho, seguramente porque no conocían nada más allá de su ciudad colina abajo; incluso Cloud observaba con malos ojos al muchacho, lo que podría hacerle sospechar que quizás tampoco fuese del Coliseo del Olimpo.

—Cuidado con tu lengua —le advirtió simplemente el rubio.

El hombre se apartó de la puerta, dirigiéndose hacia la entrada del campo de batalla. Alexis soltó a Ragun y se dirigió hacia su compañero, olvidándose de portador de la Llave Espada; quizá pensó en seguirla para disipar más dudas, pero justo entró Fyk allí y, un par de minutos después, Phil. En cuanto les vio se acercó a ellos un par de pasos, algo serio.

—Saludos de parte de Zack, ha preguntado por vosotros —informó el organizador, acicalándose la barba—. Os da un aviso: cuidado con el pelopincho. Pero bah, podréis con esos dos novatos con los ojos cerrados. ¿Estáis preparados? Lo estéis o no, el combate empezará ahora.

[Sombra]

La niña frunció el ceño ante las palabras de Ragun. Con un salto se agarró a su cuello, obligándole a agacharse para colocar su oído al nivel de su boca.

—¡Tontorrón, claro que soy de Tebas! —gritó haciendo que todos los participantes la mirasen, justo entonces me agarró y acercó su cara a mi oído—. ¿Qué haces? ¡Es un secreto, idiota! ¿No te han enseñado nada los Maestros?

Había cometido un error fatal, sin duda. Al haberme centrado en la niña y su acompañante me había olvidado por completo del resto del mundo. Bajé la cabeza algo avergonzado por mi error.

—Cuidado con tu lengua —continuó Cloud con voz monótona siguiendo la bronca que Alexis acababa de echarme.

Al menos, aquello me había servido para saber que realmente no era de ese mundo, incluso Cloud, que pegaba a la perfección con aquel mundo no parecía ser de allí por su advertencia.

El hombre se fue alejando de la puerta y fue directo a la entrada del campo de batalla sin decir nada. La muchacha me soltó y siguió a su compañero. Miré como ambos se alejaban hacia la arena. Ya casi era nuestro turno y Fyk todavía no había vuelto, tenía que ir a buscarlo. Justo cuando iba a salir a por él este apareció por el pasillo.

—Ah, Fyk. Nuestro combate empezará dentro de poco —comenté.

El hombre-cabra también dio acto de presencia, su cara estaba más seria de lo usual, cosa que me llamó la atención.

—Saludos de parte de Zack, ha preguntado por vosotros —nos dijo con cierta seriedad—. Os da un aviso: cuidado con el pelopincho. Pero bah, podréis con esos dos novatos con los ojos cerrados. ¿Estáis preparados? Lo estéis o no, el combate empezará ahora.

—Sí, estamos preparados —asentí—. ¿Vamos, Fyk?

[Final Fan]

Me hallaba ciertamente confuso lamiendo el polo, preguntándome todavía a quién se referiría Hades con "amiguita". Hades me empujó levemente en el hombro alentándome a volver a entrar en el coliseo...

—¡Mira la hora, ya van a comenzar las semifinales! —me recordó—. No dudes que estaré atento viendo cómo mi chico favorito gana. ¡Acuérdate de mi nombre cuando estés en lo más alto! Y, eh, ánimo. ¡Ya verás cómo demuestras a todos que los de color azul somos superiores!

Tal vez estaba pecando de ingenuo, pero yo era así, claro. Aquellas palabras de ánimo me imbuyeron de ganas de ganar el combate que nos esperaba contra Alexis y Cloud.

—¡Gracias! ¡No le...! —comencé.

Pero el dios ya no estaba allí. Cuando me di la vuelta, Hades se había desvanecido de aquel lugar, como un fantasma.

