[Evento Global] Ruta del Caído

Keiko, Yui, Nikolai, Light, Saxor, Maya, Nicoxa, Malik, Alec, Coli

Nunca olvidarás que tomaste parte en alguno de estos jolgorios. Kazuki tampoco.

Moderadores: Suzume Mizuno, Denna, Astro, Sombra

Re: [Evento Global] Ruta del Caído

Notapor LightHelco » Lun Jul 27, 2015 12:21 am

Señorita Nicoxa, aguante —le pedí a la mujer desatándome el lazo que llevaba al cuello y se lo coloqué en la herida —. Apriete con fuerza, puede devolvérmelo más tarde.

Maya y Gabriel estaban teniendo problemas para deshacerse del encapuchado y además Maya parecía haberse quedado en blanco al realizar un hechizo ¿ella también habría perdido recuerdos? Ya se lo preguntaría después, ahora debíamos escapar. Silbé dándole el aviso a Ilana para que atacara, aunque su ayuda no fue muy útil, ya que nuestro enemigo se la quitó de encima de una patada, aun así le dio valiosos segundos a los dos niños para llegar a la puerta.

¡Daos prisa, rápido! —les grité volviendo a silbar para que Ilana también regresara.

El hombre lanzó un nuevo hechizo en dirección a la brujita, del cual se libró con suerte gracias a un empujón de Gabriel, aunque eso hiciera que alcanzara mi costado por haberme encontrado en medio de la trayectoria. No era una herida muy grave, así que iba a poder seguir corriendo sin problemas, aun así primero debía esperar a que Ilana volviese conmigo.

Tranquila, estoy bien, tenemos que salir de aquí —le diría a Maya en caso de que se preocupara de la herida.

En ese instante, la pluma que portaba la niña se iluminó de forma que detuvo el avance del encapuchado y además dejó durante unos instantes su rostro al descubierto, uno que me resultaba ligeramente familiar… ver el rostro sorprendido de Gabriel me fue suficiente para compararlos, la sombra era una versión adulta del niño ¿Cómo era aquello posible?

«¡A la Biblioteca! ¡Rápido, escapad! ¡Salvad a Gabriel!»


Pudimos escuchar una voz en nuestras cabezas. Miré a Gabriel esperando a que el chico nos dijera donde se encontraba aquella habitación, aunque no nos lo dijese, teníamos que seguir bajando las escaleras. Nuestro enemigo mientras tanto y viendo que cada vez nos alejábamos más de él, cambió de forma mostrándose ahora como el lobo que nos había atacado en el lago. Aquel monstruo había conseguido bloquear varios de mis recuerdos de una dentellada, ¿qué podría hacernos si nos atrapaba del todo? Ni quería arriesgarme a descubrirlo.

¡Entrad, rápido! —les gritaría a todos al llegar a la puerta de la biblioteca y abrirla, no entraría dentro hasta que no estuviesen los cuatro en el interior, aunque Ilana no tardó mucho en escabullirse dentro.

En cuanto solo quedase el lobo fuera, entraría y cerraría la puerta apoyando o tirando de ella (dependiendo a qué lado se abriese) para que la sombra no pudiese llegar a tiempo. En el interior de la sala pudimos finalmente ver la salida del recuerdo, y como había ocurrido en el anterior, en este también estaba inscrito algo aunque me era imposible leerlo ya que me encontraba centrado en que la puerta no se abriese. Tuve que esperar a que una de mis compañeras lo leyese en alto para poder pensar las palabras.

¿Los algo son reales? ¿Qué puede ser real?” me estrujé la cabeza intentando descubrir aquellas dos palabras “Agh… he tenido que escucharlas, justo como en el anterior recuerdo

Fue entonces que recordé las palabras del niño del sótano, el cómo me advertía de una amenaza real. El monstruo lo había llamado.

¡Los Monstruos son reales! —exclamé finalmente dando la frase completa —. La segunda palabra es Monstruos.
ImagenImagenImagenImagen



Logros:
Spoiler: Mostrar
ImagenImagenImagen


Awards:
Spoiler: Mostrar
ImagenImagen
ImagenImagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Avatar de Usuario
LightHelco
111. Roxas Organización
111. Roxas Organización
The Unknowns
 
Mensajes: 3303
Registrado: Jue Jun 07, 2012 10:42 am
Dinero: 320,406.83
Banco: 15,568.00
Ubicación: Un lugar con lapiz y goma
Sexo: Femenino
Clan: The Unknowns
Estantería de objetos
Karma: 16

Re: [Evento Global] Ruta del Caído

Notapor Zodiark » Lun Jul 27, 2015 12:52 am

Buen farol —dijo la chica peliazul, levantando el pulgar y guiándo un ojo, tras mi fallizo hechizo—.

Sí, gracias... —respondí levantando la mano, con el brazo aún adormilado, mientras corría con Gabriel, disimulando el hecho de que, en realidad, había sido un fallo. ¿Qué me acababa de ocurrir? ¿Me estaría afectando la influencia del castillo...?

El encapuchado reaccionó con un sonoro "¡No!" al oírme hablando directamente a la pluma. ¿Quizá conocía su secreto, y además le temía? En cualquier caso el tipo quería evitar que la pluma hiciese algo a toda costa, así que no tardé mucho en ver un rayo de oscuridad volando hacia mí. Por suerte Gabriel reaccionó rápido y me empujó apartándome de la trayectoria del hechizo.

Gracias, Gabriel —Dediqué una sonrisa cálida y agradecida al chico.

Me dispuse a reincorporarme para seguir huyendo de allí, pero entonces, de súbito, noté otro latido de la pluma. Cada vez eran más fuertes. Aquél en concreto fue tan fuerte que pareció estallar, y de hecho por unos segundos pensé que así había sido, al ver que, de pronto, emitió un deslumbrante destello.

El encapuchado gritó, y su capucha voló hacia atrás, dejando al descubierto su rostro, que era visible a pesar de sus esfuerzos por intentar recolocársela.

¿Pero qué...? ¿Quién...?

Estaba totalmente confusa. No estaba segura, pero aquel rostro... parecía ser él. Era idéntico a Gabriel. La cara del niño era todo un poema, evindentemente. Tampoco podía creer lo que estábamos viendo.

Gabriel, ¿qué está pas...

«¡A la Biblioteca! ¡Rápido, escapad! ¡Salvad a Gabriel!»


Antes de poder terminar, la voz sonó de nuevo en mi cabeza, y por la expresión de los demás parecía que también en las suyas. Asentí con la cabeza y volví a agarrar a Gabriel de la muñeca. Acto seguido, eché a correr de nuevo.

Es inútil. Sabes que no se puede cambiar el pasado, Nithael. Da igual cuánto lo intentes, cuánto lo repitas en tu cabeza. «Si hubiera estado ahí, si hubiera sabido ver, si hubiera podido ayudarle…» Nada importa, porque no llegó a suceder.

En efecto, se trataba de Nithael. Él era quien me estaba ayudando, quien estaba guiándome a través de la pluma. Y aquella especie de versión adulta de Gabriel parecía estar hablándole.

Lo siento—susurró Gabriel, sus ojos cubiertos de lágrimas—. Lo siento de verdad.—A continuación, acercó su boca a mi oído, para que sólo yo pudiera escucharle—: No soy más que un fantasma del pasado. Nithael nunca ha podido librarse de la culpabilidad porque no pudo salvarme. ¡Por eso… tengo que llegar hasta él! ¡Tengo que romper este bucle, aunque sólo sea para…! ¡Cuidado!

No tuvo tiempo de acabar de hablar, ni yo de procesar la información, cuando vimos que las paredes de los pasillos se estaban volviendo oscuras y parecían surgir unos picos muy extraños de ellas, parecidos a unas mandíbulas, como si cobraran vida. ¿Sería aquello obra del encapuchado? Éste, de nuevo, se transformó en el lobo que nos había atacado en el lago. Me di prisa en echar a correr una vez más para alejarme de él.

No entiendo muy bien de qué va todo esto —respondí al chico, también susurrando, continuando nuestra carrera por los tenebrosos pasillos—. Tendrás que explicármelo luego con más calma, ¿vale?

Al llegar a la biblioteca, encontramos un arco de luz con una inscripción, que parecía incompleta. Nicoxa y yo nos acercamos para echarle un vistazo, mientrastanto Alec se quedó bloqueando la puerta para que el lobo no entrase.

Los que no pueden recordar el... están condenados a repetirlo. Los... son reales y los... también: Viven dentro de nosotros. Y, a veces, ganan.

»Está incompleta... ¿La resolvemos?

Nicoxa intentó adivinar la primera palabra. "Pasado" fue su propuesta. Alec, por su parte, propuso que la segunda palabra debía ser "Monstruos". Sólo quedaba la última.

¿"Los monstruos son reales"? ¿"Y los..."?

Miré a Gabriel, recordando lo que acababa de susurrarme, y una bombilla se encendió sobre mi cabeza. "No soy más que un fantasma del pasado".

Los fantasmas. Creo... que la tercera palabra es "Fantasmas".

Tras decir eso, me giraría y me pondría en guardia, con la Llave Espada preparada en una mano y la pluma de Nithael en la otra, preparada para combatir al lobo si nos alcanzaba.
Imagen
Imagen
Imagen

~Awards~
Spoiler: Mostrar
Imagen
Imagen

ImagenImagenImagen
Avatar de Usuario
Zodiark
72. Ducky Goose
72. Ducky Goose
The Unknowns
 
Mensajes: 2142
Registrado: Lun May 14, 2012 3:40 am
Dinero: 5,145.82
Banco: 1,816,912.05
Ubicación: Ultimate Academy for Gifted Juveniles
Sexo: Masculino
Clan: The Unknowns
Tumblr: sodasalvaje
Youtube: Dacobue
Instagram: @soda_93
Estantería de objetos
Karma: 103

Re: [Evento Global] Ruta del Caído

Notapor Suzume Mizuno » Jue Jul 30, 2015 2:59 am

Malik




¡Joder! —jadeó Malik mientras luchaba contra las manos de Chihiro, que se hincaban dolorosamente en su cuello.

Gabriel entornó los ojos, aunque no dijo nada, mientras contemplaba a Malik llorar. Malik trató de recomponerse, de apartar a Chihiro de sí.

Chi... hiro. Si me... matas... jamás podrás recuperar ese... recuerdo.

Chihiro no escuchaba. Parecía desquiciada, desesperada. Malik le había arrebatado el recuerdo más importante, el que más apreciaba, el que más quería, el que la ayudaba a sostenerse como persona. El vacío era demasiado oscuro, demasiado grande, como para que unas palabras pudieran abrirse paso en medio de su irracionalidad y devolverle la cordura.

Aun así, cuando le mostró la runa, Chihiro reaccionó un poco. Quizás reconoció el símbolo. Aflojó un poco el agarre, pero, aun así, no soltó.

Si Malik había deseado más de una vez acabar con ella por todo lo que había sucedido en Port Royal, ahora Chihiro no se encontraba en una situación muy distinta. Sólo podía pensar que odiaba a Malik, que él era el culpable de esa nada que amenazaba con devorarla por completo.

Así que Malik se vio obligado a usar un Aturdidor para quitársela de encima cuando volvió a apretar contra su garganta. En el momento de que Chihiro cayó insconsciente, Gabriel se apresuró a correr al lado de Malik y lo ayudó a incorporarse.

Lo lamento. Se supone que no debo intervenir.—Lo guió hasta un asiento y luego recogió a Chihiro en brazos para volver a tumbarla en un sofá. Suspiró—. Malik, por favor, continúa adelante. Estás perdiendo un tiempo que no...

¡Oh, pero Gabriel, que pierda el tiempo si quiere! —Tras Malik había aparecido el Guía. Bajo su capucha pudo vislumbrar su maliciosa sonrisa—. Qué más da que sus amigos se estén enfrentando a lo inevitable. Para él es más fácil fingir que es un caballero y que debe proteger a una mujer a la que odia. Para él [color=#BF0040]es más fácil pensar «tenía que hacerlo, era mi deber[/color]», para dejar que los demás hagan frente al verdadero peligro. ¿Estás demasiado viejo para estos trotes, Malik? —El Guía rió por lo bajo, desdeñoso—. Debe ser duro. Ya sabes, ser tan viejo, rodeado de gente joven y con capacidad de aprender. No como tú. Siempre quedándote atrás, siempre eligiendo la salida «responsable» y fácil, ¿verdad? Porque no puedes perder de vista a Chihiro, porque temes que la secuestre.

»Porque debe ser maravilloso tener el poder sobre alguien que te hizo daño. ¿Eh, Malik? Por una vez puedes manejar a otra persona, ¡y no se te ocurre nada mejor que penetrar en su mente, ver su intimidad más profunda y ROBÁRSELA! ¿No es magnífico? Eres todo un criminal, Malik. Sólo te falta empezar a matar y no serás muy distinto a ella.

Gabriel, que había contemplado todo aquello en silencio, hizo amago de levantarse. Luego, ante una mirada de advertencia del Guía, se cruzó de brazos pero dijo:

Trata de pensar a dónde lleva esto, Malik. Él sabe en todo lo que estás pensando. Mentir no tiene sentido.

El Guía alzó las manos al cielo, con fingida frustración, y luego comenzó a dar vueltas alrededor de la silla de Malik como un chacal acechando a su presa.

—¿Por qué te quedaste con Chihiro, Malik? ¿Realmente por responsabilidad o por comodidad? ¿O por poder? —El Guía guardó un silencio para escuchar la respuesta—. ¡Ah, por supuesto! Por eso le has devuelto su recuerdo. Te preocupa tanto que sirva para algo… ¡Ah, cierto! ¡Que no puede hacer nada, ni devolverte a tus amigos ni dar un paso sin caerse! ¡Pero pongamos excusas! ¡Digamos que es una actitud noble, que no hay un acto inconsciente de querer sentirte superior, de saber que ella depende de ti, que puedes protegerla…! Como no estás haciendo con la gente a la que quieres.

De pronto el Guía apoyó las manos en el reposabrazos y se inclinó hacia delante, impidiendo a Malik escapar y forzándole a enfrentarse a la oscuridad que había bajo su capucha, donde brillaban sus ojos.

Tu esposa te dejó porque no fuiste capaz de hacer nada por ella. No fuiste un gran hijo, no te ocupaste lo que debiste de tus padres. ¡Tan inútil fuiste que hasta dejaste ir a tu hermano, como a tu querida esposa, que prefería dejar vuestra bonita casa para comer de la calle con tal de alejarse de ti! Sí, sí, ya veo tu patrón: salvaré a la bonita prostituta y me sacrificaré a mí mismo para contrarrestar la culpabilidad que me domina. Pasaré a formar parte de una Orden de Caballeros a pesar de que no tengo ni magia ni talento y soy demasiado viejo para aprender, por lo cual me convierto ante todo en una carga para aprendices mucho más fuertes y predispuestos que yo. Me enamoraré, de paso, de una menor y trataré de aceptarla como es para demostrarme a mí mismo que soy una buena persona, que he aprendido de mis errores.

»¡Buscaré el alma de un mago muerto para recomponerla en un intento de hacer algo bueno con mi vida! ¡Pero cuando llegue el momento, el verdadero momento, de probarme a mí mismo no me quedaré con mi pareja, sino que buscaré un camino que sacie mi odio! ¡En vez de consumar la ejecución de una criminal la protegeré usando burdas excusas, me quedaré con lo que más le importa, y a partir de eso, cuando tenga el verdadero poder, intentaré comprenderla! ¡No en situación de igualdad, sino cuando ella ya no puede hacerte daño! ¡Todo después de abandonar a tus verdaderos compañeros para que se enfrenten solos al peligro!

»¡¡Enhorabuena, Malik!! ¡Eres un gran Caballero!

Gabriel miraba a Malik fijamente, con el ceño fruncido, y con una mezcla de esperanza y preocupación.

¿Qué era lo que le había dicho antes? Había sido algo muy importante. Que la prueba había comenzado, que el Guía sabía lo que estaba pensando…

Que no podía engañarse a sí mismo.


Spoiler: Mostrar
Malik
VIT: 52/64
PH: 10/26



****
Yui, Keiko y Light




Yui comenzó a gritar:

¡¿Qué quieres que te diga?! ¡¿Qué tienes razón en lo que has dicho?! ¡Pues sí, tienes razón, siéntete orgulloso!

El Guía emitió un suspiro, puede que de impaciencia o decepción, mientras la muchacha gesticulaba con fiereza.

¡Todo está mal conmigo! ¿Las cadenas? ¡Son importantes para mi! ¡Aparte de que, en mi opinión me dan suerte, es un recuerdo de que pude seguir sola! ¡¿Vale?! ¿Aceptar la Llave Espada y unirme a la Orden? ¡Solo quiero descubrir quién soy en realidad, no sé ni cómo llegué al orfanato! ¡También alcanzar a ser alguien! ¡Pero mira por dónde, he perdido mi Llave Espada!

Se acercó al Guía.

No sabes la penita que me das.

—¡Y no, no sé que hacer con mi vida! ¡En esta misión estoy resultando más un estorbo que una ayuda! ¡Y Guía, si no sabes si hay un por qué detrás, no digas nada! —El Guía soportó sin problemas su mirada y luego la siguió con la vista mientras ella se sentaba, apoyando la espalda contra la pared—. Aparte de solo conseguir el trozo de llave para salir de aquí, para volver a Bastión Hueco, supongo que quiero conseguir ayudar en la tarea, pero seré más un estorbo, ¿verdad? Y si vas a seguir lanzándome más mierda, adelante, ya me da igual. Ya estoy cansada, así que si te hace ilusión sigue.

—¿Cómo era eso de los estados…? ¿Negación, ira, negociación (¿esa creo que te la has saltado?)…? Y luego depresión. ¡Sí, eso era! No está mal, Yui. Has sido un poco de manual, pero no te preocupes, lo has hecho bastante bien para no tener ni siquiera Llave Espada. Ahora sólo queda superar esa fase en la que nos centramos en nosotros mismos, envueltos en un halo de egocentrismo mientras creemos que somos las personas más desgraciadas del mundo, y empezar a aceptar que aunque seas un pedazo de cacho de trozo de aprendiz sin desarrollar, ¡las cosas pueden mejorar!

»La Orden es un conjunto de personas, poco importa si sois de Bastión Hueco o Tierra de Partida. Los recuerdos forman a la persona, así que no importa lo que haya quedado atrás, sino lo que te espera a partir de ahora. Si quieres convertirte en alguien que merezca la pena, Yui, forja nuevas memorias por las que estés dispuesta a morir. Nadie puede vivir solo, nadie puede vivir sin objetivos. Deja de mirarte a ti misma y busca a los demás porque sólo así podrás convertirte en alguien mejor: cuando la gente te condicione y te obligue a cambiar.

Cuando Yui quiso darse cuenta, ya no estaba en el pasillo, sino en una sala abovedada, con una gran puerta dorada, y Keiko hacía una pregunta al Guía:

¡Espera un momento! ¿Qué garantía tengo de que esta es de verdad la prueba final y no otro de tus trucos? ¿Qué nos aguarda tras esa puerta? Tiene que ser algo poderoso si requiere de ser abiertas por siete personas. Pero... ¿cómo voy a abrirla si renuncié a mi Llave-Espada cuando Gabriel nos preguntó a que estaríamos dispuestos a renunciar por conseguir la llave que buscamos?

El Guía se quedó un momento en silencio. Después se llevó una mano a la frente y meneó la cabeza.

Creo que no debería haberte dejado pasar. En fin, a lo hecho, pecho. Supongo. Creo. A veces desearía no tener tantas personalidades dentro, je. Como iba diciendo antes, no podéis cruzar esa puerta a menos que haya siete personas, de modo que os recomiendo que descanséis un poco y os preparéis bien preparadas. No os voy a responer qué os espera porque entonces no tendría gracia. Si no confiáis en mí, ¡qué se le va a hacer! Podéis intentar marcharos aunque… —Miró a su alrededor y soltó una risotada—. ¿Por dónde pretendéis hacerlo?

»Y por último, Keiko, querida. Nadie te ha quitado nada y menos Gabriel, que es un pedazo de pan, así que será mejor que aprendas a saber cuándo has perdido un fragmento de tu corazón y cuándo no. A menos que quieras que te la quite yo, claro, ya que veo que no le estás dando demasiado uso ni tampoco servirías de demasiada ayuda… ¿No? Bah, qué aburridas sois.

Pasó al lado de Yui, a la que le dio una palmadita en la cabeza como si fuera un perro, y se desvaneció.

La chica había superado la prueba. Ahora, tocaba esperar.

*


Hablaré.

¡Magnífico! Escucho.

Quería salvar la vida de todos los asistentes que fueron a la ópera Se suponía que ella les había envenenado de muerte a todos; a nosotros también, a varios aprendices de Tierra de Partida …

Y la narración se sucedió durante largos minutos, durante los cuales el Guía escuchó, impasible, cómo Light vomitaba todos sus miedos, su resentimiento, y su punto de vista de lo que había sucedido. Debía ser extraño decirlo frente a una persona que parecía ser Wix. Confesar ante tu víctima… Y esperar su veredicto.

Esto es lo que hay.

La expresión de Wix se suavizó hasta adoptar una sonrisa tranquila, amable, en paz. Cerró los ojos e inclinó con suavidad la cabeza.

Tienes fuerza de voluntad y objetivos. Quieres ayudar a tus compañeros y encontrar paz para tu alma. Estás lleno de dudas y tienes ideas equivocadas. Pero al menos tienes el espíritu de un verdadero Caballero. Dentro de unos años estará bien forjado y puede que llegues a ser un buen Maestro.

