El rayo impactó de lleno en Enix, al que no le dio tiempo a hacerse a un lado. La corriente eléctrica le recorrió por todo el cuerpo y le paralizó, haciendo que cayera de rodillas para después derrumbarse como un saco de patatas contra suelo. El brazo chirrió abriendo y cerrando sus garras y se fue acercándose progresivamente al aprendiz arañando la piedra del pavimento.
Sally corría todo lo rápido que podía hacia la fuente, aprovechando que las partes que quedaban desperdigadas por ahí estaban ocupadas en otros objetivos. Pensaba que si podía ocultarse tras la estatua de la fuente, estaría a salvo. Fue entonces cuando vio a Myxa corriendo hacia ella, quizá para ayudarla y sintió un poco de alivio. Se quedó quieta esperando a que la aprendiza llegara hasta su posición para mostrar la triste preocupación que sentía también, y la culpabilidad, al ver que estaba malherida. Con un gesto tímido, le ofreció un frasquito que sacó de entre sus ropas cosidas. Myxa podría reconocer la poción que anteriormente le había dado a la muñeca.
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Ten, creo que deberías usarla, te hace más falta —murmuró.
Nada más cogiera la aprendiza el frasco, Sally miraría por encima del borde de la fuente. Si Myxa hacía lo mismo, también vería la cabeza del experimento allí flotando, como muerta, como si no fuera a hacer nada más. La muñeca temblaba, tenía mucho miedo.
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Vuestro maestro dice que será más fácil derrotar a la cosa si reunimos sus partes —explicó, pensando que Myxa no los había oído.
Un maullido cercano las alertaría, y quizá asustaría, pero no era más que Ilana, la gatita de Alec. Sally suspiró y acarició la cabeza del animalito, antes de volver a mirar la cabeza. Con cuidado de que los ojos no estuvieran mirando hacia ellas, Sally consiguió pescar la cabeza y mantenerla sujeta, alejada de sí. Nada más tocarla la cabeza había empezado a temblar.
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Vamos... Sin mucha más dilación, y sintiéndose segura con Myxa e Ilana cerca, la muñeca echó a correr con la cabeza hacia el torso atrapado en la guillotina.
Alec, por su parte, consiguió retrasar el avance de las piernas con su hechizo de zarzas y dañarlas con su hechizo Electro. Por un rato podría olvidarse de ellas, ahí quietas mientras despedían un humo particularmente chamuscado. Pero todavía quedaban partes sueltas que podían resultar un peligro. No sólo el brazo de la ventosa, que por fin se había liberado de su presa en la valla, si no también el brazo que se acercaba a Enix lentamente.
Lanzó el segundo Electro tras dar su aviso, que impactó contra el brazo de la ventosa. El brazo dio un respingo, saltó por los aires y aterrizó pesadamente en el suelo. Entonces se oyó un sonoro
¡CLANK!... y el brazo volvió a elevarse como si un imán le atrajera hacia algo.
Si Alec se volvía, vería que las piernas y el brazo que faltaba también estaban reuniéndose hacia el mismo punto: El torso y la cabeza unidos bajo la guillotina, que se abrió violentamente ante la repentina presión del experimento. Imbuido por alguna extraña fuerza, el torso y cabeza unidos se desplazaron hasta el centro de la plaza, uniéndose allí con el resto de las partes: los dos brazos y las piernas. Un fuerte latido se dejó oír de pronto, y tanto Sally como los aprendices podrían sentir cómo el monstruo cargaba un nuevo ataque...
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¡Ahora, Jack!De pronto la voz de Kazuki tronó, al mismo tiempo que la barrera mágica desaparecía de golpe y una figura veloz y casi indistinguible se echaba encima del experimento. Jack, al aviso de Kazuki, había saltado contra el ser y atravesado el torso con su esquelética mano derecha. Al erguirse, todos podrían ver que sujetaba el palpitante corazón artificial entre los dedos y lo estrujaba hasta convertirlo en pedazos inservibles. Al hacer eso, el experimento dejó de agitarse y sus ojos se apagaron, para siempre.
El hombre-esqueleto miró entonces en derredor, localizando que todos estuvieran bien, desviando la vista hacia Sally en último lugar, y sonrió abiertamente.
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Podríamos hacer algo así para el próximo Halloween, menos peligroso claro.Kazuki reprimió un bostezo y corrió hacia Enix, que todavía estaba inconsciente. Lo sostuvo con bastante habilidad al mismo tiempo que musitaba un hechizo de curación. Al poco el muchacho abriría los ojos, sintiéndose cansado, muy cansado.
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Bienvenido al mundo de los, eh, no-muertos, Enik.Podía parecer una broma de mal gusto, pero el maestro estaba sinceramente aliviado.
Fecha límite: 27 de julio.
Myxa: 2/10 VIT — 4/8 PH
Alec: 20/20 VIT — 11/26 PH
Ilana: 7/22 VIT — 0/18 PH
Enix: 1/22 VIT— 10/14 PH