* * *

Entré en el vestuario en el que se hallaban los participantes apurando el último trozo del helado y mirando a Ragun con una mirada de disculpa. Me había vuelto a poner tonto, así que había faltado al trato que yo mismo había propuesto. Intenté dejar de pensar en la carta de Lyn, aferrándome a las palabras de apoyo de Hades...

—Ah, Fyk. Nuestro combate empezará dentro de poco —comenté.

—Ya, sí, sí, lo siento —dije, rascándome la nuca—. Es que me he encontrado con... bueno, es que me he liado, ja, ja.

En aquel momento llegó Filoctetes al recinto, con cara de circunstancias.

—Saludos de parte de Zack, ha preguntado por vosotros —dijo el fauno.

—¡Entonces está bien! Menos mal... —suspiré, aliviado, mirando de reojo a nuestros contrincantes.

—Os da un aviso: cuidado con el pelopincho —aparté rápidamente mi vista de Cloud, alarmado de repente— Pero bah, podréis con esos dos novatos con los ojos cerrados. ¿Estáis preparados? Lo estéis o no, el combate empezará ahora.

—Sí, estamos preparados —aseguró Ragun—. ¿Vamos, Fyk?

—C-claro. Quiero decir... ¡por supuesto! —dije, intentando parecer convencido.

[Soul Artist]

El público en las gradas enloqueció al ver a los dos aprendices de la Llave Espada. Estaban realmente impacientes por verles luchar, gritaban y aplaudían a ambos chicos. Unas jóvenes habían creado un improvisado cartel de tela donde aparecía la cara de Ragun algo poligonal con debajo escrito "Scarfman" para animarle. Quizá con el tiempo se volviesen tan famosos como Lyn, aunque seguramente aquellas fans no eran aficionadas al chico por sus dotes de lucha.

Ya en el campo de batalla, Cloud clavó su mirada en ellos y montó su enorme espada al hombro. Alexis, por su parte, se estiró y bostezó energéticamente, desperezándose. Sonrió a los chicos y sacó su videoconsola, como en la sala de espera, mientras la encendía.

—Te encargas tú, ¿no, Cloud? —preguntó la despreocupada niña, mientras se acercaba a uno de los cuatro pilares que mantenían las barreras mágicas—. Yo echaré unas partidas ahí. No me apetece mucho molestarme.

—Nunca te apetece —criticó el hombre rubio a la chica, aunque ella no dio importancia a sus palabras.

—¡Semifinales! ¡Blue Kid y Scarf Man contra Alexis Blackblood y Cloud Strife!

Los aplausos y gritos de júbilo fueron mayores cuando el nombre del pelopincho fue nombrado, tanto de los hombres que esperaban ver un gran combate como de las jóvenes adolescentes. Estaba claro que gran parte del coliseo apoyaba al muchacho, en vez de a Fyk y Ragun; Alexis era bastante más indiferente para el público.

—Vosotros no sois mi objetivo —señaló Cloud, fijando la mirada en los aprendices y colocando su espada en posición de combate—. Visteis qué sucedió con nuestro primer contrincante y sabéis cómo quedó vuestro amigo. Rendíos ahora y nadie saldrá perdiendo.

Cloud parecía dispuesto a negociar y sería un contrincante realmente diferente. Por otra parte, Alexis no parecía estar en absoluto dispuesta a luchar de momento: se había ido a su rincón a jugar a la videoconsola y parecía muy entretenida en ello.

La gente ya esperaba el combate.

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Orden de combate:
- Fyk
- Ragun
- Cloud

Alexis: ¿?

[Final Fan]

El estadio parecía hervir con todos los espectadores que se habían reunido en él. El ambiente estaba mucho más caldeado que en las dos rondas anteriores, se notaba. La presencia de Cloud, que parecía atraer la atención de la mayoría de ciudadanos de Tebas, y de Ragun, que daba la sensación de haberse hecho con su propio club de fans, contribuían a que los nervios de la afición estuviesen más a flor de piel que de costumbre. Busqué entre las gradas alguna cabeza en llamas, pero parecía que Hades no se encontraba entre el público. ¿Me estaría viendo desde otro lugar?