»Sólo queda que dejes de aferrarte al pasado o desvirtuará todo tu futuro. Aprender está bien, Light. Pero ese colgante no es un recuerdo de lo que hiciste mal, es una promesa que te puede desviar de lo que debes hacer. Wix quería morir. Iwashi nunca será Wix. Deja de perseguir fantasmas. Revívela, si así lo quieres, pero recuerda que hay cosas más importantes.


*



Light apareció de pronto en la misma sala abovedada que Keiko y Yui, traído por un brazo por el Guía. Wix había desaparecido. Le explicó sucintamente lo mismo que a sus compañeras —que necesitaban siete personas, que podían aprovechar para descansar— y luego hizo amago de marcharse mientras decía:

Pronto se os unirán más personas. Espero. Me pregunto cuántos serán capaces de superar la prueba… —Se detuvo un momento y, de pronto, cuando se encaró a los aprendices sostenía un abanico de cartas de las cuales sólo podían ver la parte trasera, con diseños de Llaves Espada—. Para amenizar la espera os propongo algo: tengo ocho cartas. Cada una de ellas puede ofreceros un ítem que quizás os sirva para lo que os espera. Entre otras cosas hay una carta reveladora, una Poción, una Ultrapoción, un Éter, una invocación a alguna reminiscencia con la que os hayáis encontado para pedirle algo o información (¿no estaría guay contar con Zephyr en un combate?), un recuerdo, una posibilidad de hacerme cualquier pregunta y que yo me vea obligado a responderla y una carta-trampa que os sellará la magia durante un tiempo pero os dará cierta inmunidad física.

»Por supuesto, cuando las escojáis podéis decidir cómo, cuándo y dónde usarlas, aunque evidentemente sólo funcionarán en el Castillo. Tenéis que escogerlas a boleo, nombrando del 1 al 8. Sólo una para cada uno. ¿No es divertido? ¿Jugáis o preferís esperar a que venga más gente?

El Guía les ofrecía las cartas, divertido. No parecía que hubiera ninguna trampa, sólo ventajas, aunque…

¿Podían fiarse de él?

Spoiler: Mostrar
Keiko
VIT: 12/12
PH: 14/14

Yui
VIT: 5/6
PH:4/4

Light
VIT: 48/54
PH: 22/40

Gaomon
VIT: 36/36
PH: 16/20



****
Saxor, Nikolai y Colibritany




¡La palabra es...!¡... Autoridad!

El arco resplandeció y, por fin, se abrió. Nikolai y Colibritany habían recogido dos plumas, de modo que la oscuridad avanzaba con muchísima más rapidez, lo cual obligó a Kazuki a redoblar sus esfuerzos para intentar detener a la sombra. Al ver la puerta abierta, con todo, pareció recuperar fuerzas y empujó con violencia a los aprendices a su interior, mientras escapaban en el último instante.

La luz los envolvió.

*


Cuando su vista se acostumbró de nuevo, se encontraron en una de esas salas blancas con una puerta dorada esperándoles al fondo de unos escalones. Cada uno portaba un naipe.

Kazuki suspiró y se apoyó contra una pared para recuperar el aliento. Estaba muy pálido y parecía que fuera a desplomarse de un momento a otro.

Ha ido, eh, por un pelo chicos pero... Lo habéis hecho muy bien.—Se estiró y la espalda le crujió. Soltó un pequeño quejido—. Ay, ni que fuera... eh, un viejo. Bueno. Ya estamos casi. Tenemos que seguir, chicos.—Aunque escucharía y respondería si alguno de los aprendices se dirigía a él, Kazuki se encaminó hacia la puerta con el naipe en alto. Mientras tanto se dijo—: Tratad de no olvidar lo que habéis visto. Podría ser importante.

En cuanto cruzaran la puerta dorada, se encontrarían en un único pasillo blanco que se perdía en la distancia… Con la excepción de una pequeña salita con unos sillones y unas sillas. Pudieron ver a cuatro personas: Malik, al Guía, a un chico de pelo negro al que reconocerían como Gabriel y a…

¡Chihiro!—exclamó Kazuki con una mezcla de preocupación y anhelo.

Corrió al frente pero, poco antes de llegar a la silla, topó con una barrera invisible. Frustrado, la golpeó con su único brazo, pero no consiguió que cediera ni un milímetro.

—¡Calma, calma, Kazuki! ¡Ni que Chihiro fuera a desvanecerse! —exclamó un coro de voces que a los aprendices les resultaría familiar. El Guía había aparecido entre ellos, con su capucha y su rostro sumido en las sombras, a pesar de que otra versión suya se inclinaba sobre Malik y parecía acosarlo a preguntas—. Normalmente Gabriel os daría la bienvenida, pero como está un poco ocupado lo haré yo. Dejad que os explique:

»¡Bienvenidos a la recta final del Castillo del Olvido! Aunque habéis tardado lo vuestro, ¡lo habéis conseguido! Sólo queda una prueba por delante y llegaréis a la sala de la Llave Espada, donde tres compañeros os están esperando. Puede que cuatro, si Malik consigue superar sus propia prueba. No os puedo decir en qué consiste, como Gabriel os diría: «La prueba dará comienzo ahora. Podéis ir juntos o de uno en uno, si bien… Os aconsejo que vayáis solos. Quizás os arrepintáis si preferís ir en grupo. Aunque imagino que os han advertido precisamente contra separaros: por eso tenéis la oportunidad de ir juntos.»

»No puedo daros información sobre la prueba, aunque podemos hablar de otras cosas si así lo queréis. Contestaré a lo que pueda. Si decidís permanecer un rato aquí, recobraréis fuerzas. Al que pase, o a los que paséis, sin embargo, he de haceros dos preguntas:

»¿Por qué has decidido continuar adelante? Y, ¿a qué aceptarías renunciar a cambio de obtener la Llave Espada?


El Guía carraspeó, echó un vistazo curioso a Nikolai y Colibritany, mirando hacia el lugar donde habían guardado sus plumas y esbozó una sonrisa que ninguno de los dos pudo interpretar.

—Dicho esto,
aclarar que hablaréis con Gabriel, no conmigo (porque soy una persona ocupada, como comprenderéis). Así que, quitando a Kazuki porque supongo que él decidirá una vez haya podido reunirse con Chihiro, ¡decidme cuál es vuestra decisión!—exclamó abriendo los brazos, como si quisiera darles un achuchón.

Si intentaban llamar la atención de Malik, no lo conseguirían; este parecía no poder verlos, igual que ellos no eran capaces de escuchar lo que les estaba diciendo la réplica del Guía. Kazuki, por su parte, los observaba con angustia.

Debían decidir bien, pensando en su estado físico y emocional y en la prisa que tenían. Ciertamente se encontraban en la recta final pero quizás se arrepintieran si no tomaban un descanso. ¿O era posible que el Guía sólo pretendiera entretenerlos para hacerles perder tiempo…?

Spoiler: Mostrar
Os comento lo mismo que a los otros: espero total fidelidad con el personaje de la ficha. Cualquier acción que no siga el curso natural del pensamiento del personaje o que vaya más enfocado a ganar la prueba que a actuar como lo haría el personaje será penalizado.

Dicho esto, ¡suerte!


Spoiler: Mostrar
Colibritany
VIT: 6/14
PH: 8/8

Nikolai
VIT: 18/26
PH: 11/18

Saxor
VIT: 42/50
PH: 34/34

Guilmon
VIT: 22/30
PH: 14/14




****
Alec, Maya y Nicoxa


«Pasado», «monstruos», «fantasmas». Las tres palabras iluminaron los vacíos del Arco al mismo tiempo que el lobo, con un aullido terrible, embestía contra la puerta que Alec empujaba con todas sus fuerzas para evitar que pasara: había sido lo suficiente rápido como para cerrársela en las narices. Escucharon los zarpazos de sus garras hundiéndose en la madera, desgarrándola. Alec no pudo resistir más y la oscuridad se extendió como la niebla por la Biblioteca.

Gabriel estaba ya en el arco, gritándoles que se dieran prisa.

El lobo le clavó una mirada helada y el niño se quedó congelado, esperando a que todos cruzaran. Entonces, de un salto, fue tras ellos, antes de que las mandíbulas del monstruo lo atraparan.

*




¡Bienvenidos! Enhorabuena, lo habéis conseguido. Y, vaya…—Ren, que se había acercado a ellos para ayudarles a incorporarse y les extendía respectivamente un naipe a cada uno, se quedó mirando a Gabriel con sorpresa—. Os habéis traído un regalito.—Torció la boca y pareció algo triste—. Aunque no durará mucho.

Gabriel se miró los pies en un acto reflejo y exhaló un suspiro: se estaban volviendo transparentes. Se encaró a los tres aprendices y realizó una profunda reverencia.

Lamento profundamente todos los problemas que os he causado—de nuevo, su tono no parecía el de un niño, sino el de alguien más mayor— y os agradezco que me hayáis ayudado a escapar. Siento que hayáis tenido que ver toda esa sangre y haberos enfrentados a los recuerdos de Nithael. Es sólo que no puede controlarlo… Alec, fuiste muy valiente. Siento haberte hecho malgastar magia y que hayas olvidado algunos hechizos. Igual que siento lo de tu cuello, Nicoxa. Ojalá hubiera podido evitarlo porque, en gran medida, es mi responsabilidad. Por eso creo… Creo que… merecéis una explicación.—Intercambió una mirada con Ren, que asintió con la cabeza. Gabriel se frotó, nervioso, una palma contra el brazo—. Como imagináis, sólo soy una reminiscencia. Mi yo verdadero… Ocurrió hace mucho, más de mil años. Esa… sombra que nos perseguía es en lo que me convertí de adulto. Nithael lo recuerda demasiado bien, a pesar de todo el tiempo que ha pasado, y lleva desde entonces repitiendo en pesadillas escenas como la que habéis visto. Pensando que si hubiera sabido reaccionar a tiempo, podría haber salvado al niño que él conocía. A veces aparezco como adolescente y otras como niño. Nunca como adulto. Para él, «ese Gabriel» nació por culpa de la oscuridad, por culpa de que no fue capaz de evitar que me exiliaran de Tierra de Partida.—Sonrió con amargura—. Y no lo es. Él no tiene la culpa de nada, aunque lo crea. Fue todo por mi propio egoísmo. Cuando me exiliaron sólo podía sentir resentimiento contra la gente que me había apartado de mi hogar. No voy a decir que quisiera venganza pero…

»Si esa persona nunca se me hubiera acercado, las cosas, quizás, habrían sido diferentes.…


Gabriel apretó los labios y pareció que quería decir algo más, pero entonces se miró las manos y dio un respingo al ver que se empezaban a desvanecer. Dio un paso al frente y cogió a Maya por la mano que sostenía la pluma. Habló apresurado, consciente de que se le acababa el tiempo:

Se supone que no puedo salir de ese lugar, así que… Por favor, necesito que me dejes fusionarme con la pluma. Así, cuando llegue el momento, podré hablar con Nithael. Perderá su poder mágico pero puede que sea útil. Por favor, Maya. Es mi única oportunidad.—Miró a Maya con seriedad, sin exigir, sin juzgar. Incluso si se negaba a permitírselo, lo comprendería y no habría rechazo en sus ojos. Hiciera lo que hiciera, le acariciaría la mano y diría—: Has sido muy amable conmigo, incluso siendo un desconocido. Muchísimas gracias. A ti y a todos.

»Por favor, tenéis que ayudar a Nithael. No puede seguir atado al pasado. Se merecía muchas cosas mejores y tiene… Tiene que mirar al futuro. No puede dejar que le sigan persiguiendo sus fantasmas, ni el mío… Ni el de nadie.

»Buena suerte a los tres.


Si Maya aceptaba que Gabriel se fusionara con la pluma, entonces al mismo tiemop que el niño desaparecía, esta adoptaría una tonalidad negra hasta tornarse ébano con bordes azulados. Si no, Gabriel simplemente se desvanecería.

Ren había observado la escena en silencio y suspiró. Se pasó la mano falsa por el pelo.

Es triste, pero nadie entendía porqué hizo lo que hizo. Porqué llegó a ese extremo.—Ren los observó y volvió a tenderles los naipes—. Aquí tenéis. Enhorabuena por haber superado la prueba. Os queda una. La última y llegaréis al fondo del Castillo. Supongo que no os hará ilusión saber que el Guía os estará esperando—esbozó una sonrisa incómoda—. En cualquier caso, habéis llegado muy lejos. Dudo mucho que falléis ahora. Antes de que os vayáis, ¿os importaría darle esto a Neru?—Le tendió a Alec una carta sellada con el emblema de un Leopardo—. Os lo agradecería mucho.

»Suerte. Por favor, salvad Tierra de Partida.


La puerta dorada aguardaba. Si tenían alguna pregunta que hacer, mejor que aprovecharan el momento.


Spoiler: Mostrar
Nicoxa
VIT: 27/32
PH: 10/10
+Poción

Maya
VIT: 31/34
PH: 20/32
+Ultrapoción

Alec
VIT: 19/22
PH: 21/30

Ilana
VIT: 20/30
PH: 17/20



Spoiler: Mostrar
Ausencias:
Tanis: II
Saxor: II (Justificadas)
LightHelco I (Justificada)
Reimeow I (Justificada)


Fecha límite:miércoles 12 de agosto a las 23:59


Spoiler: Mostrar
Tanto Sombra como yo estamos un poco agobiados con el Global (¿os imagináis lo que es escribir con este calor? Claro que sí. Seguro que sentís cómo se os funden las neuronas. Pues nosotros lo mismo pero con más presión por ser Game Masters xD) y, bueno, es verano. Os pedimos comprensión para que nos tomemos dos semanitas de descanso y luego volveremos con muchas ganas. ¡Ánimo a todos y disfrutad del descanso también!
Imagen

¡Gracias por las firmas, Sally!


Awards~

Imagen

Imagen

Imagen

Imagen

Imagen
Avatar de Usuario
Suzume Mizuno
63. Komory Bat
63. Komory Bat
 
Mensajes: 1883
Registrado: Vie Mar 02, 2012 9:52 pm
Dinero: 1,462,577.72
Sexo: Femenino
Karma: 6

Re: [Evento Global] Ruta del Caído

Notapor Light » Sab Ago 01, 2015 12:12 pm

Tienes fuerza de voluntad y objetivos. Quieres ayudar a tus compañeros y encontrar paz para tu alma. Estás lleno de dudas y tienes ideas equivocadas. Pero al menos tienes el espíritu de un verdadero Caballero. Dentro de unos años estará bien forjado y puede que llegues a ser un buen Maestro.

»Sólo queda que dejes de aferrarte al pasado o desvirtuará todo tu futuro. Aprender está bien, Light. Pero ese colgante no es un recuerdo de lo que hiciste mal, es una promesa que te puede desviar de lo que debes hacer. Wix quería morir. Iwashi nunca será Wix. Deja de perseguir fantasmas. Revívela, si así lo quieres, pero recuerda que hay cosas más importantes.


Light relajó los hombros y se mostró más sereno. No se tomó a mal el veredicto del Guía disfrazado —no se hubiera imaginado recibir un solo halago suyo— e incluso asintió tras escuchar su valioso consejo. Wix no era Iwashi, lo sabía. Y, en efecto, quizás se había obsesionado demasiado con su muerte. Inevitablemente le había marcado. Aquel crudo recuerdo le perseguía en todo momento y no podía quitárselo de la cabeza. Puede que el tiempo terminara sanando aquella herida, pero jamás olvidaría a la Guardiana.

Al final no le costó tanto esfuerzo pasar la prueba. Quizás porque, a pesar de la presencia de la falsa Wix, ya había confesado su crimen en las sesiones del psicólogo Pepito Grillo (delante de Neru y Keiko en una ocasión). Aun así, lógicamente no le había agradado en absoluto hablar de aquel tema tan delicado.

Se olvidó prácticamente de la prueba y de Wix cuando de repente apareció en una habitación desconocida para él. Aturdido, observó al Guía con clara incredulidad en el rostro y posteriormente echó un breve vistazo a aquella sala abovedada. Keiko y la chica de Bastión Hueco también habían ido a parar allí.

«¿Light?», el eidolon pronunció su nombre, dubitativo. Se estaba comunicando con él mediante la telepatía.

«¿Qué pasa, Gaomon?».

«No podía ponerme en contacto contigo, no me escuchabas. Pero veo que no has necesitado mi ayuda. Lo has hecho bien», le felicitó.

«Sí… parece que he pasado la prueba. Y menuda prueba», exhaló un resoplido y dirigió la mirada hacia la puerta dorada. Ojalá la susodicha prueba hubiera terminado del todo y pudieran ir a por la maldita llave cuanto antes. A medida que el tiempo pasaba su angustia aumentaba: los Sincorazón invadirían el castillo en cualquier momento.

Además, si no salía pronto de aquel endemoniado y agobiante castillo se volvería loco.

El ser encapuchado les explicó su situación actual. Estaban ya cerca del final, pero antes de entrar a la siguiente sala tenían que reunirse siete personas. Sin ese requisito no podían hacer otra cosa que descansar y esperar, lo que suponía una gran pérdida de tiempo.

Pronto se os unirán más personas. Espero. Me pregunto cuántos serán capaces de superar la prueba… —En ese momento pudieron comprobar que el Guía agarraba varias cartas. En sus reversos había Llaves Espada representadas—. Para amenizar la espera os propongo algo: tengo ocho cartas. Cada una de ellas puede ofreceros un ítem que quizás os sirva para lo que os espera. Entre otras cosas hay una carta reveladora, una Poción, una Ultrapoción, un Éter, una invocación a alguna reminiscencia con la que os hayáis encontado para pedirle algo o información (¿no estaría guay contar con Zephyr en un combate?), un recuerdo, una posibilidad de hacerme cualquier pregunta y que yo me vea obligado a responderla y una carta-trampa que os sellará la magia durante un tiempo pero os dará cierta inmunidad física.

»Por supuesto, cuando las escojáis podéis decidir cómo, cuándo y dónde usarlas, aunque evidentemente sólo funcionarán en el Castillo. Tenéis que escogerlas a boleo, nombrando del 1 al 8. Sólo una para cada uno. ¿No es divertido? ¿Jugáis o preferís esperar a que venga más gente?

No le parecía mala su propuesta y tampoco sospechó, así que aceptó. Incluso si elegía la carta-trampa, la inmunidad de la que hablaba podría ayudarle. De todos modos prefería escoger cualquiera de las otras opciones, no quería renunciar a su magia.

¿Estaría la diosa Fortuna de su lado? Pronto lo comprobaría.

Yo juego. El cinco mismamente —dijo un número al azar, sin meditarlo demasiado.
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen

Spoiler: Mostrar
Imagen

Imagen
Imagen
Avatar de Usuario
Light
144. Xion Forma Final
144. Xion Forma Final
The Unknowns
 
Mensajes: 4309
Registrado: Mar Ago 24, 2010 7:20 pm
Dinero: 116.22
Banco: 474,840.29
Sexo: Masculino
Clan: The Unknowns
Estantería de objetos
Karma: 59

Re: [Evento Global] Ruta del Caído

Notapor Tanis » Sab Ago 01, 2015 1:52 pm



Malik tosió y boqueó por aire en cuanto Chihiro le soltó. A pesar de la pequeña duda de ella, había tenido que quitársela de encima a golpes y ahora le corroía ¿la culpa?. Se incorporó gracias a la ayuda de Gabriel. La piel del cuello le tiraba y escocía, como si hubieran estado a punto de arrancársela.

Lo lamento. Se supone que no debo intervenir.

No importa, no es tu culpa —graznó Malik dejándose guiar.

¿Se había terminado la prueba, eso había sido todo?

Malik, por favor, continúa adelante. Estás perdiendo un tiempo que no...

«No, no se ha terminado... ». No le hizo falta más de un segundo para pensar aquello, al mismo tiempo que encaraba al Guía, a su sonrisa infernal y a la oscuridad que parecía emanar de su voz. De repente, volvió a sentirse como si alguien le oprimiera el cuello y no le dejara respirar. Sólo que en esa ocasión, nadie le había puesto un dedo encima.

¡Oh, pero Gabriel, que pierda el tiempo si quiere!

Guía.

Recordó con demasiada claridad las palabras de Gabriel, como si un eco preciso y programado para tronar en ese momento hubiera decidido hacerse escuchar.

Esta ya ha dado comienzo, Malik. Lo hizo desde que entrasteis aquí.
Si continúas así, el Guía vendrá y decidirá, probablemente, que no mereces sobrevivir.


No hacía falta ser un genio para saber por qué el Guía estaba allí, en ese momento, a punto de destrozarlo por todas partes. Malik no se sabía preparado y por eso, todas y cada una de las afiladas dagas que el Guía le clavó en el pecho se hundieron hasta el fondo y le hicieron sangrar.

Qué más da que sus amigos se estén enfrentando a lo inevitable. Para él es más fácil fingir que es un caballero y que debe proteger a una mujer a la que odia. Para él es más fácil pensar «tenía que hacerlo, era mi deber», para dejar que los demás hagan frente al verdadero peligro. ¿Estás demasiado viejo para estos trotes, Malik?

Malik entornó los ojos y el ceño le tembló ligeramente. Fingir... ¿Estaba de verdad fingiendo? ¿Qué sabía el Guía de sus intereses, quién era para hablar tan a la ligera de lo que quería hacer, o sentía?

Si continúas así, el Guía vendrá y decidirá, probablemente, que no mereces sobrevivir.


