Los cuatro jóvenes que decidieron salir de la estación por la puerta principal se llevaron una desagradable sorpresa.
Una niña se encontraba sentada en el suelo junto con su paraguas con la espalda pegada al pequeño muro que le separaba de las vistas a la ciudad. Pero aquello le daba igual: era más importante la partida a la que estaba jugando en su videoconsola portátil. Durante unos segundos pudieron pensar que no se había percatado de su presencia, pero no tardaría en corregirles:
—
Vamos, Shantae, tengo que guardar la partida para hacer mi trabajo como Reaper...La chica suspiró, levantando la mirada un segundo de su videoconsola para observar a los aprendices. Perdió de inmediato el interés y, nuevamente, volvió a centrarse en el videojuego.
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Está bien, mientras no pueda guardar...Un joven de dieciséis años vestido de blanco y con un gorro negro que ocultaba su pelo rubio salió de la estación, pasando por al lado de los aprendices. Lo más llamativo de él era la enorme cicatriz que cruzaba su frente, además de su actitud llena de prepotencia. Portaba una espada de Struggle de aspecto inofensivo en su cintura, color azul marino.
La niña tomó el paraguas del suelo y apuntó con él al joven, que de inmediato se detuvo, de espaldas a los aprendices.
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Elimínalos. Porfi.El joven se giró de golpe y vieron cómo sus ojos habían adquirido un brillo color rojo intenso repentinamente, junto con una sensación de calma total. Pero parecía que iba a obedecer sus órdenes.
Tomó su espada y golpeó con fuerza a Zait y a Ike sin previo aviso. El ataque a traición les pilló por sorpresa y les provocaron serios daños, notándose de inmediato más debilitados.
Iba a acabar con ellos.
* * *Fyk y Yagami salieron a través de la puerta, saliendo de los túneles interiores y llegando al exterior. Lo primero que les llamó la atención fue un tranvía, que comenzaba a frenar cerca de la plaza mayor. Desde su posición, los jóvenes podían ver una serie de puestos de tiendas, aunque la más llamativa era una colocada en el centro, de aspecto circular y que, si habían visitado el mundo, sabrían que anteriormente se había tratado de un local donde vendían golosinas. Ahora, sin embargo, tenía un cartel encima que decía claramente "Venta de Segunda Mano Stan", con la cara de un tipo conriente y un enorme sombrero.
Aparte de ello, todo seguía igual. La salida a los Altos de la Estación era la más cercana, a su izquierda; más allá, un agujero oculto en una pared les permitía viajar hasta el bosque de la colina, y si se desviaban llegarían al Solar Deportivo.
—
Caído como un rayo del cielo...Cinco nubes de oscuridad surgieron alrededor de Fyk y Yagami, y así fueron invocados un grupo de Sincorazón que pronto rodearon a los dos jóvenes. Su cabeza circular y una cuerda encima de ellos a modo de pelo les recordó la forma de una bomba, y era más que probable que fuesen eso: bombas que estallarían de un momento a otro.
—
¡Es la hora de la Entrevista Reaper! —volvió a hablar la voz femenina, cuyo origen no eran capaces de localizar los chicos—
. Fallad, y estos Sincorazón explotarán por los aires, eliminando vuestra existencia. Acertad, y quizás os deje ir... Aunque me lo plantearé seriamente.La amenaza parecía ir en serio. Para su desgracia, se habían topado de lleno con un Reaper, y en vez de acabar con ellos directamente, quería jugar como si fuesen animalitos en una jaula. ¿Pero era un juego, u otra cosa...?
—
¡Primera pregunta! Tenéis una oportunidad cada uno. ¿Cuál es la posesión más preciada de la Maestra Lyn?Menuda pregunta. ¿Y ellos qué sabrían? Sí, era imposible que lo supiesen, pero de algún modo,
una fuerza superior tendría que iluminarles la cabecita para poder contestar y no ser eliminados. Aunque fuese lo primero que se les ocurriese decir.
—
¿Estáis seguros? —preguntó la voz, haciéndoles dudar de su respuesta seriamente—
. ¡Segunda pregunta! ¿De qué material está hecha la espada del líder de los hunos?Aquella se las traía. De nuevo, habría que tener suerte o inspiración de algún tipo de divinidad como para saberlo.