En cuanto nos hubimos colocado en el ring, Alexis no dudó en desentenderse del combate e irse a jugar con aquel extraño aparatito a una esquina de la arena. Cloud se dirigió a nosotros entonces:

—Vosotros no sois mi objetivo —dijo, poniéndose en guardia—. Visteis qué sucedió con nuestro primer contrincante y sabéis cómo quedó vuestro amigo. Rendíos ahora y nadie saldrá perdiendo.

Escudriñé sus ojos azules intentando adivinar cuáles eran sus intenciones, pero no logré sacar nada en claro. Focalicé parte de mi poder mágico en mis ojos e intenté analizarlo de forma más profunda con Libra.

—¿Quién es tu objetivo, entonces? —pregunté, poniéndome en guardia.

[Sombra]

Salimos por fin al exterior, el fresco aire me llenó al instante ya que comparado con el cargado ambiente de la sala de espera era un cambio muy brusco. La gente estaba aclamando y vitoreando a nosotros, los participantes con un entusiasmo que no había visto en los primeros combates. Entre el público pude reconocer una pancarta con mi cara en esta que estaba siendo sujeta por un grupo de personas que parecían admirarme. Oculté un poco más mi cara ligeramente avergonzado.

Alexis sin ningún aparente motivo se alejó hacia una esquina del ring donde encendió su videoconsola para empezar a jugar con esta ¿Entonces era verdad que no quería participar? Cloud fue el único que parecía dispuesto a encararnos.

—Vosotros no sois mi objetivo —informó de pronto, en mi mente apareció fugazmente la cara de Neso junto a las palabras que había dicho tras su derrota en la ronda anterior—. Visteis qué sucedió con nuestro primer contrincante y sabéis cómo quedó vuestro amigo. Rendíos ahora y nadie saldrá perdiendo.

—¿Quién es tu objetivo, entonces? —interrogó Fyk antes de que yo pudiese decir nada. En mi cabeza se estaban uniendo piezas de una especie de puzzle. Hades había invitado a Fyk, Neso decía algo sobre un plan, además de "otro tipo más" que estaba con él y Cloud hablaba de nosequé objetivo. ¿Estábamos participando en alguna clase de conspiración? Pero faltaban demasiadas piezas del puzzle, ¿pero qué?

—Cloud ¿Tu objetivo está de alguna manera ligado a Neso o a ese tal Hades? —intenté que me contestase para despejar mis dudas invocando también mi llave espada y poniendola en posición defensiva.

[Soul Artist]

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Datos que ha proporcionado Libra:
· Nombre: Cloud Strife
· VIT: 25/25
· Nivel: 12
· Características:
- Gran manejo de las armas blancas.
- ???
- Afinidad a Electro.
· Punto débil:
- ???
· Habilidades:
▪ Omnilátigo (HC) [Nivel 12] [Requiere Combate con Armas Blancas: 16; Elasticidad: 14]. El usuario vuela y golpea varias veces con su arma a los enemigos, volviéndose invencible en el proceso. Ataque muy rápido y difícil de esquivar.
▪ ???
▪ ???

Cloud mantuvo su espada en guardia, preparado para cualquier ataque que le pudiesen lanzar. Sin embargo no hubo necesidad de moverse, al no verse en peligro por parte de ninguno de los dos

—¿Quién es tu objetivo, entonces?

—No es vuestro asunto —le cortó el pelopincho, sin apartar la vista del extraterretres azul. Se dirigió hacia Ragun, el cual también tenía preguntas por hacerle.

—Cloud ¿Tu objetivo está de alguna manera ligado a Neso o a ese tal Hades?

Ante aquello el guerrero no contestó; solo dirigió una mirada de enfado al chico, mientras agarraba con más fuerza el mango de su arma. Dio un paso adelante, viendo que no le pretendrían atacar, y alzó su enorme espada hacia el cielo.