¿Quién te crees que eres... ?

—Debe ser duro. Ya sabes, ser tan viejo, rodeado de gente joven y con capacidad de aprender. No como tú. Siempre quedándote atrás, siempre eligiendo la salida «responsable» y fácil, ¿verdad? Porque no puedes perder de vista a Chihiro, porque temes que la secuestre.

Malik inspiró hondo, tratando de tragarse la ira. Sabía lo qué estaba haciendo, y creía saber por qué, pero eso no impedía que el instinto irracional, que se inflamaba cuando alguien te echaba la verdad en cara, se hinchase a punto de estallar. Apretó la mandíbula con un gesto tenso, que tembló al intentar dejar a un lado aquellas acusaciones.

«Siempre he querido ser responsable... ».

Porque debe ser maravilloso tener el poder sobre alguien que te hizo daño. ¿Eh, Malik? Por una vez puedes manejar a otra persona, ¡y no se te ocurre nada mejor que penetrar en su mente, ver su intimidad más profunda y ROBÁRSELA! ¿No es magnífico? Eres todo un criminal, Malik. Sólo te falta empezar a matar y no serás muy distinto a ella.

Entreabrió los labios, desviando la vista hacia el suelo, lejos de la mirada acusadora del Guía. Si hubiera podido huir de su voz, también lo habría hecho.

«Pero eso es lo que he hecho siempre... Huir... Y él lo sabe».

Trata de pensar a dónde lleva esto, Malik. Él sabe en todo lo que estás pensando. Mentir no tiene sentido.

¿Eh?

Levantó la vista hacia Gabriel.

Él sabe en todo lo que estás pensando. Mentir no tiene sentido.


Despacio, siguió con la mirada los pasos del Guía, que caminaba al rededor de la silla como un buitre a la espera de poder hincarle el pico a su presa muerta. Tomó conciencia de las palabras de Gabriel y tras una vuelta dejó de mirar al Guía, para mantener la vista fija al frente, pensativo.

Trata de pensar a dónde lleva esto... —murmuró con un hilo de voz—. Claro...

Era la prueba, la prueba de verdad. El Guía sabía y sabría siempre lo que había hecho y lo que pensaba hacer, sus razones, su moral, su doble rasero... Y sería estúpido negarlo, y negárselo a sí mismo. ¿Esa era la prueba? ¿Admitir lo que uno era de verdad y aceptarlo?

Despacio se recostó en la silla y apoyó la espalda en el respaldo por completo, intentando relajarse. No podía decir que no doliese todo lo que decía, porque era imposible.

¿Por qué te quedaste con Chihiro, Malik? ¿Realmente por responsabilidad o por comodidad? ¿O por poder?

Responsabilidad —respondió, apretando los labios en una línea fina.

Claro que, la verdad no tenía siempre que ser del agrado de todo el mundo. Sobre todo cuando la retorcían.

¡Ah, por supuesto! Por eso le has devuelto su recuerdo. Te preocupa tanto que sirva para algo… ¡Ah, cierto! ¡Que no puede hacer nada, ni devolverte a tus amigos ni dar un paso sin caerse! ¡Pero pongamos excusas! ¡Digamos que es una actitud noble, que no hay un acto inconsciente de querer sentirte superior, de saber que ella depende de ti, que puedes protegerla…! Como no estás haciendo con la gente a la que quieres.

Malik apretó también los dedos sobre los reposabrazos y abrió la boca para replicar. Eso no era justo, él no podía... No estaba...

«Sólo quería hacer lo correcto por una vez, con alguien con quien no tenía por qué ser bueno».

De pronto se vio confrontado a la oscuridad bajo la capucha y la sintió densa, insondable e infinita. Dos ojos brillantes le miraron y fue como si no hubiera nada más, nada más que esos ojos, esa oscuridad y su corazón pasado y repasado hasta la saciedad... Malik quiso hablar, decir algo, pero le fue imposible. El torrente de palabras que soltó el Guía, la forma en que lo hizo, le pisoteó de tal manera que se convirtió en un niño pequeño perdido, aterido y asustado, que estaba solo y que siempre lo estaría.

Tu esposa te dejó porque no fuiste capaz de hacer nada por ella. No fuiste un gran hijo, no te ocupaste lo que debiste de tus padres. ¡Tan inútil fuiste que hasta dejaste ir a tu hermano, como a tu querida esposa, que prefería dejar vuestra bonita casa para comer de la calle con tal de alejarse de ti! Sí, sí, ya veo tu patrón: salvaré a la bonita prostituta y me sacrificaré a mí mismo para contrarrestar la culpabilidad que me domina. Pasaré a formar parte de una Orden de Caballeros a pesar de que no tengo ni magia ni talento y soy demasiado viejo para aprender, por lo cual me convierto ante todo en una carga para aprendices mucho más fuertes y predispuestos que yo. Me enamoraré, de paso, de una menor y trataré de aceptarla como es para demostrarme a mí mismo que soy una buena persona, que he aprendido de mis errores.

»¡Buscaré el alma de un mago muerto para recomponerla en un intento de hacer algo bueno con mi vida! ¡Pero cuando llegue el momento, el verdadero momento, de probarme a mí mismo no me quedaré con mi pareja, sino que buscaré un camino que sacie mi odio! ¡En vez de consumar la ejecución de una criminal la protegeré usando burdas excusas, me quedaré con lo que más le importa, y a partir de eso, cuando tenga el verdadero poder, intentaré comprenderla! ¡No en situación de igualdad, sino cuando ella ya no puede hacerte daño! ¡Todo después de abandonar a tus verdaderos compañeros para que se enfrenten solos al peligro!

»¡¡Enhorabuena, Malik!! ¡Eres un gran Caballero!

Basta, basta, basta


Malik boqueó, acongojado y a punto de gritar. Se había mordido la lengua y sentía el sabor de la sangre en la boca. Le escocían los ojos, aunque los había cerrado en un burdo intento por alejarse de la mirada acusadora y burlona del Guía. Dos partes se sí mismo pelearon: la que aceptaba parte de esas cosas como la verdad y la que intentaba justificarlas.

Él sabe en todo lo que estás pensando. Mentir no tiene sentido.

Si continúas así, el Guía vendrá y decidirá, probablemente, que no mereces sobrevivir.


Si continuo así...




No tenía sentido engañarse. El Guía... El Guía tenía razón, incluso en su crueldad. Malik pensó en Tsuniro, en la última vez que la vio, alejándose por la calle después de una conversación demasiado amarga sólo para él. Pensó en su hermano pequeño, Farid, y en sus rabietas, en sus padres... que poco a poco se iban disolviendo en la memoria. Su pasado no era el mejor, ni el más dulce. No había hecho grandes cosas, una y otra vez, había dejado que la corriente le llevara por donde fuera, y a pesar de que al convertirse en aprendiz se había propuesto no volver a ser así, al final...

«Al final es lo que he terminado haciendo otra vez».

Despacio, al pensar en todas esas cosas, Malik sintió su cuerpo más relajado y en paz, porque allí sentado, bajo la oscuridad del Guía, no podía perder más. Un suspiro débil se le escapó de entre los labios y su ceño fruncido se suavizó por completo, antes de abrir los ojos y mirar a la oscuridad. Su gesto era serio, pero no enfadado, ni triste, sólo... conforme, resignado y decidido.

Tienes razón —dijo, más tranquilo que antes—. No soy un gran Caballero. Quería serlo, quiero llegar a serlo... Muchas cosas de las que he hecho las hice precisamente para expiar culpas, sentirme mejor conmigo mismo y limpiar mi pasado, sin tener en cuenta si era correcto o no. Yo pensaba que era correcto siempre... —Soltó un pequeño siseo y chasqueó la lengua—. Tienes razón en muchas cosas...

«Pero no en todas».

Malik se inclinó hacia adelante, acercándose todo lo que quiso a la capucha y a su oscuridad.

Podría haber matado a Chihiro. Puedo matarla, saciar mi odio y hacer justicia personal, pero como has dicho, eso me convertiría en alguien como ella y no es lo que quiero. Quiero hacer algo bueno en la vida y si eso conlleva elegir entre el mal menor y el mal mayor, elegiré entre el mal menor y el mal mayor. Ahora mismo, mantener a Chihiro bajo control es el mal menor, porque si le devuelvo ese recuerdo, su poder podría descontrolarse otra vez y absorber todo esto, incluido a ti. ¿Es lo que quieres? —Levantó un poco las cejas—. He comprendido tarde demasiadas cosas, es cierto, me he quedado atrás por razones egoístas, también es cierto. ¡Es cierto, Guía!

»En realidad no soy una buena persona, siempre me ha movido el interés personal. Puedes verlo desde ese punto de vista todo lo que quieras, no voy a rebatirlo... Pero eso no va a impedirme intentar mejorar para el futuro y mudar la piel de serpiente.

Se había tragado por completo la furia por cuestiones personales que no consideraba ciertas, como lo referente a su aptitud para la batalla, Fátima o el hecho de haber dejado a los demás avanzar sin él. Si esa prueba la estaban pasando todos, entonces era cierto que Gabriel les había aconsejado bien. No hubiese querido que los demás se enterasen de su vida personal así por las buenas.

No añadió mucho más, al final sus palabras se quedaron más cortas de lo que había querido expresar en un principio, pero tampoco le hacía falta mucho. Lo único que le quedaba era esperar la resolución del Guía, si le dejaría pasar o le relegaría al Olvido del Castillo.
Avatar de Usuario
Tanis
28. Samurai
28. Samurai
 
Mensajes: 813
Registrado: Mar Feb 19, 2013 10:20 pm
Dinero: 75,353.31
Banco: 15,572.00
Sexo: Mucho, gracias por preguntar
Karma: 5

Re: [Evento Global] Ruta del Caído

Notapor Drazham » Mar Ago 04, 2015 12:27 am

¡La palabra es...!¡... Autoridad!

Todo ocurrió muy rápido: Nikolai acababa de coger del suelo una de las plumas de Nithael cuando el portal de luz se abrió en pleno centro del arco. Ni siquiera llegó a replantearse el correr de inmediato a la salida de aquel infierno, ya que el propio Kazuki lo arrastró como pudo con su único brazo. Entendió su impaciencia nada más ver cómo el pozo de oscuridad avanzaba a mayor velocidad.

Antes de que cualquier catástrofe diese lugar, el aprendiz y sus compañeros pasaron a través del arco, donde la oscuridad ya no les pudo alcanzar.

***


Encontrarse de nuevo resguardado por las paredes blancas del Castillo del Olvido le tranquilizó un poco. Habían logrado escapar del recuerdo y librarse de esa cosa, pero por muy poco. Con el corazón palpitándole por el efecto de la adrenalina, se recostó sobre sus rodillas y se pasó la mano por la frente, empapada en sudor frío. Notó algo extraño en la otra, que sostenía la cálida pluma, y se sorprendió al ver que algo más había aparecido entre sus dedos: un naipe con picos en el borde superior.

<Supongo que eso significa que hemos superado la prueba>, dirigió una mirada cansada a la puerta dorada que había al fondo de la sala. Con la “llave” en su posesión, podrían seguir avanzando por el castillo.

Ha ido, eh, por un pelo chicos pero... Lo habéis hecho muy bien. —Encontró a Kazuki recostado en una de las paredes, con una cara tan blanca que más bien parecía un muerto. Miró con lástima al pobre hombre, quien había acabado en un estado tan lamentable después de haberse dejado la piel en mantener a raya a esa criatura—. Ay, ni que fuera... eh, un viejo. Bueno. Ya estamos casi. Tenemos que seguir, chicos.

Nithael dijo que no nos quedaba mucho para llegar hasta la Llave —añadió, bajando la mirada a la pluma del ángel. Suspiró, afligido por el hecho de que se le había “castigado” por intentar ayudarles. ¿A dónde le habría mandado el Guía?

Tratad de no olvidar lo que habéis visto. Podría ser importante.

Como para no olvidarlo después de aquella experiencia. Se llevó la mano al mentón, recordando la escena del juicio que habían contemplado hace unos minutos. Ese chico, Gabriel, fue condenado por luchar por la misma causa que apoyaba su Orden. Era curioso saber que, incluso en el pasado, había quienes se cuestionaban si la Oscuridad no era tan nociva como la mayoría de la gente opinaba.

El chico comentó que conocía a Nithael, ¿no? Si volvía a encontrarse con en ángel, le preguntaría si sabía algo al respecto.

Nikolai siguió a Kazuki y le imitó, alzando el naipe delante de la puerta dorada. Al cruzarla, el grupo llegó a un interminable pasillo, del cual ni se podía discernir su final en la lejanía. Sin embargo, le llamó más la atención que, justo al principio del pasillo, hubiese una pequeña habitación medianamente amueblada en uno de los laterales.

Y mayor fue la sorpresa en cuanto vio que había gente en su interior, y encima conocidos.

<¿Ese no es…?>

El primero en el que se fijó fue en el aprendiz treintañero de Tierra de Partida con el que colaboró en una misión en el Coliseo del Olimpo. Si él estaba allí, cabía la posibilidad de que los otros seis que se separaron nada más entrar en los sótanos estuviesen bien. Tal vez ellos supiesen como acabó Kazuki amnésico y con un brazo amputado. Al fin y al cabo, se suponía que iban con él.

A partir de ahí, encontró a la figura encapuchada del Guía inclinada hacia el aprendiz, como si estuviese hablando con él, pese a que no se escuchaba nada. Al tercero le costó reconocerlo, hasta que cayó en que hace unos minutos que lo había visto… aunque en el recuerdo era más joven: Gabriel, con unos cuantos años de más.

Y la cuarta persona, que yacía inconsciente en el suelo…

¡Chihiro!

Un Kazuki exasperado salió escopetado nada más ver a su vieja amiga, dándose de bruces con una barrera invisible que impedía el acceso a la salita. No pudo evitar sentir una punzada de amargor por el Maestro en cuanto este se puso a aporrearla de pura impotencia. Conocía el dolor de tener a un ser querido lejos de tu alcance.

Puede que fuese la culpable de haberles metido de cabeza en una guerra sin sentido. Pero de esa mujer dependía que volviese a ver a Saeko. Bueno era saber que estaba de una pieza.

—¡Calma, calma, Kazuki! ¡Ni que Chihiro fuera a desvanecerse!

Nikolai arqueó una ceja ante la presencia de un segundo Guía que había aparecido junto a ellos. Intercaló la mirada entre el que estaba junto al aprendiz y el que acababa de aparecer. Seguro que la capacidad de estar en varios lugares a la vez le venía de perlas para tener vigilados a todos los aprendices y Maestros que había en el Castillo. No podían hacer nada sin que él lo supiese.

—Normalmente Gabriel os daría la bienvenida, pero como está un poco ocupado lo haré yo. Dejad que os explique:

»¡Bienvenidos a la recta final del Castillo del Olvido! Aunque habéis tardado lo vuestro, ¡lo habéis conseguido! Sólo queda una prueba por delante y llegaréis a la sala de la Llave Espada, donde tres compañeros os están esperando. Puede que cuatro, si Malik consigue superar sus propia prueba. —¿Malik? Sería el nombre del aprendiz al otro lado de la barrera. Lo cierto es que no tuvieron la ocasión de presentarse aquel día. Las condiciones en las que se encontraban no lo hicieron muy propenso.

Pero más importante: estaban ante la última prueba. ¡Por fin! Y si ya la habían superado tres personas, todo indicaba que no se trataría de un imposible. ¿Habrían sido algunos de los aprendices del otro grupo? ¿O Alec? Lo mismo, separarse le había servido como atajo para llegar hasta la Llave.

»No os puedo decir en qué consiste, como Gabriel os diría: «La prueba dará comienzo ahora. Podéis ir juntos o de uno en uno, si bien… Os aconsejo que vayáis solos. Quizás os arrepintáis si preferís ir en grupo. Aunque imagino que os han advertido precisamente contra separaros: por eso tenéis la oportunidad de ir juntos.»

Niko lanzó una mirada de suspicacia a “Gabriel” (¿No les estaría tomando el pelo el Guía con eso?). Bien cierto era que Nithael les recomendó que se mantuviesen unidos, y separarse justo en el último tramo no era muy buena idea. No obstante, se fijó que en ningún momento les estaban prohibiendo que fuesen juntos; tan sólo que les perjudicaría. Sonaba a que la prueba tendría una dificultad variable, dependiendo de si ibas en grupo o solo.

»No puedo daros información sobre la prueba, aunque podemos hablar de otras cosas si así lo queréis. Contestaré a lo que pueda. Si decidís permanecer un rato aquí, recobraréis fuerzas. Al que pase, o a los que paséis, sin embargo, he de haceros dos preguntas:

»¿Por qué has decidido continuar adelante? Y, ¿a qué aceptarías renunciar a cambio de obtener la Llave Espada?


Nikolai arrugó el entrecejo y se cruzó de brazos, dándole un par de vueltas a las dos preguntas que se les planteó. Eran bastante ambiguas, y se lo tuvo que pensar a conciencia para buscar las respuestas. Dedujo que estaban hechas a propósito para que el que se sometía a la prueba recapacitase y fuese él el convencido por sus propias respuestas.

Estaba tan sumido en sus pensamientos que tardó en pisparse de la mirada divertida que le dirigía el Guía. Se quedó extrañado, sin saber a que venía esa cara, hasta que reparó en que aquellos brillantes ojos estaban clavados en un sitio concreto: el bolsillo derecho de su chaqueta, justo en donde se guardó la pluma de Nithael. Desde luego, a ese canalla no se le escapaba ni una.

Dicho esto, aclarar que hablaréis con Gabriel, no conmigo (porque soy una persona ocupada, como comprenderéis). —<Suena ridículo viniendo de alguien con el don de la omnisciencia>, puso los ojos en blanco—. Así que, quitando a Kazuki porque supongo que él decidirá una vez haya podido reunirse con Chihiro, ¡decidme cuál es vuestra decisión!

Una bombilla metafórica se encendió en la cocorota del aprendiz. Había un tema que quería discutir con Nithael en el caso de verlo. Claro que teniendo delante a la persona que más relación tenía con el susodicho, también le serviría para aclarar sus dudas.

Si es Gabriel con el que vamos a hablar y, como dice, está dispuesto a hablar sobre cualquier otra cosa, me gustaría hacerle una pregunta un tanto personal antes de continuar con la prueba. —Se aclaró la garganta y dirigió una mirada dudosa al Guía, esforzándose en visualizar a Gabriel. Pensó que de esa forma le resultaría más sencillo exponer su cuestión—. ¿Qué ocurrió después del juicio? Se supone que te exiliaron cuando no tendrías ni quince años y, bueno… —titubeó, ladeando la cabeza—. Que haya una versión adulta de ti significa que estuviste en Tierra de Partida a esa edad, ¿me equivoco?

Esperaría a que Gabriel le diese una respuesta. Contestase o no a su pregunta, asintió y pasó directamente a responder las preguntas que le llevarían a iniciar la prueba, el asunto que más le atenía en esos instantes:

Si sigo adelante es porque quiero salir de este Castillo y llegar a ver el día de mañana. Todavía tengo mucho por lo que vivir, y ahora que estamos tan cerca de nuestro objetivo, mayor razón para no detenerse —admitió con determinación, dando un paso al frente hacia el Guía… o a Gabriel—. Y no solo lo hago por mi mismo. Cierto que no soy ningún samaritano que lucha por devolver Tierra de Partida a su estado original, pero aquí dentro hay Maestros y compañeros a los que aprecio. Si yo salgo de aquí, ellos también.

>>¿Y a que renunciaría para obtener la Llave Espada? No tendría que renunciar a nada… porque ya lo he hecho. —Se encogió de hombros y extendió sus palmas con una expresión de conformidad—. El día en el que acepté la Llave Espada tuve que renunciar a la vida cotidiana que llevaba desde que tengo memoria: apenas puedo pasarme por mi hogar sabiendo que ahora soy alguien repudiado allí, y tampoco puedo ver a mi madre tanto como querría. Acepté la libertad que me brindaba la Llave Espada a cambio de renunciar a otro tipo de “libertad”.

Suspiró, convencido por las respuestas que le había dado a Gabriel y se llevó las manos a la cintura. Tenía razón: con preguntas así, uno tenía la oportunidad de recapacitar sobre sus acciones y que le había llevado a realizarlas. Nunca estaba demás recordar que te había llevado hasta donde estás.

Si eso es todo, podemos empezar cuando quieras —le confirmó, asintiendo con la cabeza—. Y también tendré en cuenta tu consejo: iré solo.

Dicho esto, se encaminó hacia sus dos compañeros. No sabía como se tomarían su decisión, pero esperaba que lo comprendieran. Fuera lo que fuese lo que le esperase en la prueba, quería hacerle frente el mismo. Tenía la corazonada de que sus respuestas a las preguntas de Gabriel afectarían de alguna manera a su rendimiento en la prueba. Si iban a usar sus confesiones como armas, que solo las usasen contra él.

Saxor, Coli, os deseo suerte en la prueba. —Esbozó una amarga sonrisa—. Tened mucho cuidado. Yo también trataré de aplicarme el mismo cuento.

Por último, miró a Kazuki con complicidad, quien se quedó como una estatua delante de la barrera, observando a Chihiro. Tuvo el impulso de acercarse y decirle algo, pero acabó por retractarse. Poco podría hacer por él si decidía quedarse hasta que pudiese llegar hasta Chihiro. Tan solo respetar su decisión.