—
Si eso queréis pensar... —se burló la chica una vez hubiesen contestado, aunque no les dio oportunidad de corregirse—
. ¡Última pregunta! ¿Dónde suele ocultarse Kazuki cuando le toca vaguear y su habitación no es segura?¿¡Pero a quién se le habían ocurrido esas preguntas!?
* * *No me habéis dejado claro qué queréis hacer. Pero como Hitori ha cedido hablando (que no pensando) y Mickael ni ha contestado a la propuesta de subir, tomaré por sentado que subís gracias al poder de la democracia hablada en alto.
Hana, Mickael e Hitori se dirigieron hacia lo alto de la torre, aunque el último no mostrara muchas ganas de hacerlo por recuerdos del pasado que le traían.
El camino de las escaleras fue de lo más normal. Agotador, incluso, pues la torre no venía siendo precisamente pequeña y nadie se había molestado en incluir un ascensor para los pobres discapacitados. Sólo podían avanzar y avanzar en unas escaleras de ladrillo pintadas del mismo color que las paredes: naranja suave. La idea de Hana no parecía haber sido muy buena.
Pero llegaron. Tras rato largo (¿media hora?), alcanzaron lo más alto y pudieron disfrutar de unas magníficas vistas de la ciudad desde el punto más alto de esta. Los tres jóvenes que habían visto con anterioridad habían ido a sentarse en el borde del reloj, mientras tomaban helados de sal marina y reían entre sí. Uno de ellos, el más alto, dio un empujón al otro, más rechoncho, por una broma sobre él que acababa de hacer.
La amistad, gran tesoro...Aunque la voz no procedía de ninguna parte en concreto, algo en el aire invitó al trío de Jugadores a girarse a mirar hacia las escaleras. Una figura bajita, como la de un niño, se encontraba de pie frente a ellos, vestida con un traje negro que le llegaba hasta los pies y una capcuha que no permitía distinguir su sexo siquiera.
La figura avanzó hacia adelante con paso lento y pasó entre los aprendices, dirigiéndose hacia el borde. Se quedó de pie, frente al pequeño muro que evitaba que nadie se cayera, puesto que a aquella altura sería complicado sobrevivir.
En ese momento, los tres jóvenes recibieron un mensaje en el móvil. Al igual que el de la misión del día anterior, era incomprensible para ellos:
63 91 31 22 33 71 33 62 31 81 22 22 71 22 41 31 33 71 31 41 32 91 22
33 31 63 51 12 91 22 31 63 92 12 73 81 22 81 91 63
22 91 92 91 81 73 01 91 41 51 12 63 22 71 22 33 91 41 12 13 91 63 31 22: NSRB
~ La Game Master
Me recuerdan tanto a Ronin... A Ryota... Y a ti.El encapuchado dirigió su mirada hacia el trío de amigos, que les ignoraban por completo. Era como si se hubiesen vuelto invisibles, pues ni siquiera prestaron atención a la figura encapuchada que estaba a apenas unos metros. El desconocido volvió a mirar hacia el sol, que se ocultaba en el horizonte.
La luz del sol... El eterno crepúsculo de esta ciudad... Me recuerdan a ti. Fue aquí...Se giró hacia los tres aprendices nuevamente con la mirada perdida. Tras unos segundos de silencio, se metió la mano en el bolsillo de su traje y sacó una esfera grisácea que dirigió hacia ellos: un PowerUp. Extendió la mano para que uno de ellos lo tomara, pero en vez de esperar a que se aproximaran, dejó que cayera al suelo, esperando que se agacharan para recogerlo.
Después de que tomaran el objeto, la figura se desvaneció y volvió a surgir a espaldas de ellos, en las escaleras que descendían de nuevo a la estación.
El final es donde vosotros comenzáis.Y tras aquellas misteriosas palabras, se giró y descendió por el camino.
Fecha límite: sábado 24 de Noviembre, 21.00, hora peninsular.
Siguiente ronda: domingo 25 de Noviembre, 00.00, hora peninsular.