—¡¡Omnilátigo!!

Cloud se cargó de poder, recorriéndole rayos amarillos por todo el cuerpo. Somenzó a elevarse del suelo, todavía con la espada en alto, y entonces dirigió su mirada hacia Fyk. Quizá el pequeño extraterrestre azul imaginase lo que se le venía encima e intentase huir o defenderse; fuese como fuese, fue inútil.

Su contrincante se lanzó rápidamente contra él, a la velocidad del rayo, y la espada le golpeó con fuerza, lanzándole un par de metros a distancia. A continuación, Cloud continuó volando alrededor del chico, preparado para otro nuevo ataque, y en cuanto Fyk se hubiese vuelto a levantarse le atacó por la espalda. El extraterrestre azul quedó inconsciente, ya fuera de combate. El último ataque del guerrero fue contra Ragun, el cual tampoco pudo hacer mucho ante la fuerza de aquel sobrehumano enemigo, y se vio arrojado en el suelo.

El pelopincho descendió al suelo y bajó su espada, agachándose para tomar aire. Estaba claro que el ataque le había debilitado y ahora se encontraba indefenso, pero no sería por mucho tiempo. Dependía de Ragun ahora.

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Turno de Ragun, ya que Fyk ha caído en combate. Os recuerdo que está permitido el uso de un objeto por persona en cada ronda, y que con una Poción rápidamente se "resucita". Os aconsejo no desperdiciar más turnos de combate, en serio, que Cloud os ventila como habéis visto.
PD: Si devolvéis el conocimiento a Fyk, irá después de Ragun y antes de Cloud.

[Sombra]

Todos aquellos instantes desde mi pregunta habían sucedido en cuestión de sengundo, como un rayo atravesando el cielo. Cloud se había limitado a usar algún tipo de habilidad que había llamado ¿Omnilatigo? que utilizó contra Fyk tirándolo al suelo, justo cuando este trató de ponerse en pie volvió a la carga brillando con intensidad dejándolo fuera de combate.

—¡¡Fyk!! —grité cuando vi como mi compañero caía derrotado, pero no pude hacer mucho puesto que el siguiente ataque fue contra mí. Aquel golpe me lanzó contra el duro suelo, aunque me levanté al momento. Lancé una poción al aire que dirigí hacia Fyk haciendo que sus fuerzas fuesen recuperadas rapidamente y sin previo aviso empecé a correr hacia el ahora debilitado Cloud. Cuando estuve a escasos cuatro metros de él levanté mi llave espada apuntándole y usé una de mis habilidades:

—¡Impulso Tenebroso!

Una Razia tenebrosa salió de la espada y me oculté tras esta, cuando el primero de los ataques impactase en el rubiales usaría mi "factor sorpresa" para soltar un Golpe Contundente que sería casi imposible evadir en su actual estado.

[Final Fan]

—¡¡Omnilátigo!!

Poco más pude llegar a oír tras aquella palabra de Cloud. Fui lanzado por los aires con el súbito ataque del joven, aterrizando estrepitosamente cerca de los límites del ring. Intenté reponerme, pero fue demasiado tarde... Cloud era muy rápido, y un segundo sablazo con su enorme espada acabó por noquearme sin darme tiempo siquiera a reaccionar.

—Ha... kuu'... jorr... —musité, antes de caer inconsciente.

Después de cerrar los ojos, me di cuenta de lo mucho que puede llegar a pensar uno mientras está desmayado. ¿Qué pensaría Ragun de mi derrota? ¿Y Hades, que me había instado tan encarecidamente a ganar? ¿Resolvería el malentendido con Lyn en algún momento? ¿Qué era aquel ritual que mi madre...?

—¡¡Fyk!! —oí, de repente.

Recuperé las fuerzas al instante, como si me hubiesen echado una jarra de agua fría tras un largo sueño... aunque me di cuenta de que tan sólo habían pasado unos segundos. Ragun se ocultaba tras uno de sus ataques de Oscuridad para intentar acertarle a Cloud, mientras Alexis seguía sin hacer nada. ¿Estaría el pelopincho concentrado en los ataques de Scarf Man?