Concienciado para afrontar lo que se le viniese encima, esperó a que Gabriel le diese luz verde para comenzar la prueba.
ImagenImagen
Avatar de Usuario
Drazham
26. Umbrío
26. Umbrío
 
Mensajes: 762
Registrado: Jue Oct 17, 2013 9:55 pm
Dinero: 133,197.76
Banco: 15,378.00
Sexo: Masculino
Estantería de objetos
Karma: 6

Re: [Evento Global] Ruta del Caído

Notapor LightHelco » Lun Ago 10, 2015 4:20 am

¿Estamos a salvo? —pregunté al aire tras que hubiésemos atravesado el arco huyendo de aquella oscuridad.

La visión de la sala en la que nos habíamos reunido los cuatro y la presencia de Ren me sirvieron como respuesta, dejándome claro que nos habíamos librado de una muy buena. Suspiré aliviado antes de fijarme en que Gabriel seguía con nosotros, pero este se estaba volviendo transparente como si fuera a desaparecer en cualquier instante.

Lamento profundamente todos los problemas que os he causado —se dirigió a nosotros con un tono que no le hacía parecer para nada un niño, seguramente fuese por ser el recuerdo de alguien que llegaría a ser adulto, pero era extraño — y os agradezco que me hayáis ayudado a escapar. Siento que hayáis tenido que ver toda esa sangre y haberos enfrentados a los recuerdos de Nithael. Es sólo que no puede controlarlo… Alec, fuiste muy valiente. Siento haberte hecho malgastar magia y que hayas olvidado algunos hechizos —se disculpó seguidamente a lo que le respondí con una sonrisa, por lo que sentía respecto a ellos, no eran más que una pérdida temporal.

No te tortures con una tontería así, realmente ya empiezo a volver a recordar escenas en donde estaba entrenando algunos hechizos que ahora no soy capaz de mencionar, pero vaya, nada que se le pueda comparar a lo que tengo en el tarro —le expliqué sacando inmediatamente la hoja en donde tenía apuntados varios de mis hechizos —. Y creo que siempre puedo apuntar aquí algunas cosas por si me quieren insistir con lo de la amnesia.

Reí un poco para mejorar el ánimo de Gabriel, y si podía el de mis compañeras. Claramente estaba preocupado con el tema de los recuerdos, pero no iba a dejar que me comiera el tarro algo que tenía asegurado el recuperar en cuanto saliéramos del castillo, a sabiendas de eso mi prioridad era totalmente el salvar Tierra de Partida.

Tras la disculpa, el chico se dispuso a explicarnos el que significaba aquel recuerdo. Todo era una especie de pesadilla que Nithael, el ángel que había visto cuando me desperté amnésico, sufría rememorando algo que creía que había sido un error suyo. Por lo que nos contó, lo habían desterrado de la antigua Tierra de Partida debido a la oscuridad, algo que me dio bastante rabia, el elemento oscuro era peligroso, pero era un elemento a fin de cuentas, un elemental de fuego también puede llevar un mundo a la destrucción si se vuelve loco, lo mismo con los de oscuridad. Al final lo que lo había condenado era el rencor y el odio que sintió durante el exilio y no lo otro.

Si esa persona nunca se me hubiera acercado, las cosas, quizás, habrían sido diferentes.…

Aunque aquellas últimas palabras del niño me llamaron mucho la atención. ¿Quién le había hecho cambiar de esa forma? El transformar a ese inocente niño en un monstruo sanguinario. Sabía que no podría llegar a preguntárselo, ya que el chico empezó a desaparecer y quiso usar el poco tiempo que le quedaba para pedirle un último favor a Maya.

Me quedé al lado de Nicoxa esperando a que los dos jóvenes terminaran, el chico quería fusionarse con la pluma que portaba Maya, así que yo no podía hacer nada al respecto con esa petición. Estaba en manos de la brujita, después de todo ella era la que tenía el objeto, no nosotros, por lo que no podíamos más que apoyarla en su decisión.

Por favor, tenéis que ayudar a Nithael —rogó nuevamente el joven —. No puede seguir atado al pasado. Se merecía muchas cosas mejores y tiene… Tiene que mirar al futuro. No puede dejar que le sigan persiguiendo sus fantasmas, ni el mío… Ni el de nadie.

No debes porque preocuparte, le haremos saber a Nithael la verdad para que deje de sufrir, te lo prometo.

Tras despedirnos de Gabriel, volvimos con Ren, el cual no había hablado en toda la escena.

Es triste, pero nadie entendía porqué hizo lo que hizo. Porqué llegó a ese extremo. —. Ren se giró hacia nosotros entregándonos los nuevos naipes —. Aquí tenéis. Enhorabuena por haber superado la prueba. Os queda una. La última y llegaréis al fondo del Castillo. Supongo que no os hará ilusión saber que el Guía os estará esperando—sonrió de forma poco animada, como si la persona que hubiese mencionada no fuera de su gusto. Miré de reojo a mis dos compañeras para ver si compartían la misma opinión —. En cualquier caso, habéis llegado muy lejos. Dudo mucho que falléis ahora. Antes de que os vayáis, ¿os importaría darle esto a Neru?—. Y me tendió una carta que guardé bajo la chaqueta con cuidado de no arrugarla —. Os lo agradecería mucho.

»Suerte. Por favor, salvad Tierra de Partida.


Eso haremos y no tienes que preocuparte por la carta, llegará a su destino —me agaché un poco para poder hablarle a Maya por lo bajo —. Creo que vas a tener que ayudarme con esto, ni me suena el nombre ese. Ah, una cosa más —recordé de golpe —. Debido a que perdí los recuerdos, todo lo que haya podido saber del castillo lo he olvidado y posiblemente entre ellos se encontrara la existencia de esa persona a la que llamas Guía ¿quién es realmente? ¿Y por qué deberíamos de temerle?
ImagenImagenImagenImagen



Logros:
Spoiler: Mostrar
ImagenImagenImagen


Awards:
Spoiler: Mostrar
ImagenImagen
ImagenImagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Avatar de Usuario
LightHelco
111. Roxas Organización
111. Roxas Organización
The Unknowns
 
Mensajes: 3303
Registrado: Jue Jun 07, 2012 10:42 am
Dinero: 320,406.83
Banco: 15,568.00
Ubicación: Un lugar con lapiz y goma
Sexo: Femenino
Clan: The Unknowns
Estantería de objetos
Karma: 16

Re: [Evento Global] Ruta del Caído

Notapor Saxor » Mar Ago 11, 2015 9:29 pm

Nada más pronunciar la respuesta, el portal se bañó en luz. Inmediatamente todos supimos que no nos podíamos quedar allí ni una milésima de segundo más. Sobre todo Kazuki, quien nos empujó a todos a dentro del portal.

***


Cuando pude acostumbrar la vista, me di cuenta de que todos habíamos regresado al Castillo del Olvido (aunque más bien habíamos salido del recuerdo). Estábamos en una sala blanca cuya única salida era una puerta dorada, aunque desconocía completamente cómo abrirla. Me sentía realmente aliviado de haber escapado de toda aquella oscuridad... Ojalá no tuviera esa sensación nunca más.

Agité un poco la cabeza para romper mi linea de pensamiento. Era mejor dejar de pensar en ello para que los recuerdos no volvieran, al fin y al cabo.

Ha ido, eh, por un pelo chicos pero... Lo habéis hecho muy bien. —El Maestro Kazuki se había recostado en la pared, bastante cansado—. Ay, ni que fuera... eh, un viejo. Bueno. Ya estamos casi. Tenemos que seguir, chicos.—miré un poco avergonzado a Kazuki desde donde me encontraba. La culpa de que hubiéramos estado a punto de morir no era nada más que mía, y era algo que no me podía quitar de la cabeza. ¿Por qué no se me había podido ocurrir antes la respuesta?—Tratad de no olvidar lo que habéis visto. Podría ser importante.

El debate de si la oscuridad era tan peligrosa como decían... Era un tema que me tocaba bastante. Si no fuera por Xayim yo no sería nadie, por mucho que me molestara. Toda mi luz se había desprendido de mí hacía bastante tiempo ya, y la única conexión que me quedaba con ella era la marca invisible que tenía en la mano... Que tampoco respondía a mis llamados que digamos. Solo era oscuridad contenida en un cuerpo vacío. ¿Era una aberración por ello? ¿Había alguna manera de usar la oscuridad sin que ella se volviera en tu contra? Para mi desgracia, aún no tenía respuestas a esas preguntas, y mis cambios de humor dentro del Castillo del Olvido solo habían hecho que tuviera aún más dudas sobre esas cuestiones.

Kazuki se acercó a la puerta dorada y alzó un naipe muy parecido a los que conseguimos en el segundo nivel del sótano (¿cuántos pisos habíamos descendido ya? La verdad era que no tenía ni idea). Así que para eso servían... Como al parecer solo podía pasar quien usara el naipe, lo saqué de mi bolsillo y lo alcé de la misma forma, permitiéndome la entrada.

Una vez atravesamos la puerta, acabamos en un pasillo prácticamente infinito, sin ningún fin a la vista. La única alternativa a ese camino posiblemente eterno era una sala justo al lado nuestra. Y en su interior... Se encontraba ni más ni menos que Malik, uno de mis compañeros que el Castillo trató de hacerme creer que estaban muertos. Además de él, también estaban otras tantas personas más, que era capaz de reconocer sin muchos problemas. Uno de ellos era Gabriel (aunque con más años que en el recuerdo), otro el propio Guía, y la cuarta...

¡Chihiro!—el Maestro corrió con todas sus fuerzas nada más ver a la persona que quería, pero acabó estrellándose con una barrera invisible, como si el Castillo no hubiera hecho sufrir a Kazuki lo suficiente.

—¡Calma, calma, Kazuki! ¡Ni que Chihiro fuera a desvanecerse!

Como si un Guía no fuera suficiente, otro con tan mala lengua como el primero apareció junto a nosotros. Guilmon estaba mirando alternativamente a los dos Guías con una clara confusión en su rostro. Yo solo miraba al que se encontraba junto a nosotros, con una expresión clara de molestia. ¿Es que no podía dejarnos en paz?

—Normalmente Gabriel os daría la bienvenida, pero como está un poco ocupado lo haré yo. Dejad que os explique:

»¡Bienvenidos a la recta final del Castillo del Olvido! Aunque habéis tardado lo vuestro, ¡lo habéis conseguido! Sólo queda una prueba por delante y llegaréis a la sala de la Llave Espada, donde tres compañeros os están esperando. Puede que cuatro, si Malik consigue superar sus propia prueba. —¿Entonces Malik ya estaba en mitad de la prueba? Si el Guía iba a dirigirla, seguro que me iba a irritar, y mucho. ¿Significaba eso que me iba a echar atrás? Ni lo más mínimo. Debía alcanzar la Llave, y si eso significaba enfrentarme al Guía, que así fuera.

»No os puedo decir en qué consiste, como Gabriel os diría: «La prueba dará comienzo ahora. Podéis ir juntos o de uno en uno, si bien… Os aconsejo que vayáis solos. Quizás os arrepintáis si preferís ir en grupo. Aunque imagino que os han advertido precisamente contra separaros: por eso tenéis la oportunidad de ir juntos.»

Aquel consejo con la voz de Gabriel me pilló de sorpresa. Incluso cuando Nithael nos dijo que no nos separáramos sobre todo justo antes del recuerdo, ¿nos estaban aconsejando que nos separáramos justo ahora? El Guía no me inspiraba ninguna confianza, todo lo contrario que Nithael. ¿A quién debería hacer caso? Para mí, la respuesta estaba más que clara.

»No puedo daros información sobre la prueba, aunque podemos hablar de otras cosas si así lo queréis. Contestaré a lo que pueda. Si decidís permanecer un rato aquí, recobraréis fuerzas. Al que pase, o a los que paséis, sin embargo, he de haceros dos preguntas:

»¿Por qué has decidido continuar adelante? Y, ¿a qué aceptarías renunciar a cambio de obtener la Llave Espada?


Dos preguntas que me, aunque he de decir que no las había previsto, sí que las veía lógicas. En resumidas cuentas, nos estaba preguntando por qué queríamos alcanzar la Llave y a qué estábamos dispuestos a renunciar para ello. Eran preguntas que bien debían pensarse con detenimiento.

Dicho esto, aclarar que hablaréis con Gabriel, no conmigo (porque soy una persona ocupada, como comprenderéis). Así que, quitando a Kazuki porque supongo que él decidirá una vez haya podido reunirse con Chihiro, ¡decidme cuál es vuestra decisión!

Mientras Nikolai preguntaba algunas cosas a "Gabriel" y responder al par de cuestiones, yo pensé en mis propias respuestas. La primera era muy sencilla de responder, la segunda... Más que difícil, era qué opciones de las que disponía podía contar y cuáles no. ¿Qué me pertenecía y qué no?

Cuando por fin llegué a las respuestas, Nikolai dijo que iba a ir solo a la prueba... Lo que me pilló por sorpresa. ¿Había seguido el consejo del Guía? Que eligiera exactamente lo contrario a lo que presuponía que íbamos a responder todos me hizo replantearme el si ir juntos o separados a la prueba. Si bien es verdad que nos aconsejaron ir juntos, también que confiáramos los unos en los otros. Tal vez debía de confiar en que esa decisión era la correcta y seguir también... Una vez estuve seguro de mi elección, empecé a responder.

A la primera pregunta... Es simple: quiero salvar mi único hogar y a todas las personas que aprecio que también viven en él—respondí con sinceridad—El único mundo al que puedo llamar hogar está a las puertas de la destrucción, y con él casi todas las personas que conozco. No pude hacer nada con Vergel Radiante... pero no me rendiré con Tierra de Partida.

>> Y sobré qué estaría dispuesto a renunciar... Es difícil responder cuando ya te lo han quitado todo. He perdido mi familia y mi primer hogar, y estoy luchando por recuperar el que tengo ahora. Parte de lo que dispongo ni siquiera es de mi posesión. La llave espada no me pertenece, estas ropas son robadas, y ni siquiera tengo corazón... Aunque supongo que no son sólo bienes materiales a lo que te refieres. Tengo objetivos de los que me costaría bastante desprenderme. Pero sin con ello consiguiera recuperar Tierra de Partida y a todos mis seres queridos... Estaría dispuesto incluso a no recuperar nunca Vergel Radiante.—respiré hondo tras expresar lo que quería. Era cierto, devolver a Vergel Radiante todo su esplendor era una meta que siempre había ansiado lograr, pero no debía ansiarlo todo. Si con renunciar a ello podía recuperar Tierra de Partida, conformarme con mi nuevo hogar estaba bien.

Saxor, Coli, os deseo suerte en la prueba. Tened mucho cuidado. Yo también trataré de aplicarme el mismo cuento.

Igualmente—devolví mis deseos a Nikolai ... Y yo también tomaré la prueba solo.

Una vez terminé, me puse a esperar alguna indicación para que fuese mi turno, o el camino que debía tomar para empezar la prueba, aunque suponía que sería la misma ruta que tendría que tomar Nikolai.
Imagen
Gracias a Ita por la firma~
Spoiler: Mostrar
Imagen

Imagen

RolKHWorld: Cronología
Spoiler: Mostrar
Primer Arco: Corrupción

1ª Saga
Prólogo: Sólo los más fuertes... [Bastión Hueco]
Encuentro: Recién llegado [Tierra de Partida]
Trama: Un paso atrás [Tierra de Partida]
Trama: Y digo ¡salta! [Coliseo del Olimpo]
Encuentro: La ciudad eterna [El Mundo Inexistente]
Encuentro: Persecución enmascarada [Villa Crepúsculo]
Encuentro: Un lugar al que regresar [Espacio Profundo]
Trama: ¿¡Es que nadie piensa en los niños!? [Islas del Destino]
Misión: Cuidado con los asteroides [Espacio Profundo]
Encuentro: Perros, lagartos y osos parlantes [Bosque de los 100 Acres]
Encuentro: Las apariencias engañan [Tierra de Partida]
Trama: ¡Se me ha metido placton en la nariz! [Atlántica]
Evento Global: Ocaso de una estrella (Primera parte) [Bastión Hueco]
Evento Global: Ocaso de una estrella: Ruta 3 (Segunda parte) [Bastión Hueco]
Evento Global: Ocaso de una estrella (Parte final) [Bastión Hueco]

Segundo Arco: Perdición

2ª Saga
Misión: Dulces olores [Monstruo] (Inconclusa)
Trama: Ángeles Caídos [Intersticio entre los mundos]
Encuentro: Laberinto Paranoico [Espacio Paranoico]
Trama: Alianza en las Penumbras [El Mundo Inexistente]
Encuentro: ??? [???]
Encuentro: Pasado olvidado [Ciudad de Paso]
Encuentro: Coincidencias alarmantes [País de Nunca Jamás] (Inconcluso)
Trama: Cada loco con su tema [País de las maravillas]
Evento Preglobal: The End Is Where We Begin (Day 0: The Introduction) [¿Villa Crepúsculo?]
Evento Global: The End Is Where We Begin (Día 1 - Sector 1: Crepúsculo) [¿Villa Crepúsculo?]
Evento Global: The End Is Where We Begin (Día 2 - Sector 3: Ocaso) [¿Villa Crepúsculo?]
Evento Global: The End Is Where We Begin (Día 3 - Sector 4: Túneles) [¿Villa Crepúsculo?]
Evento Global: The End Is Where We Begin (Día 4 - Sector 3: Ocaso) [Villa Crepúsculo Virtual]
Evento Global: The End Is Where We Begin (Día 5 - Sector 2: Atardecer) [Villa Crepúsculo Virtual]
Evento Global: Datastream (Primera parte) [La Red]
Evento Global: Datastream - Ruta de la Eliminación (Segunda parte) [La Red]
Evento Global: Datastream (Parte final) [La Red]

Tercer Arco: Rebelión

3ª Saga
Trama: Crisis de tierras sin dueño [Ciudad de Paso]
Encuentro: Día de monos [Selva Profunda]
Trama: Asalto a la Torre [Torre de los Misterios]
Trama: De cero a héroe [Coliseo del Olimpo]
Trama: En busca del corazón [Espacio Paranoico]
Evento Global: El Esclavo del Olvido (Primera parte) [Castillo del Olvido]
Evento Global: El Esclavo del Olvido - Ruta del Caído (Segunda parte) [Castillo del Olvido]
Evento Global: El Esclavo del Olvido (Parte final) [Castillo del Olvido]
Secret Episode: Another Side, Another Story - The Last Twilight [Villa Crepúsculo]

Cuarto Arco: Colisión

4ª Saga
Trama: Leyendas se contarán [Tierra de Dragones] (en proceso)


No Canon
Especial libre: San Valentín [Tierra de Partida] [Corrupción]
Especial libre: Halloween [Ciudad de Halloween] [Perdición]
Especial libre: ¡Feliz Navidad 2012! [Bastión Hueco] [Perdición]
Especial libre: Historias de San Valentín [Bastión Hueco] [Perdición]
Especial libre: Venid, mis pequeños [Villa Crepúsculo] [Perdición]
Especial libre: ¡Feliz Navidad 2013! [Bastión Hueco] [Perdición]
Especial libre: La mansión encantada [Ciudad de Halloween] [Rebelión]
Especial libre: El laberinto de los corazones [???] [Rebelión]
Especial libre: ¡Los reyes han llegado! [Tierra de Partida] [Rebelión]
Especial libre: La Mansión Encantada II: La Venganza [Ciudad de Halloween] [Rebelión]
Especial libre: World War Christmas [Tierra de Partida] [Colisión]
Avatar de Usuario
Saxor
42. Atisbota
42. Atisbota
 
Mensajes: 1239
Registrado: Jue Oct 21, 2010 9:14 pm
Dinero: 649,366.31
Banco: 15,749.69
Ubicación: En el Mundo Digital
Sexo: Masculino
Estantería de objetos
Karma: 8

Re: [Evento Global] Ruta del Caído

Notapor Reimeow » Mar Ago 11, 2015 10:54 pm

Durante todo mi discurso, si a eso se le puede llamar discurso, el Guía estuvo suspirando y contemplando, no sé si divertido o no, todo aquel espectáculo.

Tras apoyar mi espalda contra la pared y dejar que el peso de mi cuerpo me hiciera caer hasta sentarme, llegué a arrepentirme de haber abierto la boca, tenía que haberme mantenido callada. Después de meditar lo que había estado diciendo me llevé las manos a la cara, así de paso, quitaba alguna que otra lagrimilla suelta mientras me relajaba un poco y esperaba a que la crisis pasara.

—¿Cómo era eso de los estados…? ¿Negación, ira, negociación (¿esa creo que te la has saltado?)…? Y luego depresión. ¡Sí, eso era! No está mal, Yui.

Al escuchar al Guía me quité un poco las manos para mirarle con cara de extrañada, ¿de qué habla? ¿Cómo que no está mal?

Has sido un poco de manual, pero no te preocupes, lo has hecho bastante bien para no tener ni siquiera Llave Espada. Ahora sólo queda superar esa fase en la que nos centramos en nosotros mismos, envueltos en un halo de egocentrismo mientras creemos que somos las personas más desgraciadas del mundo, y empezar a aceptar que aunque seas un pedazo de cacho de trozo de aprendiz sin desarrollar, ¡las cosas pueden mejorar!

Con cara entre asombro y extrañeza, fui escuchando las palabras del guía, sin mediar palabra, asimilando lo que quería decir. Si no fuera por qué era el Guía juraría que me estaba dando consejos.

