por H.S Sora » Mié Abr 10, 2013 8:31 pm
Esperé un rato, hasta que el Maestro Ryota nos escuchó a todos, incluido a Gengar.
—Que yo sepa. La perdió en el comedor, nada más. Solo vi el Tablón de Anuncios.
>¿Sabes algo, Wix?
Esperaba que Wix supiese algo más que nadie más supiese… aunque fuese una posibilidad mínima.
—Shinju parecía ocultar algo el otro día en el comedor.
Esbocé una sonrisa de satisfacción durante un par de segundos, ahora quedaba aún más claro que yo tenía razón respecto a que Shinju era muy sospechosa… Lo que me preocupaba era que, quizá no estaría dispuesta a colaborar por las buenas. ¿Tendríamos que enfrentarnos a ella? Por mucho que la superásemos en cantidad, dudaba de nuestras posibilidades de resultar victoriosos frente a ella. Y por otro lado me preocupaba que Saeko tuviese un pronto y decidiese que lo “mejor” sería separarnos, en ese caso sí que lo tendríamos crudos… Si un dos contra uno era complicado, un uno contra uno sería pan comido para Shinju.
Esperé a que Saeko quisiese dar su opinión, y rezaba porque fuese la que esperaba oír.
—¡Saito! Mejor volvamos al comedor, puede que se nos pasase algo de vista. ¿O tú vas a ir a por Shinju?
Maldije varias veces a mi suerte en silencio. Saeko parecía más decidida que nunca en ir a investigar aquello. ¿Cómo se nos podía pasar de vista algo como una baraja? Realmente era bastante ilógico en mi opinión. Pero separarnos podía ser peor a la larga, así que tendría que darle un argumento lo suficientemente válido.
—Saeko, quizá lo mejor sería primero ir a por Shinju porque…
—Si queréis puedo ir yo a investigar, ¿Saeko?
Gengar había vuelto a salvar la escena. Realmente le estaba agradecido, supongo que se imaginó que no podría convencer a Saeko por mucho que lo intentase, ahora tenía un motivo para dejarle ir y que nosotros fuésemos a por la verdadera pista.
Mientras esperaba la respuesta de esta, pude ver como imitaba la postura del Maestro Ryota, supuse que de manera involuntaria. Aquella chica era una caja llena de sorpresas, realmente.
—Vale, pero date prisa. ¡Y no tardes! —Exclamó de pronto, de manera bastante desagradable para mi opinión. Pero yo no tenía derecho a meterme en asuntos que no me inmiscuían.
Gengar asintió y se marchó por el pasillo, levitando, hasta perderse por completo de vista para todos. Entonces pude observar como Saeko se giraba de nuevo después de comprobar que Gengar ya no era visible.
—Gracias Maestro, su información ha sido realmente valiosa, muchas gracias, y a ti también Wix. Con su permiso, maestro, nos retiramos. —Aquello me dejó algo sorprendido. ¿Había actuado Saeko de nuevo como si fuésemos un equipo? No pude evitar reír por lo bajo ante aquello.
—Gracias Maestro Ryota y gracias a ti también Wix, como ya ha dicho Saeko, os estamos agradecidos por la información. Y bueno, nos retiramos por ahora.
Nos alejamos un poco de aquella escena y dejamos ambos, mi Maestro y a Wix, seguir trabajando en aquella reparación. Habían ayudado bastante realmente, pero no tanto como Gengar, tendría que agradecérselo en otra ocasión.
—Saito, ¿vamos a por Shinju verdad?—Preguntó Saeko de pronto, mientras seguíamos caminando.— Esta vez no tendrá ninguna excusa, pero... —¿Qué estaba pasando por la mente de Saeko? Realmente nunca solía mostrarse indecisa ante nada, es más, solía ser todo lo contrario.
Pero aquello me hizo recordar que realmente la idea de ir a volver a ver a Shinju no había agradado del todo a Saeko. ¿Tendría algún tipo de problema con ella? Fuese lo que fuese, tendrían que zanjarlo en otro momento y no ahora.
—No, déjalo, vamos. Y no te quedes atrás, no me seas como Gengar.
—Tranquila, tengo tanta curiosidad como tú por saber qué diantres está pasando aquí.
Saeko volvió a tomar las riendas y aceleró el ritmo, dejándome atrás de nuevo. Una vez llegué la vi allí parada, ¿Se habría negado Shinju a abrirnos la puerta? Si era así, tendríamos que entrar a la fuerza.
Pero una vez me acerqué, noté como ella hacía un gesto con su mano derecha que parecía significar que quería verme en acción a mí esta vez. Eso y que “Si tanta razón creía que tenía, que probase mi teoría”, o algo así imaginé que habría pensado.
—Querías interrogarla, ¿verdad? —No podía negarlo, ya que era verdad. — Tu turno.
Aquella acción me molestó un poco. Quería interrogarla, ¿Pero acaso ella no? Fuese como fuese, decidí no prolongar la espera, ya que sería peor. Me acerqué a la puerta y la golpeé ligeramente con los nudillos, esperando una respuesta.
—Shinju, sal por favor... —Dije en el tono más amable posible, esperando a que saliese.
Después de eso, me aparté de la puerta y me acerqué a Saeko.
—¿Por qué le temes tanto a Shinju?—Diría en voz baja, esperando una respuesta por su parte mientras Shinju salía a recibirnos.
Esperaba que pudiésemos terminar el caso de una maldita vez si Shinju nos contaba que había pasado.
Muchas grácias por el avatar Mepi ^^