"Tan sólo necesito que no me vean, que no me vean, que no me vean...", pensé con fuerza, todavía sin levantarme del suelo. "Sólo tengo posibilidades de hacer algo si logro esquivar sus ataques... que no me vean... ser invisible, Tenue como un fantasma..."

Por mucho que desease ocultarme de la vista del enemigo en aquel momento, sabía que tenía que correr si no quería llevarme otra paliza, así que comencé a surcar tan rápido como podía el borde de la arena, deseando fervientemente tener Buena Estrella en el combate. No nos vendría mal tener la suerte de nuestro lado...

[Soul Artist]

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Datos que ha proporcionado Libra, actualizados a este momento del combate:
· Nombre: Cloud Strife
· VIT: 15/25 [!!!]
· Nivel: 12
· Características:
- Gran manejo de las armas blancas.
- ???
- Afinidad a Electro.
· Punto débil:
- No puede moverse tras usar Omnilátigo. [!!!]
· Habilidades:
▪ Omnilátigo (HC) [Nivel 12] [Requiere Combate con Armas Blancas: 16; Elasticidad: 14]. El usuario vuela y golpea varias veces con su arma a los enemigos, volviéndose invencible en el proceso. Ataque muy rápido y difícil de esquivar.
▪ ???
▪ ???

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Usado Random.org para decidir sobre el aturdimiento del Golpe contundente y Buena estrella bajo notario y notaria.

· El aturdimiento de Golpe contundente ha sido... Exitoso. Increíblemente. Cloud no puede defenderse ni atacar este turno.

· Las estadísticas que ha aumentado Buena estrella son Velocidad, Combate con armas blancas y Puntería. Duración: dos turnos cada uno (no cuenta el post en el que el hechizo fue utilizado). Tenue dura el mismo tiempo.

Cloud se vio atacado por todas partes de golpe tras usar la poderosa habilidad que había dejado fuera de combate al extraterrestre azul. Por una parte, el Impulso tenebroso de Ragun se había vuelto completamente inesquivable para el rubio, pues parecía estar realmente agotado. De modo que el Golpe contundente tampoco pudo pararlo, al venir automáticamente después; y es más, el ataque noqueó sorprendentemente al guerrero, incapaz de reaccionar.

Tenían la oportunidad de seguir atacando mientras Cloud se encontraba confuso, antes de que volviese a lanzarles la peligrosa habilidad.

Alexis, por otra parte, levantó ligeramente la vista de su videoconsola para ver cómo avanzaba el combate. Al ver el estado del pelopincho no se preocupó ni se movió de su sitio; suspiró con fuerza y apagó la consola, guardándola en su bolsillo. Se movió ligeramente de su sitio para tener una mejor perspectiva del combate, callada. Había perdido de vista al pequeño ser azul, pero la Llave Espada Oscura de Ragun era lo que aparentemente le llamaba la atención de verdad. Rió por lo bajo, observando sonriente.

[Final Fan]

Parecía increíble. ¡Era como si todos lo que pedía se hiciese realidad! Mientras corría vi cómo mi cuerpo desaparecía, y tras desear buena suerte para el combate noté cómo una misteriosa magia me daba fuerzas. Parecía que mi poder mágico no estaba ligado únicamente a mis palabras... ¿también a mis deseos? Decidí hablar de ello con el Maestro Kazuki al llegar a Tierra de Partida, pero en aquel momento era más imperativo acabar de una vez el combate... ¡y parecía que Cloud era vulnerable!

Con la carrerilla que había acumulado, decidí lanzarme directamente a por nuestro contrincante. Cuando hubiese llegado a su lugar, saltaría para propinarle un invisible puñetazo en la cabeza con todas mis fuerzas, para luego volver a alejarme rápidamente, por si se recuperaba.