—La Orden es un conjunto de personas, poco importa si sois de Bastión Hueco o Tierra de Partida. Los recuerdos forman a la persona, así que no importa lo que haya quedado atrás, sino lo que te espera a partir de ahora. Si quieres convertirte en alguien que merezca la pena, Yui, forja nuevas memorias por las que estés dispuesta a morir.

Forjar nuevas memorias…Aquella frase se grabó casi a fuego en mi mente. Levanté la mirada para mirar al ser que hacía un momento me había estrangulado y ahora parecía que me daba consejos, al menos, a mi me resultaban eso, ya que, no iba a negarlo, tenía razón.

Nadie puede vivir solo, nadie puede vivir sin objetivos. Deja de mirarte a ti misma y busca a los demás porque sólo así podrás convertirte en alguien mejor: cuando la gente te condicione y te obligue a cambiar.

Tras todo aquello mi mente se había quedado en blanco y mientras miraba al suelo lo único que rondaba por mi cabeza era una de las frases del Guía: “Forjar nuevas memorias..

Solté un suspiro cogiendo fuerzas para levantarme del suelo y decirle una única palabra más, pero cuando quise darme cuenta me encontraba en otra sala. Alzando ambas cejas, contemplé aquella nueva sala donde lo único que destacaba era una puerta dorada.

Tardé en darme cuenta de la presencia de Keiko ya que aún estaba algo confusa. Le preguntaba varias cosas intentando averiguar con sus respuestas lo que había tras aquella puerta y si verdaderamente se trataba de la prueba final.

Espera, ¿prueba final? ¿Eso quiere decir que he superado la prueba?

Con algo más de confusión en lo alto y preguntándome qué había hecho en especial para superar la prueba, me acerqué a Keiko.

Resultaba que para poder entrar por la puerta y pasar a la sala de la prueba final necesitábamos ser siete personas, ¿tan difícil o tan peligrosa era?

Por lo menos tengo la pluma del ángel y la espada, supongo que podré sobrevivir ahí dentro.

Seguía bastante confusa por el cambio de habitación y de por el hecho de que hubiera superado una prueba sin saberlo. Lo que si sabía es que aquellas últimas palabras que me dedicó el Guía las iba a grabar en mente. Éste pasó por mi lado dándome una palmadita en la cabeza y le seguí con la mirada hasta que se desvaneció. No quise decírselo pero me sentía agradecida por sus consejos.

No sabía si quejarme por la palmadita o no, pero tras ver cómo desaparecía me giré hacia Keiko saludándola y dedicándole una media sonrisa.

***


Por ahora éramos muy pocas personas para abrir la puerta, así que nos tocaba esperar. A mí al menos, me venía bien un pequeño descanso, si Keiko quería entablar conversación no me quejaría, al revés, hablaría con ella. Necesitaba despejar un poco la cabeza.

Y, como por arte de magia, Light apareció en la sala arrastrado de un brazo por el Guía. Ya éramos tres personas, esperaba que empezaran a llegar con más velocidad si no, esto iba a ser eterno. Una vez allí, el ser le explicó a Light lo de las siete personas y que podía descansar.

Con unas últimas palabras de que quizás pronto se unirían más personas, el ser se fue marchando pero de pronto se paró, como si se hubiera olvidado de algo, pero al revés, tuvo una idea. Al girarse de nuevo hacia nosotros sostenía una baraja de cartas abiertas en abanico, enseñando su parte trasera. El guía explicó que eran ítems, una carta reveladora (invocación, poción, Ultrapoción…) y una carta trampa que nos sellaría la magia pero nos daría cierta inmunidad física.

Simplemente para escoger carta había que elegir un número del 1 al 8. Light sin dudar cogió el número cinco. Intercambié durante unos segundos la mirada con los que se encontraban en la sala y dirigiendo mi mirada al Guía me decidí a jugar también. Quién sabe, quizás me tocaba algo bueno, hasta estaba dispuesta a aceptar que me tocara la carta-trampa si con ello conseguía cierta inmunidad física.

Yo el 7.
A scattered dream that's like a far-off memory.A far-off memory that's like scattered dream.I want to line the pieces up yours and mine.

Imagen

^Gracias por el avatar y la firma Crystal. <3
Avatar de Usuario
Reimeow
7. Grandullón
7. Grandullón
 
Mensajes: 206
Registrado: Mié Jul 03, 2013 6:01 pm
Dinero: 8,667.79
Sexo: Femenino
Karma: 0

Re: [Evento Global] Ruta del Caído

Notapor James Bond » Mié Ago 12, 2015 12:00 pm

Aguardando una respuesta del Guía, Keiko aguardó lo más pacientemente que pudo y mientras lo hacía, Yui acabó apareciendo.

¡Yui!— exclamó de alegría la aprendiza y corrió a abrazarla— ¿Estás bien?
Creo que no debería haberte dejado pasar. En fin, a lo hecho, pecho. Supongo. Creo. A veces desearía no tener tantas personalidades dentro, je. Como iba diciendo antes, no podéis cruzar esa puerta a menos que haya siete personas, de modo que os recomiendo que descanséis un poco y os preparéis bien preparadas. No os voy a responer qué os espera porque entonces no tendría gracia. Si no confiáis en mí, ¡qué se le va a hacer! Podéis intentar marcharos aunque… —Miró a su alrededor y soltó una risotada—. ¿Por dónde pretendéis hacerlo?

»Y por último, Keiko, querida. Nadie te ha quitado nada y menos Gabriel, que es un pedazo de pan, así que será mejor que aprendas a saber cuándo has perdido un fragmento de tu corazón y cuándo no. A menos que quieras que te la quite yo, claro, ya que veo que no le estás dando demasiado uso ni tampoco servirías de demasiada ayuda… ¿No? Bah, qué aburridas sois.


Poco después, apareció Light en la sala, parecía que también había superado la prueba. Keiko se alegró de verle también y fue a abrazarle.

¡Que alegría veros a los dos!— exclamó la chiquilla.— Me estaba sintiendo muy sola, ¿sabéis?

Entonces, el Guía volvió a aparecer, con nueva información.

Pronto se os unirán más personas. Espero. Me pregunto cuántos serán capaces de superar la prueba… —Se detuvo un momento y, de pronto, cuando se encaró a los aprendices sostenía un abanico de cartas de las cuales sólo podían ver la parte trasera, con diseños de Llaves Espada—. Para amenizar la espera os propongo algo: tengo ocho cartas. Cada una de ellas puede ofreceros un ítem que quizás os sirva para lo que os espera. Entre otras cosas hay una carta reveladora, una Poción, una Ultrapoción, un Éter, una invocación a alguna reminiscencia con la que os hayáis encontado para pedirle algo o información (¿no estaría guay contar con Zephyr en un combate?), un recuerdo, una posibilidad de hacerme cualquier pregunta y que yo me vea obligado a responderla y una carta-trampa que os sellará la magia durante un tiempo pero os dará cierta inmunidad física.

»Por supuesto, cuando las escojáis podéis decidir cómo, cuándo y dónde usarlas, aunque evidentemente sólo funcionarán en el Castillo. Tenéis que escogerlas a boleo, nombrando del 1 al 8. Sólo una para cada uno. ¿No es divertido? ¿Jugáis o preferís esperar a que venga más gente?

Yo juego. El cinco mismamente— dijo Light.
Yo el 7— escogió Yui.
Entonces... Yo escojo el número seis.
Imagen
Imagen
Avatar de Usuario
James Bond
28. Samurai
28. Samurai
AnimeDesign
 
Mensajes: 826
Registrado: Mié Dic 05, 2007 6:00 pm
Dinero: 200,000.00
Banco: 15,728.25
Sexo: Masculino
Clan: AnimeDesign
Estantería de objetos
Karma: 4

Re: [Evento Global] Ruta del Caído

Notapor Mentos » Mié Ago 12, 2015 9:46 pm

Autoridad. Esa era la palabra que faltaba y la que por fin Saxor pudo adivinar. En cuanto la dijo, el arco comenzó a emitir una poderosa luz de su interior. Parecía ser que la salida estaba por fin abierta.

La oscuridad seguía avanzando peligrosamente por lo que, una vez Coli pudo atrapar la pluma que estaba tirada en el suelo, se dirigió hacia el resplandor del arco junto con sus compañeros.

***


Como era de esperar, al cruzar el arco se encontraban en un lugar distinto. Se trataba de otra sala del castillo, decorada con su blanco monótono, pero esta vez con una puerta dorada que imponía bastante a Colibritany. ¿Habrían llegado al final?

Ha ido, eh, por un pelo chicos pero... Lo habéis hecho muy bien. —Kazuki se apoyó en una de las paredes mientras descansaba—. Ay, ni que fuera... eh, un viejo. Bueno. Ya estamos casi. Tenemos que seguir, chicos. —Se reincorporó y avanzó en dirección a la puerta mientras sujetaba un naipe—. Tratad de no olvidar lo que habéis visto. Podría ser importante.

<<El naipe...>>

Coli rebuscó en sus bolsillos para encontrar el que ella consiguió hace ya tiempo. Lo agarró fuertemente y se acercó hacia la gigantesca puerta, curiosa y aterrada a partes iguales por lo que ocultaba en su interior.

Cuando los cuatro entraron, un larguísimo pasillo se extendió ante ellos. A simple vista parecía ser el único camino pero en una pequeña sala que había...

¡Chihiro!

... Se encontraban Chihiro, el Guía, Gabriel y uno de los aprendices que la joven vio al principio de su aventura en el castillo.

El maestro Kazuki se abalanzó hacia ellos sin pensárselo pero fue detenido por una barrera invisible. No parecía que pudiesen comunicarse con ellos.

—¡Calma, calma, Kazuki! ¡Ni que Chihiro fuera a desvanecerse! —El Guía apareció de repente mientras aquellas palabras sonaban—. Normalmente Gabriel os daría la bienvenida, pero como está un poco ocupado lo haré yo. Dejad que os explique:

»¡Bienvenidos a la recta final del Castillo del Olvido! Aunque habéis tardado lo vuestro, ¡lo habéis conseguido! Sólo queda una prueba por delante y llegaréis a la sala de la Llave Espada, donde tres compañeros os están esperando. Puede que cuatro, si Malik consigue superar sus propia prueba. No os puedo decir en qué consiste, como Gabriel os diría: «La prueba dará comienzo ahora. Podéis ir juntos o de uno en uno, si bien… Os aconsejo que vayáis solos. Quizás os arrepintáis si preferís ir en grupo. Aunque imagino que os han advertido precisamente contra separaros: por eso tenéis la oportunidad de ir juntos.»

»No puedo daros información sobre la prueba, aunque podemos hablar de otras cosas si así lo queréis. Contestaré a lo que pueda. Si decidís permanecer un rato aquí, recobraréis fuerzas. Al que pase, o a los que paséis, sin embargo, he de haceros dos preguntas:

»¿Por qué has decidido continuar adelante? Y, ¿a qué aceptarías renunciar a cambio de obtener la Llave Espada?


Tenía que haberme imaginado que esto no sería tan sencillo...

El Guía aclaró su garganta mientras miraba el bosillo de Coli, algo que resultó sospechoso a la chica.

—Dicho esto, aclarar que hablaréis con Gabriel, no conmigo (porque soy una persona ocupada, como comprenderéis). Así que, quitando a Kazuki porque supongo que él decidirá una vez haya podido reunirse con Chihiro, ¡decidme cuál es vuestra decisión!

Nikolai aprovechó el momento para preguntar una cuestión bastante acertada. Pero la bella Colibritany no podía quedarse de brazos cruzados. Tenía que pensar en una respuesta para las preguntas que el Guía les proponía, ya que parecían ser bastante importantes para el desarrollo de la prueba. Dejó que sus compañeros respondieran primeros y cuando llegó su turno, habló:

Bueno, he decidido continuar adelante por razones obvias: mi supervivencia. No iba a quedarme quieta mientras perdía mis recuerdos. Puede que mi vida no haya sido la más bonita para vivir pero sí que es la que me ha tocado y la que, desde hace poco tiempo, por fin he llegado a poder vivir junto con mi amiga... nunca he tenido intenciones de rendirme por esta razón.

Una respuesta dada. Pero aún le faltaba otra.

Lo segundo que me preguntas es algo más complicado ya que nunca es algo que me haya cuestionado. A diferencia de mis compañeros, yo nunca tuve alguna posesión de valor o familia... trabajaba en Port Royal contra mi voluntad. Aceptar la Llave Espada y ser aprendiza de Bastión Hueco significó salir de aquella situación y tener un hogar. Pero aun así, nada de eso me pertenece. Lo único que realmente siempre tendré será la amistad de Nicoxa y no pienso dar a ella o los recuerdos que tenemos juntas —contestó firmemente—. Sí que estaría dispuesta a renunciar a mi pasado antes de conocer a mi amiga Nico, pero dudo que eso valga algo, ¿no? —Suspiró profundamente.

No tenía nada más que decir y tampoco es que tuviese mucho tiempo. Nikolai decidió ir solo por lo que parecía que la muchacha debía ir también sola, pero ahora no debía flaquear. Después de todo lo que ha dicho, debía mostrar que era capaz de superar la prueba con éxito. Estaba cansada, sí, pero no podía pararse cuando todo el mundo avanzaba.

Saxor, Coli, os deseo suerte en la prueba —dijo el aprendiz—. Tened mucho cuidado. Yo también trataré de aplicarme el mismo cuento.

Igualmente... Y yo también tomaré la prueba solo.

Lo mismo. Nos vemos en el otro lado.

Ya solo quedaba avanzar. Borró las dudas que existían en su cabeza y se propuso a afrontar la prueba, al fin.
"La nostalgia es como el alcohol; arruina tu juicio".

Imagen
Imagen
Imagen

AWARDS
Spoiler: Mostrar
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen



Imagen
Avatar de Usuario
Mentos
102. Yuffie
102. Yuffie
The Unknowns
 
Mensajes: 3050
Registrado: Mar Ago 04, 2009 2:13 pm
Dinero: 319,254.72
Banco: 664,875.25
Ubicación: Umrcya.
Sexo: Masculino
Clan: The Unknowns
Estantería de objetos
Karma: 134

Re: [Evento Global] Ruta del Caído

Notapor Zodiark » Jue Ago 13, 2015 12:10 am

¡Éxito! Nuestra elección de palabras fue correcta, y pudimos salir de allí sanos y salvos. Volvíamos a estar en el castillo, esta vez con Gabriel, y allí nos esperaba Ren, que se acercó y nos entregó un nuevo naipe a cada uno.

¡Bienvenidos! Enhorabuena, lo habéis conseguido. Y, vaya…Os habéis traído un regalito. Aunque no durará mucho.

¿Qué quieres dec... —Me giré hacia Gabriel y lo observé. Pronto me di cuenta de a qué se refería Ren: Gabriel estaba desapareciendo—. ¡Gabriel...!

El chico también se dio cuenta, y parecía preocupado. Se apresuró en disculparse por las posibles molestias que nos había podido causar, y nos dio una explicación. Parecía algo confusa, pero nada en aquel lugar me sorprendía ya.

Así que te exiliaron... Y ese tipo es tu verdadero yo, ¿eh? Así que sólo eres un recuerdo, como Jasper...

El chico se acercó a mí y me agarró la mano en la que sostenía la pluma.

Se supone que no puedo salir de ese lugar, así que… Por favor, necesito que me dejes fusionarme con la pluma. Así, cuando llegue el momento, podré hablar con Nithael. Perderá su poder mágico pero puede que sea útil. Por favor, Maya. Es mi única oportunidad.

Observé la pluma, y después miré a Gabriel de arriba a abajo. ¿Y si era otra trampa de El Guía? ¿O quizá era parte de otra prueba? En cualquier caso no me fiaba mucho de lo que ocurría en aquel castillo, pero por alguna razón el chico me pareció honesto y sincero. Quizá era lo mejor acceder a su petición.

Has sido muy amable conmigo, incluso siendo un desconocido. Muchísimas gracias. A ti y a todos —dijo, tras acariciarme la mano.

»Por favor, tenéis que ayudar a Nithael. No puede seguir atado al pasado. Se merecía muchas cosas mejores y tiene… Tiene que mirar al futuro. No puede dejar que le sigan persiguiendo sus fantasmas, ni el mío… Ni el de nadie.

»Buena suerte a los tres.

Sonreí cándidamente y estiré el brazo, con la palma donde se hallaba la pluma boca arriba, hacia Gabriel.

Vamos, debes apresurarte.

Gabriel desapareció, y la pluma se tornó de color negro, muy distinto al blanco puro y delicado que la adornaba anteriormente. Sin pensar más en el asunto, guardé de nuevo la pluma en un bolsillo.

Ren nos dijo entonces que debíamos llegar a la última prueba, tras la que nos esperaba El Guía. También pidió a Alec que le entregase una carta a Neru, pero el chico no parecía recordar dicho nombre y me pidió ayuda con el asunto.

En ese caso me encargaré yo, ¿vale? —dije cogiendo la carta de sus manos y guardándola—. Ha sido mi compañero en alguna que otra misión, así que sé quién es.

Debido a que perdí los recuerdos, todo lo que haya podido saber del castillo lo he olvidado y posiblemente entre ellos se encontrara la existencia de esa persona a la que llamas Guía ¿quién es realmente? ¿Y por qué deberíamos de temerle? —preguntó después.

Si te soy sincera, yo tampoco sé mucho acerca de él —contesté con total honestidad guardando la carta en un bolsillo diferente al de la pluma—. Sólo sé que va por ahí llevando la cara de Ronin, y que nos está poniendo a prueba en este castillo. Poco más puedo decirte. Espero que ambos podamos obtener respuestas cuando superemos la última prueba.

Y sin más dilación, naipe en mano, me dirigí a la puerta que nos conduciría a la prueba final.
Imagen
Imagen
Imagen

~Awards~
Spoiler: Mostrar
Imagen
Imagen

ImagenImagenImagen
Avatar de Usuario
Zodiark
72. Ducky Goose
72. Ducky Goose
The Unknowns
 
Mensajes: 2142
Registrado: Lun May 14, 2012 3:40 am
Dinero: 5,145.82
Banco: 1,816,912.05
Ubicación: Ultimate Academy for Gifted Juveniles
Sexo: Masculino
Clan: The Unknowns
Tumblr: sodasalvaje
Youtube: Dacobue
Instagram: @soda_93
Estantería de objetos
Karma: 103

Re: [Evento Global] Ruta del Caído

Notapor Sito » Jue Ago 13, 2015 12:53 am

Las palabras que dijo cada uno fueron acertadas y, en el último momento, todos lograron atravesar el arco, incluso Gabriel. El chico que les atacó intentó en el último momento impedirles huir pero no le sirvió de nada.

*


¡Bienvenidos! Enhorabuena, lo habéis conseguido. Y, vaya…—un chico que le sonaba pero al que ahora mismo Nicoxa no recordaba los recibió. Le regaló a cada uno un naipe y acto seguido miro a Gabriel—. Os habéis traído un regalito.—Hizo una mueca en la que parecía haber tristeza—. Aunque no durará mucho.

¿Por qué dijo eso? Nicoxa no tuvo más que girarse para mirar al niño y comprender a qué se refería: estaba empezando a desvanecerse.

¡Gabriel! ¿Qué te ocurre...? —preguntó con preocupación a Gabriel, que hizo una reverencia a los tres aprendices.

Lamento profundamente todos los problemas que os he causado—dijo con un tono que, de nuevo, no correspondía a su edad— y os agradezco que me hayáis ayudado a escapar. Siento que hayáis tenido que ver toda esa sangre y haberos enfrentados a los recuerdos de Nithael. Es sólo que no puede controlarlo… Alec, fuiste muy valiente. Siento haberte hecho malgastar magia y que hayas olvidado algunos hechizos. Igual que siento lo de tu cuello, Nicoxa. Ojalá hubiera podido evitarlo porque, en gran medida, es mi responsabilidad. Por eso creo… Creo que… merecéis una explicación—La bella aprendiza negó con la cabeza para restarle importancia a lo de su cuello. No le echaba la culpa a él de nada—. Como imagináis, sólo soy una reminiscencia —Nico asintió, aunque no tenía ni idea de lo que significaba eso—. Mi yo verdadero… Ocurrió hace mucho, más de mil años. Esa… sombra que nos perseguía es en lo que me convertí de adulto. Nithael lo recuerda demasiado bien, a pesar de todo el tiempo que ha pasado, y lleva desde entonces repitiendo en pesadillas escenas como la que habéis visto. Pensando que si hubiera sabido reaccionar a tiempo, podría haber salvado al niño que él conocía. A veces aparezco como adolescente y otras como niño. Nunca como adulto. Para él, «ese Gabriel» nació por culpa de la oscuridad, por culpa de que no fue capaz de evitar que me exiliaran de Tierra de Partida. Y no lo es. Él no tiene la culpa de nada, aunque lo crea. Fue todo por mi propio egoísmo. Cuando me exiliaron sólo podía sentir resentimiento contra la gente que me había apartado de mi hogar. No voy a decir que quisiera venganza pero…

»Si esa persona nunca se me hubiera acercado, las cosas, quizás, habrían sido diferentes.…


¿A quién se referiría? Todo ese asunto le producía bastante curiosidad, además de pena hacia el pobre niño. Lo que vivió fue hace tanto tiempo... y aún tenía repercusión en ese castillo. Era un poco siniestro que ellos, que no tuvieron nada que ver con lo que pasó, se tuvieran que ver afectados también.

Alec re rió para intentar relajar el ambiente, aunque era algo difícil teniendo en cuenta que el niño estaba desapareciendo cada vez más. Se situó a su lado y observaron cómo Gabriel se acercaba a Maya para seguir hablando el poco tiempo que le quedaba.

