—
¿Qué coño ha pasado?Incluso notando como mi conciencia volvía por momentos cuando Ivan se acercaba a mí para mirarme curioso apenas era capaz de moverme. Incluso respirar era un suplicio, aquel Electro había dolido como mil demonios, pero la caída aún había sido peor. No me había roto las piernas —patas— de milagro.
Y en ese momento, escuchamos un fuerte temblor que movió toda la zona y tiró a algunos de los animales que escapaban al suelo.
Justo después, una potente explosión movió mi cuerpo hacia el otro lado del cañón. Varias rocas pasaron cerca de mi cabeza a punto de aplastar mi cabeza.
Reacciona, vamos.Apenas podía moverme, mentalmente estaba muy agotado por utilizar magia hasta ese extremo y mi cuerpo dolía tanto que apenas era capaz de moverlo, aún menos levantarme.
Y entonces lo vi. Una enorme criatura similar a un caracol de mar, con un caparazón que se retorcía en forma de espiral y, ¡qué demonios! Era tan grande como toda la cueva de la que habíamos salido.
La piel del monstruo era azul y dos ojos saltones sobresalían a pocos metros bajo el caparazón. Aquella cosa tenía numerosos tentáculos que movía felices por haber resucitado.
—
¡Lord Helix ha vuelto! ¡Ahora reinará la anarquía en el Reino de la Luz! —proclamó la rata cabrona, en la cual no me había fijado hasta aquel momento y el cual apuntaba con su puño hacia el cielo en señal de victoria—
. ¡Una victoria definitiva para los Cats!Lo siento, era necesario xDDDDDD
¡Cats! ¿Cats? ¿¡CATS!?En mi mente trataba de asimilar aquella información. ¿Aquello significaba que conocía a los otros que ya había visto? Redcat, Silvercat y Purplecat. ¿Él era uno de ellos transformado? ¿O era otro?
¿¡Cuántos de aquellos hijos de puta había!? Parecían una jodida secta.
—
Ivan, sácame de aquí —le pedí mientras tosía, apenas me quedaban fuerzas y en aquel momento no creía que fuésemos capaces de enfrentarnos a aquellos dos.