Se supone que no puedo salir de ese lugar, así que… Por favor, necesito que me dejes fusionarme con la pluma. Así, cuando llegue el momento, podré hablar con Nithael. Perderá su poder mágico pero puede que sea útil. Por favor, Maya. Es mi única oportunidad.—Miró a Maya con una seriedad que parecía impropia de un niño. Parecía mentira que alguien así acabara siendo como el chico que les atacó antes.— Has sido muy amable conmigo, incluso siendo un desconocido. Muchísimas gracias. A ti y a todos.

»Por favor, tenéis que ayudar a Nithael. No puede seguir atado al pasado. Se merecía muchas cosas mejores y tiene… Tiene que mirar al futuro. No puede dejar que le sigan persiguiendo sus fantasmas, ni el mío… Ni el de nadie.

»Buena suerte a los tres.


Nicoxa le mandó un beso con la mano mientras intentaba no llorar con las bonitas palabras de Gabriel. Todo dependía de Maya, ya que era la que tenía la pluma. Hiciera lo que hiciera tendría que apoyarla, aunque si decidía no dejarle fusionarse probablemente se vería obligada a darle una cachetada indolora.

Es triste, pero nadie entendía porqué hizo lo que hizo. Porqué llegó a ese extremo.—volvió a ofrecer los naipes si no los cogieron antes—. Aquí tenéis. Enhorabuena por haber superado la prueba. Os queda una. La última y llegaréis al fondo del Castillo. Supongo que no os hará ilusión saber que el Guía os estará esperando—sinceramente no le hacía ninguna—. En cualquier caso, habéis llegado muy lejos. Dudo mucho que falléis ahora. Antes de que os vayáis, ¿os importaría darle esto a Neru?—Le tendió una carta a Alec, que parecía confundido—. Os lo agradecería mucho.

Por alguna extraña razón a Nicoxa le hizo gracia que le encasquetaran el sobre a Alec. Pero antes de que le entrara un ataque de risa histérica —esas cosas siempre ocurrían en el peor momento— decidió preguntarle algo a aquel chico que cada vez le sonaba más y más.

¿Tú sabes qué es lo que pasó exactamente con Gabriel? Dices que nadie sabe porqué llegó a ese extremo pero para empezar, ¿por qué le exiliaron? si parecía un niño tan bueno...

Suspiró y miró hacia la puerta dorada que tendrían que afrontar para seguir su camino. Miró a Maya y a Alec sonriendo para intentar transmitirles tranquilidad.

¿Algún consejo? —preguntó a Ren (¡por fin recordó su nombre!) antes de continuar, decidida a conseguir la llave.
ImagenImagenImagen
v. Ficha de Nicoxa .v
Imagen
ImagenImagenImagenImagenImagen
Imagen
Spoiler: Mostrar
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Imagen
Avatar de Usuario
Sito
Moderador
Moderador
The Unknowns
 
Mensajes: 6998
Registrado: Jue Ene 25, 2007 1:28 pm
Dinero: 32,717.55
Banco: 3,517,943.83
Ubicación: Onett
Sexo: Masculino
Clan: The Unknowns
Estantería de objetos
Karma: 127

Re: [Evento Global] Ruta del Caído

Notapor Suzume Mizuno » Dom Ago 16, 2015 1:31 am

Malik


El Guía permaneció muy cerca de Malik, observando de cerca sus reacciones, y no retrocedió cuando el hombre le devolvió la mirada con severidad.

Tienes razón.

—Siempre la tengo, pero ¡continúa!

No soy un gran Caballero. Quería serlo, quiero llegar a serlo... Muchas cosas de las que he hecho las hice precisamente para expiar culpas, sentirme mejor conmigo mismo y limpiar mi pasado, sin tener en cuenta si era correcto o no. Yo pensaba que era correcto siempre... Tienes razón en muchas cosas...

Malik pudo ver la sonrisa del Guía cuando pensó «pero no en todas». La criatura no retrocedió cuando Malik se aproximó a él. El aprendiz experimentaría un extraño mareo, como si estuviera viendo doble o triple. Los rasgos del Guía estaban difuminados y lo único distinguible eran los ojos y la sonrisa, con dientes blancos y rectos.

Podría haber matado a Chihiro. Puedo matarla, saciar mi odio y hacer justicia personal, pero como has dicho, eso me convertiría en alguien como ella y no es lo que quiero. Quiero hacer algo bueno en la vida y si eso conlleva elegir entre el mal menor y el mal mayor, elegiré entre el mal menor y el mal mayor. Ahora mismo, mantener a Chihiro bajo control es el mal menor, porque si le devuelvo ese recuerdo, su poder podría descontrolarse otra vez y absorber todo esto, incluido a ti. ¿Es lo que quieres?

—No niego que sería interesante, ya que reconoces que quieres matarla pero te niegas a hacerlo por motivos morales. Respecto a su recuerdo, es evidente que no me interesa, pero aquí no estamos hablando de mí… Sino de ti.

He comprendido tarde demasiadas cosas, es cierto, me he quedado atrás por razones egoístas, también es cierto. ¡Es cierto, Guía!

—Lo sé, querido.

En realidad no soy una buena persona, siempre me ha movido el interés personal. Puedes verlo desde ese punto de vista todo lo que quieras, no voy a rebatirlo... Pero eso no va a impedirme intentar mejorar para el futuro y mudar la piel de serpiente.

El Guía permaneció perturbadoramente cerca unos instantes. Después suspiró, se irguió y se pasó una mano por el mentón, pensativo.

Bueno, si algo se puede decir de ti es que casi nunca pierdes el control. Algo positivo tenía que ser un adulto entrado en años, ¿eh, viejo? —dijo con una risilla de niño pequeño—. Eso está bien. Es muy fácil dejarse llevar y reducirse al estado más primitivo del ser cuando la confusión es demasiado grande. Ni siquiera los ángeles se libran de ello. ¿Verdad, Gabriel?

El joven apretó los labios y algo brilló en su mirada, pero se controló y dijo:

Deja de jugar con él, Guía. Sabes tan bien como yo que se nos acaba el tiempo. Sólo quieres proteger este lugar, deja de poner impedimentos.

Mis impedimentos son lo único que pueden evitar que alguien vuelva a intentar destruir este lugar —respondió con sequedad. Cuando se dirigió a Malik, con todo, su tono era mucho más amable que el que había empleado hasta entonces—. Los humanos son egoístas. Eso no es malo en sí. Siempre vas a hacer daño a alguien, por mucho que intentes no hacerlo, así que lo importante es darte cuenta de cuándo has hecho algo mal y no volver a repetirlo. Como una serpiente, je. Es una buena comparación. Ahora —su voz cambió y Malik, sin duda la reconoció—: date prisa, porque hay alguien esperándote y si te ve más preocupado por otra mujer que por ella, va a sufrir un ataque brutal de celos, más cuando ella está arriesgando su vida para daros tiempo y que lleguéis al sótano de una puñetera vez.

Gabriel sonrió suavemente y apoyó una mano en el brazo de Chihiro.

Ve sin miedo, Malik. Tienes algo que hacer y aquí no vas a conseguirlo. Kazuki viene de camino; él se ocupará de Chihiro y os esperará cuando regreséis. Ella seguirá bajo control mientras no liberes su recuerdo.

—Oh, el control —se burló el Guía—. Se dice que sólo los verdaderamente fuertes tienen derecho a…

Oh, calla un rato—musitó Gabriel y el Guía calló—. Sigue adelante, Malik. No abandones a tus compañeros. No cometas los errores de otros. Si lucháis juntos, podéis conseguir cualquier cosa. Siempre ha sido así—añadió con una sonrisa.

Ah, exceso de azúcar. Vamos, machote, despídete y vámonos, que tenemos mucho trabajito. —El Guía se adelantó, le dio una palmada en el hombro y añadió—: A veces da gusto hablar con un adulto. Los adolescentes hormonados tienen unas reacciones divertidas, pero muy dramáticas, porque todavía no se conocen a sí mismos. Enhorabuena.


****
Yui, Keiko, Light y Malik



Yo juego. El cinco mismamente.

¡Eh, no está mal! —El Guía le tendió el naipe escogido a Light.

Era un Éter.

Yo el 7.

A ver, a ver

Yui recibió una Ultrapoción.

Entonces... Yo escojo el número seis.

Ooooh, ¡ding-ding-ding!

A Keiko le cayó precisamente la Carta-Trampa. Casi de inmediato sintió cómo algo se le encogía en el corazón y cualquier magia que pudiera haber querido usar quedaba encerrada en su interior. A cambio, experimentó una extraña seguridad en sí misma. Si probaba a hacerse daño —si no se fiaba de las palabras del Guía— comprobaría que notaba el golpe, pero que nada podía atravesarle la piel.

—Voy a ser bueno y contar el tiempo que te queda desde el momento en que empieces el combate. ¿No soy una grandísima persona?

Spoiler: Mostrar
Los números de los ítems han sido elegidos de forma aleatoria con random.org, así que os han tocado por pura suerte (o mala suerte).


El Guía se volvió entonces y dio la espalda a los aprendices porque, de la nada, había aparecido Malik, quien se encontraría un poco desconcertado: hacía un segundo estaba juntoa Gabriel y a Chihiro.

¡Bienvenido! ¡Sois cuatro, sólo necesitáis tres personas más para abrir la Puerta! ¡Qué emocionante! Y para pasar el rato, ¿qué tal si escoges una de estas cartas? Tus amigos ya lo han hecho y se han llevado un Éter, una Ultrapoción y una Carta que vuelve inmune a la persona durante cierto tiempo a ataques. Quedan cinco y puedes escoger uno aleatoriamente contando del 1 al 8, si bien el 5, el 6 y el 7… Esperad, ¿sois tan burros que los habéis escogido en orden? —El Guía se quedó un momento quieto, luego se encogió de hombros y continuó—: Esos números ya han sido escogidos. De los ítems restantes te quedan son: una carta reveladora, una Poción, una Reminiscencia a la que os hayáis encontrado y que puede bien ayudaros durante un tiempo en combate o proporcionaros información interesante, un recuerdo y una pregunta de cualquier clase que estaré obligado a responder.

»Bien, ¿cuál escoges, Malik?

Cuando Malik se decidiera por un naipe —si es que quería, claro, nadie le obligaba— el Guía haría desaparecer las cartas y se quedaría un momento en silencio, mirando hacia la puerta dorada.

Parece que quiere hablar con vosotros. Quién sabe, quizás os venga bien para saber lo que os espera ahí delante. —Emitió una risa, si bien sonó hueca y desprovista de alegría.



La puerta se iluminó y contorneó una figura alada. De inmediato se sintieron bien, relajados y cualquier miedo o inquietud desapareció de sus mentes sin dejar trazo alguno.

Nithael tomó cuerpo y dio un par de pasos al frente, desplegando las níveas alas a los lados, quizás estirándolas. Respiró hondo y las recogió a la espalda, a la vez que les observaba uno a uno y les dedicaba una cálida sonrisa que no alcanzó sus ojos tristes.

Bienvenidos. Os he estado esperando durante mucho tiempo. Más del que podáis imaginar.—Extendió los brazos a los lados—. Siento que hayáis tenido que pasar por todas estas pruebas. El Guía es un poco paranoico…

¡Oye! —protestó el Guía.

… y no sin motivos. La primera vez que el Castillo del Olvido fue invocado, el resultado casi resultó ser fatal. Todo lo que ha hecho ha sido para proteger este mundo y, aunque no lo creáis, para ayudaros. Os ha mostrado muchas cosas, si bien haber entendido su significado es algo que depende exclusivamente de vosotros.—Nithael sonrió al Guía, que mascullaba algo por lo bajo. Después, su gesto se volvió solemne—.Ahora os queda el enemigo más peligroso.

»Yo
.

Alzó las manos por si alguno de los aprendices intentaba interrumpirle.

Llevo durmiendo más de mil años tras esta puerta. Mi presencia ha afectado a toda la zona inferior del Castillo y por eso algunos habréis visto mis recuerdos o es posible que hayáis encontrado fragmentos de mis viejos escritos. Vuestros amigos viajaron a mi época. Conocí a varios y simpaticé con una muchacha en especial—dijo con un asomo de ternura—. Ahora entiendo por qué estaban ahí y qué era lo que buscaban. De haberlo sabido, habría podido ayudar y, quizás, no habría hecho lo que hice. Pero el pasado no se puede cambiar.

»Cuando seáis siete, podréis abrir la puerta y me encontraréis dentro. Poseo uno de los fragmentos de la Llave Espada que necesitáis para que Castillo del Olvido vuelva a ser Tierra de Partida. Lamentablemente, no está en mi mano entregároslo como me gustaría hacerlo. Para obtenerlo tendréis que despertarme de mi sueño y, cuando lo hagáis, os atacaré. No por propia voluntad, pero lo haré. Incluso herido, soy un enemigo muy superior a vosotros, más cuando poseo el fragmento de la Llave Espada, que me permitirá manipular en gran medida la estancia, ya que la Llave da poder sobre el Castillo. Por eso, aunque sea egoísta, aunque sea algo que jamás pediría a nadie, pues cargar con la vida de otra persona es un peso terrible… No hay otro remedio.

»Por favor, matadme sin vacilar.


No había rastro de duda en su voz.

Para mí, despertar será terrible. Todo esto, nuestras conversaciones, vuestros rostros, serán como un sueño para mí. Dudo que sea capaz de reconoceros El desconcierto aumentará mi ira y volveré a hacer daño a personas como vosotros, que sólo quieren salvar este mundo, mi mundo, de la destrucción. Fue suficiente con una vez. No quiero volver a hacer nada igual. Además, han pasado mil años. —Sus alas se crisparon y se miró las manos con un atisbo de desesperación—. Mil años. Mil años encerrado, mil años que sentiré como una pesadilla inconexa. No hay ningún sitio para mí, porque ya no queda ninguno de los míos. Antes tenía la esperanza de poder encontrar a alguno, pero es imposible. Lo sé. No hay más ángeles.

»Ayudé a destruir lo que más amaba con mis propias manos. Mi papel como Guardián es una farsa. No queda nada de mí, ni el más mínimo recuerdo, y así es como debe ser
—dijo, hundiendo los hombros. El pelo le cayó sobre la cara. Apenas sí se escuchó un hilo de voz—: No quiero despertar, volver en mí y encontrar que no sólo han desaparecido todas las personas que amaba, que todo lo que conocía ha sido olvidado, sino que además he terminado con vuestras vidas.

»Estoy tan cansado de que todo muera a mi alrededor. Por favor…


Los observó con sus intensos ojos verdes, unos pozos de desolación en los que uno podría hundirse y no volver a salir. A pesar de su entereza, que comenzaba a desmoronarse, aquella reminiscencia estaba decidida. No había mentira en su mirada.

Para él, la muerte sería una liberación.


Spoiler: Mostrar
Keiko
VIT: 12/12 [Inmunidad física durante ???? Turnos desde el instante que empiece la prueba]
PH: 14/14 [La magia está sellada. Puedes hacer, sin embargo, habilidades HC]

Yui
VIT: 6/6
PH:4/4
+Ultrapoción

Light
VIT: 52/54
PH: 35/40
+ Éter

Gaomon
VIT: 36/36
PH: 20/20


Malik
VIT: 52/64
PH: 10/26




****
Saxor, Nikolai y Colibritany



Si es Gabriel con el que vamos a hablar y, como dice, está dispuesto a hablar sobre cualquier otra cosa, me gustaría hacerle una pregunta un tanto personal antes de continuar con la prueba. —El Guía se quedó mirando a Nikolai, a la espera—. ¿Qué ocurrió después del juicio? Se supone que te exiliaron cuando no tendrías ni quince años y, bueno… Que haya una versión adulta de ti significa que estuviste en Tierra de Partida a esa edad, ¿me equivoco?

El Guía echó un vistazo hacia donde estaba Gabriel. Después se retiró la capucha y apareció el joven moreno bajo la misma con expresión de tristeza y resignación.

Fui exiliado y pasé varios años en un mundo alejado, intentando encontrar la paz y una forma de seguir adelante. Pero no pude. Tierra de Partida lo era todo para mí, por corrupta y ciega que fuera. Quería cambiarla y me obsesioné con ello, a pesar de que ya me había quedado claro que no era capaz de hacer nada, porque era alguien insignificante. Ni siquiera fui capaz de permanecer callado para poder quedarme junto a mi mejor amigo, algo de lo que siempre me arrepentiré. Si me hubiera contenido, habrían cambiado tantas cosas…—Apretó los labios y su rostro se contrajo por el dolor—. Tantas cosas… Entonces encontré a alguien que… No. Echarle la culpa de todo lo que sucedió después es pura hipocresía. Fui yo quien dio pie a todo y quien se corrompió y se dejó llevar por el odio y la amargura.

Y Gabriel guardó silencio. No parecía dispuesto a decir más. Escuchó sus respuestas, le dedicó una tenue sonrisa y asintió, invitándolo a continuar.

¿Y a que renunciaría para obtener la Llave Espada? No tendría que renunciar a nada… porque ya lo he hecho. —Allí Gabriel frunció el ceño, desconcertado—. El día en el que acepté la Llave Espada tuve que renunciar a la vida cotidiana que llevaba desde que tengo memoria: apenas puedo pasarme por mi hogar sabiendo que ahora soy alguien repudiado allí, y tampoco puedo ver a mi madre tanto como querría. Acepté la libertad que me brindaba la Llave Espada a cambio de renunciar a otro tipo de “libertad”.

Tras un instante, el joven rió por lo bajo.

Lo lamento, creo que lo has entendido mal. No hablo de tu Llave Espada. Hablo de la que necesitáis para revertir el Castillo del Olvido a Tierra e Partida. La que os aguarda al final del camino. Hablo de a qué renunciaríais para salvar este mundo.

Esperaría su nueva respuesta, aceptaría su decisión de partir solo y se volvería hacia Saxor, el siguiente en hablar.

Es simple: quiero salvar mi único hogar y a todas las personas que aprecio que también viven en él—respondió y Gabriel le sonrió con una mezcla de comprensión y tristeza—.El único mundo al que puedo llamar hogar está a las puertas de la destrucción, y con él casi todas las personas que conozco. No pude hacer nada con Vergel Radiante... pero no me rendiré con Tierra de Partida.

Gabriel asintió.

Comprendo bien tus sentimientos. Si pudiera…—Suspiró y escuchó el resto. Tampoco puso objeciones cuando decidió hacer frente a la prueba en solitario.

Se encaró a Colibritany.

Bueno, he decidido continuar adelante por razones obvias: mi supervivencia. No iba a quedarme quieta mientras perdía mis recuerdos. Puede que mi vida no haya sido la más bonita para vivir pero sí que es la que me ha tocado y la que, desde hace poco tiempo, por fin he llegado a poder vivir junto con mi amiga... nunca he tenido intenciones de rendirme por esta razón.

Gabriel no alteró el rostro y la invitó a continuar. Pareció preguntarse con la segunda respuesta si Colibritany no habría malinterpretado también su pregunta y le preguntó, con delicadeza, si se estaba refiriendo al objetivo de la misión del grupo o a su propia Llave, en cuyo caso tendría que reformular la respuesta. Miró entonces a Kazuki. El Maestro se frotaba el brazo cortado con una expresión compungida.

No me enfrentaré a la prueba hasta que pueda comprobar que Chihiro se encuentra bien. Lo… lo siento, chicos. Muchísima… suerte er, a todos.—El Maestro respiró hondo—. Demostrad que sois mejores que yo. Un Maestro que no lucha por Tierra de Partida… No es de extrañar que el Guía me desprecie…

Vamos, ve junto a Chihiro. Ese es tu sitio. Vosotros podéis empezar ya.—Gabriel señaló al frente. La barrera desapareció y se encontraron con que Malik y el Guía también se habían esfumado.



Kazuki lanzó una mirada de ánimo a los aprendices y después se precipitó junto a Chihiro, se arrodilló a su lado y le tomó una mano mientras la llamaba con suavidad.

Entre tanto, los aprendices continuaron por el pasillo, pues era el momento de su propia prueba.

*



Nikolai avanzaba por el interminable pasillo blanco. No sabía en qué momento se había quedado a solas… O, bueno, casi, pues el Guía caminaba a buen paso a su lado.

—¡Buenas! ¿Estás listo? Espero que no te importe charlar mientras nos movemos, porque queda un ratejo por delante. En realidad deberíamos darnos prisa, pero hay cosas que se tienen que tocar muy poco a poco. ¡Así que no perdamos el tiempo! —El Guía le pasó un brazo por el hombro—. ¿Sabes? Mi papel es el de proteger el Castillo del Olvido y, por tanto, el de Tierra de Partida. Por eso os conozco a todos, de una forma que no podéis ni llegar a imaginar. Sé en lo que pensáis, en cómo os mentís a vosotros mismos, en lo acojonados (o no) que estáis. En definitiva, me ocupo de decidir quién es digno y quién no de recorrer mi casa. Kazuki no lo es, por ejemplo.

»La pregunta es: ¿lo eres tú, Nikolai?

El Guía le mostró los dientes.

Así que, según tú, te uniste a la Orden y renunciaste a tu libertad. Qué forma tan curiosa de decirlo, ¿no crees? Y taaaan galante y favorecedora. No es como si hubiera sido una decisión egoísta, ¿verdad? ¿No te suena algo llamado «información»? Por supuesto, ser un Caballero, poder viajar de mundo en mundo, ¡y acceder a todos sus conocimentos!, es una ganga demasiado buena para pensárselo dos veces. A cambio tienes que luchar pero, pfft, ¿qué más da? Un Sincorazón por aquí, otro por allá, y todo arreglado, ¿no? Merece la pena. —Le dio unas palmadas en el hombro y, de repente, le clavó los dedos—. «Apenas puedo pasarme por mi hogar sabiendo que ahora soy alguien repudiado allí, y tampoco puedo ver a mi madre tanto como querría». ¡Oh, mi corazón! ¡Estoy seguro de que tu madre lloraría si escuchara las palabritas de su mocito!

»No te preocupes, mamá. Sé que es duro criar a un hijo sola, un hijo que no deja de pensar en su padre, que está obsesionado con él. ¡Lo suficiente para dejarte atrás, mamá, pero es que tengo que concluir los trabajos de papá! ¿Que no puedo decirte que probablemente muera y no vuelvas a verme? ¡No te preocupes, sé que eres una mujer fuerte! ¡Superaste el trauma de papá, sin duda podrás vivir sin mí también, aunque casi no vaya a verte, aunque no sepas qué es de mí, ni tengas jamás un cadáver que enterrar!

Por debajo de la capucha apareció la cara del propio Nikolai, que sonreía con una expresión malévola mientras imitaba su voz.

Porque soy una buena persona. Soy una persona noble, respeto las vidas de los demás y me han educado bien. Me importa más el pasado, me importa más mi padre muerto y su legado que mi madre. ¡Pero es que ahora soy una persona importante! ¡Soy un aprendiz de Caballero! ¡He luchado en muchos mundos, estoy aprendiendo lo indecible y, además, ahora tengo un motivo para pelear! ¡Un motivo que…! —El Guía calló y de pronto la cara de Nikolai desapareció para ser sustituida por la oscuridad que caracterizaba al amo del Castillo del Olvido—. ¿Lo tienes, Niko? ¿Alguien tan insensible como tú puede tener un motivo no egoísta para pelear?

»Qué desagradecidos son los hijos. Sólo quieren volar del nido. Y, bueno, eso no está mal en sí. ¡Claro que no! Aprovechemos lo que podamos de nuestros papis y luego usémosles para saltar más y más alto. ¡Lo que les suceda detrás no es importante, porque esta es nuestra vida!

Soltó una ronca carcajada, giró sobre sí mismo y se situó delante de Nikolai, cortándole el paso.

O eso sería bueno, porque es natural, ya sabes, si fuera verdad en tu caso. ¿Lo es, Nikolai? ¿Dejaste a tu madre por tus propios motivos? ¿Porque tenías un camino que seguir…? ¿O porque eres un triste imitador?

»Pobre, pobre Shanna. Como si no fuera suficiente perder al marido y al hijo, este encima se va intentando imitar a su padre. Un recuerdo constante, hiriente del hombre al que perdió. ¿Por eso te uniste a la Orden? ¿Para ser la sombra de tu padre? —espetó con creciente desprecio—. ¡Tanto cerebrito, tanta investigación, pero estás tan ciego como si llevaras una venda en los ojos! ¡No eres capaz de cuidar de las personas a las que quieres! ¿Acaso hay amor en tus acciones? ¿Es una forma retorcida de acercarte al recuerdo de tu padre o simplemente persigues la ambición de terminar su trabajo porque así serás alguien? Ah, claro, es posible que tu nombre algún día aparezca en libros, Niko, pero… Sabes que nunca serás importante, ¿verdad? Porque el trabajo lo empezó tu padre y tú te limitaste a seguir sus pasos, a vivir a su sombra. ¡Y gracias a cosas así, a que no eres capaz de pensar por ti mismo y sólo persigues lo sencillo, lo académico, la ambición de saciar tu curiosidad, haces daño a los demás! Sí, no pongas esa cara. Lo has hecho hace poquísimo. ¿Acaso ya has olvidado a la pobre Saeko?

El Guía vio algo en los ojos de Nikolai y rió por lo bajo. Dio una vuelta sobre sí mismo y, cuando se enfrentó a Nikolai, ya no era él, sino… Saeko. Lo miraba con resentimiento.

Te fuiste—le acusó con sequedad—. En vez de acompañarme, te quedaste en el Castillo. Y, ¿para qué? ¿No era para vigilar a Chihiro?—La joven miró a su alrededor y esbozó una mueca de desagrado—.¿Cuánto tardaste en separartede ella, Nikolai? Preferiste quedarte a su lado para tenerla bajo control mientras yo me iba al pasado. No tienes ni idea de si algún día volverás a verme. ¡No sabes si estás hablando con una reminiscencia que murió en el pasado!

»Y lo único de lo que fuiste capaz fue de decirme: nos veremos cuando todo esto haya acabado, Saeko.
—Saeko le sostuvo la mirada, acusadora—. ¿Eso es todo? ¿Tan poco te importo? Las cartas, los paseos, las… las historias. Creía que había algo. Me hacías sentir… especial. Pero ya veo cuánto significo para ti.

Antes de que Nikolai pudiera responder, reapareció el Guía, que alzó las manos al cielo.

¡La chica a la que quieres se mete en un agujero temporal y lo único que le dices es «nos veremos»! ¿Qué harás con esa fría inteligencia tuya cuando te des cuenta de que no sirve más que para fingirte superior, para alejarte de los demás, para hacer daño? ¿Eh? ¿Quieres hablar con la reminiscencia de Saeko? ¿Quieres pedirle perdón? Porque el resentimiento está ahí, Niko. Lo he sentido con claridad mientras la pobre volaba de un lado a otro por Tierra de Partida, luchando a brazo partido para encontrar una forma de salvar el presente donde tú estás, preguntándose si pensarías en ella, diciéndose que debería haber hecho algo más. ¡Y tú, mientras tanto, ¿qué haces?! ¡Interrogar reminiscencias en vez de seguir a Chihiro, separarte de ella, perderla de vista, avanzar dando golpes de ciego! ¡Da gusto! ¡Cuéntale a su reminiscencia lo que has estado haciendo mientras ella se desangraba y se enfrentaba un ejército de Sincorazón, Nikolai! —Avanzó tanto que el joven no tendría más remedio que retroceder—. ¡¡Cuéntaselo!! ¡Cuéntaselo y dime a mí porqué debería dejar pasar a alguien como tú, que no le llega ni a la suela del zapato a una verdadera aprendiz de Caballero, que ha aceptado la Llave Espada sin comprometer su corazón con la Orden, que decidió quedarse en el lugar más seguro y ni siquiera es capaz de cumplir las misiones que se le encargan!

*



¡Hola! ¿Qué tal, don no-sé-quién-soy?

Saxor se llevaría un buen susto cuando el Guía le hablara de pronto. No sabría cuánto había caminado, en solitario, por aquel pasillo blanco. En cualquier caso, no había visto a nadie más y el Guía debía haberse manifestado de la nada, con esa malsana costumbre suya de sorprender a los demás.

Con saltitos infantiles se puso a caminar de espaldas, mientras miraba a Saxor a la cara.

¿Sabes? Me sorprendió gratamente que decidieras regresar a Tierra de Partida. La verdad es que tu ida no me pareció la más lógica, pero bueno, todos hemos sido jóvenes y estúpidos alguna vez. Además, tú tienes… Ya sabes. Ese problemilla. —Se llevó un dedo a la sien y lo hizo girar—. Xayim, ¿eh? Mira, si fuera un psicólogo te diría que esto se solucionaba con un poco de medicación, pero entre la Orden hay tanto bicho raro y tanta criatura sobrenatural que supongo que estarás acostumbrado y nadie te mirará como si estuvieras chalado. Con todo, debe ser difícil. Te compadezco. Eres la persona más miserable que he conocido. Nada es tuyo, ni tu ropa, ni tu Llave Espada, ¡ni siquiera tienes Corazón!

»Y, aun así, piensas y sufres. Decides y actúas. Sobre todo para lamerte las heridas. Experimentaron con tu pobre persona y no eres capaz de sobreponerte. Pero sigues aquí. Qué existencia más patética y miserable. Realmente te compadezco, Saxor. Aunque todavía más a Xayim. Debe ser HORRIBLE compartir vida contigo, ser frenado por ti, por tu depresión, por tu falta de confianza. Aunque depende del día, eh. Puedes ser gallito cuando te apetece, ¿verdad, Sax? Es tan fácil echarle la culpa a Xayim, actuar irritado o asustado porque crees que él va a salir…

»Oye, ¿cuánto tiempo lleváis así? ¿Años? ¿Me estás diciendo que todavía no eres capaz de controlarle?

Rompió a reír con crueldad, señalando a Saxor con un dedo y después llevándose una mano a la cara, quizás para secarse unas lágrimas invisibles.

—¡Por favor, ES TAN TRISTE! ¿Por qué no te rindes, Sax? ¿Tanto miedo te da la oscuridad, el vacío? ¿No sería mucho más fácil tirarte por un edificio? Se acabarían los problemas, dejarías de hacer daño a los demás y, ante todo, de darte problemas a ti mismo. Seguro que estás agotado de ti mismo. ¿Eres capaz de mirarte una mañana a un espejo y no ver a un fracasado? Necesitas a Xayim para seguir adelante, ¿no es irónico? ¡Como un drogadicto! ¡Dependes de él! ¡No eres nadie sin él!

»¡Pero lo mejor es que está todo en tu cabeza! Ronin te concedió la Llave Espada, Ronin consideró que… ¡Anda, espera un momento! ¡La Llave no puede ser invocada si no tienes corazón! —Le dio un golpe con un dedo en el pecho, donde debería estar el corazón—. ¡Tu vida es una tragedia digna de ser puesta por escrito! —Hizo un movimiento teatral, afinando la voz, y se inclinó hacia atrás como si fuera a desmayarse. Luego se irguió y continuó, sin detenerse prácticamente a coger aire—: ¡No sólo no eres digno de la Llave Espada que te concedió Ronin, sino que te rendiste a Xayim y traicionaste a tu Maestro! ¡Tuvo que ser alguien de fuera el que te devolviera el control!

»¡Eres débil, un pusilánime! ¡Tus ambiciones están atadas al pasado! ¿No? ¡Oh, Vergel Radiante! Tu corazón inexistente sigue atado a un mundo perdido y llora por él en vez de concentrarse en el que está a punto de perder. ¿Te das cuenta ahora de lo que significa Tierra de Partida para ti? ¿Por eso optaste por permanecer en el presente? ¿Por eso es tan fácil decir que no tienes nada, que no eres nadie?

»Mírame a los ojos, estos tan bonitos que tengo, Saxor, y dime quién eres. Dime qué quieres y porqué debería dejarte continuar adelante, pues no posees Llave Espada, no eres alguien que merezca estar aquí. Dejaste que Xayim traicionara a Ronin y ahora eres tú mismo un traidor a tu antigua Orden. ¿Por qué debería dejarte pasar? ¡Vuelve con tu Atesaki, aléjate de este lugar si no eres capaz de mantenerte en pie por ti mismo! —Le dio un empujón que prácticamente lo derribó—. ¿Puedes? ¿Eres más fuerte que Xayim, puedes hacer algo sin él? ¡Lo dudo MUCHO!

El Guía le miraba con desprecio.

Spoiler: Mostrar
Guilmon no anda presente, no puedes usarlo para la prueba



*


Colibritany no tuvo otro remedio que detenerse cuando el Guía se interpuso en su camino. La joven no sabía cuándo había perdido de vista a sus compañeros, ni en qué momento dejó atrás la zona donde se encontraban Kazuki y Chihiro. El caso era que ahora se encontraba sola, en medio de un pasillo blanco sin final, con el Guía. Éste se apoyaba en una pared, cortándole el paso, y la saludó con un gesto.

—Wola. ¿No me esperabas? Pues aquí estoy, preparado para incordiar una vez más, y mucho me temo que no vas a poder librarte de mí fácilmente, querida. Veamos. —Materializó una libreta en la mano y pasó unas pocas páginas—. ¡Aquí! A ver, consideras que lo único que vale en tu vida es tu amiga Nicoxa, ¿verdad? Ah, qué adorables. ¿Crees que ella respondería lo mismo que tú? —Aguardó unos instantes para escuchar su contestación—. Ya veo, ya veo. —Pasó otra página de la libreta tras garabatear algo. La cerró con sequedad—. ¿Sabes? No puedo evitar sorprenderme al verte aquí. Una aprendiza de Bastión Hueco, que ni come ni pincha en esta guerra, y que perfectamente podría haberse quedado durmiendo la mona en su camita (¿mola dormir sin pulgas? Deben de echarte mucho de menos allá en Port Royal. Tienes tanta sangre que darles…), haya venido hasta aquí…

»¿Por qué estás aquí, Coli? No me malinterpretes. Me refiero a qué demonios haces con la Llave Espada. ¿Cualquier cosa te valía con tal de alejarte de ese burdel? Tú, que eres tan fuerte, que te consideras tan extraordinaria, tan llena de amargura por no haber tenido esa infancia feliz que te merecías, aunque, ¿sabes?, no es para tanto. El mundo está lleno de gente pobre y mucho más miserable que tú. Niños que trabajan de sol a sol y que mueren de hambre con las tripitas hinchadas (muy diferentes a la tuya) y los bracitos consumidos. A ti no te veo muy… hambrienta, que digamos. ¿O es que has vaciado las cocinas de Bastión Hueco?

El Guía paseó frente a ella. Si intentaba sortearle, la seguiría muy de cerca, riendo malévolamente contra su oído.

Sigo queriendo saberlo, Coli. Sé que eres una persona egoísta, que se cree con derecho a decir lo que piensa de los demás como si fueras mejor. Oh, no te culpo con ello, suele pasar en gente con baja autoestima o que vienen de entornos como el tuyo. Es su forma de salir adelante y no considerar lo miserable que es su existencia. Por eso no dejo de preguntarme qué te llevó a aceptar la Llave Espada. ¿Aspirabas a ser alguien más importante, con poder, alguien que saliera de la mierda del callejón donde vivíais para ser nada más y nada menos que una Caballero, una protectora de mundos? ¡Menudo cambio! Es como… ¡Como un sueño, ¿verdad?! ¡Colibritany, esa niña a la que abandonaron, a la que nadie ha querido jamás como no fuera mediante engaños y mentiras, a la que nadie excepto su querida amiga Nicoxa ve con verdaderos ojos, será un día un Caballero!

»¡Madre mía, qué cambio! —El Guía se quedó mirándola, sonriente—. ¿No es eso lo que quieres? ¿Ah? ¿Entonces, qué podría ser? Una persona como tú jamás se interesaría en los demás. El mundo es malo, ¿no es cierto? ¡Por supuesto! La gente no merece la pena si no tiene dinero, si no está dispuesta a darte algo a cambio de tu interés por ellos. Hombres, mujeres, todos son iguales para ti… A menos que no caigan bajo tus encantos. —Empezó a reír por lo bajo, despectivo—. Qué bonito todo. Una persona con un corazón tan retorcido sin duda sería capaz de vender la Llave Espada si a cambio obtuviera algún beneficio. Una persona como tú no es leal, no tiene un bando, no tiene ideologías. Sólo se deja llevar por la corriente, sólo es capaz de aprovecharse de los demás y de hacerles daño, ¡porque si no te sirven, no merecen la pena! —Empezó a caminar hacia ella hasta arrinconarla contra una pared—. ¿Venderías a Ariasu, Colibritany, si ella te mirara con asco o desprecio a pesar de la nueva vida que te ha dado? ¿Darías la espalda a la gente que te ha ayudado si no te respeta? ¡Porque, por supuesto, te deben respeto! ¡Como ser humano, nada más y nada menos! Pero, ¿cómo vas a respetar tú a nadie si jamás has sentido nada así por ninguna figura que te haya rodeado? Sólo piensas en utilizar a la gente, en vengarte, en alejarte.

»No mereces ser un Caballero. Y quizás no te importe, pero, claro, hay algo que sí te importa, ¿no es así?

»¿Te importa Nicoxa? ¿Porqué adoras tanto a esa chica? ¿Qué eres sin ella, Colibritany? Yo te lo diré: nadie. Una niña cuyo nombre nadie recuerda, que no valió más que un par de monedas en un callejón perdido de la mano de Dios, a la que ni se molestaron en buscar cuando escapó del burdel, porque no eres importante, porque es imposible que lo seas cuando eres una persona cerrada, altiva y cruel, ¡tan capaz de hacer daño a los demás que no siente ni una pizca de empatía o compasión!

El Guía cerró una mano entorno a su cuello.

—Dame un motivo, un solo motivo, para que permita que alguien como tú de un solo paso más por mi hogar. Tu supervivencia me importa bien poco, igual que la de tu querida amiga. No sois de la Orden, no pretendéis luchar por la Luz o la Oscuridad. Sólo sois un par de niñatas egoístas. No merecéis la Llave Espada… ¿O sí? ¿Tú qué piensas?


Spoiler: Mostrar
Colibritany
VIT: 6/14
PH: 8/8

Nikolai
VIT: 18/26
PH: 11/18

Saxor
VIT: 42/50
PH: 34/34

Guilmon
VIT: 22/30
PH: 14/14




****
Alec, Maya y Nicoxa




—Deberíais temerme, Alec, porque soy el guardián de este lugar y me gusta poner a prueba a los incautos aprendices que pasean por mis dominios sin tener idea lo que están arriesgando. Por algo así terminaste perdiendo tus memorias.

Alec casi se dio de bruces con la cara del Guía, que les aguardaba al otro lado de la puerta y se había agachado, como si fuera un niño, para hablar con el brujo. Su rostro era una masa de oscuridad, casi imposible de definir, pero había dos ojos brillantes y dorados, y una sonrisa blanca que destacaba como la luna a medianoche.

—¡Bienvenidos, por fin, a la última prueba antes de que alcancéis el sótano! —El Guía se echó a un lado para dejarles pasar. Para entonces comprobarían que estaban en un pasillo blanco sin fondo. A su espalda el arco desapareció, de modo que no les quedaba otro remedio que continuar adelante.

Por el camino había una especie de antesala. Allí, tumbada en un sofá con el aspecto de alguien que tiene un pie en la tumba, estaba Chihiro. A su lado, sosteniéndole una mano con su único brazo, Kazuki se volvió hacia ellos. Pareció aliviado al verlos enteros, en especial a Maya. Sus ojeras eran terribles y daba la impresión de que hubiera ganado diez años de golpe, por no hablar de la ausencia descara de su brazo, y la sangre en su ropa.

Menos mal que habéis llegado. Muchísimo ánimo, chicos, ya os queda muy poco.

Yo me ocuparé de esto, Kazuki—dijo un chico joven, que se levantó de una silla y sonrió a los recién llegados. Todos reconocerían los rasgos de Gabriel, así como del hombre que les había perseguido en la prueba anterior—. No os preocupéis, no soy la misma reminiscencia con la que os topasteis antes. Estoy aquí para explicaros lo que os espera antes de la próxima prueba.—Dirigió la mirada hacia el Guía, que asintió y se desvaneció. Quizás, así, los aprendices se sentirían menos nerviosos—. Sois el último grupo en llegar: cuatro personas han superado ya esta prueba y os esperan mientras recuperan fuerzas. Me gustaría ofreceros un poco de descanso, pero me temo que ya no hay tiempo. Pronto llegaréis a la última sala, donde podréis obtener el fragmento de la Llave Espada que necesitáis para revertir Tierra de Partida. Antes, sin embargo, debéis superar una prueba final que comenzará… Ahora.—Señaló el pasillo que se abría frente a ellos—. Podéis hacerme cualquier pregunta e intentaré responderos, si bien no puedo adelantaros nada de la prueba en sí. Por otra parte, mi consejo es que decidáis ir separados, pues… Así os será más fácil.—Sonrió—.Imagino que no es una idea que os haga demasiada gracia, así que está bien si optáis por continuar juntos. Por lo demás, he de haceros dos preguntas que debéis responder:

»¿Por qué has decidido continuar adelante? Y, ¿a qué aceptarías renunciar a cambio de obtener la Llave Espada?


Esperó a que cada uno respondiera. Después dijo:

Lamento tener que meteros prisa, pero cuanto más tiempo perdáis, menos posibilidades hay de que Tierra de Partida se salve. Mucha suerte a los tres. Estoy seguro de que lo conseguiréis.

Kazuki se incorporó, sin soltar la mano de Chihiro, que apretaba con tanta fuerza que se había puesto blanca.

Por favor, tened mucho cuidado. Sea lo que sea que tengáis que hacer para obtener el fragmento, no os arriesguéis a menos que sea… necesario. Actuad en equipo… Protegeos los unos a los otros. No os dejéis engañar por… las palabras del Guía. Sois aprendices, pero ya tenéis… la base para ser Caballeros. No puede haber obstáculos que se interpongan en vuestro camino y que no podáis superar.—Les sonrió con cansancio—. Siento no acompañaros, pero… Os estaré esperando. Y haré lo que sea para llevaros de vuelta a Tierra de Partida. Lo que sea.

Gabriel aguardaba. En la mesa había bollos, té, leche y variadas pastas. Si alguno quería comer para intentar recargar energía, podría aprovechar el momento sin problemas. Por lo demás, a menos que quisieran hacer preguntas a Gabriel o Kazuki, sólo les quedaba continuar adelante.

Eran los últimos, ¡no debían hacer esperar a sus compañeros!


Spoiler: Mostrar
Alec e Ilana recuperan todas sus habilidades


Spoiler: Mostrar
Nicoxa
VIT: 27/32
PH: 10/10
+Poción

Maya
VIT: 31/34
PH: 20/32
+Ultrapoción

Alec
VIT: 19/22
PH: 21/30

Ilana
VIT: 20/30
PH: 17/20



Spoiler: Mostrar
Ausencias:
Tanis: II
Saxor: II (Justificadas)
LightHelco I (Justificada)
Reimeow I (Justificada)


Fecha límite:viernes 21 de agosto a las 23:59
Imagen

¡Gracias por las firmas, Sally!


Awards~

Imagen

Imagen

Imagen

Imagen

Imagen
Avatar de Usuario
Suzume Mizuno
63. Komory Bat
63. Komory Bat
 
Mensajes: 1883
Registrado: Vie Mar 02, 2012 9:52 pm
Dinero: 1,462,577.72
Sexo: Femenino
Karma: 6

Re: [Evento Global] Ruta del Caído

Notapor Drazham » Mar Ago 18, 2015 2:35 am

A la pregunta de Nikolai, Gabriel respondió narrando la historia de su exilio fallido. De cómo no pudo desvincularse de Tierra de Partida y lo mucho que quería cambiar la jerarquía que tanto repudiaba y que le había expulsado por su forma de pensar. Hiciese lo que hiciese, no denotaba estar muy orgulloso de ello por su forma de contarlos.

Si me hubiera contenido, habrían cambiado tantas cosas… —Su rostro reflejó una expresión de aflicción. ¿Hasta qué punto llegó para intentar cambiar Tierra de Partida?—. Tantas cosas… Entonces encontré a alguien que… No. Echarle la culpa de todo lo que sucedió después es pura hipocresía. Fui yo quien dio pie a todo y quien se corrompió y se dejó llevar por el odio y la amargura.

Nikolai guardó silencio y optó por no indagar más en el asunto. El Gabriel original ya debió sufrir demasiado con sus actos de pasado, por lo que no había necesidad de que su propio recuerdo siguiese atormentándose por ello. Tratando de cambiar de tema, pasó a responder a las preguntas que Gabriel les formuló para someterse a la prueba. Aunque su contestación a la segunda no era la que se esperaba el hombre, quien soltó una risita.

Lo lamento, creo que lo has entendido mal. No hablo de tu Llave Espada. Hablo de la que necesitáis para revertir el Castillo del Olvido a Tierra e Partida. La que os aguarda al final del camino. Hablo de a qué renunciaríais para salvar este mundo.

Un “¡oh!” en voz baja salió de la boca de Nikolai, dándose golpecitos en la sien con el dedo por malinterpretar la pregunta. Cerró los ojos unos instantes y, una vez tuvo su nueva respuesta, procedió a contestar:

En ese caso, si tuviese que renunciar a algo para conseguir la clave que nos sacase a todos de este castillo… estaría dispuesto a dar todos los apuntes de la investigación que comenzó mi padre —alegó con serenidad—. Son muchos años de trabajo acumulados en cientos de libretas y folios, pero no irremplazables. Se hicieron con el fin de ayudar a la gente en futuro. Por lo que si pueden ayudar a los que estamos cautivos aquí, con mucho gusto los dejaría atrás.

En cuanto los tres aprendices respondieron, Gabriel miró a Kazuki, esperando cuál sería su decisión. Tal y como se temía, el Maestro no mostró la misma iniciativa que ellos. No cuando tenía allí mismo a alguien que le anclaba.

No me enfrentaré a la prueba hasta que pueda comprobar que Chihiro se encuentra bien. Lo… lo siento, chicos. Muchísima… suerte er, a todos. Demostrad que sois mejores que yo. Un Maestro que no lucha por Tierra de Partida… No es de extrañar que el Guía me desprecie…

Suspiró y ladeó la cabeza, consternado. ¿Y qué? Él mismo expuso que no luchaba exactamente por Tierra de Partida, si no por sus compañeros. Sin embargo, llegaba a entender que Kazuki no tuviese la misma voluntad que ellos cuando, en su momento, el Guía se encargó de despedazarla por completo, dejando a un pobre hombre demacrado y amnésico en el proceso.

Vamos, ve junto a Chihiro. Ese es tu sitio. Vosotros podéis empezar ya.

Niko asintió con la cabeza y echó un último vistazo a Kazuki reuniéndose con su querida Chihiro. Se quedó un tanto extrañado al percatarse que el aprendiz llamado Malik y el Guía habían desaparecido por arte de magia. Quizás su prueba hubiese finalizado… Pero no le dio más vueltas y giró sobre sus talones, comenzando su marcha por el largo pasillo, directo a la boca del lobo.

Su prueba comenzaría en breves.

***


La magia del castillo hizo de las suyas una vez más. Cuando quiso darse cuenta, Nikolai caminaba en solitario por aquel larguísimo pasillo que no parecía terminarse nunca. Juraría haber tenido a Saxor y a Colibritany detrás, pero al darse la vuelta, no había ni rastro de ellos.

De ellos, no. Pero sí de un viejo conocido que apareció a su lado, sin tener muy claro de dónde había salido.

—¡Buenas! ¿Estás listo? Espero que no te importe charlar mientras nos movemos, porque queda un ratejo por delante. En realidad deberíamos darnos prisa, pero hay cosas que se tienen que tocar muy poco a poco. ¡Así que no perdamos el tiempo!

Como quien no quiso la cosa, el Guía le pasó el brazo por el hombro con toda la confianza del mundo. Niko lanzó una mirada mortificante a la maraña de oscuridad que se escondía debajo de su capucha. Tras cinco largos segundos clavándole los ojos, chasqueó la lengua y siguió adelante, sin siquiera molestarse en retirar el brazo de ese canalla. De nada le serviría protestar cuando este haría lo que le diese la gana, como de costumbre.

¿Sabes? Mi papel es el de proteger el Castillo del Olvido y, por tanto, el de Tierra de Partida. Por eso os conozco a todos, de una forma que no podéis ni llegar a imaginar. Sé en lo que pensáis, en cómo os mentís a vosotros mismos, en lo acojonados (o no) que estáis. En definitiva, me ocupo de decidir quién es digno y quién no de recorrer mi casa. Kazuki no lo es, por ejemplo.

»La pregunta es: ¿lo eres tú, Nikolai?

Paró en seco, mirándole por el rabillo del ojo.

Supongo que hay una forma para averiguarlo. —Terminó por virar la cabeza del todo, mirándole directamente—. ¿Me equivoco?

El Guía no tardó en mostrarle esa sonrisa burlona que tanto le desquiciaba. Por un momento llegó a cuestionarse si debería haber hecho esa pregunta.

Así que, según tú, te uniste a la Orden y renunciaste a tu libertad. Qué forma tan curiosa de decirlo, ¿no crees? Y taaaan galante y favorecedora. No es como si hubiera sido una decisión egoísta, ¿verdad? ¿No te suena algo llamado «información»? Por supuesto, ser un Caballero, poder viajar de mundo en mundo, ¡y acceder a todos sus conocimentos!, es una ganga demasiado buena para pensárselo dos veces. A cambio tienes que luchar pero, pfft, ¿qué más da? Un Sincorazón por aquí, otro por allá, y todo arreglado, ¿no? Merece la pena.

Niko pegó un respingo al sentir las uñas de ese malnacido clavársele en el hombro. Se zafó de su agarre con brusquedad, dando un par de pasos hacia adelante para alejarse de él. Pero cuando se dio la vuelta para encararle, los ojos casi se le salieron de las órbitas por lo que vio a continuación.

—«Apenas puedo pasarme por mi hogar sabiendo que ahora soy alguien repudiado allí, y tampoco puedo ver a mi madre tanto como querría». ¡Oh, mi corazón! ¡Estoy seguro de que tu madre lloraría si escuchara las palabritas de su mocito!

El que usase un fragmento de las respuestas que dio a Gabriel para acceder a la prueba le sentó como una puñalada trapera. Dolió que usase su voz, pero más que le dolió el ver su propia cara bajo su capucha, mostrando una sonrisa tan retorcida que mostraba la auténtica naturaleza de aquel tramposo.

»No te preocupes, mamá. Sé que es duro criar a un hijo sola, un hijo que no deja de pensar en su padre, que está obsesionado con él. ¡Lo suficiente para dejarte atrás, mamá, pero es que tengo que concluir los trabajos de papá! ¿Que no puedo decirte que probablemente muera y no vuelvas a verme? ¡No te preocupes, sé que eres una mujer fuerte! ¡Superaste el trauma de papá, sin duda podrás vivir sin mí también, aunque casi no vaya a verte, aunque no sepas qué es de mí, ni tengas jamás un cadáver que enterrar!

¿Te parece divertido usar mi voz y mi cara para hablar por mí? —rugió con furia, mostrándole los dientes. ¿Qué demonios sabía él sobre sus padres para atreverse a hablar de ellos en su nombre?

Porque soy una buena persona. Soy una persona noble, respeto las vidas de los demás y me han educado bien. Me importa más el pasado, me importa más mi padre muerto y su legado que mi madre.

¡Basta! —le ordenó, tajante.

¡Pero es que ahora soy una persona importante! ¡Soy un aprendiz de Caballero! ¡He luchado en muchos mundos, estoy aprendiendo lo indecible y, además, ahora tengo un motivo para pelear! ¡Un motivo que…! —Y antes de terminar la frase, calló. La cara que copió de Nikolai se fundió en una maraña de oscuridad, volviendo a recuperar su semblante borroso —. ¿Lo tienes, Niko? ¿Alguien tan insensible como tú puede tener un motivo no egoísta para pelear?

Niko frunció el ceño y miró con desconfianza al Guía, temiéndose la obviedad de la trampa que escondía esa pregunta.

¿Te refieres a un motivo que no puedas tergiversar y resulte mínimamente despreciable? —le recriminó con un tono ácido.

¿Y existía algo así? Por muy noble o altruista que fuese una acción, siempre había detrás de esta un motivo para satisfacer de alguna manera al que la llevaba a cabo. Podía notarse más, podía notarse menos, pero cualquier razón se podría catalogar de egoísta.

<¿Acaso tengo yo un motivo para luchar que no sea egoísta?>, negó con la cabeza. Podría responderle al Guía con cualquier excusa, y ninguna le serviría. Era imposible engañar a alguien que se conocía al dedillo toda su vida.

»Qué desagradecidos son los hijos. Sólo quieren volar del nido. Y, bueno, eso no está mal en sí. ¡Claro que no! Aprovechemos lo que podamos de nuestros papis y luego usémosles para saltar más y más alto. ¡Lo que les suceda detrás no es importante, porque esta es nuestra vida!

Nikolai apretó la mandíbula y desvió la vista, asqueado por la desagradable risa de ese cretino. Claro, dicho de esa manera era facilísimo recriminarle. Les debía muchísimo a sus padres, más de lo que cualquiera se imaginase. Pero ahí estaba la cuestión: ¿había sido un desconsiderado por dejar sola a su madre? ¿Por no pararse a pensar en cómo llevaría su falta?

Antes de que pudiese hacer nada, el Guía se plantó delante de él, negándole la posibilidad de escaquearse y librarse de sus ponzoñosas palabras.

O eso sería bueno, porque es natural, ya sabes, si fuera verdad en tu caso. ¿Lo es, Nikolai? ¿Dejaste a tu madre por tus propios motivos? ¿Porque tenías un camino que seguir…? ¿O porque eres un triste imitador?

¿Qué?

Parpadeó sucesivas veces, perplejo. ¿Un imitador? ¿Por qué?

»Pobre, pobre Shanna. Como si no fuera suficiente perder al marido y al hijo, este encima se va intentando imitar a su padre. Un recuerdo constante, hiriente del hombre al que perdió. ¿Por eso te uniste a la Orden? ¿Para ser la sombra de tu padre?

Niko abrió los ojos de par en par, sin dar crédito a lo que escuchaba.

¡No! ¡Eso no es así! —saltó, hecho un manojo de nervios—. Eso no… no es…

La voz se le quebró, con la mirada perdida en el suelo y el labio inferior temblándole. De pronto su mente se trabó en un bucle que no hacía más que repetir una y otra vez la misma pregunta. Debatiéndose un dilema que, hasta la fecha, no había llegado a plantearse.

<Yo… ¿soy la sombra de mi padre?>.

¡Tanto cerebrito, tanta investigación, pero estás tan ciego como si llevaras una venda en los ojos! ¡No eres capaz de cuidar de las personas a las que quieres! ¿Acaso hay amor en tus acciones? ¿Es una forma retorcida de acercarte al recuerdo de tu padre o simplemente persigues la ambición de terminar su trabajo porque así serás alguien?

Nikolai apretó los labios en una fina línea y se llevó la mano a la sien. Fue la primera vez que se llegó a plantear si realmente quería terminar el proyecto de su padre por amor parental… o tan solo intentaba ser como la persona a la que tanto admiraba. Ser como el hombre al que tanta estima le tenían muchos ciudadanos de su mundo.

Tu padre… tu padre me habría ayudado… era un gran hombre…


¡Por dios! ¡Ya sabía que fue un gran hombre! Fue el mismo que le crió y le enseñó tanto. Y ahora… Ahora se cuestionaba a si mismo cual fue la auténtica razón por qué siguió con su trabajo.

Ah, claro, es posible que tu nombre algún día aparezca en libros, Niko, pero… Sabes que nunca serás importante, ¿verdad? Porque el trabajo lo empezó tu padre y tú te limitaste a seguir sus pasos, a vivir a su sombra.

La cara se le empalideció al recordar la última respuesta que le dio a Gabriel. Le había dicho que estaría dispuesto a dar los apuntes de la investigación. La misma que empezó su padre. Y él tuvo la desfachatez de alegar que sacrificaría algo que en realidad no le pertenecía.

<¡No, no, no!>, se llevó ambas manos a la cabeza. <¡Joder!>.

—¡Y gracias a cosas así, a que no eres capaz de pensar por ti mismo y sólo persigues lo sencillo, lo académico, la ambición de saciar tu curiosidad, haces daño a los demás! Sí, no pongas esa cara. Lo has hecho hace poquísimo. ¿Acaso ya has olvidado a la pobre Saeko?

El Guía se regodeó de la expresión de congoja que se le quedó a Niko, soltando una risita infantil. Ya se había ensañado con él usando a sus padres. ¿Por qué detenerse ahí? ¿Por qué no aprovechar que las heridas estaban frescas y echarles más sal? Podía hacer más daño. Mucho más daño. Y tan solo tenía que utilizar a la chica que amaba.

Cosa que no dudó en hacer.

El joven miró con aprensión a la figura de Saeko que tenía justo en frente, exactamente igual que como la recordaba antes de verla por última vez en el vestíbulo del castillo. Entonces, notó como la mirada gélida de la chica le perforó.

Te fuiste. —Escuchar su voz fue aun peor. Niko se encogió en sí mismo, esbozando una mueca de dolor y llevándose la mano a su antebrazo izquierdo—. En vez de acompañarme, te quedaste en el Castillo. Y, ¿para qué? ¿No era para vigilar a Chihiro? ¿Cuánto tardaste en separarte de ella, Nikolai? Preferiste quedarte a su lado para tenerla bajo control mientras yo me iba al pasado. No tienes ni idea de si algún día volverás a verme. ¡No sabes si estás hablando con una reminiscencia que murió en el pasado!

Nikolai se apretó aún más el antebrazo y bajó la cabeza, mortificado. Se sentía tan frustrado consigo mismo que ni podía dirigirle la mirada a la joven. Lo que estaba diciendo era la cruda verdad, y no podía hacer otra cosa que tragársela.

»Y lo único de lo que fuiste capaz fue de decirme: nos veremos cuando todo esto haya acabado, Saeko. —Niko ahogó un gemido de angustia. Lo último que necesitaba era que le recordasen eso en concreto—. ¿Eso es todo? ¿Tan poco te importo? Las cartas, los paseos, las… las historias. Creía que había algo. Me hacías sentir… especial. Pero ya veo cuánto significo para ti.

Abrió la boca, pero ninguna palabra salió. Acabó por cerrarla, apretando los labios con tanta fuerza que se hizo daño al mordérselos. No le respondió, ni le volvió a dirigir la mirada. Se quedó allí, agarrándose el brazo, maldiciéndose a sí mismo por lo inútil que era mientras una lágrima le rodaba por la mejilla. Se quedó reducido a un estado lamentable, en el que ni se atrevía a levantar la cabeza.

¡La chica a la que quieres se mete en un agujero temporal y lo único que le dices es «nos veremos»! ¿Qué harás con esa fría inteligencia tuya cuando te des cuenta de que no sirve más que para fingirte superior, para alejarte de los demás, para hacer daño? ¿Eh? ¿Quieres hablar con la reminiscencia de Saeko? ¿Quieres pedirle perdón? Porque el resentimiento está ahí, Niko. Lo he sentido con claridad mientras la pobre volaba de un lado a otro por Tierra de Partida, luchando a brazo partido para encontrar una forma de salvar el presente donde tú estás, preguntándose si pensarías en ella, diciéndose que debería haber hecho algo más. ¡Y tú, mientras tanto, ¿qué haces?! ¡Interrogar reminiscencias en vez de seguir a Chihiro, separarte de ella, perderla de vista, avanzar dando golpes de ciego! ¡Da gusto! ¡Cuéntale a su reminiscencia lo que has estado haciendo mientras ella se desangraba y se enfrentaba un ejército de Sincorazón, Nikolai! —Nikolai, aun decaído, dio un lento pasó hacia atrás cuando el Guía se le aproximó tanto. Alzó un poco la vista para reparar en esos ojos brillantes que lo observaban con sumo desprecio—. ¡¡Cuéntaselo!! ¡Cuéntaselo y dime a mí porqué debería dejar pasar a alguien como tú, que no le llega ni a la suela del zapato a una verdadera aprendiz de Caballero, que ha aceptado la Llave Espada sin comprometer su corazón con la Orden, que decidió quedarse en el lugar más seguro y ni siquiera es capaz de cumplir las misiones que se le encargan!

¿Y qué quieres que te cuente?

Nikolai terminó por alzar la cabeza del todo, devolviéndole al Guía una mirada temerosa, pero que a la vez resultaba desafiante. Sus ojos enrojecidos estaban anegados en las lágrimas que había intentado contener. Se las secó con una pasada de su mano y tomó una buena bocanada de aire.

Ya lo has dicho tú todo: soy un hijo mediocre que no es capaz de evitarle disgustos a su madre. Un hijo que se aferra ciegamente en el recuerdo de su padre y que ni siquiera sabe en lo que se quiere convertir en un futuro. ¿Cómo Caballero? Soy peor todavía: dudo de las decisiones de mis Maestros por pensar que el rencor que le guardan a Tierra de Partida tiene mucho que ver. Por no hablar de que los resultados de las misiones que se me encargan no son para tirar cohetes. —Cerró los ojos y suspiro—. Creo que no hace falta que te cuente que casi le entrego mi alma a un dios de los muertos en una de ellas.

>>Como ves, no soy tan buen Caballero como lo podría ser Saeko. —Extendió las manos de manera teatral—. Te preguntarás cómo alguien como yo ha conseguido llegar hasta aquí, supongo. Bueno… en realidad no hace falta porque ya lo sabrás. Tú lo sabes todo, ¿no es así? —soltó con sorna—. Pero imagino que querrás oírlo de mi boca. ¿Cómo ha llegado Nikolai Everard tan lejos? —Se llevó ambas manos al pecho—. Por egoísmo.

>>Así es, por puro y dichoso egoísmo. El egoísmo para enrolarse en la Orden de Bastión Hueco y sacarle tajada a toda la información que me puede brindar. El egoísmo para dejar de lado mi antigua vida y comenzar una nueva como Portador.

Nikolai relajó el cuerpo y dejó caer sus brazos. Dio un par de pasos hacia atrás hasta que su espalda chocó con la pared del pasillo y se recostó. Miró con cansancio al Guía y le dijo:

Spoiler: Mostrar


Pero es gracias a mi egoísmo por lo que puedo seguir adelante. Tomaré todas las oportunidades que tenga a mi alcance. Aceptaré sin rechistar los errores que haya cometido. Me lo quedaré todo —proclamó a la par que cerraba su puño derecho—. Todo… para convertirme en una persona de provecho. Usaré todo lo que me han ofrecido mis padres, mi Maestra y, por supuesto, Saeko —se retiró la manga de la chaqueta de su brazo izquierdo, desvelando el brazalete azulado que le regaló Saeko y lo miró con nostalgia— para mejorar y devolverles el favor. Dime cómo pretendes complacer a las personas que aprecias si no eres capaz de complacerte a ti mismo.

Niko despegó su espalda de la pared y avanzó con paso lento hasta plantarse en frente del Guía.

Si buscas dejar pasar a un guerrero que sea noble o digno de admiración, pierdes el tiempo —declaro rotundamente, cruzándose de brazos—. Yo no soy nada de eso. Solo un chaval egoísta que seguirá aprendiendo de sus errores para volverse algún día en un hijo del que estar orgulloso, en el Caballero ideal de la chica a la que ama, y en encontrar la razón de seguir con el legado de su padre.

>>Lo tomas, o lo dejas.
ImagenImagen
Avatar de Usuario
Drazham
26. Umbrío
26. Umbrío
 
Mensajes: 762
Registrado: Jue Oct 17, 2013 9:55 pm
Dinero: 133,197.76
Banco: 15,378.00
Sexo: Masculino
Estantería de objetos
Karma: 6

AnteriorSiguiente

Volver a Eventos Globales

¿Quién está conectado?

Usuarios navegando por este Foro: No hay usuarios registrados visitando el Foro y 1 invitado